El documento discute las instrucciones de Pablo a la iglesia en Tesalónica sobre cómo los creyentes deben tratarse unos a otros y vivir en armonía. Pablo enfatiza la importancia del respeto mutuo, la resolución pacífica de conflictos, y el apoyo a los miembros más débiles. La vida en la iglesia debe basarse en el espíritu de unidad y amor que Cristo enseñó.
1. lección 10
1 al 7 de septiembre
La vida
en la iglesia
«No desprecien las profecías, sométanlo todo a prueba,
aférrense a lo bueno». 1 Tesalonicenses 5: 20, 21
Edición facilitada por:
RECURSOS ESCUELA SABATICA ®
2. sábado
1º de septiembre
Introducción
Gálatas 5: 22; Filipenses 4: 4 Repasando la vida
en la iglesia
En 1 Tesalonicenses 5: 12-28, leemos las instrucciones finales que Pablo envía a
los cristianos de aquella ciudad. Estudia los escenarios presentados a continuación,
basados en sucesos reales, y luego piensa en una reacción apropiada tomando en
cuenta los consejos de Pablo.
Al decir eso salió abruptamente del salón.
Pasan diez meses y aún no regresa a la iglesia.
• La iglesia celebra un programa de talentos. Durante las pruebas, llega una
dama que ha enviudado recientemente, vestida con un traje típico y dice que
desea presentar una danza de su cultura. El director del grupo de aprobación
previa, afirma enfáticamente que en el programa no se permite ningún tipo
de bailes. La viuda explica que esa danza es parte de su herencia cultural y que
si la misma no es aceptable, ella entiende que tampoco su persona es acepta-
ble. Al decir eso salió abruptamente del salón. Pasan diez meses y aún no
regresa a la iglesia.
• La Junta de nombramientos está reunida. Alguien menciona un nombre y
dice que esa persona ha rechazado su nombramiento diciendo que única-
mente servirá en algún departamento o comisión, que maneje recursos eco-
nómicos.
• La directora de la Escuela Sabática es una persona que posee un fuerte tem-
peramento. En cierta ocasión hizo que un orador palabrero se sentara al decir-
le: «Hermano, ¡su lengua parece que tiene un ala en cada uno de sus lados!»
Una de las familias de la iglesia se sorprendió al saber que ella había decidi-
do celebrar una actividad social de la Escuela Sabática en la casa de ellos. La
directora les informó que permitiría aportar la comida para la reunión, ya que
eran buenos cocineros.
• Los dirigentes de una iglesia muy misionera confiaban que podrían dirigir los
cultos del sábado y la comida comunitaria mientras el pastor estaba ausente.
El sermón incluyó una serie de textos además de algunos breves comentarios
destinados a corroborar varios reglamentos aprobados por la Junta directiva.
Después del culto, la congregación se dispuso a participar del almuerzo. En la
última mesa había un joven que estaba leyendo su Biblia. Cuando alguien le
preguntó si podía acompañarlo, el joven le dio la bienvenida y entabló una
conversación con el recién llegado. El joven era un visitante. Había acudido
a la iglesia para «conocer un poco más acerca de los observadores del sábado».
El otro hombre era también un visitante que vivía a más de mil kilómetros de
distancia.
Norma Sahlin, Springboro, Ohio, EE. UU. 97
3. domingo Mateo 5: 43-48;
Marcos 9: 50;
2 de septiembre Logos Juan 15: 4-6;
Romanos 12: 17-20;
La armonía en la iglesia Gálatas 5: 22-24;
Filipenses 4: 4, 5; 1
Tesalonicenses 5: 12-28
Pablo había establecido una pequeña iglesia casera en Tesalónica en años atrás y
ahora Timoteo llegaba con un informe respeto al crecimiento de dicha congregación y de
sus problemas. La correspondencia de Pablo con esta pujante iglesia nos permite aso-
marnos a lo que era la vida normal de una congregación durante el siglo I. En varios
aspectos se parece al comportamiento de muchas iglesias en la actualidad.
