El documento presenta varias notas y artículos sobre temas de interés para la comunidad de Parque Chacabuco. En la página 2, un editorial critica el sistema presidencialista argentino y propone un sistema más parlamentario. En la página 3, un artículo histórico describe la llegada de los primeros ómnibus a motor al barrio en la década de 1900. Otras notas incluyen una reseña sobre un libro, una crónica sobre una fogata comunitaria y una entrevista con el hijo de un bicicletero local

1. www.periodicochacabucocultural.blogspot.com.ar
En esta
publicación
- Página 2:
Un gobierno de mi-
norías. Una república
a la deriva
Por Adrián Placenti
- Página 4:
Autos y tranvías his-
tóricos
Por Liliana Dávila
Agenda Cultural
- Página 5:
Hugo Cabret. Un en-
cuentro revelador con
la literatura
Por Silvia Gabrielli
Homenaje a grandes
maestros
por Viviana Agosti
- Página 8:
Ayer y hoy
Ciudad Autónoma de Buenos Aires - Comuna 7 - Parque Chacabuco - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018
DISTRIBUCIÓN GRATUITA - Tirada: 2000 ejemplares (ISSN 2250-6349)
“Describe tu aldea y describirás el mundo...” - Tolstoi
El Periódico Barrial de Parque Chacabuco
Chacabuco Cultural
Por vocación, practicidad
o tradición, heredar el oficio
de los padres es algo habi-
tual. Pero que además ese
oficio sea una elección de
vida, no es común, ya que
para algunos actúa de repe-
lente, y para otros pocos de
motivación. Y este último es
el caso de Ricardo, que here-
Nuestra historia
Ómnibus pioneros llegan al barrio
Por Roberto Madrejón
No hacía mucho que los
porteños habían visto por
las calles, los primeros ca-
rruajes sin caballos, pero
era evidente que esa extra-
Universo escolar
La valiosa herencia de un oficio
Por María Agustina Clemente
El pasado sábado 30 de
junio se revivió en el Parque
Avellaneda la tradicional
Fogata de San Pedro y San
Pablo.
La celebración , llamada
"Luz de Fuego" fue una pro-
ducción conjunta de Actores
Culturales, Organizaciones
Barriales y el Complejo Cul-
ña invención que llamamos
auto había llegado para que-
darse.
Prueba de eso era que en
1892 la Municipalidad había
concedido la primera chapa-
patente a un vehículo ¡a va-
por! de Dalmiro Varela Cas-
tex. También estaban los que
tenían ruidosos y asmáticos
motores “a explosión”. Y
estos fueron los que termina-
ron por imponerse.
Continúa en pág. 3
dó y siguió los pasos profe-
sionales de Don Mario, su
progenitor.
Ricardo Jorge Blasco tie-
ne 57 años, nació en Parque
Chacabuco, en la calle Bal-
bastro entre Hortiguera y
Puán, y es hijo de Don Ma-
rio, el primer bicicletero de
nuestro barrio. Tenía el taller
en su propia casa, y estaba
ubicado en la terraza.
Ricardo cuenta que los
clientes tocaban timbre y
subían por una entrada exter-
na. “Venía muchísima gen-
te”, recuerda.
Continúa en pág. 6
tural Chacra de Los Reme-
dios.
El Coordinador General,
Marcelo Bruzzone, nos invi-
tó a asistir y nos explicó el
significado de la fiesta en el
texto siguiente:
Continúa en pág. 7
¡Este ómnibus pasaba por aquí! (en la década del 30) . Era de la Compañía General y venía de Retiro .
Plásticamente
La fogata
Por Viviana Agosti

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Creación del medio
Marzo de 2012
Editores
Liliana Dávila
Adrián Enrique Placenti
Equipo de redacción
Viviana Agosti
Mariela Méndez
Silvia Gabrielli
Horacio Galacho
Colaboradores
María Agustina Clemente
Roberto Madrejón
ISSN 2250-6349
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5353163
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Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018 - Página 2
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Editorial
Un gobierno de minorías. Una república a la deriva
Somos un país sin rumbo.
Sin un proyecto a mediano o
largo plazo. Una nación que
oscila pendularmente sus
políticas. Cada cambio de
gobierno supone tirar por
tierra el camino tomado y
plantear nuevos senderos.
Privatizar, estatizar, privati-
zar… Tomar deuda, desen-
deudar, tomar deuda... y así
desde hace 200 años. Una
sociedad así no está detenida
en un mismo lugar: retroce-
de. No puede llegar a ningún
lado.
Acordar, consensuar, pa-
recen verbos que no existen
en el diccionario argentino.
Cada sector social tiene un
par de anteojeras que le impi-
de ver más allá de su propio
interés. Y las pujas son para
imponer posiciones, no para
construir desde el acuerdo.
