En 3 oraciones:
1) El documento analiza la estructura de la familia venezolana, en particular el fenómeno de la matrifocalidad donde predomina la figura de la madre como jefa del hogar. 2) Explica que en las familias matrifocales la presencia del padre es débil e intermitente y la madre asume el rol de proveedora emocional y económica. 3) También describe los roles tradicionales dentro de la familia matrifocal para la madre, el padre, los hijos e hijas, y los ancian
1. 1
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL
FRANCISCO DE MIRANDA
ÁREA CIENCIAS DE LA SALUD
PROGRAMA DE GERONTOLOGÍA
SOCIEDAD Y VEJEZ
UNIDAD II
TEMA 3
LA FAMILIA Y EL ANCIANO EN VENEZUELA
Prof. Dra. Blanca De Lima
2. 2
Coro, 2006
ÍNDICE GENERAL
Pág.
PRESENTACIÓN .................................................................... 3
INTRODUCCIÓN ..................................................................... 4
ESPECIFICACIÓN DE LOS USUARIOS ................................ 6
ORIENTACIONES DIDÁCTICAS ............................................ 6
OBJETIVOS ............................................................................ 8
1. EL MATRICENTRISMO Y LA FAMILIA VENEZOLANA
1.1 La familia ............................................................................. 10
1.2 La familia venezolana y la matrifocalidad ........................... 12
1.2.1 La mujer-madre ................................................................. 15
1.2.2 El varón-padre ................................................................... 15
1.2.3 La prole ............................................................................. 16
1.2.4 El anciano ......................................................................... 17
1.3 El hogar matrifocal ............................................................... 19
1.4 Un problema mundial: la feminización de la pobreza ........... 21
1.5 A manera de conclusión ....................................................... 23
BIBLIOGRAFÍA ......................................................................... 35
3. 3
INTRODUCCIÓN
El propósito de este trabajo es aportar algunos datos y reflexiones
sobre los hallazgos que la investigación social venezolana ha hecho al
abordar el tema de la familia, y que han sido aplicados en el trabajo
comunitario, en el sector salud y otros.
La mayor parte de los trabajos venezolanos sobre el tema de la familia
son de tipo descriptivo-exploratorio, realizados en los últimos 40 años.
Muchos son estudios de casos efectuados en comunidades o barrios, otros
tienen alcance nacional y han aplicado métodos estadísticos, como los
efectuados por Fundacredesa, Proyecto Venezuela Área Familia y el
Instituto Nacional del Menor. En menor medida ha habido una aproximación
psicoanalítica con estudio histórico (Vethencourt, 1974).
Se advierte en todos ellos el énfasis en temas como la crianza, el
proceso de socialización, la pobreza, educación y salud; mas la figura del
4. 4
adulto mayor como integrante de la familia pasa en general desapercibida en
estos estudios, fuertemente marcados por la díada materno-infantil.
Los estudios de corte social de la década de los noventa enfatizan a la
familia popular (Moreno, 1993, 1994, 1995; Hurtado,1995, 1998). En ellos se
esboza la presencia de los viejos y sus funciones en el hogar.
Este texto busca hacer una síntesis de lo investigado, aportando
además nuevos conocimientos procedentes de la investigación universitaria
en la UNEFM, para delinear con la mayor precisión la problemática del adulto
mayor en su inserción familiar y de la mujer, fuente tradicional de apoyo y
cuido para el anciano, sometida a presiones externas que merman la
eficiencia de su rol tradicional.
5. 5
ESPECIFICACIÓN DE LOS USUARIOS
Estudiantes de educación superior e investigadores del área social y
de las ciencias de la salud.
Estudiantes de tecnología superior universitaria en gerontología y de
licenciatura en gerontología.
Profesionales de las ciencias sociales: antropólogos sociales,
sociólogos, trabajadores sociales, psicólogos sociales y otros.
Requisitos previos
Estudiantes: una adecuada expresión oral y escrita, acorde a exigencias de
nivel universitario, es necesaria para optimizar el rendimiento ante técnicas y
actividades instruccionales que se soportan marcadamente sobre elementos
del lenguaje oral y escrito. Igualmente, una adecuada capacidad para la
lectura exploratoria y evaluativa es elemento que el alumno debe dominar
adecuadamente, para responder al ritmo y calidad de lecturas que exige esta
temática; ello implica el manejo de la técnica del párrafo como unidad de
pensamiento, para detectar ideas principales y secundarias.
