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YHWH Nuestro-Dios, el Unico.
La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén

La reforma de Ezequías
                                               Tiglatpileser sitia Damasco
     El siglo VIII es la época del ma-
yor esplendor de Asiria y la peor situa-       «Puse mi campamento en torno a su ciudad durante 45 días; lo encerré
ción del reino de Israel. Después de           como un pájaro enjaulado. Talé sus jardines, árboles innumerables de
asesinar a Pecajías hijo de Menajem,           los huertos, y no dejé ni uno. Asedié y conquisté la ciudad de Hadara,
Pécaj hijo de Remalías se había sen-           ciudad paterna de Rasón de Damasco, donde había nacido. Me llevé
tado en el trono de Samaría en 737 y           como botín 800 personas con su hacienda, sus bueyes, sus ovejas. Me
buscó organizar una coalición contra           llevé como botín 750 prisioneros de la ciudad de Kurssa, (...) de la ciu-
Asiria. Para eso había conseguido              dad de Irma, 550 prisioneros de la ciudad de Metuna. Destruí 591 ciuda-
como aliado a Rasón de Damasco e               des de los 16 distritos de Damasco dejándolas como un montón de
intentaba arrastrar también a Ajaz. Al         ruinas ocasionado por un diluvio»
no lograrlo, israelitas y arameos si-
tiaron Jerusalén para deponerlo y co-                                                     Anales de Tiglatpileser, ANET 283.
ronar a un rey a su antojo.
     En esa situación desesperada
Ajaz recurrió a los medios más extre-       masco en 733 y se apoderó de la ciu-          de Judá, convertido en vasallo suyo,
mos. En primer lugar:                       dad (cf. 2 Re 16,9). La crónica asiria        se mantuvo fiel a los asirios hasta su
                                            complementa las informaciones del             muerte. Sargón no cesó con esto sus
  «hizo pasar por el fuego a su hijo,       relato biblico. En lo que se refiere al       intervenciones en la región, siguió
  según las abominaciones de las            reino de Israel, su territorio quedó con-     combatiendo al faraón y deportando
  naciones que YHWH había arroja-           siderablemente reducido y se llevó a          varias poblaciones árabes a Sama-
  do ante los israelitas» (2 Re 16,3).      cabo una primera deportación (2 Re            ría, según la política asiria acostum-
                                            15,29).                                       brada para impedir las sublevaciones
     Y a la vez que ofrecía este sacrifi-         Pero a la muerte del monarca            de los naturales en los territorios so-
cio cruento a los dioses cananeos,          asirio, el rey Oseas intentó terminar         metidos.
buscaba la protección asiria:               con la sumisión, por lo cual Salma-                 Desde el punto de vista religio-
                                            nasar V emprendió una nueva cam-              so, la llegada de pueblos muy distin-
  «Ajaz envió mensajeros a Tiglat-          paña contra la región y obligó nueva-         tos a Samaría trajo un sincretismo
  pileser, rey de Asiria, diciendo:         mente a Israel a pagar tributo. En es-        que fue juzgado con mucha severidad
  «Soy tu siervo y tu hijo. Sube,           tas circunstancias Oseas especuló             por los creyentes de Judá:
  pues, y sálvame de manos del rey          con la ayuda que el faraón Tefnakht le
  de Aram y de manos del rey de             prestaría para enfrentar a los asirios.         «Cada nación se hizo sus dioses
  Israel que se han levantado con-          Sus esperanzas se vieron frustradas             y los pusieron en los templos de
  tra mí». Y tomó Ajaz la plata y el        y Oseas quedó solo ante Asiria. El rey          los altos que habían hecho los
  oro que había en la Casa de               de Israel cayó prisionero y la capital          samaritanos, cada nación en las
  YHWH y en los tesoros de la casa          fue sitiada (2 Re 17,4-6). Samaría cayó         ciudades que habitaba... Venera-
  del rey y lo envió al rey de Asiria       finalmente en 721 después de un lar-            ban también a YHWH y se hicie-
  como presente» (2 Re 16,7-8).             go asedio, en el comienzo del reina-            ron sacerdotes en los altos, to-
                                            do de Sargón II, hijo de Salmanasar.            mados de entre ellos, que oficia-
     Respondiendo al llamado de                   El territorio del reino de Israel se      ban por ellos en los templos de
Ajaz, el rey de Asiria puso sitio a Da-     convirtió en provincia asiria y el rey Ajaz     los altos. Reverenciaban a YHWH
                                                                                            y servían a sus dioses según el
                                                                                            rito de las naciones de donde ha-
                                                                                            bían sido deportados. Hasta el día
                                                                                            de hoy siguen sus antiguos ritos»
                                                                                            (2 Re 17,29. 32-34).

                                                                                                En estos juicios se ve aparecer
                                                                                          una hostilidad de los judíos de Jeru-
                                                                                          salén contra los habitantes de Sama-
                                                                                          ría, que se acentuará con el paso del
                                                                                          tiempo.
                                                                                                Sargón también se apoderó de
                                                                                          la ciudad costera de Asdod, ya que su


                                                                                             «En tiempo de Pecaj, rey de Israel, vino
                                                                                           Teglatfalasar, rey de Asiria, y tomó Iyyón,
                                                                                             Abel Bet Maacá, Yanóaj, Cadés, Jasor,
                                                                                            Galaad, Galilea, todo el país de Neftalí, y
                                                                                                  los deportó a Asiria» (2 Re 15,29).


50                                                                                                  La época del Primer Templo
Primera deportación de Israel
   «Del país de Israel (...) conduje a Asiria al conjunto de sus gentes con
   su hacienda. Derrocaron a Pécaj, su rey, y pusieron sobre ellos como
   rey a Oseas. Recibí de ellos 10 talentos de oro, 1000 talentos de
   plata como tributo anual»
                                        Anales de Tiglatpileser, ANET 283.

   Caída de Samaría
   «Desde el comienzo de mi reinado hasta el decimoquinto año del                     «El rey de Asiria subió por toda la tierra,
   mismo, derroté a Humbanigash, el elamita, en los alrededores de                    llegó a Samaría y la asedió durante tres
   Der. Sitié y conquisté la ciudad de Samaría; me llevé como botín                   años. El año noveno de Oseas, el rey de
   27.290 habitantes de ella. Reuní 50 carros de entre ellos, e hice                  Asiria tomó Samaría y deportó a los
   trabajar al resto en su oficio. Puse al frente de ellos un alto funciona-          israelitas a Asiria; los estableció en Jalaj,
   rio mío y les impuse el mismo tributo que el rey anterior»                         en el Jabor, río de Gozán, y en las
                                                                                      ciudades de los medos» (2 Re 17,5-6).
                                      Inscripción de los Fastos, ANET 284.
                                                                                      obra se pudo seguir desarrollando en
                                                                                      Jerusalén gracias al ambiente de re-
rey había intentado una revuelta es-       rial propio la lectura de las tradicio-    novación religiosa propiciado por Eze-
peranzado en la ayuda de los egip-         nes del Sur para consolidar en el pue-     quías. En esta revisión de la Ley esta-
cios, de las otras ciudades filisteas y    blo una clara identidad nacional y reli-   ba contenido el espíritu infundido por
del rey Ezequías, el hijo de Ajaz.         giosa.                                     los grandes profetas Elías, Amós y
      El ejemplo de la disolución mo-            La fusión intentó a la vez respe-    Oseas, cuyas palabras los refugiados
ral y religiosa que había experimenta-     tar las dos tradiciones (a pesar de sus    del norte también salvaron del olvido.
do Samaría antes de su caída era un        diferencias de ópticas) y asegurar la            Junto a la reelaboración de las
serio llamado de atención para los ha-     coherencia del nuevo relato. Es por        leyes, el espíritu profético llevaba tam-
bitantes de Jerusalén, que parecían        eso que de un mismo episodio el ac-        bién a estos refugiados a hacer una
estar siguiendo sus pasos. Por eso         tual texto bíblico conserva a veces dos    revisión de la historia para investigar
Ezequías intentó una renovación para       relatos con sus respectivas variacio-      las causas de la destrucción de su
su reino:                                  nes. El resultado fue una obra que         reino: ¿qué habría sido necesario
                                           mantiene la esperanza mesiánica da-        hacer para permanecer fieles a Dios?
  «Él fue quien quitó los altos, derri-    vídica propia del sur, y las exigencias    La misma mirada crítica sobre las
  bó las estelas, cortó los cipos y        morales y espirituales del norte.          actitudes y decisiones de los sobera-
  rompió la serpiente de bronce que              Además de sus tradiciones his-       nos que había hecho hablar a los pro-
  había hecho Moisés, porque los           tóricas propias, los refugiados del        fetas también leía ahora los hechos
  israelitas le habían quemado in-         norte se llevaron a Jerusalén sus co-      de la historia reciente, de modo que
  cienso hasta aquellos días; se la        lecciones de leyes que venían revi-        algunos cronistas se permitieron na-
  llamaba Nejushtán» (2 Re 18,4).          sando hacía ya mucho tiempo. Era           rrar la historia de Israel de un modo
                                           evidente que la ley dada antiguamen-       muy distinto del que lo habían hecho
     Mientras tanto, Jerusalén había       te por Moisés resultaba anacrónica         los historiadores cortesanos que re-
abierto sus puertas a sus hermanos         para aquel pueblo que había dejado         dactaron los Anales del reino de Is-
refugiados del norte, entre los cuales     de ser nómade y que se había trans-        rael y también los Anales del reino de
había muchos levitas. A ellos se de-       formado en un reino organizado. La         Judá.
bió que la literatura redactada en su      necesaria adaptación de las leyes                Quien quisiera escuchar, por
suprimido reino se salvara de la des-      antiguas y la creación de otras nue-       ejemplo, las grandes hazañas que del
aparición para siempre. De esta ma-        vas requeridas para la vida sedenta-       rey Ajab la historia oficial de Samaría
nera las tradiciones del Norte llega-      ria había comenzado a originar una         relataba no tenía más que recurrir a
ron hasta los escritores de la corte de    especie segunda edición de la Ley de       la obra redactada por los escritores
Ezequías e iluminaron con su mate-         Moisés (gr. deuteros-Nomos). Esta          que habían estado a su servicio:

                                                                                        «El resto de los hechos de Ajab,
                                                                                        todo cuanto hizo, la casa de mar-
   Repoblación de Samaría                                                               fil que edificó, todas las ciudades
                                                                                        que fortificó ¿no está escrito en el
   «A los Tamudi, los Ibadidi, los Marsimani, los Hayapa, árabes lejanos,               libro de los Anales de los reyes
   habitantes del desierto, que no reconocían ni superior ni gobernador, y              de Israel?» (1 Re 22,39)
   que no pagaban su tributo a rey alguno, los derroté en la confianza de
   Assur, mi señor; deporté a los restantes de ellos y los asenté en la                    Porque esa información tan elo-
   ciudad de Samaría»                                                                 giosa los mismos reyes se encarga-
                                                                                      ron de que fuese bien divulgada ya no
                                              Anales de Sargón, ANET 286a.            era necesario volver a transmitirla.
                                                                                      Los revisionistas se encargaron, más


La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén                                                                          51
bien, de seleccionar algunos pocos
hechos, precisamente los no relata-            El por qué del fracaso
dos por la historia oficial, para emitir
a partir de ellos juicios sobre el com-        «Esto sucedió porque los israelitas habían pecado contra YHWH su
portamiento moral y religioso de los           Dios, que los había hecho subir de la tierra de Egipto, de bajo la mano
reyes:                                         de Faraón, rey de Egipto, y habían reverenciado a otros dioses, siguiendo
                                               las costumbres de las naciones que YHWH había arrojado delante de
  «Ajab, hijo de Omrí, hizo el mal a           ellos.
  los ojos de YHWH más que to-                 Los israelitas maquinaron acciones no rectas contra YHWH su Dios,
  dos los que fueron antes que él»             se edificaron altos en todas las ciudades, desde las torres de guardia
  (1 Re 16,30).                                hasta las ciudades fortificadas. Se alzaron estelas y cipos sobre toda
                                               colina elevada y bajo todo árbol frondoso, y quemaron allí, sobre todos
       Mientras que los Anales de la           los altos, incienso, como las naciones que YHWH había expulsado de
historia oficial no sobrevivieron al           delante de ellos, y cometieron maldades, que irritaban a YHWH. Sirvieron
paso de los años y son desconoci-              a los ídolos acerca de los que YHWH les había dicho: «No haréis tal
dos por nosotros, las versiones críti-         cosa».
cas de los revisionistas perduraron,           YHWH advertía a Israel y Judá por boca de todos los profetas y de todos
seguramente porque estuvieron bien             los videntes diciendo: «Volveos de vuestros malos caminos y guardad
lejos de las manos y tal vez del cono-         mis mandamientos y mis preceptos conforme a la Ley que ordené a
cimiento de los reyes.                         vuestros padres y que les envié por mano de mis siervos los profetas».
      Pero la purificación espiritual del      Pero ellos no escucharon y endurecieron sus cervices como la cerviz
                                               de sus padres, que no creyeron en YHWH su Dios.
pueblo no era, para Ezequías, sólo
                                               Despreciaron sus decretos y la alianza que hizo con sus padres y las
una exigencia planteada a partir de la
                                               advertencias que les hizo, caminando en pos de vanidades, haciéndose
predicación de los fervorosos profe-
                                               ellos mismos vanidad, en pos de las naciones que les rodeaban, acerca
tas; era también una exigencia plan-
                                               de las que YHWH les había ordenado: «No haréis como ellas».
teada por sus propias aspiraciones             Abandonaron todos los mandamientos de YHWH su Dios, y se hicieron
de independencia. Sólo de esta ma-             ídolos fundidos, los dos becerros; se hicieron cipos y se postraron
nera se podía hacer frente a un impe-          ante todo el ejército de los cielos y dieron culto a Baal. Hicieron pasar a
rio tan poderoso como Asiria. Por eso          sus hijos y a sus hijas por el fuego, practicaron la adivinación y los
Ezequías emprendió una nueva polí-             augurios, y se prestaron a hacer lo malo a los ojos de YHWH,
tica de alianza con Egipto, conquistó          provocando su cólera.
las ciudades filisteas fieles a Asiria (2      YHWH se airó en gran manera contra Israel y los apartó de su rostro,
Re 18,8) y se rebeló negándose a               quedando solamente la tribu de Judá» (2 Re 17,7-18).
pagar el tributo de vasallaje.
      A causa de esta rebelión Sena-
querib, el sucesor de Sargón, empren-
dió en represalia una campaña con-          Ecrón derrocó y entregó a Ezequías a
tra Judá en el año 701. Para hacer          su rey proasirio y pidió ayuda a Egip-    Oráculos de Isaías
frente a la invasión Ezequías fortificó     to. Pero, habiendo vencido a los egip-
Jerusalén y construyó un canal que          cios, Senaquerib castigó despiadada-            En medio de esta encrucijada
llevara agua desde el torrente Guijón,      mente a la ciudad. El rey destronado      histórica se desarrolla el ministerio
fuera de las murallas, hasta la pisci-      por los propios filisteos en Ecrón re-    profético de Isaías, hijo de Amós. El
na de Silhoé, dentro de la ciudad. Gra-     cobró el trono gracias a los asirios y    lugar de procedencia de este mensa-
cias a este conducto, que aún hoy se        se comprometió nuevamente con             jero de la palabra de YHWH parece ser
puede recorrer, la ciudad podría so-        ellos mediante el correspondiente tri-    la misma Jerusalén, puesto que la
brevivir un largo asedio sin falta de       buto anual, pero las ciudades de Judá     cultura que evidencia difícilmente se
agua.                                       debieron soportar los terribles golpes    podría haber adquirido fuera de la ca-
      Si bien varias ciudades filisteas     de Senaquerib.                            pital. Él se nutrirá de las principales
se sometieron, otras resistieron.                                                     tradiciones allí cultivadas, que son la