La organización política
de nuestro país a mi entender
reproduce, contribuye y de
alguna manera alimenta esta
realidad. Nuestro sistema
presidencialista a ultranza
acumula el poder en una sola
persona que por otra parte
representa solamente a una
pequeña parte de la sociedad:
un gobierno de minorías. La
concentración de poder en
una sola mano, que todo o
casi todo lo puede, es una
tentación muy grande para
las mezquindades del poder:
a las fuerzas políticas no les
ha interesado cambiar este
status, salvo un intento de
Alfonsín que no contó con el
apoyo necesario. Las mez-
Cúpula del Congreso Nacional .
quindades: querer llegar a
tomar ese lugar de privilegio.
Un sistema presidencialis-
ta como el nuestro le da mu-
cho margen de acción al po-
der ejecutivo. Por ejemplo: el
Congreso (el organismo más
representativo del abanico
ideológico) vota una ley con
la totalidad de la cámara apo-
yándola. Es decir que los
representantes del 100% de
la sociedad piensan y acuer-
dan una política a seguir.
Pero el Poder Ejecutivo,
que en el mejor de los casos
representa como primer mi-
noría no más allá de un 30%
del padrón electoral, puede
decir no y vetarla. Pensemos
que por dar otro ejemplo, en
la toma de deuda externa,
algo que condiciona el futuro
del país por muchos años: es
decir, algo muy importante
por decidir.
Es una decisión que el
Poder Ejecutivo puede hacer
efectiva sin el consenso de
las amplias mayorías. Cada
presidente que asume repre-
senta una primer minoría, y
esa primer minoría gobierna
sin contemplar los intereses
de las otras minorías, que por
otra parte, sumadas son ma-
yoría. Entonces, ¿cómo po-
demos avanzar de este mo-
do?
En los sistemas parlamen-
tarios, en cambio, el go-
bierno del país se recuesta
más en las decisiones de las
cámaras del congreso, lo que
de alguna manera obliga a
llegar a los acuerdos entre
los distintos sectores para
avanzar en las políticas. In-
cluso, como vimos reciente-
mente en España, el presi-
dente puede llegar a ser re-
movido por la acción parla-
mentaria.
He visto y escuchado mu-
chas veces en mis años de
vida que nuestra sociedad
necesita de líderes que mar-
quen el rumbo con un brazo
fuerte, un poco siguiendo un
viejo esquema patriarcal his-
pano que desde ya nos ha
sido propio pero cuyo resul-
tado lo conocemos y no por
bueno. Me pregunto entonces
si no es hora que nos
“pongamos los pantalones
largos”, y asumamos una
madurez como sociedad co-
menzando a tomar decisiones
en conjunto, a mediano y
largo plazo, y por qué no, tal
vez, modificando el sistema
político, de tal modo que el
acuerdo de base amplia sea
una prioridad y un camino
ineludible hacia una sociedad
más previsible y justa.
AP
Los nostálgicos y los románticos, los trasno-
chadores y los madrugadores, los poetas y los
contadores, los sencillos y los complicados, los
locuaces y los reservados, todos pueden escri-
bir en Chacabuco Cultural.
¡Proponga su carta o artículo!

3. www.facebook.com/chacabucocultural
Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018 - Página 3
El entusiasmo que desper-
taron debió ser grande por-
que pronto hubo audaces
dispuestos a aplicar la nueva
forma de propulsión al tras-
porte público. En seguida
solicitaron al municipio se
les otorgaran concesiones
para la explotación de líneas
de ómnibus a motor y los
ediles, rendidos por el impul-
so avasallante del progreso
se las concedieron. La prime-
ra, se otorgó en julio de 1902
a Agustín Llambí y Gothold
Frankel, para hacer circular
cuatro líneas con dos coches
cada una.
Después de varias poster-
gaciones el 30 de noviembre
de 1903 se pudo poner en
servicio el primer coche, que
corría (es un modo de decir)
sobre la Avenida de Mayo,
en donde no había (ni hubo)
rieles tranviarios. El vehícu-
lo, de carrocería abierta por
los lados, como las
“jardineras” de los tranvías
provenía de la fábrica aus-
triaca Lohner-Werke. Estaba
impulsado por un motor eléc-
trico alimentado por un gene-
rador que movía un motor de
explosión a nafta.
Las dificultades no tarda-
ron en aparecer. Hubo que
reducir las prestaciones para
dar tiempo a que se enfriaran
los motores recalentados. Las
llantas de goma macizas que
debían usarse, como condi-
ción indispensable para obte-
ner la concesión, no eran
fáciles de conseguir ni de
pagar y se dañaban pronto;
las de acero, más resistentes,
arruinaban el pavimento y el
municipio trinaba. Los esca-
pes ensuciaban todo y las
fallas mecánicas eran fre-
cuentes. Como corolario, en
julio de 1904 el servicio se
canceló y los ómnibus a mo-
tor desaparecieron de las ca-
lles del centro. Otros, crea-
dos poco después, perdura-
ron en cambio, circulando
por los barrios (por Flores en
1912, por ejemplo), las ciu-
dades del interior y el Gran
Buenos Aires.
El nuevo transporte re-
apareció en agosto de 1922
cuando se inauguró la línea
A del Auto-Ómnibus Metro-
politano, de Sandalio Salas,
que iba de Plaza Constitu-
ción a Retiro, pasando por
Plaza de Mayo. Los vehícu-
Nuestra historia
Ómnibus pioneros llegan al barrio
Viene de pág.1
los eran los míticos Ford T
con motor a explosión. Esta-
ban provistos de carrocerías
elaboradas por Gerónimo
Gnecco, un fabricante de
carruajes con mucho futuro
en el rubro.