Respeto por el liderazgo (1 Tes. 5: 12, 13)
Pablo acostumbraba a elegir ancianos en cada congregación, antes de marcharse. La
palabra para este cargo es presbítero y se traduce como «obispo». Ellos eran los pastores de
las primeras iglesias cristianas. Entonces, al igual que hoy, el liderazgo no podrá trabajar
a menos que cuente con el respeto del grupo. La iglesia de Tesalónica tenía problemas en
este sentido, como algunas iglesias en la actualidad. Pablo nos dice: «Hermanos, les pedi-
mos que sean considerados con los que trabajan arduamente entre ustedes, y los guían y
amonestan en el Señor» (1 Tes. 5: 12). Aunque parte de su labor era «aconsejar» a los
miembros de la iglesia, él les dice: «ténganlos en alta estima» (vers. 13). Pablo pide que el
respeto por los dirigentes sea manifestado «con amor». Aunque existen diferentes opi-
niones respecto a la forma de hacer las cosas, o de interpretar las Escrituras, eso no niega
el requisito básico de que los seguidores de Jesús deben tratar bondadosamente a los
demás.
Enfrentando los conflictos (Mar. 9: 50; Rom. 12: 17-20)
Vivan «en paz unos con otros» es una repetición de un mandato expresado por el
mismo Cristo (Mar. 9: 50). En Romanos 12: 18, Pablo amplía dicho mandato para incluir
«a todos los seres humanos». Cristo espera que los miembros de la iglesia «estén mutua-
mente en paz». Esto es algo fundamental para su testimonio y para su adoración. No es
necesario que estemos de acuerdo con los demás respecto a todo asunto, o que nos parez-
camos o tengamos las mismas actitudes ante la vida
Cuando estemos comprometidos a vivir en paz con los demás miembros de la igle-
sia, podremos discutir con ellos nuestros diferentes puntos de vista en una forma positi-
va. Podremos escuchar a aquellos con quienes no estamos de acuerdo y aprender de ellos
respecto a sus interpretaciones de la Biblia. Eso no significa que coincidiremos con
ellos abandonando nuestras propias ideas, sino que analizaremos diferentes perspectivas
para entender las razones por las que los demás podrían ver las cosas en forma diferente.
De otra forma, estaremos siempre intentando imponer nuestras opiniones sobre las aje-
nas. Esa no es una forma cristiana de vida.
Ayudando a los cristianos a que se amen mutuamente
(Mat. 5: 43-48; 1 Tes. 5: 14)
En 1 Tesalonicenses 5: 14, Pablo nos instruye para que aconsejemos a los «desorde-
nados» y a los «holgazanes» que podría haber en la congregación. Estos conceptos se refie-
ren a los soldados que están fuera de compás al marchar, quizá tomando un descanso no
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4. autorizado a la orilla del camino.1 Es el propósito de Cristo que «cada» creyente se man-
tenga activo en algún tipo de servicio (1 Cor. 12: 7). Cuando los miembros de la iglesia
no están involucrados en servir a la comunidad, en el evangelismo, o en cuidarse mutua-
mente; estarán más propensos a involucrarse en conflictos, discordias y críticas.
«Estimulen a los desanimados». La palabra «desanimado» se refiere a una persona
de «pequeño corazón». Algunas iglesias se desaniman fácilmente. Ellas necesitan nuestro
cuidado y apoyo. Podríamos pensar que ellos son pacientes heridos pero que pueden
caminar.
«Estén siempre alegres, oren sin cesar,
den gracias a Dios en toda situación».
«Ayuden a los débiles». En otros textos del Nuevo Testamento, Pablo utiliza la mis-
ma palabra para referirse a aquellos que son pobres en recursos materiales. (Hech. 20:
35), de poca salud física (1 Cor. 11: 30), o en la fe (Rom.14: 1). Esos son los pobres y los
enfermos, además de aquellos a quienes les falta la fe. En Cristo, todos tenemos la obli-
gación de ayudar a esas personas.