Aunque el texto de los Anales no
menciona concretamente cuáles
fueron las ciudades capturadas, un
bajorrelieve del palacio real en
Nínive representa de una manera
escalofriante la toma de una de
ellas; la inscripción explicativa dice:
«Senaquerib, rey del universo, rey
de Asiria, está sentado en un sillón
y pasa ante él el botín de Lakish».
En esa ciudad se encontraba el rey
asirio cuando Ezequías, arrinconado
en la sitiada Jerusalén, envió
mensajeros para transmitir su                                                            Rendición de los habitantes de Lakish.
decisión de pagar el tributo como                                                         Relieve del palacio de Senaquerib, en
precio de la finalización del asedio                                                                                    Nínive.
(cf. 2 Re 18,14-16).


52                                                                                             La época del Primer Templo
«Entonces Yahveh dijo a Isaías: «Ea, sal con tu hijo Sear
                                                                    Yasub al final del caño de la alberca superior, por la calzada
                                                                             del campo del Batanero, al encuentro de Ajaz, y dile:
                                                                      «¡Alerta, pero ten calma! No temas, ni desmaye tu corazón
                                                                     por ese par de cabos de tizones humeantes, ya que Aram,
                                                                    Efraím y el hijo de Remalías han maquinado tu ruina diciendo:
                                                                     Subamos contra Judá y desmembrémoslo, abramos brecha
                                                                                     en él y pongamos allí por rey al hijo de Tabel".
                                                                         Así ha dicho el Señor Yahveh: No se mantendrá, ni será
                                                                      así; porque la capital de Aram es Damasco, y el cabeza de
                                                                         Damasco, Rasón; Pues bien: dentro de sesenta y cinco
                                                                       años, Efraím dejará de ser pueblo. La capital de Efraím es
                                                                      Samaría, y el cabeza de Samaría, el hijo de Remalías. Si no
                                                                                     os afirmáis en mí no seréis firmes» (Is 7,3-9).



                                                                                          será abandonado el territorio cu-
                                                                                          yos dos reyes te dan miedo»
                                                                                          (7,13-16).

                                                                                             Ezequías, el hijo de Ajaz que de-
                                                                                       bía nacer en reemplazo de su hijo sa-
elección divina de Jerusalén y de la        «Oíd pues, casa de David: ¿Os              crificado, era el signo de la supervi-
dinastía davídica.                          parece poco cansar a los hom-              vencia de la dinastía davídica más allá
      A pesar de que se le atribuye un      bres que cansáis también a mi              de esa angustiante crisis y, por lo tan-
origen aristocrático y que interviene       Dios? Pues bien, el Señor mis-             to, de la protección de YHWH sobre
mucho en el ámbito de la corte como         mo va a daros una señal: He aquí           Judá. En ese sentido, el niño llegaría
consejero, es claro que mantiene su         que una jóven está encinta y va a          a ser el signo visible de la presencia
libertad para recriminar los desacier-      dar a luz a un hijo, y le pondrá por       de Dios en medio de su pueblo (´im
tos de los reyes y para denunciar los       nombre Immanuel. Cuajada y                 manu ´el = con nosotros Dios). Era un
abusos de los poderosos (3,16,24;           miel comerá hasta que sepa re-             anuncio de esperanza, de una época
32,9-14). En esos casos muestra cer-        husar lo malo y elegir lo bueno.           de paz que se aproximaba con el nue-
canía con el pueblo explotado y extra-      Porque antes de que sepa el niño           vo rey. El hijo que le nació a Ajaz no
viado por sus gobernantes (1,17;            rehusar lo malo y elegir lo bueno,         debía tener más de tres o cuatro años
3,12-15).
      Una de las intervenciones más
contundentes de Isaías ha tenido
como marco la guerra siro-efraimita.
                                             La sintonía con el corazón de Dios
La falta de confianza del rey en el Dios
de la Alianza, manifestada como temor        Lo que distinguía al profeta del resto del pueblo era la experiencia de su
y como pedido de auxilio al rey de Asi-      vocación, que se daba bajo la forma de una alocución totalmente perso-
ria, suscitará la intervención de Isaías:    nal e inmediata de Dios. En virtud de esa palabra, cada uno de aquellos
                                             hombres se veía arrebatado del ambiente en que había vivido hasta
  «¡Alerta, pero ten calma! No te-           entonces para toda su vida o por un largo espacio de tiempo.
  mas, ni desmaye tu corazón por             Pero también la vocación profética se constituía mediante la experiencia
  ese para de cabos de tizones hu-           muy fuerte de la visión. Ésta familiarizaba al futuro mensajero con la
  meantes, ya que Aram, Efraím y             voluntad y los planes de Dios, haciendo que la mirada del profeta se
  el hijo de Remalías han maqui-             volviera clara y sus ojos se abrieran a realidades futuras.
  nado tu ruina diciendo: «Suba-             ¿Cómo explicar psicológicamente esta experiencia? El contenido y el
  mos contra Judá y desmem-                  tono de los discursos proféticos reflejan que el profeta, en esas situa-
  brémoslo, abramos brecha en él             ciones de visión, fue desligado de un modo especial de sí mismo, de
  y pongamos allí por rey al hijo de         sus sentimientos de gana o desgano, y fue introducido en el pathos del
  Tabel». Así ha dicho el Señor              mismo Dios. Dios comunicaba mediante su Espíritu (inspiraba) al cora-
  YHWH: no se mantendrá ni será              zón del profeta no sólo el conocimiento de los planes históricos, sino
  así; porque la capital de Aram es          también los afectos de su corazón divino: amor, cólera, preocupación
  Damasco, y el cabeza de Damas-             por los demás... De todo lo que pudiera suceder en YHWH, algo pasaba
  co, Rasón; Pues bien: dentro de            al psiquismo del profeta. Así el profeta se va a distinguir del asceta
  sesenta y cinco años Efraím de-            estoico, que busca la perfección y la semejanza con la divinidad en la a-
  jará de ser pueblo. La capital de          patía, en la inmutabilidad del espíritu (por supuesto que la divinidad
  Efraím es Samaría, y el cabeza             estoica es un ser supremo impersonal que determina un orden cósmi-
  de Samaría, el hijo de Remalías»           co, el Logos, pero no un Dios personal que obra en la historia); el profeta
  (7,4-8).                                   es el hombre de la sym-patía, es decir, de la comunión de sentimientos
                                             con Dios.
      El profeta reprochó duramente la       Y de este modo la clarividencia no era una simple adivinación del futuro,
actitud del rey que, antes de pedir auxi-    sino una certeza de lo que Dios haría, pues el profeta llegaba a sentir
lio a YHWH, había buscado su apoyo           como Dios.
en el poder militar extranjero:


La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén                                                                           53
cuando la desgracia anunciada por
Isaías cayó sobre Aram e Israel.
     Isaías intervino ante Ezequías
                                              Senaquerib sitia Jerusalén
cuando Sargón de Asiria se apoderó
de la ciudad costera de Asdod, ya que         «A Ezequías el judaíta, que no se había sometido a mi yugo, asedié y
su rey había intentado una revuelta           conquisté 46 de sus ciudades fuertes amuralladas e innumerables ciu-
esperanzado en la ayuda de los egip-          dades pequeñas de sus alrededores, por medio de apisonamiento de
cios, de las otras ciudades filisteas y       terraplenes y acercamiento de máquinas de asedio, ataques de infante-
del rey Ezequías. El profeta alcanzó a        ría, minas, brechas, escalas de asedio. Hice salir de su interior y conté
advertirle al rey a través de un signo        como botín 200.150 personas pequeñas y mayores, hombres y muje-
profético sobre el fracaso de la coali-       res, caballos, mulos, asnos, camellos, bueyes y ovejas sin número.
ción antiasiria alentada por Egipto:          Al citado Ezequías le derribó el terrible resplandor de mi soberanía. Hizo
                                              llevar tras de mí al interior de Nínive, mi ciudad real, a los Urbi y a sus
  «Habló YHWH por medio de                    soldados elegidos que había introducido para la defensa de Jerusalén,
  Isaías, hijo de Amós, en estos tér-         su ciudad real, pero que habían rehusado el servicio, con 30 talentos de
  minos: «Ve y desata el sayal de tu          oro, 800 talentos de plata, selección de antimonio, grandes bloques de
  cintura, y quítate las sandalias de         cornalina, lechos de marfil, sillones de marfil, piel de elefante, marfil,
  los pies». El lo hizo así, y anduvo         ébano, boj, toda clase de cosas, un gran tesoro y a sus hijas, sus muje-
  desnudo y descalzo. Dijo YHWH:              res de palacio, cantores, cantoras. Envió su mensajero para pagar tribu-
  «Así como ha andado mi siervo               to y prestar vasallaje»
  Isaías desnudo y descalzo tres
  años como señal y presagio res-                                                      Anales de Senaquerib, ANET 288
  pecto a Egipto y Kush (Etiopía),
  así conducirá el rey de Asiria a los
  cautivos de Egipto y a los depor-        líticas con los países vecinos. Sólo          se os convertirá en vergüenza, y
  tados de Kush, jóvenes y viejos,         en YHWH encontraría la firmeza que            el amparo de la sombra de Egip-
  desnudos, descalzos y nalgas al          buscaba inútilmente en los reinos po-         to, en confusión» (30,1-3).
  aire - desnudez de Egipto. Se que-       derosos que terminaban en la ruina.
  darán asustados y confusos por                 También intervino cuando Eze-             Las palabras de Isaías siguie-
  Kush, su esperanza, y por Egipto,        quías concretó finalmente su alianza       ron insistiendo siempre en el mismo
  su prez. Y dirán los habitantes de       con Egipto, conquistó las ciudades fi-     mensaje:
  esta costa aquel día: «Ahí tenéis        listeas fieles a Asiria (2 Re 18,8) y se
  en qué ha parado la esperanza            rebeló negándose a pagar el tributo           «Por la conversión y la calma se-
  nuestra, adonde acudíamos en             de vasallaje. El profeta no pudo me-          réis liberados, en el sociego y se-
  busca de auxilio para librarnos          nos que lamentar esta conducta que            guridad estará vuestra fuerza»
  del rey de Asiria. Pues ¿cómo nos        tanta ruina acarrearía al pueblo:             (30, 15).
  escaparemos nosotros?» (Is
  20,2-6).                                   «¡Ay de los hijos rebeldes - orá-              El resultado fue la destrucción por
                                             culo de YHWH- para ejecutar pla-         parte de Senaquerib de muchas ciu-
     El caminar desnudos y encade-           nes, que no son míos, y para ha-         dades de Judá. El rey asirio en esa
nados hacia el lugar de la deporta-          cer libaciones de alianza, más no        ocasión no quiso (o no logró) tomar la
ción era el modo habitual de conducir        a mi aire, amontonando pecado            capital del reino de Ezequias. Tal vez
a los desterrados. Así, la desnudez          sobre pecado! Los que bajan a            pudo haber preferido no arruinar total-
de Isaías llegó a ser una predicación        Egipto sin consultar a mi boca,          mente el país para asegurarse así el
viviente en la que exhortaba al rey a        para buscar apoyo en la fuerza de        tributo anual, conformándose sólo con
poner la confianza en YHWH, Señor            Faraón y ampararse a la sombra           eliminar sus defensas; o se retiró tal
de la historia, y no en las alianzas po-     de Egipto. La fuerza del Faraón          vez como consecuencia de una epide-




