1. José Bustamante CI: 19.417.023 Arquitectura (41)
El colegio de ingenieros desde su creación el 28 de octubre de 1861 se ha
encargado de promover los conceptos básicos que rigen a los ingenieros y
arquitectos en todo lo concerniente a las normativas a la hora de la creación de
obras, surge en los años de independencia siendo representada por Antonio José
de Sucre y el Cuerpo de Ingenieros Republicanos, sumándose después otros
grandes eminencias de las ciencias los cuales luego de terminar la guerra
debieron abrazar la tarea de reconstruir la nación que había quedado en ruinas.
En sus inicios la academia de matemáticas era una institución destinada a
enseñar las aplicaciones civiles y militares de las matemáticas. Aceptaba
estudiantes civiles y militares; estos últimos podían convertirse en aspirantes a
integrar el cuerpo de ingenieros que ya se estaba pensando en establecer. La
academia también planteaba una salida intermedia al ofrecer el título de
agrimensor público a los estudiantes que hubieran aprobado con excelentes notas
en el primer bienio de los estudios. El ejecutivo decidió nombrar a Juan Manuel
Cajigal y al maestro Acevedo, el catedrático de matemáticas como maestros de la
Academia para impartir todas las materias.
En su instalación en 1861 el colegio de ingenieros reglamenta a la academia de
matemáticas regido por un decreto presidencial, es en este momento donde se
crea el colegio de ingenieros, en el acto se encontraban solo un grupo de 22
ingenieros debido a que para ese momento no muchas personas estaban
consagradas en esa profesión. En el artículo 45 del ya mencionado decreto se
aprecia lo siguiente: “Todos los Ingenieros de la República constituirán un Cuerpo
que se denominará”
Para el año 1844, el Ing. Olegario Meneses recomienda la creación del colegio de
ingenieros. Sin embargo, no es sino hasta el 24 de octubre de 1860, que el
Presidente Manuel Felipe de Tovar promulga el decreto en el cual se reglamenta
la Academia de Matemáticas y enuncia en su artículo 45. Al año siguiente, el 27
de octubre se celebró la junta preparatoria en la sede del Colegio de Santa María,
situado entre las esquinas de Veroes a Jesuitas de Caracas, quedando instalado
el Colegio de Ingenieros de Venezuela el día 28 de octubre de 1861. Inicialmente
adscrito al antiguo Ministerio de Guerra y Marina fue dirigido por el Comandante
de Ingenieros Juan José Aguerrevere y como Secretario el Teniente de
Ingenieros, Francisco de Paula Acosta. Más tarde, en 1881, el colegio queda
adscrito al Ministerio de Educación.

2. Entre 1895 y 1925, las actividades del Colegio se fusionan con las condiciones
políticas del país. Una de las principales características la constituye el proyecto
de modernización del régimen de Juan Vicente Gómez, que tiene como objetivo la
conexión territorial de las principales ciudades venezolanas con la construcción de
caminos y carreteras, actividad en la que el Colegio participó activamente. En
1923, se inició la publicación de la Revista del Colegio de Ingenieros de Venezuela
y la reorganización del Colegio. En 1925, se promulgó la Ley de Ejercicio de las
profesiones de Ingeniero, Arquitecto y Agrimensor. Con la reorganización y la Ley,
mejoraron las condiciones sociales, económicas y profesionales de los ingenieros
venezolanos en relación con la competencia profesional de los extranjeros,
situación generada por la actividad petrolera.
Entre los años 1925 y 1958, se examina lo que será uno de los objetivos de mayor
impacto en la institución: el nacimiento del ejercicio profesional independiente.
Además, se consolidaron los estudios de ingeniería y arquitectura, apoyados en
marcos legales. Con la puesta en práctica de la Ley, se fortaleció la participación
del gremio en el campo educativo y se detectaron las deficiencias legales y
profesionales que permitieron la promulgación en 1958 de la Ley de Ejercicio de la
Ingeniería, la Arquitectura y Profesiones afines. Así la institución funcionó de forma
independiente de los poderes públicos, perdió fuerza el rol asesor del Estado en
las materias de su competencia y se puso el acento en el libre ejercicio de la
profesión, lo que trastocó la visión disciplinar del siglo XIX. El Colegio se extendió
hasta el interior del país mediante seccionales, luego de promover congresos,
convenciones y cursillos relacionados con temas nacionales.
Desde 1958 en adelante se esboza la gestión institucional después de la caída de
la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez, cuando nuevos escenarios
condicionaron el gremio de los profesionales inscritos en el Colegio. Esta etapa se
caracteriza por un trabajo menos científico y técnico y más ligado a una intensa
actividad política. La identifi cación del cuerpo disciplinar como responsable de la
construcción arquitectónica, urbana y territorial del país se desvirtuó en el tiempo.
Si desde su fundación fue una institución asesora del Estado en la ejecución de
obras públicas, ahora, en esta etapa, se traslada el debate técnico-científico entre
los agremiados a las agrupaciones especializadas que se encuentran en su seno.