En estos coches, pintados
de azul y blanco, se ingresa-
ba y descendía por una puer-
ta, trasera. En el interior se
acomodaban hasta, doce pa-
sajeros en bancos de madera,
ubicados a lo largo y en el
estribo de la entrada iba un
guarda agarrado de los pasa-
manos. Este guarda, por lo
común un chico, le indicaba
al conductor cuándo debía
detenerse para que baje un
pasajero, dando golpes en la
carrocería o con un chiflido
o, más adelante, con un to-
que de silbato,
Al poco tiempo se incor-
poraron coches de otras mar-
cas, con capacidad para 18
pasajeros y después para 22
con los asientos dispuestos
en forma transversal. Tam-
bién se establecieron nuevas
empresas, como la Ítalo Ar-
gentina, la de Vicente Fiti-
paldi y la Progreso Argen-
tino, que iban desde el centro
a barrios como Palermo, la
Boca y Once. Otras cubrie-
ron servicios en el interior
del país, y en localidades del
Gran Buenos Aires a las es-
taciones o centros de trasbor-
do tal como antes lo hacían
los “breaks” y las volantas.
El crecimiento del nuevo
medio fue tan desordenado
como antes lo fue el tranvía,
pero pronto las autoridades
intervinieron. Una Resolu-
ción Municipal de 1922 es-
tableció normas y una Orde-
nanza General del 13 de di-
ciembre de 1923 las amplió.
En esta última figuraba la
obligación de reemplazar las
llantas de goma maciza por
costosos neumáticos en un
plazo perentorio.
En la calle se desató una
brava competencia por captar
la clientela. Muchos ómni-
bus, seguían los mismos re-
corridos de los rieles tranvia-
rios y ponían sus coches por
delante de cada tranvía para
birlar los pasajeros que espe-
raban en las paradas. Las
empresas tranviarias eleva-
ron quejas y movieron in-
fluencias para que se le esta-
blecieran limitaciones a los
ómnibus pero enseguida em-
pezaron a establecer líneas
propias. La poderosa Anglo-
Argentina comenzó adqui-
riendo pequeñas empresas en
diciembre de 1926 y en poco
tiempo, a través de subsidia-
rias operaba no menos de 25
recorridos en la Capital y los
alrededores. El Tranvía del
Puerto, administraba tres
líneas en la zona Sur.
La identificación de las
líneas constituyó otro arduo
asunto. Los tranvías habían
optado por asignarse núme-
ros y la mayoría formaban
parte de un sistema unificado
en 1906. Los ómnibus, en
cambio, llevaban el nombre
de la empresa o del empresa-
rio. Después empezaron a
usar números internos y co-
mo consecuencia el número
1, tan prestigioso, se aplicó a
varias líneas, aún en las que
circulaban por las mismas
calles. Algunas empresas
usaron letras: la Auto Ómni-
bus Metropolitano tenía las
líneas A, B y C y la Anglo
Argentina la A y la G.
Por fin en abril de 1935 la
Municipalidad numeró en
forma correlativa todas las
líneas de ómnibus concesio-
nadas del 1 al 73, agregando
enseguida el 74 y el 75. Era
un adelanto aunque los nú-
meros se superponían con los
de los tranvías y los taxis-
colectivos. Estos últimos,
aparecidos en 1928 ya inva-
dían la ciudad con su propia
y confusa numeración.
A fines de la década del
30 había en Buenos Aires
unos 1700 ómnibus, siendo
los más comunes los White y
Brockway de EE.UU., los
ACLO ingleses y los Mack,
también norteamericanos.
Tenían entre 17 y 36 asientos
y de manera semejante al
tranvía, se subía por una pla-
taforma trasera donde se ad-
quiría el boleto al guarda. Se
bajaba por la puerta de ade-
lante, ubicada junto al con-
ductor.
Cada empresa pintaba sus
coches con un color caracte-
rístico distribuido sobriamen-
te: podía ser toda la carroce-
ría del mismo tono o tener la
parte superior de un color y
la inferior de otro, o llevar
franja distintiva que corría
bajo las ventanillas.
Para 1932 en el barrio de
Parque Chacabuco circula-
ban estas líneas. La lista no
es exhaustiva y los recorridos
parciales, por supuesto :
Línea 1 de la empresa
Autobús Mayo: Plaza de
Mayo - Av. del Trabajo y
San Pedrito. Venía por José
María Moreno, Pedro Goye-
na, Thorne, Directorio, Cara-
bobo.
Línea 2 de la Autobús
Mayo: Sarmiento y Suipacha
- Parque Chacabuco. De Cu-
rapaligüe y Asamblea, por
Vehículo de la empresa Auto-Ómnibus Metropolitano realizado sobre un chasis Ford T ( AGN)
Asamblea hasta Pavón por
donde continuaba al centro.
