1. historia del arte religioso cristiano Unidad I / Clase nº 3 La iconografía cristiana
2. A medida que el arte religioso cristiano se fue consolidando, se llevó a cabo un proceso de elaboración de todo el conjunto de imágenes que le identificaba. A este conjunto de imágenes se le llama ICONOGRAFÍA y la disciplina que las estudia se conoce como ICONOLOGÍA. La iconografía cristiana sufre entre los siglos VIII y X una transformación enorme, pues en este período se conforman los temas iconográficos que aún nos son familiares hoy día en el seno del Cristianismo. ¿Y esta Shirley Temple de dónde salió? Yo sé lo mismo que sabes tú...
3. Al estudiar la iconografía cristiana hay que tener en cuenta dos cosas: primero, todo lo que se ve en las obras tiene un carácter simbólico y, segundo, la principal fuente de inspiración para las obras es la Biblia. Para comprender el sentido de la iconografía cristiana hagamos un ejercicio. Tomemos el siguiente pasaje bíblico: “ Estando en la cruz, Jesús vio a su Madre y a Juan, su discípulo. Dijo el Señor a María: ‘Madre, he ahí a tu hijo’. Luego, miró al discípulo y le dijo: ‘ Hijo, he ahí a tu Madre’.” (San Juan 19 : 26 – 27) Ahora, imagina cómo representarías esa escena en una pintura o una escultura.
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5. Crucifijo italiano, Siglo XI. Jesucristo La Cruz María Juan ¿Ves cómo se hacen presentes todos los elementos? Veamos otras obras...
8. Pero... las dos escenas son muy distintas. Presentan los mismos elementos, es verdad, pero son diferentes. No olvides que estamos hablando de representaciones simbólicas , es decir, que aquí en estas dos imágenes nada es lo que parece ser. Por esta razón, lo importante para armar la iconografía de la escena de la Crucifixión de Cristo es la presencia correcta de los elementos que ya hemos mencionado antes. Al no haber ninguna intención de buscar reproducir la realidad visible, carece de interés el cómo se plantee la presencia de los personajes. Es decir, que no importa como luzcan, igual representan la Crucifixión... Exactamente, pero aún podemos ir más allá. ¿Te atreves? Hmmm... de cualquier forma lo vas a hacer, así que vamos.
9. Crucifixión española, h. siglo XI-XII Fíjate bien, en toda imagen religiosa cristiana hay un significado que se da por la suma de los elementos que la componen. En esta escena de la Crucifixión, por ejemplo, vemos a Cristo en la cruz con María a su derecha y Juan a su izquierda... pero eso no es todo. Si te pregunto ¿Quién es Jesucristo? ¿Qué me respondes? Pues el fundador del Cristianismo, la cabeza de la Iglesia cristiana. Muy bien. Si te pregunto: ¿Quién es María? y ¿quién es Juan? María es la Madre de Cristo y Juan es su discípulo. Correcto. Ahora, si aceptamos la creencia cristiana de que todos somos hijos de Dios y María es la Madre de Dios... ¿Qué vínculo tendríamos con María y con Juan? Viéndolo así, todos seríamos también hijos de María y hermanos entre todos, como hermanos seríamos de Juan. ¡Eso es! Vamos a sumar todo lo que hemos dicho a ver qué resulta....
10. Si Cristo es la cabeza de la Iglesia, si María es su Madre y nuestra madre, si Juan es su discípulo como también lo somos nosotros... si recordamos lo que Cristo dice a María y Juan en esa escena (“ Madre he allí a tu hijo”, “Hijo he allí a tu Madre” ), entonces estaríamos ante la representación simbólica de algo más que la Crucifixión. Estaríamos hablando de la representación del momento en el cual Cristo instituye el sentido de su Iglesia. Ya va, no tan rápido que me enredo... La Iglesia cristiana es también la madre de todos sus fieles, en consecuencia, en la escena que estamos estudiando, presenciamos el momento en el cual Cristo brinda a su Iglesia esa cualidad maternal e indica a sus hermanos en la fe cuál es el tipo de relación que habrán de mantener con ella. Muy bien. Ya anoté todo.
