El documento describe el desarrollo psicológico durante la infancia y la adolescencia. Explica que el desarrollo comienza en el útero, donde el feto puede percibir estímulos del exterior. La madre juega un papel fundamental en los primeros años mediante la interacción y el apego emocional. El desarrollo continúa a través de la infancia y la adolescencia con cambios cognitivos, afectivos, sexuales y sociales.
1. DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
La psicología del desarrollo es una rama de la psicología que estudia los cambios
conductuales y psicológicos de las personas, durante el periodo que se extiende desde su
concepción hasta su muerte, tratando de describirlos y explicarlos, con la finalidad de
predecir comportamientos.
El desarrollo psicológico durante la infancia y la adolescencia hace referencia a los
cambios a nivel cognitivo, afectivo, sexual y social que ocurren durante el proceso de
crecimiento del individuo.
Primeras Reacciones Psicológicas Del Niño Durante El Embarazo.
El desarrollo psicológico de los infantes se inicia con la concepción. Existen estudios que
muestran que los fetos a partir del cuarto mes de gestación presentan reacciones
emocionales muy similares a las de un recién nacido y mencionan que esto se debería a
que en esta etapa ya son capaces de percibir el afecto y la ternura que les llega desde el
exterior. Durante el embarazo, hasta el momento del parto, el niño está unido a su
madre y al mundo externo a través de la placenta, la cual no solo le proporciona alimento
sino que también transmite las emociones de la madre a través de las hormonas que
segrega su organismo.
2. DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
La sangre materna que el bebé recibe por el cordón umbilical, que contiene sustancias
como neurotransmisores u hormonas, que producen en el bebé las mismas reacciones
que en la madre. Una de las hormonas del estrés, la adrenalina, que en la madre produce
aumento del ritmo cardíaco, de la presión arterial, tensión, ansiedad, etc. produce
exactamente lo mismo en el bebé. Las endorfinas, que en la madre producen tranquilidad,
bienestar y paz, actuarán de la misma manera en el bebé
El feto comienza a desarrollar el sentido del tacto en la octava semana, mientras la cara
ya empieza a adquirir un aspecto humano. A las dieciséis semanas el futuro bebé
retrocede ante la luz, a las veinte reconoce la voz de la madre, a las veinticuatro tendrá
casi todos sus órganos sensoriales maduros y a las veinticinco reacciona a la música.
Cuando tiene seis meses de gestación responde a los cambios de humor maternos y ya
tiene memoria, y a los siete meses puede soñar.
Los últimos estudios también muestran que el feto dentro del útero materno percibe
olores y sabores, oye los sonidos y los recuerda después del nacimiento. El estrés o
excitación prolongada por parte de la madre afecta la salud física y mental del ser humano
en desarrollo, está comprobado que cuando la madre sufre de un estrés emocional, el
feto se mueve con mayor fuerza y frecuencia que cuando la madre se encuentra en paz y
armonía.
El rol de la madre en los primeros años de vida.
En el primer año de vida la figura materna es la que tiene el papel fundamental en el
desarrollo armónico del niño. El recién nacido considera a la madre como una
prolongación de sí mismo, fuente de satisfacción de sus propios deseos y necesidades. La
madre le proporciona ante todo nutrición física: pecho o biberón, lo importante es que lo
coja en brazos con cariño mientras come, de forma que el niño perciba el contacto físico
con ella como gratificante.
A parte de la nutrición física, la figura materna proporciona alimento cognitivo para las
actividades motoras, sensoriales y mentales del niño: cada vez que interacciona con él,
cuando juega, lo coge en brazos, le enseña cosas, le canta, le deja explorar la cara y su
pelo, le habla, le mueve los brazos o las manos, le proporciona objetos para jugar, le
ayuda a cambiar posición, etc.
3. DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
La madre, sin tener a veces conciencia de ello, estimula y crea las condiciones favorables
para la manipulación y la exploración del ambiente. Un indicador importante para saber si
un niño es feliz, lo tenemos a partir de los dos o tres meses, cuando aparece la sonrisa ya
no solamente como respuesta a una necesidad satisfecha, sino de forma relacional, como
expresión de alegría en relación con un objeto externo, por ejemplo un rostro conocido
que esté enfrente de él, se mueva, sonría o le hable. En todo este proceso de relación con
la figura materna se produce el apego emocional.