Profesionales: conocimientos previos de antropología social, sociología,
gerontología social o interés por el área gerontológica.
6. 6
OBJETIVOS
OBJETIVO TERMINAL
CONOCER LA ESTRUCTURA DE LA FAMILIA VENEZOLANA Y LA
INSERCIÓN DE LAS PERSONAS MAYORES EN ESA ESTRUCTURA.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
* Conocer las estructuras más detectadas en la familia venezolana.
* Comprender el concepto de matrifocalidad en el contexto de la familia
venezolana.
* Conocer los cambios en la estructura familiar venezolana y en los roles de
la mujer.
* Analizar cómo influye el cambio de roles femeninos en el apoyo al anciano.
* Conocer las formas de inserción de las personas mayores en la estructura
familiar.
7. 7
1. EL MATRICENTRISMO Y LA FAMILIA VENEZOLANA
El tema del matricentismo o matrifocalidad ha sido abordado por la
investigación social venezolana a partir de los aportes de Vethencourt en los
años setenta del pasado siglo, con un enfoque psicoanalítico e histórico.
Desde entonces han surgido otros enfoques alejados de la psicología social
y más próximos a la sociología y antropología. Todos concluyen en la
matrifocalidad, pero la conciben desde paradigmas diferentes. Ellos serán
mostrados a lo largo del texto para lograr una visión amplia sobre el tema.
1.1 La familia
Socialmente hablando, la familia es la unidad parental básica de la
sociedad, institución que canaliza el desarrollo de sus miembros y reproduce
la dinámica social vigente. En la familia sancionada por las sociedades
occidentales industriales se encuentran como elementos fundamentales los
vínculos de sangre, la convivencia bajo un mismo techo y la comunidad de
8. 8
servicios, que se relaciona con la reproducción de las condiciones de vida.1
La familia es la raíz, sitio de pertenencia, núcleo de convivencia, apoyo y
preservación de la calidad de vida, fuente básica de interacción social y
barrera contra factores de riesgo socioeconómicos como la indigencia y el
aislamiento, entre otros.
Pero además la familia de las sociedades occidentales industriales es
una estructura muy heterogénea, donde pueden ubicarse distintos tipos de
uniones: civil, civil y eclesiástica, concubinato, madres solteras, padres
solteros... Esto desde un punto de vista estrictamente formal, existiendo en la
actualidad polémicas sociales, culturales y legales sobre nuevos tipos de
familia, como las formadas por uniones homosexuales y lesbianas, que en
algunos países europeos ya han sido reconocidas y adquirido derechos
legales. En los hechos, se encuentran una serie de relaciones complejas al
interior de cada una de estas familias. Debe además considerarse que
dependiendo del factor cultural la estructura de la familia tiene
especificidades, pudiendo así hablarse de la familia hindú, la familia, china, la
familia francesa, la familia islámica, por ejemplo.
En los textos más comunes de ciencias sociales se habla de dos
grandes tipos de familias:
1 Castellan, Ivonne, La familia. Introducción.
9. 9
Familias extendidas; aquéllas que incluyen tres o más generaciones y
colaterales conviviendo bajo un mismo techo. Característica de sociedades
agrarias, donde las necesidades económicas y sociales requieren un mayor
número de individuos por núcleo familiar.
Familias nucleares o conyugales: padres e hijos que viven bajo un mismo
techo. Característica de sociedades urbanas.2
El análisis social proveniente de la sociología y la antropología cultural
estadounidense ha creado la estereotipia de que en estas familias existe una
estructura rígida, donde se imponen los lazos consanguíneos directos, donde
priva el amor filial y corresponde al varón la cima de la jerarquía social y la
responsabilidad mayor o exclusiva del mantenimiento económico del grupo;
quedando la mujer relegada al rol de ama de casa y el anciano -en las zonas
urbanas- empobrecido en sus status y roles, prácticamente reducido a la
categoría de desaparecido social.
1.2 La familia venezolana y la matrifocalidad
La mayoría de las familias venezolanas no responde a estos modelos.
