Las plantas carnívoras obtienen parte de sus nutrientes atrapando y digiriendo animales, principalmente insectos. Utilizan varios mecanismos para capturar presas como trampas de pinza, pelos pegajosos, trampas de caída y trampas mecánicas. Requieren sustratos ácidos y pobres en nutrientes, luz brillante y alta humedad. Las principales amenazas son las plagas de insectos y el moho gris.
1. PLANTAS CARNÍVORAS
Una planta carnívora, también llamada planta insectívora, es una planta que obtiene
parte o la mayoría de sus necesidades nutricionales (pero no de energía) mediante la
captura y el consumo de animales y protozoos, normalmente insectos (además de
otros artrópodos). Estas plantas crecen generalmente en lugares donde el suelo es pobre,
en especial en nitrógeno, como las tierras ácidas pantanosas y los farallones
rocosos. Charles Darwin escribió el primer tratado conocido sobre estas plantas en 1875.1
PINZAS
Es el mecanismo de la venus atrapamoscas, junto con Aldrovanda vesiculosa. Son las dos
únicas especies que tienen tal mecanismo. El insecto o animal pequeño es atraído por un
néctar dulce, se posa en la hoja y cuando roza al menos dos de los cilios detectores dentro
de un lapso máximo de cinco segundos, se cierra automáticamente. La razón por la que
deben tocarse dos cilios detectores es para evitar la confusión con gotas de agua. Las
espinas de los bordes impiden el escape de su presa.
La presa dentro se mueve, y estimula la secreción de jugos digestivos para su
desintegración, que dura varios días. Una vez digerido el insecto, la hoja se desprende de
su tallo original para dar lugar a una nueva hoja y poder repetir este proceso una y otra
vez.
2. Un insecto atrapado por una Drosera.
Pelos pegajosos
Las hojas están cubiertas de mucosidad que producen las glándulas que sirven a la planta para la
captura de pequeños insectos.
Es el mecanismo usado por Drosera, Byblis, Drosophyllum y Pinguicula, entre
otras. Drosera posee hojas en rosetas pegadas al suelo que segregan un fluido viscoso
con un aroma similar al de la miel.
Cuando un insecto se posa en la hoja, queda atrapado en los pelos pegajosos. Después,
los tentáculos de Drosera se curvan hacia adentro hasta que se cierran. Puede tardar
desde un minuto a varias horas en cerrar y transcurren entre 7 a 14 días hasta que los
tentáculos se vuelven a abrir completamente.[
Trampas de caída
Trampa de Nepenthes villosa.
Son las utilizadas por los
géneros Nepenthes, Heliamphora, Sarracenia, Cephalotus, Darlingtonia y Brocchinia
reducta. Estas plantas también se conocen como plantas odre. Estas trampas tienen forma
de jarrón o de copa y al fondo tienen líquido acuoso donde los insectos se ahogan.
3. Trampas mecánicas
Estructura de una planta de Utricularia.
Este mecanismo es exclusivo del género Utricularia y es el más complejo y rápido del
mundo de las plantas carnívoras. Estas plantas acuáticas poseen numerosas trampas en
cada tallo que se asemejan a globos diminutos. Cada trampa tiene una trampilla muy
pequeña que suele estar bien cerrada. Para tender las trampas, la planta bombea hacia
afuera una parte del agua, para que la presión en el interior sea menor que la exterior. Si
un diminuto animal nada demasiado cerca de la trampa, roza unas cerdas que se
encuentran pegadas a la trampilla. La trampilla se abre y la trampa absorbe agua,
arrastrando al animal hacia adentro. Luego la trampilla se cierra. Cuando la planta ya ha
digerido a su víctima, vuelve a tender la trampa y dispone a capturar otra presa.
Trampas de langosta-olla
Genlisea violacea con sus trampas y hojas
Son el mecanismo del género Genlisea que se especializan en cazar protozoos, a los que
atraen de forma química. Una hoja en forma de Y permite a la presa entrar pero no salir.
Los pelos que apuntan hacia adentro obligan a la presa se mueva en una dirección en
particular. La presa entra en la entrada de espiral que las bobinas alrededor de los dos
brazos superiores de la Y se ven obligados a moverse inexorablemente hacia un estómago
en el brazo superior de la Y, donde se digieren. El movimiento de la presa también se cree
que está animado por el movimiento del agua a través de la trampa, producido de una
manera similar a la de vacío en las trampas de la vejiga, y probablemente evolutivamente
relacionados con ella.
