Este documento presenta un modelo de desarrollo que implica transformaciones económicas, sociales y políticas en una sociedad, incluyendo la industrialización, la urbanización, cambios en la estructura familiar y roles de género, y el surgimiento de nuevas élites. El documento también discute la relación compleja entre la tradición y el desarrollo en este proceso.
3. UN MODELO DE DESARROLLO
En este sentido, un modelo es un ejemplar que se
debe seguir por su perfección. Un modelo también
es el esquema teórico de un sistema o de una
realidad compleja.
Por otra parte, el desarrollo consiste en acrecentar o
dar incremento a algo de orden físico, intelectual o
moral. Si el concepto de desarrollo se aplica a una
realidad humana, se refiere al progreso económico,
social, cultural o político.
4. Transformaciones
Económicas
Es el proceso de cambio de conducta económica por la
que pasa un país en desarrollo.
El desarrollo supone la transformación de una economía
de subsistencia, es decir, de una economía de escasa
productividad destinada a asegurar el consumo local y a
corto plazo, economía que responde a las necesidades
elementales de la vida, en una economía de producción
industrial. En este sentido, el desarrollo consiste
primordialmente en un proceso de industrialización.
5. inversión de capital
Consiste en emplear caudales o recursos gastando o
colocándolos en aplicaciones productivas esperando el
mejor retorno de lo invertido. La escasez de capitales
constituye, evidentemente, el mayor obstáculo a la
industrialización en muchos países en vías de desarrollo.
La industrialización exige inversiones considerables, y a
menudo es imposible reunir los capitales necesarios,
dada la pobreza general de la población. Y, en caso de
darse los capitales suficientes, frecuentemente son
monopolizados por un reducido número de personas.
6. Transferencia y
reclutamiento de la mano de
obra
La industrialización exige asimismo una transferencia de la
mano de obra. En los países no industrializados, casi el 80% de
la mano de obra, se ocupa en la agricultura, ganadería y
artesanía.
El reclutamiento de la mano de obra industrial constituye el
segundo obstáculo principal a la industrialización de los países
en vías de desarrollo y es porque esa mano de obra no está
preparada para los empleos especializados disponibles, en
razón de su falta de instrucción y preparación técnica.
7. Comercio, consumo y renta
Con el trabajo industrial se difunde el uso de la moneda y
del crédito, favoreciendo la aparición de nuevas
necesidades. El comercio interior se activa, extiende y
diversifica, en una relación más o menos sostenida con el
crecimiento del consumo y la elevación de la renta per
cápita. Esa relación entre comercio, consumo y renta es
sin embargo compleja en los países en vías de desarrollo.
8. La economía tradicional
paralela
La economía tradicional, que persiste paralelamente a la
industrialización, que resulta sin embargo afectada por la
misma. Algunos tipos de empleo desaparecen como
consecuencia de la introducción de nuevos productos.
Otras actividades tradicionales se comercializan, con la
aparición, por ejemplo, de nuevos mercados para los
productos alimenticios. La moneda modifica las
relaciones de intercambio en el seno de la economía
tradicional, como también entre esta última y la
economía industrial.
9. Obligaciones del poder
político
La industrialización multiplica las obligaciones del poder
político. Éste debe, sobre todo, asegurar la instrucción
general y profesional de la juventud y la educación de los
adultos.
El poder político debe crear o ampliar un régimen fiscal
que le asegure los ingresos necesarios para sufragar esos
cuantiosos gastos. Una parte importante de los ingresos
de los particulares y de una renta nacional un tanto
escasa debe pues destinarse a inversiones sociales
esenciales.
11. La urbanización
La industrialización va necesariamente acompañada de la
urbanización, es decir, entraña una emigración de la
mano de obra, joven en su mayoría, y familias hacia las
ciudades en busca de mejores oportunidades como en
ellas se acrecienta la necesidad de manos de obras. Estas
podían existir ya antes de la industrialización. En este
caso, empiezan a crecer, a extenderse y a cobrar una
fisonomía nueva.
12. La movilidad geográfica
Los motivos por los que la población rural marcha a la
ciudad son múltiples y son motivos “positivos” y
“negativos”.
Motivos positivos: incluye el atractivo económico
en la que el hombre del campo espera enriquecerse
; la necesidad de ayudar económicamente a los familiares;
adquirir los modos de vida del medio urbano.
Motivos negativos : el deseo de escapar de la sociedad
tradicional ,la pobreza ,
Por consecuencia de la industrialización que elimina sus
medios de subsistencia
13. Familia, parentesco,
solidaridades locales
En la sociedad tradicional, el tipo predominante de familia
es generalmente la familia patriarcal o “extensa”,
integrada por varias familias “nucleares”. El desarrollo
económico y la urbanización tienden a desorganizar este
tipo de familia, las emigraciones obligan a las familias
nucleares a hacerse más “individualistas.
Esos mismos factores tienen también por efecto una
distensión de los vínculos de parentesco.
14. El status de la mujer
Con la modificación de la estructura y de las funciones de la
familia, y en consonancia con la aceleración de esa
transformación, el status de la mujer se modifica a su
vez. La industria y la ciudad ofrecen a la mujer la
posibilidad de encontrar un empleo fuera del hogar.
Se beneficia asimismo de una mayor libertad en lo que
atañe a la crianza y educación de sus hijos.
15. El status de los jóvenes y
de los ancianos
La transformación de la familia comporta también la
emancipación de la juventud, que tiende a hacerse
financieramente independiente, en caso de no haber nacido
ya en él, se adapta al mismo mucho más que sus padres. El
resultado es una disminución de la autoridad de los
progenitores, del padre sobre todo disminuye notablemente
con respecto a lo que era antes en la sociedad tradicional.
Las personas ancianas son las que más sufren la pérdida de un
status. No se benefician ya del prestigio y de la autoridad de
que estaban investidas en la sociedad tradicional. Hasta son
identificadas con un pasado más o menos despreciado y se
ven obligadas a vivir en un mundo al que no pueden ya
adaptarse.
16. Estratificación y clases
sociales
A las distinciones propias de la sociedad tradicional,
distinciones basadas en la tribu, en el clan, en el
parentesco, en la región de origen, se suman
progresivamente las distinciones de clases sociales o de
pseudoclases, de estratos sociales, de prestigio
profesional o de estatuto burocrático.
De todo ello resultan varias capas sociales que tienen que
ver con los ingresos económicos, el nivel de educación y
el grado de autoridad ejercido sobre otros trabajadores.
17. Elites nuevas y élites
tradicionales
Paralelamente a las elites antiguas (jefe de tribu, jefe de
familia, sacerdotes, hechiceras etc.) nuevas elites hacen
su aparición y se afirman progresivamente gracias a los
cambios de estructuras. Entre estas nuevas elites y las
antiguas las relaciones son complejas, a menudo tensas,
incluso hostiles: las nuevas elites elaboran y simbolizan
un modo de vida, unas ideologías
18. Tradición y desarrollo
La transformación progresiva de una sociedad tradicional a
una sociedad industrial se trata, en realidad, del paso de
un tipo social a otro.
El primer modelo tiene un carácter demasiado unilateral es
un modelo que supone una oposición, una
incompatibilidad total entre tradición y desarrollo. La
segunda reprocha al modelo en cuestión el no tener en
cuenta la gran diversidad de los países subdesarrollados
y, consiguientemente, la multiplicidad de las vías de
desarrollo