Yendo de arriba hacia la-base de la pirámide social, se encuentran distintos
tipos de familia, tanto en su estructura formal como en las relaciones que les
2 Cohen, Bruce, Teoría y problemas de introducción a la sociología. Cap. 8. Una extensa
crítica a esta tipología se encuentra en Samuel Hurtado, Trabajo femenino, fecundidad y familia
popular-urbana. Introducción.
10. 10
dan vida. En los grupos sociales medios y altos es mayor la presencia del
padre de familia, con una figura predominante que sirve de identificación a
los varones del grupo. La díada padre-madre y los matrimonios civil-
eclesiástico predominan en estos estratos sociales. Todo indica que el
ascenso social y económico va en relación directa a ambas díadas, así como
una disminución en el número de la prole.
Los estratos de pobreza mantienen una dinámica completamente
ajena a la anterior, al caracterizarse por la presencia de la llamada FAMILIA
MATRIFOCAL O MATRICENTRADA.3 ¿Qué es una familia matrifocal?
Existen dos formas de conceptualizarla. Para algunos teóricos (Moreno), la
familia matrifocal es aquélla constituida por una mujer-madre con sus hijos.
Es una mujer sola, una mujer sin pareja. El concepto de pareja como una
unión de convivencia continuada, donde ambos cónyuges comparten
funciones y responsabilidades en la crianza de la prole y satisfacen
mutuamente necesidades afectivas, económicas y sociales, no existe en la
estructura matrifocal. Para otros (Vethencourt, Hurtado) la matrifocalidad no
se asocia obligadamente a la ausencia del padre y la jefatura de la madre,
sino a la prevalencia de ella como figura estable y permanente, entidad de
3 Moreno, Alejandro. La familia popular venezolana. Caps. 2 y 3.
11. 11
decisión en el hogar.4 Vethencourt, a partir de su enfoque psicoanalítico,
agrega a su análisis que la díada de una madre permanente y un padre
ausente o periférico, con uniones consensuales y pobreza genera una
familia atípica e inestructurada, contrapuesta a lo que él entiende como la
familia normada, que para él es la formada por una unión estable, con hijos y
a veces otros consanguíneos. Vethencourt establece que esa familia atípica
y disfuncional está anclada en el inconsciente, siendo por ello difícil incidir
sobre ella para generar cambios.5
En ambos casos, el común denominador es la autoridad materna y los
nexos afectivos profundos con los hijos, cuya crianza recae sobre la mujer;
además del carácter extenso. Probablemente, más que hablar de la
pertinencia de una definición u otra, sea preciso advertir las realidades
específicas de deterioro social y económico que podrían conducir a
expresiones diversificadas de la matrifocalidad. en la medida que sea mayor
o menor la prevalencia de la autoridad femenina y su aporte económico, y en
la medida de las formas como el varón se integre a la red familiar.
Tanto las autoridades civiles como eclesiásticas han tratado de
eliminar o reducir al mínimo la familia matrifocal, que se contrapone tanto al
4 Hurtado, Ob. Cit., pp. 65-66.
5 Vethencourt, José Luis. La estructura cultural atípica y el fracaso histórico cultural en
Venezuela.
12. 12
concepto bíblico como al sancionado por el derecho: la familia paterna
monogámica como célula social original. Los matrimonios civil y eclesiástico
son instituciones que protegen y estimulan el concepto de la familia paterna
monogámica.
Sin embargo, la matrifocalidad ha persistido como patrón
predominante en Venezuela, siendo la armazón de más de la mitad de las
familias. Aquí se abordará, de inicio, la matrifocalidad en las expresiones
concretas encontradas en los estratos más pobres del país.
1.2.1 La mujer-madre
¿Cómo hace esta mujer, sola, para lograr los presupuestos expuestos
en el primer párrafo? Antes de- responder esta pregunta es necesario
precisar la figura de esa mujer-madre. Primeramente, es una mujer que no
requiere al hombre como compañero para una vida en común, no depende
de él ni en términos afectivos ni en términos económicos o sociales; el rol del
hombre en su vida se reduce a una función genital: hacerla madre. En
segundo lugar, su estabilidad la encuentra en la prole, que es para ella
fuente de afecto, seguridad económica, protección, comunicación, apoyo,
etc.