                                                                                 Relieve de la toma de Lakish y reconstrucción
                                                                                 de la batalla


54                                                                                              La época del Primer Templo
mia que diezmó su ejército. En este
sentido la fuga imprevista de los asi-             Una intervención milagrosa derrota a los asirios
rios, tal como está relatada en 2 Re
19,20-36 y en Is 36-37, se asemeja
                                                   «Habiendo sido invadido el Egipto por Senaquerib, rey de los árabes y
mucho a un relato del famoso histo-
                                                   de los asirios, con un grueso ejército, los guerreros del país no quisie-
riador griego Herodoto (Historia II,141).
                                                   ron tomar las armas en defensa de Setos. Viéndose el sacerdote-rey en
De modo que una tradición distinta de
                                                   tan apurado trance, entró en el templo de Hefesto, y allí, a los pies de su
2 Re 18,13-16 pudo haber conserva-
                                                   ídolo, plañía y lamentaba la desventura que iba a descargarse sobre su
do el recuerdo, deliberadamente silen-
                                                   cabeza. En medio de sollozos y suspiros sorprendióle el sueño, según
ciado por los Anales asirios, de un fra-
                                                   dicen, y mientras dormía se le apareció su dios, quien lo animó, asegu-
caso importante en la fulminate cam-
                                                   rándole que si salía a enfrentar al ejército de los árabes con sus tropas
paña del vencedor.
                                                   voluntarias, ningún mal le sucedería; que el mismo dios se encargaba
      Jerusalén se habría escapado de
                                                   de la defensa y cuidaría de enviarle socorro.
la destrucción con la que había sido
                                                   Confiado en su sueño, se anima el sacerdote a juntar un ejército con los
amenazada gracias a un aconteci-
                                                   egipcios que de buen grado quisieran seguirle, y se atrinchera con ellos
miento providencial ocasionado por la
                                                   en Pelusio, que es la puerta de Egipto. Ni un solo guerrero de profesión
intervención del Ángel de YHWH. Pero
                                                   se contaba en las tropas que se le juntaron, siendo sus soldados todos
seguía siendo una triste realidad que
                                                   mercaderes, artesanos y regatones vendedores. ¡Cosa singular!, des-
el territorio de Judá había quedado
                                                   pués que llegaron a Pelusio sucedió que infinidad de ratones esparci-
arruinado y reducido en favor de las
                                                   dos por el vecino campo de los enemigos, comieron de noche las alja-
ciudades filisteas de Asdod, Ecrón y
                                                   bas, comieron los nervios de los arreos, y finalmente, las mismas co-
Gaza, y que el reino de Ezequías tuvo
                                                   rreas que servían de asas en los escudos. Venido el día, y hallándose
que seguir sujeto al vasallaje del que
                                                   desarmados los invasores, se entregan a la fuga y perecen en gran
había querido librarse.
                                                   número. Al presente se ve todavía en el templo de Hefesto la estatua de
                                                   mármol de este rey con un ratón en la mano, y en ella se lee la inscrip-
Los oráculos de Miqueas                            ción siguiente: «Mírame, hombre, y aprende de mí a ser religioso»

       En este tiempo predicó también                                                                Herodoto Historia II,141
el profeta Miqueas. A diferencia de
Isaías, que era un allegado a la corte
de Jerusalén, Miqueas era un cam-
pesino que sufría en carne propia la            sea su paz. Porque, igual que Amós,       los responsables religiosos. Al ritmo
injusticia de los ricos y la política de        no es un turista ni un peregrino. Es un   del dinero danzan todas las personas
los dirigentes que llevaba a arruinar           profeta, que descubre el revés de la      importantes de Jerusalén. Y lo más
el país. Subió por eso a Jerusalén              trama. Prosperidad y progreso están       grave es que encima presumen de
para gritar la indignación de Dios, con         construidos con la sangre de los po-      religiosos e invocan la presencia de
más dureza que la que había usado               bres, a base de injusticias.              Dios para sentirse seguros. Come-
Isaías (3,9-12).                                     No sabemos a qué hechos con-         ten el pecado que más tarde denun-
       Este oráculo, uno de los más du-         cretos se refiere: quizá a los trabajos   ciará Jesœs: pretenden dar culto a
ros y famosos del Antiguo Testamen-             forzados, sin remuneración, a que las     Dios y al dinero. Pero sólo reservan
to, comienza denunciando a las auto-            autoridades someten al pueblo para        para Dios las palabras; las obras y
ridades por sus sentimientos (¡detes-           llevar a cabo su actividad constuctora    los corazones están lejos de él, cen-
táis la justicia!) y su actitud global (¡tor-   (algo parecido a lo que hará el rey       trados en la ganancia.
céis el derecho!). Pero a estos temas           Joaquín un siglo más tarde y denun-             Su mirada de campesino le dio
ya conocidos añade algo nuevo: esas             ció Jeremías); quizá a los duros tribu-   la originalidad con respecto a Isaías
personas tienen su centro de interés            tos que hacen posible el esplendor        de anunciar al Mesías como hijo del
en Sión-Jerusalén. Se preocupan por             de la capital. En cualquier caso, se      David pastor, y no del David rey:
ella, quieren mejorar y ampliar la ca-          trata de medidas crueles, criminales
pital.                                          y sangrientas.                              «Pero tú, Betlehem Efratá, aun-
       Para un campesino como Mi-                    ¿Cómo ha podido llegarse a esta        que eres la menor entre las fami-
queas, Jerusalén debía de ser un                situación de injusticia? Porque la co-      lias de Judá, de ti ha de salir aquel
gran espectáculo: «fijaos en sus ba-            dicia se adueña de todos, incluso de        que ha de dominar en Israel, y cu-
luartes, observad sus palacios» (Sal
48,14). Y debía resultar fácil inculcar-
le los sentimientos del Salmo 122:
«¡Qué alegría cuando me dijeron: ¡Va-              La denuncia del profeta
mos a la casa del Señor!... En nom-
bre de mis hermanos y compañeros,                  «Vosotros que detestáis la justicia y torcéis el derecho, edificáis con
te saludo con la paz; por la casa del              sangre a Sión, a Jerusalén con crímenes. Sus jefes juzgan por soborno,
Señor, nuestro Dios, te deseo todo                 sus sacerdotes predican a sueldo, sus profetas adivinan por dinero y
bien».                                             encima se apoyan en el Señor diciendo: ¿No está el Señor en medio de
       Pero Miqueas no pertenece a este            nosotros? No nos sucederá nada malo. Pues por vuestra culpa Sión
grupo. No ama Jerusalén, ni sus edifi-             será un campo arado, Jerusalén será una ruina, el monte del Señor un
cios ni su progreso. No cree en sus                cerro de breñas».
tribunales de justicia. No se siente                                                                           Miq 3,9-12
contento de estar en la ciudad. No de-


La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén                                                                           55
yos orígenes son de antigüedad,
  desde los días de antaño. Por                 Lo que Dios quiere de su pueblo
  eso Él los abandonará hasta el
  tiempo en que dé a luz la que ha              En su predicación Miqueas reunió toda una síntesis de los profetas de
  de dar a luz. Entonces el resto de            su tiempo, exigiendo la justicia como Amós, transmitiendo como Oseas
  sus hermanos volverá a los hijos              la ternura de Dios e insistiendo en la fe sencilla como Isaías. Según el
  de Israel. Él se alzará y pastorea-           profeta Dios pleitea con el pueblo, poniendo a la naturaleza como testi-
  rá con el poder de YHWH, con la               go. El motivo es la ingratitud ante los beneficios pasados. Ante este
  majestad del nombre de YHWH                   reproche, el pueblo desea mostrarse agradecido, acercarse al Señor,
  su Dios. Se asentarán bien, por-              pero sólo se le ocurre un camino: el culto. Miqueas le recuerda verdades
  que entonces se hará él grande                más antiguas e importantes:
  hasta los confines de la tierra. Él
  será la Paz. Si Asiria invade nues-             «Se te ha declarado, hombre, lo que es bueno, lo que YHWH de ti
  tra tierra, y huella nuestro suelo,             reclama: tan sólo practicar la equidad, amar la piedad y caminar
  suscitaremos contra ella siete                  humildemente con tu Dios» (Miq 6,8).
  pastores y ocho príncipes de
  hombres. Ellos pastorearán el                 La relación entre los beneficios iniciales y las exigencias que se plan-
  país de Asur con espada, y el país            tean al final es más clara de lo que puede parecer a primera vista. Todo
  de Nemrod con acero. Él nos li-               lo que Dios ha hecho por el pueblo: liberación de Egipto, salvación a
  brará de Asiria, si invade nuestra            través de Moisés y sus hermanos, protección en el desierto, bendición,
  tierra, y huella nuestra frontera»            paso de Jordán, entrada en Palestina, surgen del deseo divino de que
  (5,1-5).                                      su pueblo goce de libertad, de unas leyes y una tierra. Cuando se des-
                                                precia el derecho y la bondad se destruye el plan de Dios. Por el contra-
      En su palabra se actualizó la pro-        rios, cuando se practica el derecho y se ama la bondad, se continœa su
fecía de la mujer que engendraría a un          obra salvífica. Esto es lo más grande que el hombre puede ofrecer al
niño salvador de Israel, pronunciada            Señor: toda su vida, su actividad, sus sentimientos, al servicio de sus
treinta años antes por su colega Isaías.        planes. De las exigencias finales, las dos primeras, referentes al dere-
Ciertamente, Ezequías no había satis-           cho y la bondad, coinciden con lo dicho por otros profetas. La tercera
fecho en su reinado las esperanzas              (¡que camines humildemente con tu Dios!) representa algo nuevo e
del pueblo despertadas por el profeta           importante. Sólo quien reconoce con humildad su condición de creatura
con ocasión de su nacimiento. Habría            es capaz de vivir pendiente del Señor.
que esperar a otro rey mesías.

Los reyes impíos
                                            belión de Abdi-Milkutti de Sidón impul-     pudo reconquistarla, pero debió so-
      La espera del Mesías anuncia-         sada por Egipto. Manasés figura en-         portar por eso una nueva campaña
do podría llegar a ser muy larga, por-      tre la lista de los reyes tributarios que   dirigida por Assurbanipal, hijo de Asa-
que después de Ezequías, desde 687,         fueron sometidos.                           radón. Su marcha de conquista llegó
reinó en Jerusalén su hijo Manasés,               Pero Asaradón no tendría la si-       hasta Tebas, pero debió sofocar con
un monarca violento e impío que rei-        tuación controlada mientras el reino        dureza varias rebeliones hasta que el
nó 45 años, sometiéndose servilmen-         del Nilo continuara fomentando las re-      faraón Psamético I logró liberar a Egip-
te a los reyes de Asiria. En 677 Asara-     beliones de los vasallos de Asiria. Por     to del control asirio e, incluso, invadir
dón, el hijo de Senaquerib, sometió a       eso en 671 emprendió una campaña            la región de los filisteos en 640. Asiria
vasallaje a los reyes del oeste del         contra Egipto, al que conquistó hasta       comenzaba a dar claras señales de
Eufrates después de aplastar una re-        la ciudad de Menfis. El faraón Tarqû        fragilidad y una nueva potencia volvió
                                                                                        a cobrar fuerza en Mesopotamia: Ba-
                                                                                        bilonia.
                                                                                              Manasés sería recordado poste-
     El dominio de Asaradón                                                             riormente de una manera negativa a
                                                                                        causa del abandono de la reforma ini-
     «Convoqué a los reyes del país de Hatti y del otro lado del río: Ba’alu, rey       ciada por su padre y del fomento de la
     de Tiro, Manasés, rey de Judá... En total 22 reyes del país de Hatti, de la        idolatría como ningún otro lo había
     costa y del interior del mar. A todos ellos di órdenes y arrastraron peno-         hecho antes:
     samente y con dificultades desde las montañas donde se encuentran
     hasta Nínive, la ciudad real, grandes vigas, postes altos, travesaños                «Edificó altares a todo el ejército
     alargados de cedro y ciprés, producto del monte Sirara y del monte                   de los cielos en los dos patios de
     Líbano, que desde antiguo se habían hecho muy gruesos y altos (ANET                  la Casa de YHWH. Hizo pasar a
     291).                                                                                su hijo por el fuego; practicó los
                                                                                          presagios y los augurios, hizo
     «Puse en movimiento mis fuerzas escogidas, con que Assur e Ishtar                    traer adivinos y nigromantes, ha-
     habían llenado mis manos, y me encaminé derecho al país de Egipto y                  ciendo mucho mal a los ojos de
     de Nubia. En el curso de mi campaña trajeron ante mí su importante                   YHWH y provocando su cólera (2
     presente y besaron mis pies Ba’alu, rey de Tiro, Manasés, rey de Judá,               Re 21,5-6).
     Qa’ushgabri, rey de Edom, Musuri, rey de Moab, Silbel, rey de Gaza...»
     (ANET 294)                                                                              Amón, hijo de Manasés (642-
                                                                                        640), caminó enteramente por el ca-


56                                                                                               La época del Primer Templo
mino que siguió su padre, sirvió a los
ídolos a los que sirvió su padre y se
postró ante ellos. Abandonó a YHWH,
Dios de sus padres, y no anduvo por
el camino de YHWH (2 Re 21,21-22).
De esta manera breve y terminante
se transmitió a las generaciones si-
guientes el recuerdo de este rey im-
pío que reinó sólo dos años, ya que
pereció en una conjuración. Después
de matar a los conjurados, el pueblo
proclamó rey en su lugar a su hijo
Josías (2 Re 21,23) en el año 640.