Compañía General de
Ómnibus (foto de tapa): ver-
de oscuro. Parque Chacabuco
- Retiro. Desde Asamblea y
Curapaligüe por Asamblea,
Av. La Plata, San Juan,
Leandro N. Alem, Paseo Co-
lón.
Línea 1 de la Central
(una subsidiaria de Anglo):
Plaza de Mayo - Parque Cha-
cabuco. Iba por Garay, Av.
La Plata, Santander, Cente-
nera, Asamblea hasta Emilio
Mitre.
Línea 3 de La Nueva
Porteña: Lope de Vega y
Jonte - Avenida del Trabajo
y Emilio Mitre). Emilio Mi-
tre, Directorio, Artigas, San
Blas, Nazca, Médanos (Juan
A. García) Cuenca. Hacia
1935 se convierte en la 62.
Cesó en 1948.
Línea 14 de La Estrella:
Parque Patricios - Primera.
Junta. Por Chiclana, Av. La
Plata, Saraza, Centenera,
Asamblea, Emilio Mitre, Pe-
dro Goyena.
Línea 1 (con dudas) de la
Nueva Pompeya: (Caballito
- Pompeya). Por Pedro Go-
yena, Zuviría, Cachimayo,
Asamblea, Centenera, Ries-
tra, Av. Cruz.
Línea 2 de la Nueva
Pompeya: Pompeya-
Paternal: por Cruz, Av. Ries-
tra, Centenera, Directorio,
José María Moreno.

4. Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018 - Página 4
Centro Cultural
Adan Buenosayres
(Bajo autopista, alt. Eva
Perón 1400)
Domingo 12 de 13 a 18:
“Encuentro Temático Yukai
Fest Plus”.
Espacio Visual. Del 13 al
25, “Expresión”, taller de
arte de Sonia Casanova.
Sábado 18 de 14 a 21 y do-
mingo 19 de 17 a 21,
“Festival de Tango”.
Sábado 18 y domingo 25 a
las 16 hs. magia: “Lunas
Mágicas”.
Domingo 19 a las 16, teatro
infantil: “Las Súper-
Aventuras de Dinamita ¡Ay,
qué Susto!”.
Viernes 24 a las 20, danza:
“Un, dos, tres, cuatro, Fla-
menco / tango”.
Sábado 25 a las 17, teatro
infantil: "La brujita tiene
nana”.
Sábado 25 a las 19, teatro
adultos: “Jettattore” de Gre-
gorio de Laferrere.
Espacio Visual. Del 26 al
31, Taller de Plástica CC
Piana, con la Prof. Daniela
Draiye.
Encuentro de Miradas, pin-
turas de Daniela Draiye y
Luciana Bech.
Domingo 26 de 12 a 18,
encuentro temático: “Love
Live Agentina Idol Festival
Segunda Edición”.
Domingo 26 a las 16, ma-
gia: “No pasa naranja”.
Viernes 31 a las 20, música
y danza: “Carnaval del
Adán”, con la agrupación
murguera “Los Quitapenas”.
Todos los domingos de 16 a
20, “Práctica de tango y mi-
longa”.
Espacio visual. En la mues-
tra permanente, “El nombre
del barrio”, de los artistas
Fabio Langellotti y Veróni-
ca Molina.
Agenda Cultural
Actividades barriales
Autos y tranvías históricos
Por Liliana Dávila
Aunque el pronóstico
del tiempo nos entregaba
noticias de que tendríamos
un día destemplado con
baja temperatura, la tarde
del 22 de julio se convir-
tió, para los vecinos de los
barrios de Caballito y Par-
que Chacabuco, en cálida
y festiva.
La Asociación Amigos
del Tranvía celebraba su
42 Aniversario y como en
otros años la Avenida Di-
rectorio al 1100, entre
Emilio Mitre y Hortiguera,
pasó a ser un “Museo al
aire libre” con la presencia
de autos y colectivos clási-
cos y, por supuesto, los
tranvías históricos que cir-
culan cada fin de semana
por las calles de estos ba-
rrios.
Con nostalgia, felicidad
y asombro, abuelos, padres
y nietos se paseaban entre
los vehículos estacionados
sacándose fotos y contan-
do historia de años vivi-
dos.
En la muestra se pudie-
ron observar un Renault de
1907 y un Ford T con ac-
cesorios originales y focos
de carburo de 1914. Tam-
bién varios Ford A de las
décadas del 20 y del 30,
autos Farline y Falcon,
distintos modelos de Che-
vrolet, como un Belair cu-
pé de 1934, un Súper de
1968 y varios Chevys.
Además se exhibieron
conocidos clásicos como
el Fiat 600, 1100 y 128, el
modelos de tranvías que
posee la Asociación.
Estaban el “Lacroze”,
Nº 258, el “Anglo” Nº
652, el “Lagarto” PM2, el
“Bruselas” Nº 9069 y el
“FM” Nº 3361, último
tranvía que circuló en
Buenos Aires,. Se agrega-
ron dos coches de la línea
A de subterráneos, una
zorra soldadora y la zorra
“Aquilina” Nº 5.