13. 13
Estudios de caso en el medio rural han encontrado el rol de la mujer
como centro psicosocial del hogar, dadora de estabilidad psíquica a sus
hijos, de normas y valores.6
1.2.2 El varón-padre
En la familia matrifocal o matricentrada la presencia del varón-padre
es débil. Se caracteriza por el ausentismo o la intermitencia y el escaso o
nulo aporte económico. Suele distribuirse en varios .núcleos familiares que
identifica a través de la figura femenina como "la madre de mis hijos", no
como su pareja; por ello en la familia matrifocal abundan los hermanos por
parte de madre, ya que son frecuentes las uniones transitorias e inestables.
Sin embargo, el padre es figura de autoridad cuando hace acto de presencia,
incluso puede llegar a imponer y aplicar sanciones, muchas veces asociadas
al castigo físico.
1.2.3 La prole
Para los hijos varones la mujer-madre es la fuente que llena sus
necesidades afectivas. El varón crece-visualizando a la figura femenina
como MADRE; esto va a ser determinante para que luego, como adulto,
reproduzca el ciclo matrifocal, al carecer de conceptos como el rol de
6 Fernández y Reyes. Control de comportamiento en familias extensas, p. 41.
14. 14
pareja, de compañera, de una unión por encima de la maternidad. Para
este hombre toda mujer es, ante todo, madre. Toda unión ha de conducir a
ello.
Las hijas hembras son el semillero que reproduce la dinámica
matrifocal, el sistema de relaciones afectivas que nutre a los miembros del
grupo familiar. Apoyan económicamente al hogar si es necesario, y
cooperan en el cuido de los hermanos menores, dándose así una
socialización anticipatoria de su futuro estatus.
1.2.4 El anciano
En general, los llamados "viejos" son un grupo respetable, que aún
aportan al seno familiar mediante trabajos informales y en cuya vivienda
cohabita uno o más hijos con sus descendientes. En muchos casos esta
vivienda es el centro de la red matrifocal.7
En cuanto a las ancianas, asumen el estatus de madres-abuelas,
siendo madres para dos generaciones. Tres mujeres, tres generaciones:
madres, hijas y abuelas, ligadas por una maternidad que representa el centro
de sus vidas. Fertilidades prolongadas, sobreposición de estatus y roles.
Dice Moreno: "La maternidad nunca termina, ni tiene límites en el tiempo o
7 Hurtado, Ob. Cit., p. 65. Para casos concretos venezolanos, leer: Sívoli. Modelo social de
envejecimiento. Trabajo especial de Grado, Programa de Gerontología, UNEFM, 1994; Ledesma.
Calidad de vida en ancianos buhoneros de la ciudad de Coro. Trabajo especial de Grado, Programa de
Gerontología, UNEFM, 1997.
15. 15
en el espacio”.8 Como la madre, la anciana también incide en la estabilidad
psíquica de la prole y en la transmisión de hábitos, valores y normas.
Los estudios de Fernández y Reyes aplicados en medios rurales y
urbanos del estado Falcón han detectado diferencias en el ejercicio de los
roles de la abuela, dándose en la ciudad el caso de relaciones difíciles entre
hija y madre respecto a la crianza, ya que la madre espera de la abuela un
rol más ejecutante y apegado a sus decisiones como madre, es decir,
limitada a acatar las instrucciones que ella deja, lo que se contrapone al
hecho de que la abuela permanece con los niños más tiempo y debe en
muchos casos tomar decisiones imprevistas o urgentes, presentándose
dificultades en su actuación con respecto a la crianza de sus nietos debido a
las fricciones con su hija. Mientras, en el área rural la madre delega con
mayor facilidad en la abuela la responsabilidad de la crianza, lo que permite
a la abuela la toma de decisiones y un mayor control sobre los nietos.9
Finalmente, el estudio de Chirino (1998) encontró que el medio urbano
el riesgo de institucionalización para el adulto mayor aumenta en la medida
que se aleja o es inexistente el vínculo consanguíneo o civil directo, aunado
esto a precariedad económica, enfermedad y pérdida de función social. Este
estudio concluyó en que la pérdida de función al interior del grupo familiar
8 Hurtado, Ob. Cit., p. 14.
9 Fernández, Liana. Hábitos de crianza y estructura familiar en familias corianas: estudio
exploratorio; Fernández y Reyes. Control del comportamiento en familias extensas.
