2. Es nuestro primer culto de este nuevo
año 2013, y quisiera expresar por
medio de Las Sagradas Escrituras mis
deseos para la Iglesia del Señor.
Sabiendo que hemos sido llamados en
Jesucristo por un Dios de toda Gracia,
es mi deseo que en este nuevo año, ese
Dios nos:
Perfeccione, afirme, fortalezca y
establezca.
Todo esto en medio de los
padecimientos que sabemos, estarán
allí. Ahora explicaré mis deseos:

3. Perfeccionar: Acabar una cosa enteramente,
dándole el mayor grado de
perfección. Mejorar una cosa que está muy
bien o hacerla más perfecta.
Es mi deseo que aquel que comenzó
la obra de Dios en nosotros, él mismo
nos perfeccione en este 2013. Que el
Espíritu Santo de Dios por medio del
profundo estudio de
Las Sagradas Escrituras sigan
moldeando en nosotros el carácter
perfecto de Jesucristo nuestro Rey y
Señor.

4. Afirmar: Declarar una cosa o decir que una
cosa es verdad. Poner firme una cosa,
reforzarla o sujetarla bien.
Es mi deseo que en este 2013, todos
seamos afirmados, que ninguno
claudique ante los ataques del
enemigo o las pruebas que se
presenten. Que todos permanezcamos
firmes y fieles en el camino del Señor
sin apartarnos ni a diestra ni a
siniestra, anclados firmemente en
aquel que es nuestra roca, nuestra
torre fuerte, Jesucristo.

5. Fortalecer: Hacer fuerte o más fuerte a una
persona o cosa. Hacer más intensa una
relación o sentimiento entre dos personas o
grupos.
Es mi deseo que en este 2013, nuestra
fe sea fortalecida. Que nuestra
relación con Dios sea fortalecida. Que
las relaciones de los unos con los otros
sean fortalecidas. Que nuestro
testimonio en lo particular y como
Iglesia sea también fortalecido.

6. Establecer: Hacer que empiece a funcionar
una cosa o una actividad, generalmente con
propósito de continuidad. crear, fundar.
Disponer lo que debe hacerse. ordenar. Dejar
demostrado con firmeza un pensamiento de
valor general.
Es mi deseo que en este 2013, nuestra
Iglesia se establezca como ganadora
de almas, como productora de
discípulos de Jesús, como impulsora de
siervos y de ministerios. Todo ello,
siguiendo fielmente el modelo bíblico
del trabajo en grupos pequeños.