La Banda de la Policía
Federal deleitó con su mú-
sica la fiesta tranviaria,
que en esta ocasión fue
auspiciada por el Mercado
del Progreso.
Valiant, los Torinos y
Wolswagen, un Citröen de
1948, un Ika Baqueano, un
Peugeot 403 y otro 404, un
Siam Di Tella, Auto
Unión DKW, NSU Prinz,
Isetta.
Como representantes
del transporte público, ha-
bía colectivos de las líneas
60 y 45. Este último era un
Chevrolet de 1942 con ca-
pacidad para once pasaje-
ros sentados.
Mientras se desarrolla-
ba la exposición, en forma
simultánea realizaban sus
viajes en forma gratuita,
algunos de los muchos
Polideportivo Chacabuco
(Bajo autopista, alt. Eva
Perón y Puán) 1er
Piso
Coro Informal de Adultos
Mayores “Fortaleza”.
Lunes de 16 a 19.
Informes: 4921-5776
Coordina Alejo Distéfano.
Programa
Cultural en Barrios
Centro Cultural
Sebastián Piana. Puan 360
Viernes 17 de 20 a 23, expo-
sición “Noche de Tambores”,
muestra taller de percusión.
Viernes 24 a las 20, teatro:
"Made in Lanus" por el gru-
po independiente Tramoya.
Centro Cultural
Marcó del Pont
Artigas 202 Flores
Domingo 12 a las 16, teatro
infantil: “Juanito cuenta his-
torias en Republimagia”.
Miércoles 15 a las 19, cine:
Ghost in the shell (83 min).
Viernes 17 a las 20, teatro:
"No hay que llorar", por Los
Delirantes del Pont.
Domingo 19 a las 16:30 y
sábado 25 a las 16, teatro
infantil: "La isla de las noti-
cias".
Miércoles 22 a las 19, cine:
Despertando a la vida (97 m.).
Viernes 24 a las 20,
“Irredenta” (drama)
Del 25 de agosto al 2 de sep-
tiembre, artes visuales: "Lo
normal, lo invisible", exposi-
ción de Nicolás Sterbanoff. y
"Buscaluz", de Aníbal Caubet.
Domingo 26 a las 16, teatro:
“Enredados”.
Miércoles 29 a las 19, cine:
Persépolis (95 minutos).
Viernes 31 a las 20, “Noche
de Stand Up” Diego Segura.
periodicochacabucocultural.blogspot.com.ar
Un elegante auto de los viejos: es un Renaut de 1907.
Un tranvía histórico tripula-
do por Aquilino González.

5. Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto - Página 5
Poesía
Homenaje a grandes maestros
por Viviana Agosti
La noche
la luna
las musas
fuentes de artistas
reflejos de femineidad.
El Rincón Literario
Hugo Cabret. Un encuentro revelador con la literatura
Por Silvia Gabrielli
studio
Por estos días, en medio
de las vacaciones de invierno
escolares y con una meteoro-
logía adversa, las noticias
contaban que el reloj de La
Estación Constitución volvía
a funcionar después de varias
décadas de haberse detenido
en el tiempo, y junto a él co-
mo fiel testigo, infinitas his-
torias de otras épocas.
En el diario se leía “Tras
décadas de estar mudo, así
volvió a sonar el histórico
reloj de la estación Constitu-
ción.” Frente a este horizon-
te se destaca la importancia
de acercar a la literatura tras
un vínculo como una noticia,
para cambiar supuestos y
realidades de niños y jóve-
nes.
Se trata de crear una nue-
va experiencia lectora.
En tiempos de crisis y con
una oferta cultural amplia a
la que no todos tienen acceso
por diferentes motivos, uno
hace el esfuerzo por imaginar
otros universos de ilusión y
experiencias donde la litera-
tura sea protagonista regalán-
donos otro espacio, otra len-
gua y por sobre todo otra
visión. Un aliento de con-
fianza.
Y así, como quien no se
da cuenta, se dejaba ver des-
de el estante de la biblioteca
“La Invención de Hugo Ca-
bret”, de Brian Selznick.
Toda una invitación.
En 2013, la escritora y
pedagoga colombiana Yolan-
da Reyes manifestaba: “Las
palabras pueden zurcir la
vida de los niños en tiempos
difíciles, obligan a oír a los
otros, recuperan la memoria,
pero principalmente llenan
de significado los campos
semánticos poblados de mie-
do, silencios e incertidum-
bres”. Estos conceptos fue-
ron volcados por la autora,
en el inicio del Seminario
Internacional de Fomento de
la Lectura: Palabras que zur-
cen. La lectura y la escritura
en la recomposición del teji-
do social, que se realizó co-
mo parte de la 33 Feria Inter-
nacional del Libro Infantil y
Juvenil en Colombia.
Reflexioné entonces, en
las infancias, en las diferen-
tes. Pensé en los niños arro-
pados por una familia y en
los que no la tienen. En los
que se encuentran en situa-
ción de calle como muchos
habitantes de esta estación,
Constitución. Sobreviviendo.
En un contexto arduo sin
nada que recomponga el al-
ma. Y se me vienen los rela-
tos, las palabras, las imáge-
nes que llenan el espíritu pa-
ra poder sobrellevar tiempos
difíciles.