16. 16
potencia el riesgo de la institucionalización, pero aún más cuando se convive
con parientes lejanos como sobrinos, cuñados, primos segundos ..., aún más
cuando la pobreza presiona sobre la familia. La pérdida de función se asocia
al postramiento o debilidad por enfermedad, y también al bajo o inexistente
aporte económico al hogar.
1.3 El hogar matrifocal
Este hogar se caracteriza por el predominio de la unión transitoria o
inestable más que por la pareja, el hombre se aleja cumplido su rol genital,
bien para siempre o bien para colocarse en posición periférica, siendo
inclusive expulsado por la mujer. El hogar carece de figura masculina
estable, domina la imagen materna. La familia es extensa porque conviven
varias madres, de distintas generaciones, con sus hijos. Las madres
comparten las funciones básicas y son el vínculo que mantiene unido el
núcleo familiar. Moreno Olmedo lo recoge en la frase popular "Mi familia son
17. 17
mis hijos”.10 El soporte de este hogar no está representado en la díada
hombre-mujer, está desplazado a la díada mujer-hijos.
El perfil de estas familias queda ejemplificado en los registros de la
Alcaldía del municipio Sucre, estado Miranda:
Con un promedio de 5 hijos cada una, sin haber pisado
aún los 30 años (...) Altos niveles de desnutrición en la
prole, madres jóvenes y solas con poquísimos o ningún
ingreso que habitan con sus hijos en viviendas
establecidas en las peores condiciones, hechas de latón y
sin los mínimos servicios (...) No toda su descendencia es
del mismo padre.11
Otros estudios venezolanos en medios populares urbanos, han
encontrado la presencia de redes familiares extensas donde el varón es el
jefe del hogar:
... la familia nuclear aislada es un fenómeno extraño;
(...) Lo común es que las familias nucleares
emparentadas están vinculados de un modo
inmediato tanto en el espacio como en el tiempo (...)
los niños se socializan de tal forma en el espacio de
la familia extensa que el espacio social para ellos es
la vivienda de la abuela, el nivel de la calle y el
vecindario de ésta;...12
10 Idem.
11 La Fuente, Sandra. Cuando la fertilidad eterniza la pobreza. El Universal, Caracas, 12-12-
1997, 4-1.
12 Hurtado, Ob. Cit., p. 61.
18. 18
En estas familias, pese al estatus del varón, la mujer es el elemento
que da origen al núcleo familiar, lo amplía y lo reestructura: "La red extensa
familiar generalmente descansa en la relación de la madre, y
específicamente se orienta en la relación madre-hijo (s)”.13 La matrifocalidad,
en estas familias pobres urbanas, no va asociada a la forzada ausencia del
varón, sino a la prevalencia de las mujeres como centro afectivo-organizativo
de la familia. Una serie de madres "reales o posibles" que son figuras
estables y detentan poder, pues a ellas corresponde la toma de decisiones
afectivas y domésticas, y detentan un liderazgo vecinal que se soporta en la
familia extensa y la matrifocalidad. Inclusive tienen más relevancia en la red
extensa los parientes por vía femenina que masculina.14
En estos hogares la reproducción de las condiciones de vida depende
del equilibrio entre el trabajo doméstico y el trabajo remunerado. Ambos
trabajos se distribuyen entre las diversas generaciones femeninas que
forman la familia matrifocal. Así, la abuela suele responsabilizarse del trabajo
doméstico para que las más jóvenes egresen del hogar y se inserten en el
mercado laboral o se capaciten. Las mujeres se turnan y se dividen los
distintos trabajos, van de la calle a la casa transitando constantemente en
13 Ibídem, p. 63.
14 Ibídem, p. 66.
19. 19
sus dos mundos laborales, pero la abuela siempre queda en casa o en el
entorno inmediato atendiendo funciones domésticas. Se conserva así el
equilibrio económico de la red familiar femenina. En casos extremos de
migraciones queda la abuela en el lugar de origen mientras la hija-madre va
a la ciudad a trabajar para enviar o llevar dinero al hogar.