«Sean pacientes con todos». Una congregación adventista debería ser un lugar de
aceptación y paz, donde todos los participantes pueden encontrar «su espacio» para cre-
cer espiritualmente, hacer preguntas, meditar y aclarar sus dudas. Esto es especialmente
real durante el sábado, un retiro semanal de 24 horas.
«Asegúrense de que nadie paga mal con mal» (vers. 14). La venganza es un impulso
común, pero es pecado. No importa lo mal que los demás nos traten, debemos «poner
la otra mejilla» y «orar por nuestros enemigos» (Mat. 5: 43-48).
La base espiritual de la vida en la iglesia (1 Tes. 5: 12-28)
Al investigar respecto al crecimiento de las iglesias, encontré que uno de los factores
más importantes asociados a las congregaciones adventistas que crecen, es que tienen un
marcado sentido de que quienes asisten a la iglesia se sienten más cerca de Dios. Esa
dimensión espiritual es algo clave para un exitoso discipulado y una efectiva labor de
evangelismo. Es algo que tiene un coeficiente de correlación aún superior a los pro-
gramas evangelizadores.2
PARA COMENTAR
¿Qué ven los vecinos que viven en los alrededores de la iglesia? ¿Son ustedes un grupo
cristiano fácilmente reconocible? ¿Les extiende la iglesia un respeto visible y una real defe-
rencia a los demás? ¿O acaso está tu congregación enfrascada en controversias respecto a
asuntos no tan diáfanos?
______________
1. Interpreter’s Bible Commentary (Nashville: Abingdon Press, 1999), p. 312.
2. «Adventist Congregations Today», Ministry, noviembre del 2004.
Monte Sahlin, Springboro, Ohio, EE. UU. 99
5. lunes
3 de septiembre Testimonio 1 Tesalonicenses 5: 12-28
El trabajo en equipo
y el respeto
«Cada uno debe estar en su grupo y su lugar, realizando su trabajo. En estos últi-
mos días, cada uno de ustedes debe hacer una obra para Dios, grande, sagrada y
solemne. Cada uno debe llevar el peso de su propia responsabilidad. El Señor está
preparando a cada individuo para que haga su propia tarea, y cada uno debe ser res-
petado y honrado como hermano escogido por Dios, y como precioso a su vista. No
se debe escoger a un solo hombre para que se encargue de todos los planes y méto-
dos, mientras otros son dejados fuera. Si así se procediera, se cometerían errores y se
harían movimientos equivocados. La obra se atrasaría en vez de adelantar. Nadie
necesita temer que otro tenga el puesto de mayor importancia. Todos deben tratar-
se con imparcialidad y sin hipocresía.
«Los que se inclinan a considerar su juicio individual
como supremo están en grave peligro».
»No se da a cada obrero una misma línea de trabajo; y por esta razón ustedes
necesitan consultarse unos a otros con la libertad y confianza que debe existir entre
obreros del Señor. Todos necesitamos tener menos confianza en nosotros mismos,
y mucha más confianza en quien es el poderoso Consejero que conoce el fin desde
el principio».1
«Dios ha investido a su iglesia con especial autoridad y poder, que nadie tiene
derecho de desatender y despreciar; porque el que lo hace desprecia la voz de Dios.
