Gustavo Adolfo Bécquer nació en Sevilla en 1836. Pertenecía a una noble familia de comerciantes de origen flamenco establecida en Sevilla desde el siglo XVI. Tanto él como su hermano Valeriano adoptaron el apellido Bécquer para firmar sus obras artísticas. Algunos de sus poemas tratan sobre la brevedad de la vida y cómo la gloria y el amor que se persiguen no son más que sombras de un sueño.