1.4 Un problema mundial: la feminización de la pobreza
A nivel mundial, tomando en cuenta el incremento de las mujeres que
son madres-jefes de familia, se habla de una feminización de la pobreza,
problema que frena el crecimiento económico de países y regiones, y que
tiene alcances mundiales.15 Se ha detectado, además, que el problema es
particularmente agudo en los países pobres, donde más abundan las
madres-jefes de familia; pero también ha aparecido en países altamente
industrializados, como Estados Unidos, donde se asocia al incremento de
familias pobres. Son estas, mujeres rezagadas en materia educativa,
capacitación laboral, atención en materia de salud y a nivel nutricional.
Además, su trabajo es remunerado con desventajas en comparación al
masculino.
15 Buvinic, Mayra. Mujeres en la pobreza: un problema global, pp. 28-34.
20. 20
La idea de la mujer-madre-jefe del hogar, antes reducida a los
llamados países en vías de desarrollo, ya no es tal:
En las últimas décadas, el porcentaje de familias
mantenidas por mujeres ha aumentado. Mujeres de
todas partes del mundo están soportando la carga
económica de sus familias (...) De acuerdo con
datos recopilados por el Consejo de la Población, 18
de cada 26 censos y encuestas realizados en el
mundo dan pruebas de un aumento en el número de
grupos familiares encabezados por una mujer. Los
cálculos realizados por la Comisión para América
Latina y el Caribe (Cepal) hallan esta tendencia en
ocho de 13 países de la región.16
Es preciso acotar que no debe confundirse la mujer-madre-jefe del
hogar con la matrifocalidad tal y como se ha descrito para Venezuela. La
matrifocalidad es una estructura venezolana y caribeña, de profundas raíces
históricas y cuyo fundamento no es simplemente económico, sino social-
familiar. Estos nuevos núcleos familiares, de interés por la presencia
femenina como jefe del hogar, tienen los más diversos orígenes: madres
solteras, esposas abandonadas por causas migratorias, viudas jóvenes,
refugiadas con hijos,...
1.5 A manera de conclusión
16 Ibídem, p. 32.
21. 21
Como estructura familiar, la matrifocalidad caracteriza a la clase
popular venezolana. Su base en la familia extensa permite la reproducción
de las condiciones de vida a grupos de alta fragilidad económica que, de otra
manera, difícilmente lograrían alguna estabilidad.
Ha cubierto históricamente y hasta la actualidad los requisitos
afectivos, sociales y económicos del grueso de la población venezolana,
teniendo con respecto al anciano la ventaja de ser una estructura envolvente
y cohesiva, donde el geronte no carece de estatus y roles pese a las
deterioradas condiciones de vida.
La matrifocalidad se asocia casi siempre a la pobreza económica, pero
en Venezuela es más que eso: es un rasgo social-cultural que se encuentra
también en los estratos medios y altos. Su presencia y particularidades en los
casos concretos deben ser entendidas por todo aquel profesional que se
involucre en el trabajo comunitario y el diseño de programas sociales, ya que
de la comprensión de las estructuras sociales y familiares que haya en una
comunidad y de los estatus y roles de sus miembros dependerá, en buena
medida, la selección de uno u otro diseño, de una u otra estrategia.
Conclusiones
Existe un fenómeno real, particularmente evidente en las áreas más
urbanizadas: la fragilidad del núcleo familiar. Esta fragilidad afecta a la familia
22. 22
como fuente de apoyo para el anciano, además de asociarse a otros
fenómenos como el elevado número de divorcios, la soltería y las uniones
libres.
Ha habido un cambio en las formas de operación de las distintas
familias y, contradictoriamente, las familias pobres, extensas modificadas,
poseen mayor margen de maniobra ante los cambios estructurales y por
tanto en ellas se ve menos afectado el apoyo al anciano. No sucede lo
mismo con las familias de tipo nuclear, cuya conformación las hace
particularmente débiles para lograrlo, pero que tienen la facilidad de acceder
a la institucionalización por vía privada por corresponderse en su mayoría a
estratos medios y altos.
