El documento analiza tres factores que inciden en la abstinencia de los niños a ingerir los alimentos provistos en las escuelas: 1) La hipocresía de los padres que critican la comida de la escuela pero ignoran lo que comen sus hijos en casa, 2) La ignorancia sobre nutrición sana ya que se valora más el sabor que el valor nutricional, y 3) La lucha de intereses entre suplidores, directores y políticos por el negocio de proveer la comida escolar. El autor propone entregar las cocinas escolares

1. Entre hipocresía, ignorancia y lucha de intereses.
“La comida de la escuela”
Por: Lic. Angel Gabriel Tatis
Convivir con la realidad de
la escuela de tandas extendidas es
experimentar la dura realidad de niños que
permanecen ocho horas recibiendo el pan
de la enseñanza y rechazando el pan de
nutrición de su organismo o cuerpo. Todo
esto a mi humilde percepción objetiva de la
situación producto de tres factores que
inciden en la abstinencia de los niños en
ingerir dichos alimentos que son la
hipocresía de los padres , ignorancia sobre
nutrición sana y lucha de intereses entre los
suplidores, directores y políticos.
La hipocresía de los padres
Me duele escuchar a padres y tutores hablar
con una fuerza de voz diciendo: -mi hijo no
va a comer esa porquería de comida,
expresando así su descontento con la
calidad de los alimentos preparados por los
suplidores. En vista, de esa preocupación
aparente por la calidad de los alimentos que
ingieren sus hijos me surgen las siguientes
preguntas ¿comen sus hijos papitas y su
derivados, refrescos, golosinas en gramos
por encima del nivel de azúcar diaria, grasas
saturadas? ¿Conocen ustedes el daño que
hacen estos a la salud de sus niños? ¿Se
preocupan ustedes que hechos no ingieran
estos alimentos? Por estas cosas es que
pienso que aparente preocupación por la
salud de sus hijos me parece ser hipócrita
me preocupa lo que cocinan en la escuela,
pero ignoro lo que comen en la calle y en la
casa.
La ignorancia sobre nutrición sana
¿La comida es buena por el sabor al paladar
o por su valor nutricional? Estamos
acostumbrando a valorar los alimentos por
su sabor, escuchamos decir ¡que rica te
quedo la comida¡ refiriéndose al sabor y no
necesariamente a su valor nutricional. La
sal, sopitas y otros condimentos agregados
al menú de nuestra alimentación son
elementos de sabor sin ningún valor
nutricional. La realidad es que el INABIMA
ha diseñado un menú pensando en una
cultura de nutrición sana elaborado por
expertos nutricionistas del país, esto a la vez
enfrenta, nuestra cultura de alimentación la
cual está basada en el sabor, la cantidad
excedente a la proporción diaria
establecida. Algunas de las expresiones
que denuncian los padres y tutores –mira lo
que le dan espagueti vacío. En realidad lo
espagueti contienen harina, leche, carne,
vegetales en proporción equivalente a un
plato completo.
El sabor está sujeto a los
niveles de tolerancia que ha experimentado
el paladar, por ejemplo, si usted no está
acostumbrado a beberse una copa de vino,
es probable que se sienta mareado o
borracho, no obstante, si es una persona
acostumbrada a consumir bebidas en
mayores proporciones, la copa de vino le
sabe a nada, lo mismo sucede con los
alimentos estamos acostumbrado a
consumir altos niveles de saborizantes ya el
paladar no percibe los sabores de menor
niveles.
Lucha de intereses entre suplidores,
directores y políticos
El gobierno construyo en diferentes
centros educativo cocinas con inversiones
millonaria las cuales no se han utilizado
porque se entendió luego de realizada la
inversión que lo ideal era que los alimentos
sean suplidos por cocinas externas al centro
educativo, aquí, surge el meollo de la
situación cuando los directores de los
centros educativos se enojan por que se le
quita una responsabilidad en sus funciones
como administradores del centro codiciable
por los trueques que estos negocios
implican con los comercios, pero por otro
lado, están los políticos que con su interés
de beneficiar a los compañeros de su
militancia política son adjudicado a

2. Entre hipocresía, ignorancia y lucha de intereses.
“La comida de la escuela”
suplidores. Mientras las luchas de intereses
se mantienen los miles de niños siguen
siendo afectados por la abstinencia de
ingerir los alimentos.
Irregularidades encontradas en la cocción
de los alimentos
Ciertamente han sido encontrada
irregularidades en la cocción de los
alimentos, misma, irregularidades que
pudieran suceder en la casa, en las cocinas
internas de los centros educativos, pero que
no salen a la luz pública. El hecho de cocinar
grandes cantidades de alimentos para una
población estudiantil grande hace que los
suplidores inicien su labores de cocinar muy
temprano lo que genera que alimentos
salvos en algunas condiciones se fermentes
y crean alguna irregularidad en los
alimentos.
Mi propuesta de solución al problema
Sé que con este escrito voy a
generar controversia con los interés
involucrados, mi única motivación es
defender el verdadero bienestar estudiantil,
soy un orientador psicólogo con la función
defender precisamente eso. No me
conformo solo a presentar mi percepción
sino que también presento mi propuesta de
solución.
“Las cocinas internas de los centros
educativos deben ser entregadas a los
suplidores para que estos a la vez coloquen
su personal en dichas cocinas y los
alimentos se cocinen para cada centro
independientemente bajos los criterios del
menú establecido y realizar campaña para
desaprender la cultura de alimentación, con
los padres, maestros, estudiantes, personal
de apoyo en otros”