La reforma del rey
Josías
      Al comenzar su reinado Josías
contaba con apenas ocho años de
edad, por lo cual el gobierno de Judá
quedó en manos de los funcionarios
reales. Pero a partir de los dieciocho
años Josías se hizo cargo de la situa-    en los tiempos del impío Manasés,          «Los altares que estaban sobre el
ción y emprendió la reconstrucción de     fue encontrado durante unos trabajos       terrado de la habitación superior de Ajaz,
su reino. Logró recuperar parte de los    de restauración ordenados por Jo-          que hicieron los reyes de Judá, y los
                                                                                     altares que hizo Manasés en los dos
territorios del reino del norte (2 Cro    sías. Este documento resultaba más
                                                                                     patios de la Casa de Yahveh, el rey los
34,6) aprovechando que desde el fi-       que oportuno para ser usado como           derribó, los rompió allí y arrojó sus
nal del reinado de Assurbanipal el        base de la reforma que el rey estaba       cenizas al torrente Cedrón.
imperio asirio había comenzado de-        emprendiendo en ese momento. Por           El rey profanó los altos que estaban
bilitarse ante el crecimiento sus veci-   esta razón se volvió a trabajar sobre      frente a Jerusalén, al sur del Monte de
nos del golfo pérsico. Además em-         ese documento, añadiéndole nuevos          los Olivos, que Salomón, rey de Israel,
prendió una profunda reforma religio-     pasajes.                                   había construido a Astarté, monstruo
sa (cf. 2 Re 22-23) y una vuelta al            Los legistas que trabajaron en        abominable de los sidonios, a Kemós,
                                                                                     monstruo abominable de Moab, y a
yahwismo estricto:                        el proyecto estaban convencidos de
                                                                                     Milkom, abominación de los amonitas.
                                          que el no haber cumplido los precep-       Rompió las estelas, cortó los cipos y llenó
  * Hizo desaparecer todo culto ex-       tos divinos había sido la causa de la      sus emplazamientos de los huesos
  tranjero, destruyendo sus respec-       ruina de Israel y de la muerte que ha-     humanos.
  tivos altares..                         bía alcanzado a tantos. Si Israel hu-      También el altar que había en Betel y el
  * Desautorizó todos los santua-         biese sido fiel a la Alianza pactada con   alto que hizo Jeroboam, hijo de Nebat, el
  rios fuera de Jerusalén (en espe-       YHWH la historia hubiese tomado otro       que hizo pecar a Israel, derribó este altar
  cial el de Betel, símbolo del cis-      curso. Se veía claro, entonces, que la     y este alto, rompió las piedras, las redujo
                                                                                     a polvo, y quemó el cipo».
  ma religioso), centralizando así el     única alternativa para vivir era obede-
                                                                                                                   2 Re 23,12-15
  culto.                                  cer las normas obligatorias que
  * Renovó la alianza de Siquem,          YHWH había revelado a su pueblo en
  invitando a observar la Alianza de      el Sinaí. Dicho de otro modo, con los      políticas demostraba que fuera de esta
  YHWH y a celebrar de nuevo la           mandamientos YHWH ofrecido la vida         obediencia la muerte era segura. El
  pascua en Jerusalén.                    a su pueblo:                               punto central y fundamento de todo el
  * Los levitas venidos del norte de-                                                trabajo era esta firme convicción:
  bieron someterse a los sacerdo-           «Pongo hoy por testigos contra
  tes de Jerusalén como simples             ustedes al cielo y a la tierra: te         «Escucha, Israel: YHWH nuestro
  servidores en el culto del templo.        pongo delante vida o muerte, ben-          Dios es el único YHWH. Amarás
                                            dición o maldición. Escoge la              a YHWH tu Dios con todo tu cora-
     Por todo eso, después del reina-       vida, para que vivas, tú y tu des-         zón, con toda tu alma y con toda
do de reyes tan impíos, el pueblo se        cendencia, amando a YHWH tu                tu fuerza» (Dt 6,4-5).
podía alegrar con la llegada de Jo-         Dios, escuchando su voz, vivien-
sías ¿Sería Josías ese nuevo David          do unido a Él; pues en eso está tu            Y como los legistas tenían la se-
esperado?                                   vida, así como la prolongación de        guridad de ser fieles al pensamiento
     Durante el reinado de Josías           tus días mientras habites en la          de Moisés y que él, si hubiera vivido
también se descubrió en el Templo           tierra que YHWH juró dar a tus           entonces, hubiera redactado las le-
un rollo que contenía aquellas leyes        padres Abraham, Isaac y Jacob            yes como ellos lo estaban haciendo,
que los refugiados del norte habían         (Dt 30,19s).                             pusieron la segunda versión de la Ley
estado trabajando durante el reinado                                                 (gr. Deuteronomio) en sus labios
de Ezequías. Abandonado deliberada-            El fracaso de tantos intentos de      como si se tratase de largos discur-
mente en algún depósito del Templo        salvación a través de las instancias       sos pronunciados por él antes de


La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén                                                                      57
morir. El marco escénico de la procla-      existencia debía dejar que YHWH lo           Ciertamente la caída de Sama-
mación de los discursos no podía ser        sustentara: «No sólo de pan vive el    ría habría producido un fuerte impac-
otro que el de la marcha por el desier-     hombre, sino que el hombre vive de     to en la fe del pueblo de Judá porque,
to antes del ingreso al país de Ca-         todo lo que sale de la boca de YHWH»   a pesar de la separación y de sus fre-
naán. La historia que había vivido el       (Dt 8,3).                              cuentes enfrentamientos con respec-
reino Israel hasta su ruina fue puesta                                             to a Israel, tenían tradiciones en co-
en boca de Moisés como si éste se                                                  mún y la certeza de ser un único pue-
anticipara al futuro: mientras habites      El profeta Jeremías:                   blo a quien Dios le había dado la tie-
en la tierra que YHWH juró dar a tus                                               rra. Por este motivo Jeremías ayudó a
padres.                                     anuncio de una Nueva                   mantener viva la esperanza de ver al-
      Pero a la vez la marcha de cua-       Alianza                                gún día la reunificación de todo el pue-
renta años fue relatada con caracte-                                               blo israelita:
rísticas muy propias de la experien-              En apoyo de este movimiento de
cia de esa historia del reino de Israel     renovación religiosa se sumó la voz      «He aquí que vienen días- orácu-
tan plagada de infidelidad.                 de un joven profeta de las cercanías     lo de YHWH- en que sembraré la
      Así, la mirada sobre el pasado,       de Jerusalén llamado Jeremías. Si-       casa de Israel y la casa de Judá
que permitía revisar la historia, tenía     guiendo a los profetas que le habían     de simiente de hombres y gana-
como finalidad que Israel pudiera re-       precedido, predicó una vuelta a la       dos. Entonces, del mismo modo
conocer lo permanente, lo único real-       Alianza con YHWH, única garantía de      que anduve presto contra ellos
mente importante: la infidelidad de Is-     salvación. Como antes lo había he-       para extirpar, destruir, arruinar,
rael ponía a prueba la fidelidad de         cho Oseas, él también presentó la        perder y dañar, así andaré respec-
Dios, que no cedía en su amor:              marcha por el desierto como un tiem-     to a ellos para reconstruir y replan-
                                            po de relaciones más puras entre Is-     tar- oráculo de YHWH» (Jer 31,27-
  «Date cuenta de que YHWH tu               rael y YHWH:                             28).
  Dios te corregía como un hom-
  bre corrige a su hijo, y guarda los         «Así dice YHWH: De ti recuerdo             Pero, plenamente conciente de
  mandamientos de YHWH tu Dios                tu cariño juvenil, el amor de tu     la larga experiencia histórica de ale-
  siguiendo sus caminos y temién-             noviazgo; aquel seguirme tú por      jamiento de la voluntad divina y del
  dole» (Dt 8,5-6).                           el desierto, por la tierra no sem-   quebrantamiento de la Alianza, profe-
                                              brada. Consagrado a YHWH es-         tizó para el futuro una Nueva Alianza:
       El pecado capital de Israel siem-      taba Israel, primicias de su co-
pre había consistido en haber proba-          secha... ¿Qué encontraron vues-        «Ésta será la Alianza que yo pac-
do la paciencia de Dios. Por eso uno          tros padres en mí de torcido, que      te con la casa de Israel, después
de los principales preceptos puesto           se alejaron de mi vera, y yendo        de aquellos días - o-ráculo de
en boca de Moisés ordenaba: «No ten-          en pos de la Vanidad se hicieron       YHWH - : pondré mi Ley en su in-
tarás al Señor tu Dios» (Dt 6,16).            vanos? En cambio no dijeron:           terior y sobre sus corazones la es-
       Y aunque para el Israel sedenta-       ¿Dónde está YHWH, que nos              cribiré, y yo seré su Dios y ellos
rio, instalado en los beneficios de la        subió de la tierra de Egipto, que      serán mi pueblo. Ya no tendrán
agricultura, resultara cada vez más           nos llevó por el desierto, por la      que adoctrinar más el uno a su
difícil comprender la vida en el desier-      estepa y el páramo, por tierra         prójimos y el otro a su hermano,
to, lo cierto era que en aquella tierra       seca y sombría, tierra por donde       diciendo: Conozcan a YHWH,
no sembrada Israel estuvo completa-           nadie pasa y en donde nadie se         pues todos ellos me conocerán
mente abandonado en los brazos de             asienta? Luego os traje a la tie-      del más chico al más grande -
YHWH, y ningún Baal se entrometía             rra del vergel, para comer su fru-     oráculo de YHWH - cuando
como aconteció más tarde en el país           to y su bien» (Jer 2,2-7).             perdo-ne su culpa, y de su peca-
agrícola. En todos los dominios de su                                                do no vuelva a acordarme» (Jer
                                                                                     31,33-34).

                                                                                         A la vez que la reforma religiosa
     Una Ley sabia                                                                 ayudaba a la consolidación interna de
                                                                                   su reino, la creciente debilidad de Asi-
     La obediencia que proponían los impulsores de la renovación no debía          ria le había permitido reconquista va-
     ser, por tanto, irreflexiva. Al contrario, el pueblo debía tomar conciencia   rios territorios del reino de Israel. Los
     que los preceptos de la Ley eran una verdadera fuente de sabiduría y          babilonios (llamados también cal-
     que la revelación de la voluntad divina podría ser siempre ocasión de         deos) y los medos aliándose entre sí
     meditación y de alegría sin fin:                                              habían tomado Assur en el 614, he-
                                                                                   cho que originó la esperanza de to-
       «Guárdenlos y cúmplanlos, porque ellos son su sabiduría y su pru-           dos los hasta entonces sometidos a
       dencia a los ojos de los pueblos; los cuales al oír estos manda-            su cruel dominio. Nínive cayó en el
       mientos dirán: «¡Cierto, es un pueblo sabio y prudente esta gran            612, y Harrán, el último bastión asirio,
       nación!» (Dt 4,6).                                                          se preparó para resistir el próximo
                                                                                   golpe.
     Un hombre cuya vida espiritual estuviera completamente llena de la                  Egipto, antiguo rival de Asiria,
     palabra divina podría sacar de ella la fuerza necesaria para su compor-       había cambiado de política unos años
     tamiento.                                                                     antes, convencido de que la ayuda
                                                                                   prestada a los ahora asirios impedi-