A continuación veremos un video sobre el apego emocional que deben establecer madre
e hijo.
Apego emocional Madre-Hijo.
LOS REFLEJOS DEL INFANTE.
Los reflejos innatos son reacciones simples y automáticas ante un estímulo exterior que permiten
la supervivencia del bebé y le abren las puertas del nuevo mundo que los rodea.
REFLEJO DE BÚSQUEDA: Esa ansiedad por localizar el pecho de mamá la manifiestan
todos los recién nacidos. Al tocar la mejilla, el niño orienta su cabeza al lugar donde se le
indica mientras abre la boquita e intenta succionar el dedo o el pecho, haciendo
movimientos de la cabeza (flexión, extensión y rotación del cuello) se efectúan en la
misma dirección que se ha realizado el estímulo. Este reflejo desaparece a los 4 meses.
4. DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
REFLEJO DE SUCCIÓN: Este reflejo se desarrolla a partir de la semana 20 de embarazo (el
feto lo ensaya chupándose el dedo) y se prolonga durante 2 meses, cuando el bebé ya no
lo necesita porque ha aprendido a mamar a voluntad.
REFLEJO DE MORO: Para comprobar si el bebé realiza el reflejo de Moro se coloca al
bebé sobre una superficie dura o rígida. Luego se sujeta al bebé por los brazos tirando un
poco de ellos hacia arriba, levantando ligeramente la cabeza de la camilla. Se le suelta
bruscamente. El bebé abre los brazos y las manos y los vuelve a cerrar, como dando un
abrazo, al tiempo que empieza a llorar. Este reflejo está presente en el recién nacido y
desaparece aproximadamente hacia los 2 meses del bebé.
5. DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
REFLEJO DE PRENSIÓN EN EL BEBÉ: El reflejo de prensión se utiliza para comprobar la
intensidad con la que agarra un objeto, la simetría de los brazos y la persistencia de la
prensión en el bebé. Este reflejo es tan fuerte que, si le ponemos en cada mano uno de
nuestros dedos índice, se aferra a ellos tan fuerte que casi se le puede levantar en vilo.
Hay que tener cuidado pues esa presión dura solo unos instantes y se suelta. Este reflejo
suele desaparecer hacia los 5-6 meses.
Estimulación intrauterina.
A través de la estimulación intrauterina se pretende desarrollar al máximo las capacidades
del bebé y, sobre todo, mantener una estrecha comunicación con el pequeño que
enriquezca la relación padres e hijo.
Además de desarrollar sus sentidos, logramos que el bebé se sienta seguro, querido y
acompañado, pues desde las primeras semanas de gestación nos estamos comunicando
con él y creando un fuerte vínculo afectivo, que él percibe perfectamente.
Si tenemos en cuenta que a las pocas semanas de gestación es capaz de percibir los
estímulos que vienen desde el exterior y, por lo tanto, nos puede oír, sentir, incluso
distinguir sabores, podríamos realizar actividades que desarrollen sus sentidos y resulten
placenteras para él como oír música, bailar suavemente, etc.
6. DESARROLLO PSICOLÓGICO EN LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA.
El bebé capta perfectamente el estado de ánimo de su madre. Así, por ejemplo, si ella se
siente triste, contenta, desanimada, feliz, preocupada, etc. lo percibe perfectamente. Las
situaciones en que la madre se encuentra excesivamente estresada pueden incluso
afectar al desarrollo y crecimiento del bebé. Las madres deben ser conscientes de que
tanto sus emociones como sus actitudes, repercuten positiva o negativamente en el bebé.
Por ello, debemos hacer todo lo posible para vivir el embarazo como una etapa alegre e
ilusionada, dando especial importancia al bienestar de la madre y del bebé. Una mujer
que disfruta de su embarazo, se comunica con su hijo, le estimula y espera con ilusión su
nacimiento. Lo más probable es que tenga un bebé emocionalmente sano. Lo más
importante no es la estimulación, sino el trato continuo con el pequeño.
El siguiente video presenta la importancia de la estimulación prenatal y sus
características.
Importancia de la estimulación prenatal.