1. Lo público
En teoría es de muchos y en la realidad de pocos
Por: Clara Patiño Villegas
Empiezo diciendo que es un término muy amplio y de gran complejidad, no solo
en su definición sino en su aplicación.
Lo público es todo aquello dentro de un territorio que le pertenece e interesa a
quienes habitan en él. “Todo” hace referencia tanto a lo tangible como a lo
intangible, es decir abarca desde los espacios físicos que no han sido comprados
por sujetos en específico, como aquellos imposibles de ver como el espectro
electromagnético. Saliéndonos un poco de lo que es el espacio, hay intangibles
que son aún más importantes y que determinan la unidad e identidad social como
lo es la cultura, que también hace parte de lo público.
Los dueños de lo público, como lo decía antes, son todos aquellos que están
dentro de un territorio determinado; la sociedad. Sin embargo este término se
suele encasillar a lo estatal. Para mí la función del Estado con referencia a lo
público no es más que velar por su mantenimiento y estabilidad. Como es algo tan
amplio y en donde hay tantos sujetos involucrados, la administración manejo de lo
público necesita estar en manos de algo o alguien.
Todo esto teóricamente suena muy lindo, pero en realidad es muy complejo, y
cuando lo queremos ver en práctica no se logra. Primero porque no todos los que
hacen parte de la sociedad concuerdan con el Estado, me refiero a su elección,
decisiones, etc; lo que finalmente le quita propiedad social, por estar determinado
a usar y vivir su propiedad como otro ha querido. Y segundo hay pertenencias
públicas por las que han puesto a pagar a la sociedad, como si no les
perteneciera. Es en estos últimos puntos en donde cuestiono el verdadero
significado y existencia de lo público. Porque al parecer lo público termina siendo
aquello que en teoría es de muchos y en la realidad de pocos.