58                                                                                          La época del Primer Templo
Josías (26,16-24).
                                                                                           El hablar claramente al pueblo,
   Los egipcios quieren impedir la caída de Asiria                                    sin disimular el crítico momento que
                                                                                      se vivía bajo el impío Yoyaquim, fue
   El rey de Akkad (Babilonia) llegó a Harrán y conquistó la ciudad. Se llevó         para Jeremías el comienzo de una
   un botín inmenso de la ciudad y del templo. En el mes de addar el rey de           larga serie de sufrimientos. La fideli-
   Akkad dejó sus (¿...?); volvió a su país y los Umma-Manda (Medos), que             dad a la palabra de YHWH lo movió a
   habían venido en ayuda del rey de Akkad se retiraron. El decimoséptimo             hablar de un modo cada vez más duro
   año, en el mes de du’uzu, Ashshuruballit, rey de Asiria, y un ejército             contra la injusticia del soberano, con-
   numeroso de Misir (Egipto) cruzó el río y se dirigió contra la ciudad de           tra el culto formalista y vacío de los
   Harrán para conquistarla (... sitiaron). Las tropas que el rey de Akkad            sacerdotes, contra la mentira de los
   había estacionado en ella derrotaron. Cuando hubieron derrotado, se                falsos profetas que no querían hablar
   establecieron junto a Harrán. Llevó a cabo combates contra la ciudad               de la desgracia que se avecinaba (cf.
   hasta el mes de ululu, no tuvo éxito, pero no se retiraron. El rey de Akkad        5,1.11-13).
   vino en ayuda de sus tropas (ANET 305a).                                                Era, sin embargo, esa Palabra
                                                                                      de YHWH, no reconocida por los im-
                                                                                      penitentes y habitualmente temible
                                                                                      para quienes no querían tomar con-
ría el peligroso crecimiento medo-          seguridad con la que Jerusalén es-        ciencia del peligro que se acercaba,
babilónico y mantendría el equilibrio       peculaba su salvación, motivo por el      la que sostenía al profeta, que la sa-
de fuerzas en la región. Por eso, el        cual los sacerdotes y profetas pidie-     boreaba como un hambriento:
faraón Nekao II se dirigió a socorrer a     ron para él a los jefes del pueblo la
la sitiada Harrán, mientras que Josías      sentencia de muerte. Ante el tribunal          «Se presentaban tus palabras, y
intentó cerrarle el camino en el paso       Jeremías reiteró la amenaza de Dios:      yo las devoraba; era para mí tu pala-
de Meguido, en la llanura de Yizreel,                                                 bra un gozo y la alegría de mi cora-
para impedir la salvación asiria; allí el     «YHWH me ha enviado a profeti-          zón» (15,16).
piadoso rey judío fue derrotado y heri-       zar sobre esta Casa y esta ciu-
do de muerte. De todos modos Ha-              dad todo lo que habéis oído. Aho-             Después del triunfo sobre Asiria
rrán sucumbió y ya no pudo ser re-            ra bien, mejorad vuestros cami-         de Nabopolasar, rey de Babilonia, su
conquistada por la alianza asirio-egip-       nos y vuestras obras y oíd la voz       hijo Nabû-kudurri-usur (Nabucodono-
cia, como nos informa la crónica ba-          de YHWH vuestro Dios, y se arre-        sor), emprendió una campaña contra
bilónica.                                     pentirá YHWH del mal que ha pro-        los egipcios, a quienes venció en el
       El pueblo de Judá pasó así, en         nunciado contra vosotros»               605 en Karkemish, quedando con la
poco tiempo, del entusiasmo a la des-         (26,12-13).                             puerta abierta para entrar en la región
ilusión. La reforma religiosa iniciada                                                de Hatti. La crónica oficial babilónica
por Josías no prosperó bajo su hijo              Jeremías fue salvado de morir        conservada en el Museo Británico
Joacaz y la libertad disfrutada durante     en las manos del pueblo gracias a         cuenta que, al año siguiente, Nabu-
la debilidad de Asiria se esfumó bajo       que los jefes se inspiraron en el ejem-   codonosor sucedió a su padre en el
el dominio egipcio de Nekao, que al         plo de la tolerancia que años atrás el    trono y recorrió victoriosamente el país
regreso de su campaña destituyó y           rey Ezequías había tenido ante las        de Hattu hasta el mes de kislimu. To-
arrestó al rey de Jerusalem, imponien-      duras palabras de Miqueas, y también      dos los reyes de Hattu vinieron a su
do un pesadísimo tributo en oro y pla-      gracias a la intercesión de Shafan,       presencia y recibió un importante tri-
ta y colocando en el trono a Yoyaquim,      escriba colaborador de la reforma de      buto (ANET 564). En esa ocasión Yo-
el otro hijo de Josías (2 Re 24,31-35).

      Tras la muerte inesperada de Jo-
sías en la batalla de Meguido, Jere-           Confesiones de Jeremías
mías hizo al pueblo un llamado a asu-
mir el momento difícil que atravesaba          El drama de la vida de Jeremías nos muestra de un modo ejemplar la
el reino y a no quedarse detenidos en          naturaleza de la misión de todo profeta. La irrupción de Dios en su vida
la nostalgia: «No lloréis al muerto ni         y la vocación para la misión la experimentó de un modo violento pues,
plañáis por él: llorad, llorad por el que      siendo un hombre pacífico, tuvo que amenazar con terribles castigos
se va, porque jamás volverá ni verá            aunque con ello se le destrozara el corazón. Para un servicio tan exigen-
su patria» (Jer 22,10). El destierro de        te solamente forzado podía encaminarse este hombre: «Tú me has
Joacaz, hijo de Josías, era el signo           seducido, y yo me he dejado seducir; tú has sido más fuerte y me has
evidente del dominio egipcio, así              dominado» (20,7). Pero, a pesar de su imposibilidad de resistirse a la
como la sumisión de su hermano                 Palabra divina, algunas veces llegó al límite de sus fuerzas, hasta llegar
Yoyaquim era la señal de la libertad           a confesar abatido: «¡Maldito el día que nací!... ¿Para qué haber salido
perdida.                                       del seno, para ver pena y aflicción, y a consumirse en la vergüenza mis
      El profeta de Anatot se enfrenta-        días?» (20,14.18). Ciertamente, esta pasión sufrida por Jeremías pone
rá con los dirigentes, sacerdotes y fal-       en evidencia que la experiencia de la vocación transformaba la vida del
sos profetas de Jerusalén, a partir del        profeta, haciéndolo distinto de los demás hombres, y dejándolo sumer-
609, cuando levante su denuncia en             gido en la soledad: «nunca me senté en la reunión de los que ríen. Bajo
los mismos atrios del Templo (cap 7).          la presión de tu mano me senté solo; pues me has llenado de ira»
Jeremías se había atrevido a relativi-         (15,17).
zar aquello que constituía la mayor


La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén                                                                      59
mada el 16 de marzo de ese año, se-
                                                                                       gún la crónica caldea. Los israelitas
     Nabucodonosor el conquistador                                                     que narraron posteriormente este
                                                                                       suceso nos informan que Joaquim
     «El rey de Misir (Egipto) lo oyó y puso en movimiento sus tropas. En              fue deportado a Babilonia con parte
     batalla a campo abierto lucharon cuerpo a cuerpo uno contra otro y se             de la población de Jerusalem, y que
     infligieron mutuamente una gran derrota. El rey de Akkad y sus tropas             el rey establecido por los caldeos para
     dieron la vuelta y regresaron a Babilonia» (ANET 564)                             acatar sus órdenes fue su tío Matta-
                                                                                       nías, cuyo nombre fue cambiado en
     «Acampó contra la ciudad de Judá, conquistó la ciudad el mes de addar             Sedecías (2 Re 24,17).
     el día segundo e hizo prisionero a su rey. Puso en ella un rey de su gusto;             Pero esta lección no fue apren-
     tomó y se llevó a Babilonia su importante tributo» (ANET 564)                     dida por Sedecías que, llevado por los
                                                                                       falsos profetas, vió la deportación del
                                                                                       597 como algo pasajero. Eso lo llevó
                                                                                       a una vida despreocupada y a otra
yaquim de Judá también se sometió             donde reunió en gran número carros       alianza con Egipto contra Babilonia,
por un tiempo (2 Re 24,1), pero des-          y caballos. Sus campañas del otro        provocando a Nabucodonosor, que
pués se rebeló por instigación de             lado de Eufrates debieron limitarse en   sitió Jerusalem en el 588. Así, los ojos
Egipto.                                       el 599 simplemente a una incursión       de Sedecías tuvieron que contemplar
     Como antes le había ocurrido a           por el desierto contra los árabes, a     un horrible espectáculo antes de ver
Asiria, los caldeos no llegarían a do-        los que capturó en gran número, ade-     por última vez la luz: «Capturaron al
minar la región al occidente del Eufra-       más de sus bienes, ganados y dio-        rey y lo subieron a Riblá donde el rey
tes mientras Egipto tuviera algo de           ses en abundancia.                       de Babilonia, que lo sometió a juicio.
fuerza. De modo que Nabucodonosor                   En 597 Nabucodonosor pudo ha-      Los hijos de Sedecías fueron dego-
se lanzó a la conquista de Egipto en          cerse cargo nuevamente de la rebe-       llados a su vista, y a Sedecías le sacó
el 601, como relata la crónica babiló-        lión que Yoyaquim había iniciado alen-   los ojos, lo encadenó y lo llevó a Babi-
nica. La victoria del faraón Nekao in-        tado por Egipto. El trono de Judá ha-    lonia» (2 Re 25,6-7).
cluso obligó al rey caldeo a un año de        bía sido recientemente ocupado por             Jerusalem fue tomada y destrui-
acuertelamiento en su ciudad capital          su hijo Joaquim, que logró reinar sólo   da después de un año de asedio en
para poder reorganizar su ejército,           tres meses, ya que Jerusalem fue to-     julio del 587.

Así dice Yahveh Sebaot: «Asimismo quebrantaré yo
a este pueblo y a esta ciudad, como quien rompe un
cacharro de alfarería, que ya no tiene arreglo. «Y se
harán enterramientos en Tófet, hasta que falte sitio
para enterrar. Así haré con este lugar - oráculo de
Yahveh - y con sus habitantes, hasta dejar a esta
ciudad lo mismo que Tófet, y que sean las casas de
Jerusalén y las de los reyes de Judá como el lugar
de Tófet: una inmundicia; todas las casas en cuyas
azoteas incensaron a toda la tropa celeste y libaron
libación a otros dioses» (Jer 19,11-13).




60                                                                                              La época del Primer Templo