11. ¡Qué barbaridad! Todo tan obvio y yo encaramado aquí para ver más. La verdad es que no estamos acostumbrados a observar... nos conformamos con ver. ¡Lo mejor es ir agudizando la vista, caballeros! Conviene recordar entonces que para las próximas clases no debemos conformarnos con lo que se muestra evidente ante nuestros ojos, porque en expresiones artísticas tan profundamente simbólicas como las del Cristianismo perderemos lo más importante si nos frenamos en las apariencias.
12. Madonna y dos santos , Monasterio italiano, s. IX Lo que falta es que nos digan ahora que esa imagen de la Virgen con el Niño no es eso sino otra cosa. ¿Qué comen que adivinan? Las imágenes de la Virgen María con el Niño son uno de los ejemplos más sintomáticos de todo este asunto del simbolismo. Noten que María sostiene al Niño en su regazo y ella, a su vez, está sentada sobre un trono. Si María es la Madre de Jesús y Jesús es la cabeza de la Iglesia, pues María está haciendo aquí las veces de un “trono” para Jesús, porque ella es la Iglesia. En la parte superior observen que hay un abertura que nos recuerda que todo esto está avalado por una entidad superior: Dios Padre. ¡Uuff! Intenten hacer una lectura similar en las imágenes que siguen...
13. Retablo del Altar de la iglesia de Cardet, siglo XIII, Francia El significado simbólico de la imagen de María con el Niño Jesús es el mismo. Sin embargo, en este retablo podemos observar algunas escenas complementarias que nos narran los momentos previos a la formación de la Iglesia, que es lo que está simbolizado en el ovalo central: Anunciación, Visitación, Nacimiento, Adoración de los Reyes y Huida a Egipto.
14. Virgen con el Niño y un donante , ilustración del Salterio de Amesbury, h. 1240 En esta ilustración, el significado es, de nuevo, el que ya hemos comentado, pero ahora se ve enriquecido por algunos detalles: María amamanta al Niño Jesús, le nutre así como la Iglesia nutre a sus fieles con la verdadera fe ; María tiene al lado de su pie derecho un perrito, símbolo de fidelidad, de la fidelidad que todos los cristianos le deben a su Iglesia; el pecado, representado como un dragón, es pisoteado por María con su pie izquierdo, como símbolo del triunfo de la Iglesia sobre el pecado; finalmente, una moja arrodillada a un lado parece contemplar extática todo lo anterior, como si fuera una visión que le ha sido concedida por llevar una vida plena de virtud, como la que debe llevar todo cristiano.
15. ¡Un momento! ¿No estarán tirando de los cabellos esto del simbolismo? Hmmm... ya va a salir este tercio a complicarnos la cosa. Sí... y tan bonito que luce todo eso de los símbolos. Recuerden las referencias que hacía San Agustín respecto a hacer del mundo visible el lugar dónde se deben buscar los vínculos con el mundo invisible que es el de la divinidad, el que no nos está dado a conocer por medio de nuestros sentidos. De ésta manera, la sofisticación del simbolismo en el arte religioso cristiano, no es más que una consecuencia de esta búsqueda constante sobre la mejor manera de acercarnos a ese mundo invisible que no es para el hombre sino abstracción.
16. Todo muy bueno... Pero ¿cómo es posible que en tiempos en los que sólo unos pocos podrían ser llamados “cultos” se empleara un simbolismo tan elaborado? Hija, no olvides lo que dijo el papa Gregorio Magno por ahí en el año 590... Allí está la clave. “ La pintura tiene por fin la glorificación de Dios, los santos y nuestro prójimo. Las paredes de las iglesias deben ser como libros abiertos y las imágenes sus letras para aquellos que no saben leer. ” Gregorio Magno Sí, mejor recordarlo porque la verdad es que esto del arte religioso cristiano no tiene nada de sencillo. De esta manera, todos veían en imágenes lo que los sacerdotes repetían una y otra vez en sus homilías y sermones. Es decir, que todo esto es una gran campaña pedagógica. Como para que nadie se quede sin saber, digamos... ¿Y eso no es lo que se denomina “publicidad”? No, “publicidad” no. “ Tecnología Educativa”, que no es lo mismo.
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18. Fin de la clase nº 3. Recuerda leer los textos que corresponden a la siguiente clase antes de iniciar la presentación correspondiente.