Y allí estaba el reloj, el
nuestro, el propio, para am-
parar a sus habitantes donán-
doles un intervalo de ensue-
ño y un latido de esperanza
para recoger historias en una
de las estaciones más bella
de la ciudad, inspirada en el
castillo francés de Maisons-
Laffitte.
Parafraseando al Chavo
del ocho, -sin querer que-
riendo-, “La invención de
Hugo Cabret terminó en mis
manos para releerlo, compar-
tirlo, disfrutarlo. Está vez la
intención era otra, encontrar
en él, la magia, el arte, la
creatividad. Un dejarse llevar
para atrapar guiños que vin-
culen este presente con el de
otros tiempos.
Hugo es una novela. Una
obra sólida e íntegra que po-
sibilita un nuevo hábito lec-
tor tanto por el texto en sí
mismo como por sus ilustra-
ciones. Ambientado en Paris,
es un viaje al pasado. Allí se
rescata una profesión arrin-
conada, la de los relojeros.
Además, narra cómo fueron
los inicios del cine, ambos
olvidados por el avance de la
tecnología.
El protagonista es un niño
huérfano. Vive escondido en
los relojes de la estación fe-
rroviaria que observa desde
lo alto para ver mucho más
allá de lo que el resto advier-
te. Selznick, autor de literatu-
ra infantil y juvenil desafía
en este libro una miscelánea
entre la escritura, la pintura y
el cine.
Frente a este terreno hay
mucho por hacer y trabajar
para promover la literatura
entre los niños y jóvenes des-
de las bibliotecas, escuelas y
hogares. En tiempos de cri-
sis, leer tiene más
“cotización” inaugurando un
valioso espacio con signifi-
cado reparador.
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Hugo en su mundo. Destacada ilustración en el interior del
libro de Brian Selznick
Tapa de “La Invención de Hugo Cabret”, de Brian Selznick.

6. Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018 - Página 6
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Sin embargo, con el paso
del tiempo, la municipalidad
comenzó a exigirle que el
negocio debía estar ubicado
al frente para poder habilitar-
lo y eso era mucho gasto pa-
ra la familia. Por eso, tuvie-
ron que cerrarlo.
Ricardo hoy continúa con
el oficio que heredó de su
padre, enseñando a chicos
con capacidades diferentes
en un taller de Bicicletería
que funciona en la Escuela
de Educación Especial y de
Formación Integral Nº1 del
Distrito Escolar 8,
“Alfonsina Storni”, ubicada
en el corazón del parque
(Emilio Mitre 1087). Él for-
ma parte de la institución
desde septiembre de 1993 e
ingresó a la docencia por
recomendación de un profe-
sor de la facultad.
Ricardo, más conocido
por los jóvenes como “el
abuelo” o “el pelado”, es uno
de los docentes más queridos
de la institución, y su taller,
uno de los más concurridos.
“Fuimos la primera escuela
especial con taller de bicicle-
tería. Estamos enseñando un
oficio del futuro. Hoy en día
mucha gente elige la bicicle-
ta porque es un trasporte eco-
lógico, cómodo y económi-
co”, cuenta. Los alumnos
aprenden a cambiar ruedas,
“El pelado” Ricardo en su
taller de la Escuela de Edu-
cación Especial y de Forma-
ción Integral Nº1 del Distrito
Escolar 8
La bicicleta de la época de Alfonsina en el taller de bicicletería
Escuela de Educación Especial y de Formación Integral Nº1
reparar cadenas y pinchadu-
ras. Y Don Mario sigue pre-
sente: todos los arreglos los
llevan a cabo con sus herra-
mientas, que fueron donadas
por Ricardo al taller.
Pero, ser profesor no es su
primer trabajo. Desde los 20
años es técnico mecánico en
todas las líneas del subte de
la Ciudad de Buenos Aires.
Repara bombas hidráulicas
gracias a que estudió y se
formó para conseguir el títu-
lo de Técnico mecánico en
máquinas y herramientas.
Pero, ¿cómo llegó a la do-
cencia? En 1993, cuando se
amenazaba con privatizar el
subte, lo que dejaría a mu-
chos trabajadores en la calle,
un antiguo profesor le dio
noticias de que en las escue-
las faltaban docentes que
fueran técnicos mecánicos.
“Cuando la privatización se
hizo, quedamos solo 1500
empleados, de los 4500 que
éramos. Además, las horas
de trabajo aumentaban rotun-
damente”, recuerda Ricardo.
Y desde ese momento, man-
tiene dos trabajos, arregla
desperfectos técnicos en los
subtes de la ciudad y, a la
noche, educa a chicos y jóve-
nes con capacidades diferen-
tes en el barrio que lo vio
nacer.
Además de su faceta labo-
ral, Ricardo es muy devoto y
fue parte de históricos grupos
juveniles de nuestra Parro-
quia Medalla Milagrosa. Es-
tuvo casi 20 años formando
parte de los mismos, diri-
giendo campamentos, retiros
espirituales y programando
visitas a hospitales. Hasta
llegó a ser voluntario en Don
Orione, gracias a la invita-
ción de la Iglesia Sagrado
Corazón y con permiso del
párroco. Ese fue su primer
acercamiento a personas con
capacidades diferentes y lo
recuerda como una experien-
cia muy especial.