»Los que se inclinan a considerar su juicio individual como supremo están en
grave peligro. Es un plan estudiado de Satanás separarlos de aquellos que son cana-
les de luz y por medio de quienes Dios ha obrado para unificar y extender su obra en
la tierra. Descuidar o despreciar a aquellos a quienes Dios ha señalado para llevar las
responsabilidades de la dirección en relación con el avance de la verdad, es rechazar
los medios que ha dispuesto para ayudar, animar y fortalecer a su pueblo. El que cual-
quier obrero de la causa de Dios pase por alto a los tales y piense que la luz divina no
puede venir por ningún otro medio que directamente de Dios, es colocarse en una
posición donde está expuesto a ser engañado y vencido por el enemigo».2
PARA COMENTAR
1. Si la mensajera del Señor nos dice que todos tenemos un papel que desempeñar
en la obra de Dios, ¿por qué dedicamos tanto tiempo tratando de convencer a los
miembros de la congregación respecto a testificar?
2. ¿Qué les dicen a los miembros de la comunidad nuestras críticas a los dirigentes y
pastores?
______________
1. Liderazgo cristiano, p. 58.
2. Obreros evangélicos, p. 459.
Santhosh Jackson, Laurel, Maryland, EE. UU.
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6. martes
4 de septiembre
1 Tesalonicenses 5: 12-28
Evidencia
¿Qué desea Jesús?
«Dar gracias en toda circunstancia implica un reconocimiento de la soberanía
de Dios, sabiendo que en todo momento “Dios dispone todas las cosas para el bien
de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito” (Rom.
8: 28). Finalmente, observamos que Dios dice estar en Jesucristo. Respecto a este
tema, como a cualquier otro […] su voluntad se nos revela en Cristo, ya sea en su
práctica o en sus preceptos, en los días de su carne o mediante su Espíritu. Además,
únicamente si estamos “en Cristo” seremos fortalecidos mediante el mismo Espíritu
para llevar a cabo lo que Dios demanda».*
La iglesia es de Dios.
Esos comentarios respecto a 1 Tesalonicenses 5: 16-18, contienen la clave para
entender la vida eclesiástica. No es «nuestra» la iglesia. Tampoco es «mía» la iglesia,
sin importar el tiempo o el dinero que haya invertido en ella. La iglesia es de Dios,
y él ha revelado su voluntad respecto a ella a través de Cristo.
Las «instrucciones finales» de Pablo, registradas en los versículos 12-28 parecen
una lista de cotejo relacionada al comportamiento de los miembros. Pablo nos dice
que no debemos olvidar la razón de la iglesia para existir. Los creyentes nos unimos
porque el sacrificio de Cristo nos salva de nuestros pecados y nos transforma. Por
tanto, Pablo va un paso más allá, al decirnos en el versículo 19 que no apaguemos
el fuego del Espíritu. Mientras aboga porque las profecías sean tratadas con respeto,
también deseaba que los tesalonicenses y las generaciones futuras de creyentes tra-
taran de ser equilibrados. Él aconseja en el versículo 21 que pongamos todo a prue-
ba, que no nos apresuremos a rechazar o a abrazar algo; y que sobre todo, nos afe-
rremos de lo bueno.
El versículo 22 amplía el enfoque del mensaje paulino: eviten todo tipo de mal.
El nuestro es un mundo de pecado y no podremos escapar del mal aunque nos refu-
giemos en un lugar aislado. Seamos cuidadosos respecto a los lugares que frecuen-
tamos y a las personas con quienes nos asociamos. Mantengámonos conectados con
Jesús a través de la oración y del estudio regular de la Biblia.
Podremos compartir nuestra fe mediante nuestras acciones, así como tener una
vida espiritual más fuerte al adoptar una sencilla pregunta: «¿Qué desea Jesús de mí?»
PARA COMENTAR
¿Si tu cristianismo es cuestionado, ¿qué evidencia podrías presentar con el fin de vali-
dar tu condición?
______________
*David J. Williams, New International Biblical Commentary—1 and 2 Thessalonians, p. 100.
