TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...
Sueño de belleza y pasión desvanecida
1. Contemple tu desnudez en mis sueños, un entrometido viento me apartó de tal embeleso.
Que ojos tan deslumbrantes e incandescentes los que adornan las perfectas curvas de tu rostro,
una piel tan cálida que hasta el fuego me hiela, me habla y me espera.
Que labios más suaves, maravillosos dientes blancos y grandes le acompañan, pero más grande es
mi envidia por las gotas de lluvia, el viento y la luz que los empaña.
Contemple mi reflejo en el espejo después de ese magnífico encuentro, pero no hablo del sueño,
mis pupilas aguardaban los escombros dulces de tus cejas finas y el rígido delineado de tus adornos
tatuados, la expresión de mi apariencia se apagaba con la memoria obtusa del sendero oscuro
trazado en tu frondosa cabellera.
Qué domingo más placentero, perdí el control de mis ideas y recorrí tus caderas gruesas como las
lágrimas que recorren ahora mis mejillas, lamí cada palabra mencionada en nuestro íntimo
momento donde mis resquebrajadas aspiraciones admiraban tu belleza en silencio, mi energía se
hacía más fuerte con la carga de tu suspiros en mi oído.
Que infortunio más grande enterarme de tu partida, hacer de una servilleta nuestra despedida, no
poder besar tus implorantes labios, besar tus ideas, mi nuevo encuentro, mi nueva idea, tu, mi
nuevo sueño.
Contemplé de nuevo las nubes que nos cubrían aquella tarde, pero su azul no era el mismo,
convertiste en veneno los colores de tus ojos e hiciste quimeras con mi credo, con tu manto de
impecable deshiciste las vestiduras de esta moribunda esclava.
Inclemente fuiste con la miseria de mi esbozo, rayaste con tu sangre el lienzo de mi abrumado
hombro, a las manecillas de tus manos les rendí tributo y perpetué cada espacio en el tintar
humano de mi funesto entraño.
Como cada noche te veré en una estrella y tocare tu torso aunque no estés cerca y si para
extrañarte es que sigo en vida, serás el motor en la lejanía.