Ricardo es multifacético.
El primer taller que tuvo a su
cargo en la escuela se encar-
gaba de fabricar pañales. Te-
nía una máquina especial y
una ayudante que dictaba
parte de la teoría. Pese a des-
conocer por completo el ru-
bro, aprendió a usar la má-
quina y fabricaba, junto a sus
alumnos, pañales de todos
los tamaños que se vendían
al público y a los mismos
profesores.
Luego de mucho esfuer-
zo, los directivos evaluaron
que no dejaba ganancia y el
taller se cerró. Por eso, lo
derivaron al taller de carpin-
tería en donde permaneció
varios años. Una anécdota
que muchos recuerdan es la
fabricación de un carrito de
kiosco, al que dedicaron casi
un año de trabajo. “Se me
ocurrió como una excusa
para que aprendieran a ven-
der, pero de la emoción nun-
ca medí el ancho de las puer-
tas: el día que quisimos sa-
carlo no pudimos”, cuenta
entre risas.
Su último taller, antes de
llegar a ser el histórico profe-
sor de bicicletería, fue de
fabricación de bolsas y guan-
tes de polietileno. Confeccio-
naban más de cinco mil bol-
sas al mes, convirtiéndose en
el principal proveedor de una
famosa cadena de comidas
rápidas. Varios vecinos y
consorcios del barrio tam-
bién eran importantes clien-
tes. Se acercaban a la escuela
para retirar los productos o
los mismos profesores pres-
taban sus autos para distri-
buirlos.
Cuando se realizaron los
festejos para celebrar los 75
años de la escuela, Ricardo
recreó junto a un grupo de
alumnos de su taller, la bici-
cleta de Alfonsina Storni,
poeta y escritora argentina
que le dio el nombre a la ins-
titución. Gracias a la ayuda
de muchos vecinos y de la
bicicletería de Asamblea al
1100 que donó piezas y com-
pró rifas, pudieron llevar a
cabo el proyecto. Hoy se en-
cuentra exhibida dentro del
taller y es una de las grandes
reliquias de la institución.
En septiembre de este
año, se cumplen 25 años des-
de que comenzó a trabajar en
la escuela. Y, como se imagi-
narán, es el profesor más
antiguo. Cada día lo visitan
muchos de los que fueron sus
alumnos. Durante los actos
escolares, los jóvenes solici-
tan que Ricardo cuente algu-
na anécdota y es uno de los
docentes que más aplausos
recibe. Durante la jornada
escolar, su taller es el más
concurrido, y él lo reconoce.
"Educar a alumnos con capa-
cidades diferentes es una
gran experiencia. Yo les ex-
plico lo que es la vida porque
los quiero como hijos", cuen-
ta. Y parece que ellos lo sa-
ben mejor que nadie.
Sentimientos, habilidades
y conocimientos transmitidos
de una generación a otra pue-
den marcar nuestro destino.
El dominio de un oficio pue-
de ser un legado inolvidable
para los hijos, como lo que
sucedió con Don Mario y su
hijo Ricardo.
María Agustina Clemente
es Periodista y Profesora de
Educación Primaria.
Universo escolar
La valiosa herencia de un oficio
Viene de pág.1

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Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018 - Página 7
Plásticamente
La fogata de San Pedro y San Pablo “Luz de fuego”
Por Viviana Agosti
“La Fogata de San Pedro
y San Pablo, también llama-
da de San Juan, es el rito an-
tropológico de mayor vigen-
cia de nuestros días. El hom-
bre reunido alrededor del
fuego es una ceremonia que
las costumbres ciudadanas
están haciendo desaparecer.
Hace más de veinte años
en Parque Avellaneda soste-
nemos este rito a través del
espectáculo Luz de Fuego,
un encuentro lúdico compar-
tido donde quemamos al
Fantoche de las Miserias,
que simboliza todo lo no
deseado, y que la luz que el
fuego produce nos ilumine
para seguir apostando a ser
mejores personas y a vivir en
un mundo más solidario.
El Fantoche de 2018 fue
un “Alebrije”.
¿Qué es un alebrije? Es
un ser imaginario conforma-
do por elementos fisionómi-
cos de diversos animales
combinados entre sí, de ani-
males con plantas, de anima-
les reales con animales fan-
tásticos.
El origen de los alebrijes
es muy curioso. Aparecen
por medio de Pedro Linares,
un cartonero mexicano,
quien enferma gravemente
quedando un tiempo incons-
ciente y comienza a soñar
con unas criaturas fantásti-
cas, que en determinado mo-
mento lo conducen por el
bosque con el que él soñaba
repetidamente hacia su sali-
da, al grito de ¡alebrijes! (de
allí proviene su nombre).
recupera la consciencia.