Lo que sucede es un fenómeno triste y doloroso, por el cual la
sociedad de consumo va, progresivamente, favoreciendo la inserción social
de ciertos individuos -como la mujer- y negando a la vez estructuras de
apoyo y atención al anciano, que ve perderse su tradicional soporte,
sacrificado en aras de ingresar al contingente femenino como productor y
consumidor extra hogar, sin lograr mecanismos alternativos para garantizar
su estabilidad tanto social como al interior de su núcleo familiar.
Es concluyente que una familia extensa, con presencia de mujeres,
sobre todo hijas, es la mayor fortaleza del anciano para recibir apoyo social
informal, estando mejor posicionada la anciana que el anciano debido a que
ejerce mayores funciones al interior del hogar.
23. 23
BIBLIOGRAFÍA BÁSICA
- Fernández, Liana. Hábitos de crianza y estructura familiar en familias
corianas: estudio exploratorio. Trabajo de ascenso (Inédito). Área Ciencias
de la Salud, Departamento de Trabajo Comunitario, Universidad Nacional
Experimental Francisco de Miranda. Coro, Venezuela, 1995.
- Fernández, Liana y Reyes, Lila. “Control de comportamiento en familias
extensas”. En: Croizatia, Vol. 1, Nº 1, enero-junio de 2000, pp. 39-45.
- Fromm, Horkheimer, Parsons y otros. La familia. Ediciones Península,
España, 1974.
- Hurtado, Samuel. Trabajo femenino, fecundidad y familia popular-urbana.
Ediciones UCV, 1995.
- Hurtado, Samuel. Cultural matrisocial y sociedad popular en América latina.
Edición FACES-UCV-Fondo editorial Tropykos, Caracas, 1995.
- Moreno, Alejandro. La familia popular venezolana. Edición Fundación
Centro Gumilla, Col. Curso de formación sociopolítica, Nº 15, Caracas, 1997,
segunda edición.
- Platone, María. Familia y sociedad. Edición FHE-UCV, Col. Cuadernos de
Postgrado Nº 19, Caracas, 1999.
- Sánchez, Yulitza. La familia como un apoyo para el anciano. Urbanización
Cruz Verde. Coro, estado Falcón. Trabajo especial de grado (Inédito).
Programa de Gerontología, Área Ciencias de la Salud, Universidad Nacional
Experimental Francisco de Miranda. Coro, Venezuela, 1999.
- Sívoli, Ligdia. Modelo social de envejecimiento. Barrio Pueblo Nuevo. Coro.
Trabajo especial de grado (Inédito). Programa de Gerontología, Área
Ciencias de la Salud, Universidad Nacional Experimental Francisco de
Miranda. Coro, Venezuela, 1994.
24. 24
BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA
- Buvinic, Mayra. “Mujeres en la pobreza: un problema global”. En: Foreing
Policy. Edición venezolana. Enero 1998, Nº 1, pp. 28-34.
- Castellan, Ivonne. La familia. Edit. FCE, Col. Breviarios Nº 394. México,
1995.
- Cohen, Bruce. Teoría y problemas de introducción a la sociología. Edit.
McGraw-Hill, México, 1986.
- Hurtado, Samuel. Matrisocialidad. Edición EBUC-FACES, Caracas, 1998.
- Le Gall, Didier. Aproximación sociológica al estudio de la familia. Edición
LUZ-Universidad de Caen, Francia. Maracaibo, 1994.
- Sánchez, M. “El apoyo social informal”. En: Anzola y otros (Edits.) La
atención de los ancianos: un desafío para los años noventa. Edición OPS,
Washington, 1994, pp. 360-367.
- Vethencourt, José. “La estructura cultural atípica y el fracaso histórico
cultural en Venezuela”. Revista SIC Nº 362, Caracas, febrero de 1974. pp.
67-69.
- Vethencourt, José. “Hacia el poder social de la familia”. Memorias de las I
Jornadas Nacionales de Organización y Participación Social de la Familia.
Caracas, 1988.
- Yedra, Yulianys. Status y roles del anciano en el medio rural. Trabajo
especial de grado (Inédito). Programa de Gerontología, Área Ciencias de la
Salud, Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda. Coro,
Venezuela, 1995.
FUENTES HEMEROGRÁFICAS
- La Fuente, Sandra. “Cuando la fertilidad eterniza la pobreza”. El Universal,
Caracas, 12 de diciembre de 1991, 4-1.