Cuando las plantas se desarrollan en su ambiente natural pueden llegar a ser del tamaño
de la mano de un hombre adulto y se han llegado a registrar pequeños roedores en su
interior, que no son alimento de las plantas, sino que se cree que cayeron por accidente.
Este mecanismo recuerda mucho al visto en Sarracenia psittacina, Darlingtonia
californica y Nepenthes aristolochioides.
4. Combinación de trampas
Un mecanismo utilizado únicamente por Drosera glanduligera, en la que combina
características de las trampas de pinza y de sus trampas de pelos pegajosos, estas
últimas comunes en las demás droseras.
Cultivo
Cultivo de Nepenthes rajah y otras especies.
Heliamphora chimantensis, planta carnívora en la Gran Sabana, Venezuela.
Aunque las distintas especies de carnívoras poseen diferentes necesidades de luz solar,
mezcla de sustrato o humedad, todas comparten algunas de estas necesidades. La
mayoría requiere agua de lluvia, de 6,5 con ácido sulfúrico. El agua corriente contiene
minerales (en especial sales de calcio) que se acumularían hasta matar la planta.
5. Este es el motivo por el cual la mayoría de las plantas carnívoras ha evolucionado en
sustratos ácidos y pobres en nutrientes y son, en consecuencia,
extremadamente calcífugas. Por lo tanto son demasiado sensibles al aporte continuado de
nutrientes en el suelo. Ya que la mayoría vegeta en pantanos, casi todas son muy
intolerantes a la sequía, por lo que en verano hay que colocar la maceta sobre un platillo
con agua. Sin embargo, hay excepciones, como las tuberosas drosera que requieren un
periodo seco en verano (reposo), y Drosophyllum lusitanicum que requiere condiciones
mucho más secas que la mayoría.
Las plantas cultivadas en el exterior normalmente obtienen insectos más que suficientes
para alimentarse adecuadamente, aunque en ocasiones se les deben suministrar
manualmente para suplementar la dieta. Sin embargo, estas plantas son incapaces de
digerir otro tipo de alimentos que no sean insectos, como trozos de carne, por ejemplo, ya
que estos se pudrirían en el interior de la trampa causando la muerte de toda la planta. Es
raro que una carnívora muera aunque no atrape ningún insecto, lo que puede afectar es a
su crecimiento. En general, lo mejor es dejar que estas plantas utilicen sus propios
recursos: las causas más comunes de muerte para una Venus atrapamoscas, son,
además de regarla con agua del grifo, intentar forzar su trampa para alimentar.
Salvo un par de especies, Nepenthes y Pinguicula, que vegetan bien a la sombra, la
mayoría requiere luz brillante o pleno sol, para estimularles a sintetizar los pigmentos rojo y
púrpura de la antocianina.La mayoría vive en los pantanos y las demás, generalmente, en
regiones tropicales, por lo que requieren un alto grado de humedad. Estas condiciones se
pueden imitar en el cultivo doméstico o a pequeña escala colocando las plantas dentro de
un recipiente mayor con el fondo cubierto de guijarros que se mantengan constantemente
húmedos. Las especies pequeñas de Nepenthes vegetan bien en un terrario.Muchas
especies son originarias de regiones frías, por lo que pueden cultivarse en un jardín
húmedo durante todo el año. La mayoría de las especies de Sarracenia tolera
temperaturas por debajo de 0 °C, a pesar de que casi todas son oriundas de la zona
suroriental de Estados Unidos. Las especies de Drosera y Pinguicula también toleran estas
temperaturas. Sin embargo, el género Nepenthes, que es tropical, requiere entre 20 a
30 °C para prosperar.
El sustrato más adecuado para las carnívoras es una mezcla 3:1 de turba
de Sphagnum con arena ácida del tipo usado para horticultura (la fibra de coco es un
sustituto más ecológico que la turba). Nepenthes crece bien en un compuesto
para orquídeas o simplemente en musgo de Sphagnum.
Irónicamente, estas plantas son propensas a sufrir infestaciones parasitarias
de áfidos o cochinillas. Los ataques menores se pueden eliminar a mano, sin embargo las
infestaciones masivas requieren un insecticida. El alcohol isopropílico es efectivo como
insecticida tropical, particularmente para cocoideos. El Diazinón es un excelente
insecticida sistémico tolerado por la mayoría de las carnívoras, así como el Malathion y
el Acephate.
