Se ha desprendido de su concesión en el denominado Bloque 39, en Perú, tras las advertencias del Comité de Ética del fondo de pensiones de Noruega, accionista relevante de la compañía. Ese comité consideraba que la presencia de la multinacional allí era un "riesgo inaceptable de complicidad en graves violaciones de los derechos" de las tribus indígenas. La petrolera española descubrió crudo en ese enclave en 2006 y 2005, y en 2008 lo incluyó entre sus 10 principales proyectos de exploración.
Repsol vende un pozo en la Amazonia peruana tras el aviso de veto del mayor fondo soberano del mundo
1. Repsol vende un pozo en la Amazonia peruana tras el aviso de
veto del mayor fondo soberano del mundo
Fuente: eldiario.es. Domingo 1ro de febrero de 2015
Se ha desprendido de su concesión en el denominado Bloque
39, en Perú, tras las advertencias del Comité de Ética del
fondo de pensiones de Noruega, accionista relevante de la
compañía. Ese comité consideraba que la presencia de la
multinacional allí era un "riesgo inaceptable de complicidad en
graves violaciones de los derechos" de las tribus indígenas. La
petrolera española descubrió crudo en ese enclave en 2006 y
2005, y en 2008 lo incluyó entre sus 10 principales proyectos
de exploración.
Era un " caso de éxito" de la política de Responsabilidad Social
Corporativa (RSC) de Repsol y llegó a figurar entre los diez "grandes
proyectos de crecimiento" que contemplaba el Plan Estratégico 2008-
2012 que la petrolera presentó en febrero de 2008, con una inversión
estimada entonces en 350 millones de euros. Pero la multinacional
española ha decidido venderlo al mejor postor tras la amenaza de
veto de un accionista muy poderoso.
Repsol ha vendido a la petrolera franco-británica Perenco,
perteneciente a la familia Perrodo (una de las mayores fortunas de
Reino Unido), su participación mayoritaria (55%) en el denominado
Bloque 39, una concesión de 8.868 kilómetros cuadrados de
superficie en la cuenca del río Marañón, provincia de Maynas, en el
corazón de la Amazonia peruana, una de las zonas con mayor
biodiversidad del planeta. La operación se cerró el año pasado por un
importe no especificado, tras las advertencias del Comité de Ética del
Fondo de Pensiones del Gobierno de Noruega (NBIM, por sus siglas
2. en inglés), el mayor fondo soberano del mundo, sobre las posibles
consecuencias del proyecto para las comunidades indígenas.
La venta ha llegado tras las repetidas advertencias del Comité de
Ética del NBIM, aunque fuentes de la compañía aseguran que la
decisión de vender el Bloque 39, adoptada a finales de 2013,
respondió a que "no se consideraba económicamente interesante".
Añaden que "nunca se demostró la presencia de indígenas" en ese
área y que la existencia de violaciones de derechos humanos por
parte de la compañía "nunca ha sido acreditada" ante el Comité de
ética del NBIM.
Accionista de las grandes del Ibex
En diciembre de 2010, según documentos publicados recientemente
por el Gobierno noruego, ese órgano recomendó excluir a Repsol y a
su socio en ese yacimiento, la india Reliance Industries, de la cartera
de inversiones del fondo, que a cierre de 2013 controlaba un 1,24%
de la compañía española valorado entonces en 2.469 millones de
coronas suecas (unos 263,7 millones de euros). El fondo, con activos
de 5,038 billones de coronas noruegas (608.597 millones de euros),
entre renta fija y variable, tiene intereses en las principales
compañías cotizadas españolas. A cierre de 2013, estaba presente en
73 empresas españolas, con Santander (1,70% del capital),
Telefónica (1,78%), BBVA (1,64%), Inditex (0,88%) e Iberdrola
(1,64%) entre ellas. Entre sus asesores en España está el exministro
de Industria Miguel Sebastián.
El Comité de Ética del NBIM consideraba que la presencia de la
petrolera en ese territorio, ubicado junto a la frontera con Ecuador,
podía suponer un "riesgo inaceptable de complicidad en graves
violaciones de los derechos" de las tribus indígenas que lo habitan y
que viven en aislamiento voluntario del resto de la sociedad. En una
nota publicada el mes pasado, la ONG noruega de apoyo a los
pueblos indígenas Rainforest Foundation ha relacionado la decisión
con la "amenaza de exclusión" que, a raíz de esas recomendaciones,
pendía sobre las inversiones del NBIM en Repsol.