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El final de la monarquia

  • 1. YHWH Nuestro-Dios, el Unico. La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén La reforma de Ezequías Tiglatpileser sitia Damasco El siglo VIII es la época del ma- yor esplendor de Asiria y la peor situa- «Puse mi campamento en torno a su ciudad durante 45 días; lo encerré ción del reino de Israel. Después de como un pájaro enjaulado. Talé sus jardines, árboles innumerables de asesinar a Pecajías hijo de Menajem, los huertos, y no dejé ni uno. Asedié y conquisté la ciudad de Hadara, Pécaj hijo de Remalías se había sen- ciudad paterna de Rasón de Damasco, donde había nacido. Me llevé tado en el trono de Samaría en 737 y como botín 800 personas con su hacienda, sus bueyes, sus ovejas. Me buscó organizar una coalición contra llevé como botín 750 prisioneros de la ciudad de Kurssa, (...) de la ciu- Asiria. Para eso había conseguido dad de Irma, 550 prisioneros de la ciudad de Metuna. Destruí 591 ciuda- como aliado a Rasón de Damasco e des de los 16 distritos de Damasco dejándolas como un montón de intentaba arrastrar también a Ajaz. Al ruinas ocasionado por un diluvio» no lograrlo, israelitas y arameos si- tiaron Jerusalén para deponerlo y co- Anales de Tiglatpileser, ANET 283. ronar a un rey a su antojo. En esa situación desesperada Ajaz recurrió a los medios más extre- masco en 733 y se apoderó de la ciu- de Judá, convertido en vasallo suyo, mos. En primer lugar: dad (cf. 2 Re 16,9). La crónica asiria se mantuvo fiel a los asirios hasta su complementa las informaciones del muerte. Sargón no cesó con esto sus «hizo pasar por el fuego a su hijo, relato biblico. En lo que se refiere al intervenciones en la región, siguió según las abominaciones de las reino de Israel, su territorio quedó con- combatiendo al faraón y deportando naciones que YHWH había arroja- siderablemente reducido y se llevó a varias poblaciones árabes a Sama- do ante los israelitas» (2 Re 16,3). cabo una primera deportación (2 Re ría, según la política asiria acostum- 15,29). brada para impedir las sublevaciones Y a la vez que ofrecía este sacrifi- Pero a la muerte del monarca de los naturales en los territorios so- cio cruento a los dioses cananeos, asirio, el rey Oseas intentó terminar metidos. buscaba la protección asiria: con la sumisión, por lo cual Salma- Desde el punto de vista religio- nasar V emprendió una nueva cam- so, la llegada de pueblos muy distin- «Ajaz envió mensajeros a Tiglat- paña contra la región y obligó nueva- tos a Samaría trajo un sincretismo pileser, rey de Asiria, diciendo: mente a Israel a pagar tributo. En es- que fue juzgado con mucha severidad «Soy tu siervo y tu hijo. Sube, tas circunstancias Oseas especuló por los creyentes de Judá: pues, y sálvame de manos del rey con la ayuda que el faraón Tefnakht le de Aram y de manos del rey de prestaría para enfrentar a los asirios. «Cada nación se hizo sus dioses Israel que se han levantado con- Sus esperanzas se vieron frustradas y los pusieron en los templos de tra mí». Y tomó Ajaz la plata y el y Oseas quedó solo ante Asiria. El rey los altos que habían hecho los oro que había en la Casa de de Israel cayó prisionero y la capital samaritanos, cada nación en las YHWH y en los tesoros de la casa fue sitiada (2 Re 17,4-6). Samaría cayó ciudades que habitaba... Venera- del rey y lo envió al rey de Asiria finalmente en 721 después de un lar- ban también a YHWH y se hicie- como presente» (2 Re 16,7-8). go asedio, en el comienzo del reina- ron sacerdotes en los altos, to- do de Sargón II, hijo de Salmanasar. mados de entre ellos, que oficia- Respondiendo al llamado de El territorio del reino de Israel se ban por ellos en los templos de Ajaz, el rey de Asiria puso sitio a Da- convirtió en provincia asiria y el rey Ajaz los altos. Reverenciaban a YHWH y servían a sus dioses según el rito de las naciones de donde ha- bían sido deportados. Hasta el día de hoy siguen sus antiguos ritos» (2 Re 17,29. 32-34). En estos juicios se ve aparecer una hostilidad de los judíos de Jeru- salén contra los habitantes de Sama- ría, que se acentuará con el paso del tiempo. Sargón también se apoderó de la ciudad costera de Asdod, ya que su «En tiempo de Pecaj, rey de Israel, vino Teglatfalasar, rey de Asiria, y tomó Iyyón, Abel Bet Maacá, Yanóaj, Cadés, Jasor, Galaad, Galilea, todo el país de Neftalí, y los deportó a Asiria» (2 Re 15,29). 50 La época del Primer Templo
  • 2. Primera deportación de Israel «Del país de Israel (...) conduje a Asiria al conjunto de sus gentes con su hacienda. Derrocaron a Pécaj, su rey, y pusieron sobre ellos como rey a Oseas. Recibí de ellos 10 talentos de oro, 1000 talentos de plata como tributo anual» Anales de Tiglatpileser, ANET 283. Caída de Samaría «Desde el comienzo de mi reinado hasta el decimoquinto año del «El rey de Asiria subió por toda la tierra, mismo, derroté a Humbanigash, el elamita, en los alrededores de llegó a Samaría y la asedió durante tres Der. Sitié y conquisté la ciudad de Samaría; me llevé como botín años. El año noveno de Oseas, el rey de 27.290 habitantes de ella. Reuní 50 carros de entre ellos, e hice Asiria tomó Samaría y deportó a los trabajar al resto en su oficio. Puse al frente de ellos un alto funciona- israelitas a Asiria; los estableció en Jalaj, rio mío y les impuse el mismo tributo que el rey anterior» en el Jabor, río de Gozán, y en las ciudades de los medos» (2 Re 17,5-6). Inscripción de los Fastos, ANET 284. obra se pudo seguir desarrollando en Jerusalén gracias al ambiente de re- rey había intentado una revuelta es- rial propio la lectura de las tradicio- novación religiosa propiciado por Eze- peranzado en la ayuda de los egip- nes del Sur para consolidar en el pue- quías. En esta revisión de la Ley esta- cios, de las otras ciudades filisteas y blo una clara identidad nacional y reli- ba contenido el espíritu infundido por del rey Ezequías, el hijo de Ajaz. giosa. los grandes profetas Elías, Amós y El ejemplo de la disolución mo- La fusión intentó a la vez respe- Oseas, cuyas palabras los refugiados ral y religiosa que había experimenta- tar las dos tradiciones (a pesar de sus del norte también salvaron del olvido. do Samaría antes de su caída era un diferencias de ópticas) y asegurar la Junto a la reelaboración de las serio llamado de atención para los ha- coherencia del nuevo relato. Es por leyes, el espíritu profético llevaba tam- bitantes de Jerusalén, que parecían eso que de un mismo episodio el ac- bién a estos refugiados a hacer una estar siguiendo sus pasos. Por eso tual texto bíblico conserva a veces dos revisión de la historia para investigar Ezequías intentó una renovación para relatos con sus respectivas variacio- las causas de la destrucción de su su reino: nes. El resultado fue una obra que reino: ¿qué habría sido necesario mantiene la esperanza mesiánica da- hacer para permanecer fieles a Dios? «Él fue quien quitó los altos, derri- vídica propia del sur, y las exigencias La misma mirada crítica sobre las bó las estelas, cortó los cipos y morales y espirituales del norte. actitudes y decisiones de los sobera- rompió la serpiente de bronce que Además de sus tradiciones his- nos que había hecho hablar a los pro- había hecho Moisés, porque los tóricas propias, los refugiados del fetas también leía ahora los hechos israelitas le habían quemado in- norte se llevaron a Jerusalén sus co- de la historia reciente, de modo que cienso hasta aquellos días; se la lecciones de leyes que venían revi- algunos cronistas se permitieron na- llamaba Nejushtán» (2 Re 18,4). sando hacía ya mucho tiempo. Era rrar la historia de Israel de un modo evidente que la ley dada antiguamen- muy distinto del que lo habían hecho Mientras tanto, Jerusalén había te por Moisés resultaba anacrónica los historiadores cortesanos que re- abierto sus puertas a sus hermanos para aquel pueblo que había dejado dactaron los Anales del reino de Is- refugiados del norte, entre los cuales de ser nómade y que se había trans- rael y también los Anales del reino de había muchos levitas. A ellos se de- formado en un reino organizado. La Judá. bió que la literatura redactada en su necesaria adaptación de las leyes Quien quisiera escuchar, por suprimido reino se salvara de la des- antiguas y la creación de otras nue- ejemplo, las grandes hazañas que del aparición para siempre. De esta ma- vas requeridas para la vida sedenta- rey Ajab la historia oficial de Samaría nera las tradiciones del Norte llega- ria había comenzado a originar una relataba no tenía más que recurrir a ron hasta los escritores de la corte de especie segunda edición de la Ley de la obra redactada por los escritores Ezequías e iluminaron con su mate- Moisés (gr. deuteros-Nomos). Esta que habían estado a su servicio: «El resto de los hechos de Ajab, todo cuanto hizo, la casa de mar- Repoblación de Samaría fil que edificó, todas las ciudades que fortificó ¿no está escrito en el «A los Tamudi, los Ibadidi, los Marsimani, los Hayapa, árabes lejanos, libro de los Anales de los reyes habitantes del desierto, que no reconocían ni superior ni gobernador, y de Israel?» (1 Re 22,39) que no pagaban su tributo a rey alguno, los derroté en la confianza de Assur, mi señor; deporté a los restantes de ellos y los asenté en la Porque esa información tan elo- ciudad de Samaría» giosa los mismos reyes se encarga- ron de que fuese bien divulgada ya no Anales de Sargón, ANET 286a. era necesario volver a transmitirla. Los revisionistas se encargaron, más La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén 51
  • 3. bien, de seleccionar algunos pocos hechos, precisamente los no relata- El por qué del fracaso dos por la historia oficial, para emitir a partir de ellos juicios sobre el com- «Esto sucedió porque los israelitas habían pecado contra YHWH su portamiento moral y religioso de los Dios, que los había hecho subir de la tierra de Egipto, de bajo la mano reyes: de Faraón, rey de Egipto, y habían reverenciado a otros dioses, siguiendo las costumbres de las naciones que YHWH había arrojado delante de «Ajab, hijo de Omrí, hizo el mal a ellos. los ojos de YHWH más que to- Los israelitas maquinaron acciones no rectas contra YHWH su Dios, dos los que fueron antes que él» se edificaron altos en todas las ciudades, desde las torres de guardia (1 Re 16,30). hasta las ciudades fortificadas. Se alzaron estelas y cipos sobre toda colina elevada y bajo todo árbol frondoso, y quemaron allí, sobre todos Mientras que los Anales de la los altos, incienso, como las naciones que YHWH había expulsado de historia oficial no sobrevivieron al delante de ellos, y cometieron maldades, que irritaban a YHWH. Sirvieron paso de los años y son desconoci- a los ídolos acerca de los que YHWH les había dicho: «No haréis tal dos por nosotros, las versiones críti- cosa». cas de los revisionistas perduraron, YHWH advertía a Israel y Judá por boca de todos los profetas y de todos seguramente porque estuvieron bien los videntes diciendo: «Volveos de vuestros malos caminos y guardad lejos de las manos y tal vez del cono- mis mandamientos y mis preceptos conforme a la Ley que ordené a cimiento de los reyes. vuestros padres y que les envié por mano de mis siervos los profetas». Pero la purificación espiritual del Pero ellos no escucharon y endurecieron sus cervices como la cerviz de sus padres, que no creyeron en YHWH su Dios. pueblo no era, para Ezequías, sólo Despreciaron sus decretos y la alianza que hizo con sus padres y las una exigencia planteada a partir de la advertencias que les hizo, caminando en pos de vanidades, haciéndose predicación de los fervorosos profe- ellos mismos vanidad, en pos de las naciones que les rodeaban, acerca tas; era también una exigencia plan- de las que YHWH les había ordenado: «No haréis como ellas». teada por sus propias aspiraciones Abandonaron todos los mandamientos de YHWH su Dios, y se hicieron de independencia. Sólo de esta ma- ídolos fundidos, los dos becerros; se hicieron cipos y se postraron nera se podía hacer frente a un impe- ante todo el ejército de los cielos y dieron culto a Baal. Hicieron pasar a rio tan poderoso como Asiria. Por eso sus hijos y a sus hijas por el fuego, practicaron la adivinación y los Ezequías emprendió una nueva polí- augurios, y se prestaron a hacer lo malo a los ojos de YHWH, tica de alianza con Egipto, conquistó provocando su cólera. las ciudades filisteas fieles a Asiria (2 YHWH se airó en gran manera contra Israel y los apartó de su rostro, Re 18,8) y se rebeló negándose a quedando solamente la tribu de Judá» (2 Re 17,7-18). pagar el tributo de vasallaje. A causa de esta rebelión Sena- querib, el sucesor de Sargón, empren- dió en represalia una campaña con- Ecrón derrocó y entregó a Ezequías a tra Judá en el año 701. Para hacer su rey proasirio y pidió ayuda a Egip- Oráculos de Isaías frente a la invasión Ezequías fortificó to. Pero, habiendo vencido a los egip- Jerusalén y construyó un canal que cios, Senaquerib castigó despiadada- En medio de esta encrucijada llevara agua desde el torrente Guijón, mente a la ciudad. El rey destronado histórica se desarrolla el ministerio fuera de las murallas, hasta la pisci- por los propios filisteos en Ecrón re- profético de Isaías, hijo de Amós. El na de Silhoé, dentro de la ciudad. Gra- cobró el trono gracias a los asirios y lugar de procedencia de este mensa- cias a este conducto, que aún hoy se se comprometió nuevamente con jero de la palabra de YHWH parece ser puede recorrer, la ciudad podría so- ellos mediante el correspondiente tri- la misma Jerusalén, puesto que la brevivir un largo asedio sin falta de buto anual, pero las ciudades de Judá cultura que evidencia difícilmente se agua. debieron soportar los terribles golpes podría haber adquirido fuera de la ca- Si bien varias ciudades filisteas de Senaquerib. pital. Él se nutrirá de las principales se sometieron, otras resistieron. tradiciones allí cultivadas, que son la Aunque el texto de los Anales no menciona concretamente cuáles fueron las ciudades capturadas, un bajorrelieve del palacio real en Nínive representa de una manera escalofriante la toma de una de ellas; la inscripción explicativa dice: «Senaquerib, rey del universo, rey de Asiria, está sentado en un sillón y pasa ante él el botín de Lakish». En esa ciudad se encontraba el rey asirio cuando Ezequías, arrinconado en la sitiada Jerusalén, envió mensajeros para transmitir su Rendición de los habitantes de Lakish. decisión de pagar el tributo como Relieve del palacio de Senaquerib, en precio de la finalización del asedio Nínive. (cf. 2 Re 18,14-16). 52 La época del Primer Templo