Melissa Sahlin, Mason, Ohio, EE. UU. 101
7. miércoles
5 de septiembre Cómo actuar
Velando y esperando 1 Tesalonicenses 5: 12-16
al Señor
Pablo concluye su primera carta de ánimo a la iglesia en Tesalónica con una serie
de instrucciones aplicables a las relaciones entre los dirigentes y los miembros. Las
expresiones activas predominan: Sean considerados con los que trabajan arduamente
entre ustedes. Vivan en paz. Amonesten a los holgazanes, estimulen a los desanimados,
ayuden a los débiles. Sean pacientes con todos. No sean vengativos. Esfuércense por hacer
el bien. Estén siempre alegres. Oren sin cesar y den gracias a Dios por todo. No apaguen
el Espíritu. No desprecien las profecías. Sométanlo todo a prueba. Eviten toda clase de mal.
Recuerda que somos peregrinos, no colonizadores.
Los cristianos deberían memorizar este listado y repasarlo en forma regular.
Observar estas instrucciones fortalecerá nuestra fe y proveerá un testimonio positivo
a quienes nos rodean. Sin embargo, si estas recomendaciones no son observadas,
podría haber consecuencias negativas. Algunas ideas para mejorar nuestras relaciones
son:
• Ora por los dirigentes de tu congregación mencionando sus nombres en
forma específica. Dedicar tiempo para interceder a favor de determinadas per-
sonas puede cambiar el concepto que tienes de ellos.
• Cambia tu actitud respecto a la iglesia. Recuerda que la iglesia le pertenece a
Dios, no es tuya. Tú eres una rama, mientras que Jesús es la vid. Tú no tienes
que realizar las tareas de él. Recuerda que él puede hacer que las piedras hablen
en caso de que sea necesario.
• Dedica más tiempo a interactuar con tus hermanos de la iglesia. Trata de
entender sus puntos de vista. Haz preguntas que te ayuden a aclarar sus ideas.
Entérate de sus experiencias espirituales.
• Recuerda que la forma en que entiendes alguna situación, quizá no es la
misma en que otro miembro lo hace. Acepta los diferentes puntos de vista que
los demás pudieran aportar. Esto ampliará tu visión de la iglesia.
• Realiza tantos actos de bondad como te sea posible. Esa es una buena forma
de animar a los demás miembros. Las acciones hablan más fuerte que las pala-
bras.
• Recuerda que somos peregrinos, no colonizadores. Este mundo no es nuestro
hogar.
PARA COMENTAR
¿Cuál es la diferencia entre sentirse parte de la comunidad y no uno de los due-
ños de la misma? ¿Qué actitudes podrían usurpar el papel de Jesús?
Gianluca Bruno, Mason, Ohio, EE. UU.
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8. jueves
6 de septiembre
1 Tesalonicenses 5: 12-28
Opinión
Una nueva perspectiva
respecto al agradecimiento
Al principio, 1 Tesalonicenses 5: 12-28 me pareció una lista para una nueva
iglesia de las cosas que se pueden, o que no se deben hacer, y que no son aplicables
a nuestra época. Luego gracias a una Biblia de estudio, pude recibir un mensaje
más personal en dichos versículos: mostrar más aprecio por un pastor (hay dos en
mi familia); cómo mantener una actitud de oración; reconocer que Dios está pre-
sente aún cuando el mal nos golpee. Desde luego, lo que más me impresionó fue
lo siguiente: estén gozosos, oren sin cesar, den gracias por todo. Entiendo que es
mucho más fácil criticar que estar gozoso, ponerse a comer antes de dar gracias,
orar pidiendo la ayuda de Dios, y luego olvidar darle las gracias una vez que recibi-
mos su bendición. Por tanto, leer esos versículos podría ser algo incómodo.
Es sorprendente lo fácil que es mantener
una actitud de agradecimiento.
La vida es muy complicada, y es bastante fácil asumir una actitud negativa.
Después de un largo día de trabajo, a menudo me encuentro pensando en las cosas
que me han afectado. Pero después de leer estos versículos, me digo cada vez que
recuerdo un inconveniente, que debo más bien pensar en algo positivo.