Pero aunque las plagas de insectos puedan ser un problema, el mayor asesino de
carnívoras (además del maltrato humano) es el moho gris (Botrytis cinerea). Éste medra
en condiciones cálidas y húmedas, convirtiéndose en una seria amenaza en invierno. En
cierta medida, se puede proteger a las carnívoras de regiones frías, manteniéndolas
frescas y bien ventiladas y asegurándose de retirar las hojas muertas con regularidad. Si
aun así el hongo ataca, será necesario un fungicida.
6. Este es el motivo por el cual la mayoría de las plantas carnívoras ha evolucionado en
sustratos ácidos y pobres en nutrientes y son, en consecuencia,
extremadamente calcífugas. Por lo tanto son demasiado sensibles al aporte continuado de
nutrientes en el suelo. Ya que la mayoría vegeta en pantanos, casi todas son muy
intolerantes a la sequía, por lo que en verano hay que colocar la maceta sobre un platillo
con agua. Sin embargo, hay excepciones, como las tuberosas drosera que requieren un
periodo seco en verano (reposo), y Drosophyllum lusitanicum que requiere condiciones
mucho más secas que la mayoría.
Las plantas cultivadas en el exterior normalmente obtienen insectos más que suficientes
para alimentarse adecuadamente, aunque en ocasiones se les deben suministrar
manualmente para suplementar la dieta. Sin embargo, estas plantas son incapaces de
digerir otro tipo de alimentos que no sean insectos, como trozos de carne, por ejemplo, ya
que estos se pudrirían en el interior de la trampa causando la muerte de toda la planta. Es
raro que una carnívora muera aunque no atrape ningún insecto, lo que puede afectar es a
su crecimiento. En general, lo mejor es dejar que estas plantas utilicen sus propios
recursos: las causas más comunes de muerte para una Venus atrapamoscas, son,
además de regarla con agua del grifo, intentar forzar su trampa para alimentar.
Salvo un par de especies, Nepenthes y Pinguicula, que vegetan bien a la sombra, la
mayoría requiere luz brillante o pleno sol, para estimularles a sintetizar los pigmentos rojo y
púrpura de la antocianina.La mayoría vive en los pantanos y las demás, generalmente, en
regiones tropicales, por lo que requieren un alto grado de humedad. Estas condiciones se
pueden imitar en el cultivo doméstico o a pequeña escala colocando las plantas dentro de
un recipiente mayor con el fondo cubierto de guijarros que se mantengan constantemente
húmedos. Las especies pequeñas de Nepenthes vegetan bien en un terrario.Muchas
especies son originarias de regiones frías, por lo que pueden cultivarse en un jardín
húmedo durante todo el año. La mayoría de las especies de Sarracenia tolera
temperaturas por debajo de 0 °C, a pesar de que casi todas son oriundas de la zona
suroriental de Estados Unidos. Las especies de Drosera y Pinguicula también toleran estas
temperaturas. Sin embargo, el género Nepenthes, que es tropical, requiere entre 20 a
30 °C para prosperar.
El sustrato más adecuado para las carnívoras es una mezcla 3:1 de turba
de Sphagnum con arena ácida del tipo usado para horticultura (la fibra de coco es un
sustituto más ecológico que la turba). Nepenthes crece bien en un compuesto
para orquídeas o simplemente en musgo de Sphagnum.
Irónicamente, estas plantas son propensas a sufrir infestaciones parasitarias
de áfidos o cochinillas. Los ataques menores se pueden eliminar a mano, sin embargo las
infestaciones masivas requieren un insecticida. El alcohol isopropílico es efectivo como
insecticida tropical, particularmente para cocoideos. El Diazinón es un excelente
insecticida sistémico tolerado por la mayoría de las carnívoras, así como el Malathion y
el Acephate.
Pero aunque las plagas de insectos puedan ser un problema, el mayor asesino de
carnívoras (además del maltrato humano) es el moho gris (Botrytis cinerea). Éste medra
en condiciones cálidas y húmedas, convirtiéndose en una seria amenaza en invierno. En
cierta medida, se puede proteger a las carnívoras de regiones frías, manteniéndolas
frescas y bien ventiladas y asegurándose de retirar las hojas muertas con regularidad. Si
aun así el hongo ataca, será necesario un fungicida.