  • 4. «Entonces Yahveh dijo a Isaías: «Ea, sal con tu hijo Sear Yasub al final del caño de la alberca superior, por la calzada del campo del Batanero, al encuentro de Ajaz, y dile: «¡Alerta, pero ten calma! No temas, ni desmaye tu corazón por ese par de cabos de tizones humeantes, ya que Aram, Efraím y el hijo de Remalías han maquinado tu ruina diciendo: Subamos contra Judá y desmembrémoslo, abramos brecha en él y pongamos allí por rey al hijo de Tabel". Así ha dicho el Señor Yahveh: No se mantendrá, ni será así; porque la capital de Aram es Damasco, y el cabeza de Damasco, Rasón; Pues bien: dentro de sesenta y cinco años, Efraím dejará de ser pueblo. La capital de Efraím es Samaría, y el cabeza de Samaría, el hijo de Remalías. Si no os afirmáis en mí no seréis firmes» (Is 7,3-9). será abandonado el territorio cu- yos dos reyes te dan miedo» (7,13-16). Ezequías, el hijo de Ajaz que de- bía nacer en reemplazo de su hijo sa- elección divina de Jerusalén y de la «Oíd pues, casa de David: ¿Os crificado, era el signo de la supervi- dinastía davídica. parece poco cansar a los hom- vencia de la dinastía davídica más allá A pesar de que se le atribuye un bres que cansáis también a mi de esa angustiante crisis y, por lo tan- origen aristocrático y que interviene Dios? Pues bien, el Señor mis- to, de la protección de YHWH sobre mucho en el ámbito de la corte como mo va a daros una señal: He aquí Judá. En ese sentido, el niño llegaría consejero, es claro que mantiene su que una jóven está encinta y va a a ser el signo visible de la presencia libertad para recriminar los desacier- dar a luz a un hijo, y le pondrá por de Dios en medio de su pueblo (´im tos de los reyes y para denunciar los nombre Immanuel. Cuajada y manu ´el = con nosotros Dios). Era un abusos de los poderosos (3,16,24; miel comerá hasta que sepa re- anuncio de esperanza, de una época 32,9-14). En esos casos muestra cer- husar lo malo y elegir lo bueno. de paz que se aproximaba con el nue- canía con el pueblo explotado y extra- Porque antes de que sepa el niño vo rey. El hijo que le nació a Ajaz no viado por sus gobernantes (1,17; rehusar lo malo y elegir lo bueno, debía tener más de tres o cuatro años 3,12-15). Una de las intervenciones más contundentes de Isaías ha tenido como marco la guerra siro-efraimita. La sintonía con el corazón de Dios La falta de confianza del rey en el Dios de la Alianza, manifestada como temor Lo que distinguía al profeta del resto del pueblo era la experiencia de su y como pedido de auxilio al rey de Asi- vocación, que se daba bajo la forma de una alocución totalmente perso- ria, suscitará la intervención de Isaías: nal e inmediata de Dios. En virtud de esa palabra, cada uno de aquellos hombres se veía arrebatado del ambiente en que había vivido hasta «¡Alerta, pero ten calma! No te- entonces para toda su vida o por un largo espacio de tiempo. mas, ni desmaye tu corazón por Pero también la vocación profética se constituía mediante la experiencia ese para de cabos de tizones hu- muy fuerte de la visión. Ésta familiarizaba al futuro mensajero con la meantes, ya que Aram, Efraím y voluntad y los planes de Dios, haciendo que la mirada del profeta se el hijo de Remalías han maqui- volviera clara y sus ojos se abrieran a realidades futuras. nado tu ruina diciendo: «Suba- ¿Cómo explicar psicológicamente esta experiencia? El contenido y el mos contra Judá y desmem- tono de los discursos proféticos reflejan que el profeta, en esas situa- brémoslo, abramos brecha en él ciones de visión, fue desligado de un modo especial de sí mismo, de y pongamos allí por rey al hijo de sus sentimientos de gana o desgano, y fue introducido en el pathos del Tabel». Así ha dicho el Señor mismo Dios. Dios comunicaba mediante su Espíritu (inspiraba) al cora- YHWH: no se mantendrá ni será zón del profeta no sólo el conocimiento de los planes históricos, sino así; porque la capital de Aram es también los afectos de su corazón divino: amor, cólera, preocupación Damasco, y el cabeza de Damas- por los demás... De todo lo que pudiera suceder en YHWH, algo pasaba co, Rasón; Pues bien: dentro de al psiquismo del profeta. Así el profeta se va a distinguir del asceta sesenta y cinco años Efraím de- estoico, que busca la perfección y la semejanza con la divinidad en la a- jará de ser pueblo. La capital de patía, en la inmutabilidad del espíritu (por supuesto que la divinidad Efraím es Samaría, y el cabeza estoica es un ser supremo impersonal que determina un orden cósmi- de Samaría, el hijo de Remalías» co, el Logos, pero no un Dios personal que obra en la historia); el profeta (7,4-8). es el hombre de la sym-patía, es decir, de la comunión de sentimientos con Dios. El profeta reprochó duramente la Y de este modo la clarividencia no era una simple adivinación del futuro, actitud del rey que, antes de pedir auxi- sino una certeza de lo que Dios haría, pues el profeta llegaba a sentir lio a YHWH, había buscado su apoyo como Dios. en el poder militar extranjero: La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén 53
  • 5. cuando la desgracia anunciada por Isaías cayó sobre Aram e Israel. Isaías intervino ante Ezequías Senaquerib sitia Jerusalén cuando Sargón de Asiria se apoderó de la ciudad costera de Asdod, ya que «A Ezequías el judaíta, que no se había sometido a mi yugo, asedié y su rey había intentado una revuelta conquisté 46 de sus ciudades fuertes amuralladas e innumerables ciu- esperanzado en la ayuda de los egip- dades pequeñas de sus alrededores, por medio de apisonamiento de cios, de las otras ciudades filisteas y terraplenes y acercamiento de máquinas de asedio, ataques de infante- del rey Ezequías. El profeta alcanzó a ría, minas, brechas, escalas de asedio. Hice salir de su interior y conté advertirle al rey a través de un signo como botín 200.150 personas pequeñas y mayores, hombres y muje- profético sobre el fracaso de la coali- res, caballos, mulos, asnos, camellos, bueyes y ovejas sin número. ción antiasiria alentada por Egipto: Al citado Ezequías le derribó el terrible resplandor de mi soberanía. Hizo llevar tras de mí al interior de Nínive, mi ciudad real, a los Urbi y a sus «Habló YHWH por medio de soldados elegidos que había introducido para la defensa de Jerusalén, Isaías, hijo de Amós, en estos tér- su ciudad real, pero que habían rehusado el servicio, con 30 talentos de minos: «Ve y desata el sayal de tu oro, 800 talentos de plata, selección de antimonio, grandes bloques de cintura, y quítate las sandalias de cornalina, lechos de marfil, sillones de marfil, piel de elefante, marfil, los pies». El lo hizo así, y anduvo ébano, boj, toda clase de cosas, un gran tesoro y a sus hijas, sus muje- desnudo y descalzo. Dijo YHWH: res de palacio, cantores, cantoras. Envió su mensajero para pagar tribu- «Así como ha andado mi siervo to y prestar vasallaje» Isaías desnudo y descalzo tres años como señal y presagio res- Anales de Senaquerib, ANET 288 pecto a Egipto y Kush (Etiopía), así conducirá el rey de Asiria a los cautivos de Egipto y a los depor- líticas con los países vecinos. Sólo se os convertirá en vergüenza, y tados de Kush, jóvenes y viejos, en YHWH encontraría la firmeza que el amparo de la sombra de Egip- desnudos, descalzos y nalgas al buscaba inútilmente en los reinos po- to, en confusión» (30,1-3). aire - desnudez de Egipto. Se que- derosos que terminaban en la ruina. darán asustados y confusos por También intervino cuando Eze- Las palabras de Isaías siguie- Kush, su esperanza, y por Egipto, quías concretó finalmente su alianza ron insistiendo siempre en el mismo su prez. Y dirán los habitantes de con Egipto, conquistó las ciudades fi- mensaje: esta costa aquel día: «Ahí tenéis listeas fieles a Asiria (2 Re 18,8) y se en qué ha parado la esperanza rebeló negándose a pagar el tributo «Por la conversión y la calma se- nuestra, adonde acudíamos en de vasallaje. El profeta no pudo me- réis liberados, en el sociego y se- busca de auxilio para librarnos nos que lamentar esta conducta que guridad estará vuestra fuerza» del rey de Asiria. Pues ¿cómo nos tanta ruina acarrearía al pueblo: (30, 15). escaparemos nosotros?» (Is 20,2-6). «¡Ay de los hijos rebeldes - orá- El resultado fue la destrucción por culo de YHWH- para ejecutar pla- parte de Senaquerib de muchas ciu- El caminar desnudos y encade- nes, que no son míos, y para ha- dades de Judá. El rey asirio en esa nados hacia el lugar de la deporta- cer libaciones de alianza, más no ocasión no quiso (o no logró) tomar la ción era el modo habitual de conducir a mi aire, amontonando pecado capital del reino de Ezequias. Tal vez a los desterrados. Así, la desnudez sobre pecado! Los que bajan a pudo haber preferido no arruinar total- de Isaías llegó a ser una predicación Egipto sin consultar a mi boca, mente el país para asegurarse así el viviente en la que exhortaba al rey a para buscar apoyo en la fuerza de tributo anual, conformándose sólo con poner la confianza en YHWH, Señor Faraón y ampararse a la sombra eliminar sus defensas; o se retiró tal de la historia, y no en las alianzas po- de Egipto. La fuerza del Faraón vez como consecuencia de una epide- Relieve de la toma de Lakish y reconstrucción de la batalla 54 La época del Primer Templo
  • 6. mia que diezmó su ejército. En este sentido la fuga imprevista de los asi- Una intervención milagrosa derrota a los asirios rios, tal como está relatada en 2 Re 19,20-36 y en Is 36-37, se asemeja «Habiendo sido invadido el Egipto por Senaquerib, rey de los árabes y mucho a un relato del famoso histo- de los asirios, con un grueso ejército, los guerreros del país no quisie- riador griego Herodoto (Historia II,141). ron tomar las armas en defensa de Setos. Viéndose el sacerdote-rey en De modo que una tradición distinta de tan apurado trance, entró en el templo de Hefesto, y allí, a los pies de su 2 Re 18,13-16 pudo haber conserva- ídolo, plañía y lamentaba la desventura que iba a descargarse sobre su do el recuerdo, deliberadamente silen- cabeza. En medio de sollozos y suspiros sorprendióle el sueño, según ciado por los Anales asirios, de un fra- dicen, y mientras dormía se le apareció su dios, quien lo animó, asegu- caso importante en la fulminate cam- rándole que si salía a enfrentar al ejército de los árabes con sus tropas paña del vencedor. voluntarias, ningún mal le sucedería; que el mismo dios se encargaba Jerusalén se habría escapado de de la defensa y cuidaría de enviarle socorro. la destrucción con la que había sido Confiado en su sueño, se anima el sacerdote a juntar un ejército con los amenazada gracias a un aconteci- egipcios que de buen grado quisieran seguirle, y se atrinchera con ellos miento providencial ocasionado por la en Pelusio, que es la puerta de Egipto. Ni un solo guerrero de profesión intervención del Ángel de YHWH. Pero se contaba en las tropas que se le juntaron, siendo sus soldados todos seguía siendo una triste realidad que mercaderes, artesanos y regatones vendedores. ¡Cosa singular!, des- el territorio de Judá había quedado pués que llegaron a Pelusio sucedió que infinidad de ratones esparci- arruinado y reducido en favor de las dos por el vecino campo de los enemigos, comieron de noche las alja- ciudades filisteas de Asdod, Ecrón y bas, comieron los nervios de los arreos, y finalmente, las mismas co- Gaza, y que el reino de Ezequías tuvo rreas que servían de asas en los escudos. Venido el día, y hallándose que seguir sujeto al vasallaje del que desarmados los invasores, se entregan a la fuga y perecen en gran había querido librarse. número. Al presente se ve todavía en el templo de Hefesto la estatua de mármol de este rey con un ratón en la mano, y en ella se lee la inscrip- Los oráculos de Miqueas ción siguiente: «Mírame, hombre, y aprende de mí a ser religioso» En este tiempo predicó también Herodoto Historia II,141 el profeta Miqueas. A diferencia de Isaías, que era un allegado a la corte de Jerusalén, Miqueas era un cam- pesino que sufría en carne propia la sea su paz. Porque, igual que Amós, los responsables religiosos. Al ritmo injusticia de los ricos y la política de no es un turista ni un peregrino. Es un del dinero danzan todas las personas los dirigentes que llevaba a arruinar profeta, que descubre el revés de la importantes de Jerusalén. Y lo más el país. Subió por eso a Jerusalén trama. Prosperidad y progreso están grave es que encima presumen de para gritar la indignación de Dios, con construidos con la sangre de los po- religiosos e invocan la presencia de más dureza que la que había usado bres, a base de injusticias. Dios para sentirse seguros. Come- Isaías (3,9-12). No sabemos a qué hechos con- ten el pecado que más tarde denun- Este oráculo, uno de los más du- cretos se refiere: quizá a los trabajos ciará Jesœs: pretenden dar culto a ros y famosos del Antiguo Testamen- forzados, sin remuneración, a que las Dios y al dinero. Pero sólo reservan to, comienza denunciando a las auto- autoridades someten al pueblo para para Dios las palabras; las obras y ridades por sus sentimientos (¡detes- llevar a cabo su actividad constuctora los corazones están lejos de él, cen- táis la justicia!) y su actitud global (¡tor- (algo parecido a lo que hará el rey trados en la ganancia. céis el derecho!). Pero a estos temas Joaquín un siglo más tarde y denun- Su mirada de campesino le dio ya conocidos añade algo nuevo: esas ció Jeremías); quizá a los duros tribu- la originalidad con respecto a Isaías personas tienen su centro de interés tos que hacen posible el esplendor de anunciar al Mesías como hijo del en Sión-Jerusalén. Se preocupan por de la capital. En cualquier caso, se David pastor, y no del David rey: ella, quieren mejorar y ampliar la ca- trata de medidas crueles, criminales pital. y sangrientas. «Pero tú, Betlehem Efratá, aun- Para un campesino como Mi- ¿Cómo ha podido llegarse a esta que eres la menor entre las fami- queas, Jerusalén debía de ser un situación de injusticia? Porque la co- lias de Judá, de ti ha de salir aquel gran espectáculo: «fijaos en sus ba- dicia se adueña de todos, incluso de que ha de dominar en Israel, y cu- luartes, observad sus palacios» (Sal 48,14). Y debía resultar fácil inculcar- le los sentimientos del Salmo 122: «¡Qué alegría cuando me dijeron: ¡Va- La denuncia del profeta mos a la casa del Señor!... En nom- bre de mis hermanos y compañeros, «Vosotros que detestáis la justicia y torcéis el derecho, edificáis con te saludo con la paz; por la casa del sangre a Sión, a Jerusalén con crímenes. Sus jefes juzgan por soborno, Señor, nuestro Dios, te deseo todo sus sacerdotes predican a sueldo, sus profetas adivinan por dinero y bien». encima se apoyan en el Señor diciendo: ¿No está el Señor en medio de Pero Miqueas no pertenece a este nosotros? No nos sucederá nada malo. Pues por vuestra culpa Sión grupo. No ama Jerusalén, ni sus edifi- será un campo arado, Jerusalén será una ruina, el monte del Señor un cios ni su progreso. No cree en sus cerro de breñas». tribunales de justicia. No se siente Miq 3,9-12 contento de estar en la ciudad. No de- La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén 55