Mantener un espíritu de oración constante es algo que siempre he querido
hacer. Sin embargo, cuando medito en estos versículos y en el grado de incomodi-
dad que ellos me producen, tengo que sincerarme conmigo misma. Es fácil recor-
dar a Dios cuando le pido que no haya mucha congestión vehicular con el fin de
llegar temprano a mi reunión mañanera. Sin embargo, incorporar a Dios de mane-
ra significativa en el fluir de mi conciencia me parecía algo inalcanzable. Hasta que
una versión de la Biblia en lenguaje moderno me ayudó a entenderlo mejor. Orar
continuamente es estar consciente, y reconocer mi dependencia de Dios. Es tan
sencillo como las cosas básicas que nos enseñaron de niños: orar antes de cada co -
mida; comenzar y terminar el día con una oración. Luego, a mitad del día, al
enfrentar una situación complicada, hago una pausa para reconocer que Dios está
a mi lado y que deseo depender de él en todo.
Es sorprendente lo fácil que es mantener una actitud de agradecimiento, mien-
tras me enfoco en las cosas positivas. Es en esos momentos de agradecimiento que
hago aportes a mi actitud de oración mientras que reconozco a Dios como la fuen-
te de todo aquello por lo cual debo dar gracias.
Stephanie Sahlin Jackson, Laurel, Maryland, EE. UU. 103
9. viernes
7 de septiembre Exploración Romanos 12: 17-21;
Gálatas 5: 22-26
Llamados a actuar
PARA CONCLUIR
Las cartas de ánimo de Pablo dirigidas a la iglesia de Tesalónica les hace recor-
dar que deben ser una iglesia sensata y que sigue las instrucciones de Dios. Él tam-
bién les recuerda que deben ser una iglesia misionera. Ayuden a los pobres. Ali-
menten al hambriento. Vivan en paz con los demás y anímense mutuamente. Todo
eso debería ser parte de los objetivos de la iglesia. La iglesia no nos pertenece: es
propiedad de Dios. Parte de la obra misionera que Dios espera realicemos, implica
sembrar nuevas iglesias y preparar a nuevos dirigentes. Existen expectativas para los
dirigentes de la iglesia y todas ellas giran alrededor de la actividad y el respeto para
todos.
CONSIDERA
• Reunir a algunos amigos para colaborar en el desayuno servido en un refugio
para desamparados.
• Planificar una marcha en tu ciudad o vecindario con el fin de llamar la aten-
ción a la importancia de vivir en forma pacífica.
• Crear un rompecabezas utilizando el tema del fruto del Espíritu, para com-
partirlo con una clase de menores. Dedica algún tiempo para hablar con ellos
respecto a la razón por la que es importante tener el fruto del espíritu.
• Elaborar un formulario para entrevistar a algunas personas en un centro
comercial. Recuerda que tendrás obtener el permiso necesario. Pregunta acer-
ca de las características que la gente espera que tengan los dirigentes de una
iglesia. Incluye también un listado de cosas que ellos creen deben realizar
dichos dirigentes con el fin de realizar un impacto positivo en su comunidad.
• Anotar en un cuaderno por qué crees que estar cerca de Dios te hará un mejor
discípulo y en qué medida eso te ayudará a ser más efectivo al relatarles a otros
lo que Dios está haciendo por ti.
• Representar un relato bíblico relacionado con la venganza, enfatizando tu con-
fianza en los juicios divinos.
PARA CONECTAR
Mateo 5: 43-48; 1 Tesalonicenses 5: 12-22; 1 Pedro 4: 7-9.
El camino a Cristo, cap. 9; Special Testimonies for Ministers and Workers, nº. 6;
The Fruit of the Spirit, Richard W. O’Fill (Nampa: Pacific Press).
Edición facilitada por:
RECURSOS ESCUELA SABATICA ®
Stephanie Yamniuk, Winnipeg, Manitoba, Canadá
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