Esta organización no gubernamental asegura que Repsol "causó
serias violaciones de los derechos humanos" en las tribus aisladas de
esa región y recuerda que estos indígenas "son extremadamente
vulnerables a cualquier forma de contacto con el exterior porque no
han desarrollado la inmunidad a infecciones comunes o virus como la
gripe, la diarrea o la varicela. El contacto con terceros
inevitablemente conlleva la introducción de esas enfermedades, con
consecuencias fatales".
3. Tras la operación, el Comité de Ética del NBIM ha decidido levantar su
recomendación de excluir a la empresa española del "universo de
inversiones" del fondo. Rainforest Foundation recuerda que, "aunque
Repsol ha vendido el Bloque 39, la compañía todavía está involucrada
en el mayor proyecto gasista de Perú, Camisea", un yacimiento de
gas donde tiene previsto invertir unos 500 millones de dólares junto a
sus socios, la estadounidense Hunt Oil, la argelina Sonatrach y la
surcoreana HK.
La Rainforest Foundation recuerda que Camisea también "ocupa una
reserva legal de indígenas en situación de aislamiento", por lo que
insiste en que "Repsol debería ser excluida" de la política de
inversiones del NBIM. A cierre de 2013, Repsol tenía 354 estaciones
de servicio en Perú, el control de la refinería de La Pampilla y diversos
yacimientos en ese país, que suponía un 12% de la plantilla total de
la multinacional.
Como la minera que contrató a Aznar
Ante la recomendación que emitió el comité, reiterada en junio de
2012, Repsol se arriesgaba a correr la misma suerte que otras
multinacionales a las que finalmente ha vetado el fondo noruego por
riesgos como los de "violaciones sistemáticas de los derechos
humanos" (Wal-Mart, en mayo de 2006), daños medioambientales
(Rio Tinto o Barrick Gold, la minera canadiense a la que asesora el
expresidente José María Aznar), o efectos perniciosos sobre la salud
(las principales compañías tabaqueras).
En 2007, Repsol incluyó este bloque, de cuya concesión disfrutaba
desde principios de la pasada década (data de la época de Alfonso
Cortina, presidente de la compañía hasta octubre 2004), entre los
cinco grandes proyectos de crecimiento de su área de Upstream
(exploración y producción), para los que contemplaba una inversión
conjunta de 2.100 millones de euros hasta 2012.
La petrolera había descubierto recursos en ese área en sendos
sondeos realizados en junio de 2006 y agosto de 2005, y en 2007
analizaba las diferentes alternativas de producción y evacuación del
crudo existente en el subsuelo, de naturaleza pesada (más caro de
extraer). Entonces, estimaba que el bloque se pondría en marcha a
finales de 2011, con una producción neta estimada en 2012 de
21.000 barriles equivalentes (bep) /día y unas reservas netas de
entre 100 y 120 millones de bep.
No fue así. A principios de 2009, tras el desplome de los precios del
crudo (que venían de marcar un récord en julio de 2008), la
compañía anunciaba que revisaría algunos de los proyectos incluidos
en su Plan Estratégico, incluyendo este. Precisamente, los
4. documentos publicados por el Gobierno noruego dan cuenta de cómo
en febrero de 2009, y tras las denuncias de asociaciones de defensa
de los pueblos indígenas en Perú, el Consejo de Ética del fondo
remitía una carta a la petrolera "solicitando información sobre sus
actividades en Bloque 39 y las medidas implementadas para evitar el
contacto con las personas que habitan en aislamiento voluntario" en
esa zona.
Una inversión "muy fuerte"
Según reflejan las crónicas de entonces, en marzo de 2009, el
presidente de Repsol, Antonio Brufau, señalaba que el Bloque 39, uno
de los proyectos que estaba en revisión, se encontraba mar adentro,
por lo que su explotación requeriría la construcción de un oleoducto
de 1.000 kilómetros de extensión que suponía una inversión "muy
fuerte". Lo cierto es que el proyecto está lejos del océano, tal y como
puede apreciarse en un documento oficial del Ministerio de Energía y
Minas de Perú.
La última referencia de Repsol al Bloque 39 figura en su informe de
RSC de 2012, cuando explicaba que, en ese ejercicio, había realizado
"siete reuniones informativas sobre el estado de situación del
proyecto exploratorio y los planes de relacionamiento comunitarios
para el año 2012 con las comunidades de Urbina, Buena Vista, Flor
de Coco, Bolivar, Soledad, Tipishca, Nueva Yarina, Muchavista, Nueva
Libertad y San Rafael". A partir de entonces, no hay más alusiones.
Ver en línea : eldiario.es, 31 de enero de 2015.