2. La afinidad eléctrica, afinidad electrónica o AE es la
energía intercambiada cuando un átomo neutro,
gaseoso, y en su estado fundamental, capta un electrón
y se convierte en un ión mononegativo
La afinidad electrónica es la cantidad de energía
absorbida por un átomo aislado en fase gaseosa para
formar un ión con una carga eléctrica de −1. Si la
energía no es absorbida, sino liberada en el proceso, la
afinidad electrónica tendrá, en consecuencia, valor
negativo tal y como sucede para la mayoría de los
elementos químicos; en la medida en que la tendencia
a adquirir electrones adicionales sea mayor, tanto más
negativa será la afinidad electrónica. De este modo, el
flúor es el elemento que con mayor facilidad adquiere
un electrón adicional, mientras que el mercurio es el
que menos.
3. Aunque la afinidad electrica parece variar de forma
caótica y desordenada a lo largo de la tabla periódica,
se pueden apreciar patrones. Los no metales tienen
afinidades electrónicas más bajas que los metales,
exceptuando los gases nobles que presentan valores
positivos por su estabilidad química
4. Los elementos del grupo 1, tienden a ganar un
electrón y formar aniones −1, completando el
subnivel s, mientras que los elementos del grupo 2,
que ya lo tienen completo, no presentan esa
tendencia. Análogamente sucede en el bloque p,
donde las afinidades electrónicas se van haciendo
más negativas a medida que nos acercamos a los
gases nobles.
5. Existen átomos que presentan capas de valencia
con lugares vacantes o "huecos", que pueden ser
ocupados por electrones.
Entonces cuando a un átomo neutro se le añaden
uno o más electrones se presenta un
desprendimiento de energía, conocida como
afinidad electrica, obteniéndose como resultado la
formación de aniones.