Con un fuerte deseo de
transmitirles a su familia y
amigos estas criaturas, apro-
vechando sus conocimientos
con el cartón comienza a ge-
nerar estas figuras que repre-
sentan a esos alebrijes. Esto
se vuelve una tradición y una
estética, siendo un tipo de
artesanía que si bien es origi-
naria de México se ha expan-
dido por el mundo y hoy lle-
ga a nosotros.
Hoy buscamos traer a los
alebrijes ya que en ellos ve-
mos no solo una estética muy
llamativa para la calle y un
evento de envergadura para
la comunidad como lo es la
fogata de San Pedro y San
Pablo. Tomamos en cuenta
que para nuestra sociedad
actual una gran miseria para
depositar en este ser es la
violencia, siendo nosotros
conscientes de cómo afecta
a la comunidad el aumento
de violencia que vivimos:
violencia de género, en la
calle, en la escuela, violencia
naturalizada y aceptada por
nuestra sociedad.
Buscamos que la comuni-
dad de Parque Avellaneda,
que se acerca cada año a este
hecho tan significativo donde
confía al fuego sus miserias,
y todo aquello que ya no
quieren, repudie a viva voz
cada hecho de violencia. Que
se reviva el espíritu de fiesta,
de encuentro, de solidaridad,
de los vecinos reunidos, del
ños fantoches. Al cerrar el
día el desfile llegó al parque,
y todos se ubicaron en el Pla-
yón del Antiguo Tambo.
Luego el público se trasladó
al playón Peuser, donde se
encendió una fogata inmen-
sa.
Reunidos a su alrededor,
vimos cómo las tradiciones
nos fortalecían manteniendo
vivo el patrimonio cultural.
Un plato de guiso servido a
cada uno cerró de cálida ma-
nera el ritual.
El Complejo Cultural
Chacra de los Remedios de
Av. Directorio y Lacarra,
ofrece una gran variedad de
actividades. Puede consultar
se en Facebook, Chacra de
los Remedios2 y Remedios
Chacra. También se puede ir
a https://issuu.com/remedios
chacra y a
http:// chacradelosremedio-
sonline.blogspot.com
twitter. com/ccchacra
pueblo”.
El último sábado de junio,
el ritual de la Fogata de San
Pedro y San Pablo "Luz de
Fuego" comenzó con un re-
corrido de grupos artísticos.
Tras la apertura en el Garaje
Olimpo (ex Centro Clandes-
tino de Detención) partió un
gran muñeco, el Fantoche de
las Miserias, junto a diversos
personajes teatrales.
En el trayecto por las ca-
lles del barrio, se invitó a los
vecinos a sumarse a la cara-
vana. La gente contempló el
espectáculo, asomada a los
balcones y ventanas. Los
actores culturales pregunta-
ban a las personas cuáles
eran las miserias que querían
quemar y las anotaban en
papeles que colocaban en
largas telas que colgaban del
fantoche.
En el camino hubo espec-
táculos y se sumaron varias
instituciones con sus peque-
Fantoche de las Miseria en la calle, junto a los vecinos
La Fogata de San Pedro y San Pablo fue precedida por un
gran desfile de grupos artísticos con coloridos trajes y abun-
dantes elementos escenográficos

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Chacabuco Cultural - Año VII - Nro. 41 - Agosto 2018 - Página 8
Frente al Parque, sobre la avenida Asamblea entre Faraday y Hortiguera se
encuentra este enorme edificio, construido en los años 40, cuya foto, tomada a
fines de los 60 forma parte del acervo del AGN. En el lugar, a comienzos del
siglo XX, había una hilandería pero los vecinos lo recuerdan cuando recién
construido, sirvió para alojar “la fábrica Royal”. En efecto, allí se hacía el famo-
so polvo para hornear que tenía la propiedad de esponjar la masa produciendo
burbujas. Ahorraba el esfuerzo de lograrlo con claras batidas a nieve y manteca.
El polvo Royal, creado en 1866, llegó a la Argentina en 1936, elaborado por
Fleichman Argentina Incorprated, con licencia de la Standard Brands, de
EE.UU.. Con el tiempo, la marca se extendió a otros productos, como flanes y
postres pero después, sucesivas fusiones quiebras y ventas de las empresas la
llevaron fuera del país.
El local permaneció abandonado por un tiempo. Luego, al comienzo de los
90 la gran ilusión de la paridad cambiaria dio lugar a que se instalara allí un
shopping. Al principio sólo ocupaban la planta baja Hering y Dexter pero poco a
poco se instalaron otras marcas de renombre y numerosos locales de venta que
llegaron a los otros pisos. Las innovaciones maravillosas eran las escaleras me-
cánicas, el patio de juegos y el espacio de comidas. Había un ascensor que esta-
ba a la vista y constituía un espectáculo por sí mismo. Una figura de Superman
ubicada debajo de la caja trataba de trasmitir la fantasía de que era este persona-
je de caricatura el que lo "levantaba".
En la actualidad el edificio ha sido refuncionalizado, con todos los recursos
de arquitectura actual. Es una sucursal de los supermercados Coto que ocupa
tres pisos, más uno agregado en 2003.
Ayer y hoy
La Royal - Asamblea 1176 - Coto