  • 7. yos orígenes son de antigüedad, desde los días de antaño. Por Lo que Dios quiere de su pueblo eso Él los abandonará hasta el tiempo en que dé a luz la que ha En su predicación Miqueas reunió toda una síntesis de los profetas de de dar a luz. Entonces el resto de su tiempo, exigiendo la justicia como Amós, transmitiendo como Oseas sus hermanos volverá a los hijos la ternura de Dios e insistiendo en la fe sencilla como Isaías. Según el de Israel. Él se alzará y pastorea- profeta Dios pleitea con el pueblo, poniendo a la naturaleza como testi- rá con el poder de YHWH, con la go. El motivo es la ingratitud ante los beneficios pasados. Ante este majestad del nombre de YHWH reproche, el pueblo desea mostrarse agradecido, acercarse al Señor, su Dios. Se asentarán bien, por- pero sólo se le ocurre un camino: el culto. Miqueas le recuerda verdades que entonces se hará él grande más antiguas e importantes: hasta los confines de la tierra. Él será la Paz. Si Asiria invade nues- «Se te ha declarado, hombre, lo que es bueno, lo que YHWH de ti tra tierra, y huella nuestro suelo, reclama: tan sólo practicar la equidad, amar la piedad y caminar suscitaremos contra ella siete humildemente con tu Dios» (Miq 6,8). pastores y ocho príncipes de hombres. Ellos pastorearán el La relación entre los beneficios iniciales y las exigencias que se plan- país de Asur con espada, y el país tean al final es más clara de lo que puede parecer a primera vista. Todo de Nemrod con acero. Él nos li- lo que Dios ha hecho por el pueblo: liberación de Egipto, salvación a brará de Asiria, si invade nuestra través de Moisés y sus hermanos, protección en el desierto, bendición, tierra, y huella nuestra frontera» paso de Jordán, entrada en Palestina, surgen del deseo divino de que (5,1-5). su pueblo goce de libertad, de unas leyes y una tierra. Cuando se des- precia el derecho y la bondad se destruye el plan de Dios. Por el contra- En su palabra se actualizó la pro- rios, cuando se practica el derecho y se ama la bondad, se continœa su fecía de la mujer que engendraría a un obra salvífica. Esto es lo más grande que el hombre puede ofrecer al niño salvador de Israel, pronunciada Señor: toda su vida, su actividad, sus sentimientos, al servicio de sus treinta años antes por su colega Isaías. planes. De las exigencias finales, las dos primeras, referentes al dere- Ciertamente, Ezequías no había satis- cho y la bondad, coinciden con lo dicho por otros profetas. La tercera fecho en su reinado las esperanzas (¡que camines humildemente con tu Dios!) representa algo nuevo e del pueblo despertadas por el profeta importante. Sólo quien reconoce con humildad su condición de creatura con ocasión de su nacimiento. Habría es capaz de vivir pendiente del Señor. que esperar a otro rey mesías. Los reyes impíos belión de Abdi-Milkutti de Sidón impul- pudo reconquistarla, pero debió so- La espera del Mesías anuncia- sada por Egipto. Manasés figura en- portar por eso una nueva campaña do podría llegar a ser muy larga, por- tre la lista de los reyes tributarios que dirigida por Assurbanipal, hijo de Asa- que después de Ezequías, desde 687, fueron sometidos. radón. Su marcha de conquista llegó reinó en Jerusalén su hijo Manasés, Pero Asaradón no tendría la si- hasta Tebas, pero debió sofocar con un monarca violento e impío que rei- tuación controlada mientras el reino dureza varias rebeliones hasta que el nó 45 años, sometiéndose servilmen- del Nilo continuara fomentando las re- faraón Psamético I logró liberar a Egip- te a los reyes de Asiria. En 677 Asara- beliones de los vasallos de Asiria. Por to del control asirio e, incluso, invadir dón, el hijo de Senaquerib, sometió a eso en 671 emprendió una campaña la región de los filisteos en 640. Asiria vasallaje a los reyes del oeste del contra Egipto, al que conquistó hasta comenzaba a dar claras señales de Eufrates después de aplastar una re- la ciudad de Menfis. El faraón Tarqû fragilidad y una nueva potencia volvió a cobrar fuerza en Mesopotamia: Ba- bilonia. Manasés sería recordado poste- El dominio de Asaradón riormente de una manera negativa a causa del abandono de la reforma ini- «Convoqué a los reyes del país de Hatti y del otro lado del río: Ba’alu, rey ciada por su padre y del fomento de la de Tiro, Manasés, rey de Judá... En total 22 reyes del país de Hatti, de la idolatría como ningún otro lo había costa y del interior del mar. A todos ellos di órdenes y arrastraron peno- hecho antes: samente y con dificultades desde las montañas donde se encuentran hasta Nínive, la ciudad real, grandes vigas, postes altos, travesaños «Edificó altares a todo el ejército alargados de cedro y ciprés, producto del monte Sirara y del monte de los cielos en los dos patios de Líbano, que desde antiguo se habían hecho muy gruesos y altos (ANET la Casa de YHWH. Hizo pasar a 291). su hijo por el fuego; practicó los presagios y los augurios, hizo «Puse en movimiento mis fuerzas escogidas, con que Assur e Ishtar traer adivinos y nigromantes, ha- habían llenado mis manos, y me encaminé derecho al país de Egipto y ciendo mucho mal a los ojos de de Nubia. En el curso de mi campaña trajeron ante mí su importante YHWH y provocando su cólera (2 presente y besaron mis pies Ba’alu, rey de Tiro, Manasés, rey de Judá, Re 21,5-6). Qa’ushgabri, rey de Edom, Musuri, rey de Moab, Silbel, rey de Gaza...» (ANET 294) Amón, hijo de Manasés (642- 640), caminó enteramente por el ca- 56 La época del Primer Templo
  • 8. mino que siguió su padre, sirvió a los ídolos a los que sirvió su padre y se postró ante ellos. Abandonó a YHWH, Dios de sus padres, y no anduvo por el camino de YHWH (2 Re 21,21-22). De esta manera breve y terminante se transmitió a las generaciones si- guientes el recuerdo de este rey im- pío que reinó sólo dos años, ya que pereció en una conjuración. Después de matar a los conjurados, el pueblo proclamó rey en su lugar a su hijo Josías (2 Re 21,23) en el año 640. La reforma del rey Josías Al comenzar su reinado Josías contaba con apenas ocho años de edad, por lo cual el gobierno de Judá quedó en manos de los funcionarios reales. Pero a partir de los dieciocho años Josías se hizo cargo de la situa- en los tiempos del impío Manasés, «Los altares que estaban sobre el ción y emprendió la reconstrucción de fue encontrado durante unos trabajos terrado de la habitación superior de Ajaz, su reino. Logró recuperar parte de los de restauración ordenados por Jo- que hicieron los reyes de Judá, y los altares que hizo Manasés en los dos territorios del reino del norte (2 Cro sías. Este documento resultaba más patios de la Casa de Yahveh, el rey los 34,6) aprovechando que desde el fi- que oportuno para ser usado como derribó, los rompió allí y arrojó sus nal del reinado de Assurbanipal el base de la reforma que el rey estaba cenizas al torrente Cedrón. imperio asirio había comenzado de- emprendiendo en ese momento. Por El rey profanó los altos que estaban bilitarse ante el crecimiento sus veci- esta razón se volvió a trabajar sobre frente a Jerusalén, al sur del Monte de nos del golfo pérsico. Además em- ese documento, añadiéndole nuevos los Olivos, que Salomón, rey de Israel, prendió una profunda reforma religio- pasajes. había construido a Astarté, monstruo sa (cf. 2 Re 22-23) y una vuelta al Los legistas que trabajaron en abominable de los sidonios, a Kemós, monstruo abominable de Moab, y a yahwismo estricto: el proyecto estaban convencidos de Milkom, abominación de los amonitas. que el no haber cumplido los precep- Rompió las estelas, cortó los cipos y llenó * Hizo desaparecer todo culto ex- tos divinos había sido la causa de la sus emplazamientos de los huesos tranjero, destruyendo sus respec- ruina de Israel y de la muerte que ha- humanos. tivos altares.. bía alcanzado a tantos. Si Israel hu- También el altar que había en Betel y el * Desautorizó todos los santua- biese sido fiel a la Alianza pactada con alto que hizo Jeroboam, hijo de Nebat, el rios fuera de Jerusalén (en espe- YHWH la historia hubiese tomado otro que hizo pecar a Israel, derribó este altar cial el de Betel, símbolo del cis- curso. Se veía claro, entonces, que la y este alto, rompió las piedras, las redujo a polvo, y quemó el cipo». ma religioso), centralizando así el única alternativa para vivir era obede- 2 Re 23,12-15 culto. cer las normas obligatorias que * Renovó la alianza de Siquem, YHWH había revelado a su pueblo en invitando a observar la Alianza de el Sinaí. Dicho de otro modo, con los políticas demostraba que fuera de esta YHWH y a celebrar de nuevo la mandamientos YHWH ofrecido la vida obediencia la muerte era segura. El pascua en Jerusalén. a su pueblo: punto central y fundamento de todo el * Los levitas venidos del norte de- trabajo era esta firme convicción: bieron someterse a los sacerdo- «Pongo hoy por testigos contra tes de Jerusalén como simples ustedes al cielo y a la tierra: te «Escucha, Israel: YHWH nuestro servidores en el culto del templo. pongo delante vida o muerte, ben- Dios es el único YHWH. Amarás dición o maldición. Escoge la a YHWH tu Dios con todo tu cora- Por todo eso, después del reina- vida, para que vivas, tú y tu des- zón, con toda tu alma y con toda do de reyes tan impíos, el pueblo se cendencia, amando a YHWH tu tu fuerza» (Dt 6,4-5). podía alegrar con la llegada de Jo- Dios, escuchando su voz, vivien- sías ¿Sería Josías ese nuevo David do unido a Él; pues en eso está tu Y como los legistas tenían la se- esperado? vida, así como la prolongación de guridad de ser fieles al pensamiento Durante el reinado de Josías tus días mientras habites en la de Moisés y que él, si hubiera vivido también se descubrió en el Templo tierra que YHWH juró dar a tus entonces, hubiera redactado las le- un rollo que contenía aquellas leyes padres Abraham, Isaac y Jacob yes como ellos lo estaban haciendo, que los refugiados del norte habían (Dt 30,19s). pusieron la segunda versión de la Ley estado trabajando durante el reinado (gr. Deuteronomio) en sus labios de Ezequías. Abandonado deliberada- El fracaso de tantos intentos de como si se tratase de largos discur- mente en algún depósito del Templo salvación a través de las instancias sos pronunciados por él antes de La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén 57
  • 9. morir. El marco escénico de la procla- existencia debía dejar que YHWH lo Ciertamente la caída de Sama- mación de los discursos no podía ser sustentara: «No sólo de pan vive el ría habría producido un fuerte impac- otro que el de la marcha por el desier- hombre, sino que el hombre vive de to en la fe del pueblo de Judá porque, to antes del ingreso al país de Ca- todo lo que sale de la boca de YHWH» a pesar de la separación y de sus fre- naán. La historia que había vivido el (Dt 8,3). cuentes enfrentamientos con respec- reino Israel hasta su ruina fue puesta to a Israel, tenían tradiciones en co- en boca de Moisés como si éste se mún y la certeza de ser un único pue- anticipara al futuro: mientras habites El profeta Jeremías: blo a quien Dios le había dado la tie- en la tierra que YHWH juró dar a tus rra. Por este motivo Jeremías ayudó a padres. anuncio de una Nueva mantener viva la esperanza de ver al- Pero a la vez la marcha de cua- Alianza gún día la reunificación de todo el pue- renta años fue relatada con caracte- blo israelita: rísticas muy propias de la experien- En apoyo de este movimiento de cia de esa historia del reino de Israel renovación religiosa se sumó la voz «He aquí que vienen días- orácu- tan plagada de infidelidad. de un joven profeta de las cercanías lo de YHWH- en que sembraré la Así, la mirada sobre el pasado, de Jerusalén llamado Jeremías. Si- casa de Israel y la casa de Judá que permitía revisar la historia, tenía guiendo a los profetas que le habían de simiente de hombres y gana- como finalidad que Israel pudiera re- precedido, predicó una vuelta a la dos. Entonces, del mismo modo conocer lo permanente, lo único real- Alianza con YHWH, única garantía de que anduve presto contra ellos mente importante: la infidelidad de Is- salvación. Como antes lo había he- para extirpar, destruir, arruinar, rael ponía a prueba la fidelidad de cho Oseas, él también presentó la perder y dañar, así andaré respec- Dios, que no cedía en su amor: marcha por el desierto como un tiem- to a ellos para reconstruir y replan- po de relaciones más puras entre Is- tar- oráculo de YHWH» (Jer 31,27- «Date cuenta de que YHWH tu rael y YHWH: 28). Dios te corregía como un hom- bre corrige a su hijo, y guarda los «Así dice YHWH: De ti recuerdo Pero, plenamente conciente de mandamientos de YHWH tu Dios tu cariño juvenil, el amor de tu la larga experiencia histórica de ale- siguiendo sus caminos y temién- noviazgo; aquel seguirme tú por jamiento de la voluntad divina y del dole» (Dt 8,5-6). el desierto, por la tierra no sem- quebrantamiento de la Alianza, profe- brada. Consagrado a YHWH es- tizó para el futuro una Nueva Alianza: El pecado capital de Israel siem- taba Israel, primicias de su co- pre había consistido en haber proba- secha... ¿Qué encontraron vues- «Ésta será la Alianza que yo pac- do la paciencia de Dios. Por eso uno tros padres en mí de torcido, que te con la casa de Israel, después de los principales preceptos puesto se alejaron de mi vera, y yendo de aquellos días - o-ráculo de en boca de Moisés ordenaba: «No ten- en pos de la Vanidad se hicieron YHWH - : pondré mi Ley en su in- tarás al Señor tu Dios» (Dt 6,16). vanos? En cambio no dijeron: terior y sobre sus corazones la es- Y aunque para el Israel sedenta- ¿Dónde está YHWH, que nos cribiré, y yo seré su Dios y ellos rio, instalado en los beneficios de la subió de la tierra de Egipto, que serán mi pueblo. Ya no tendrán agricultura, resultara cada vez más nos llevó por el desierto, por la que adoctrinar más el uno a su difícil comprender la vida en el desier- estepa y el páramo, por tierra prójimos y el otro a su hermano, to, lo cierto era que en aquella tierra seca y sombría, tierra por donde diciendo: Conozcan a YHWH, no sembrada Israel estuvo completa- nadie pasa y en donde nadie se pues todos ellos me conocerán mente abandonado en los brazos de asienta? Luego os traje a la tie- del más chico al más grande - YHWH, y ningún Baal se entrometía rra del vergel, para comer su fru- oráculo de YHWH - cuando como aconteció más tarde en el país to y su bien» (Jer 2,2-7). perdo-ne su culpa, y de su peca- agrícola. En todos los dominios de su do no vuelva a acordarme» (Jer 31,33-34). A la vez que la reforma religiosa Una Ley sabia ayudaba a la consolidación interna de su reino, la creciente debilidad de Asi- La obediencia que proponían los impulsores de la renovación no debía ria le había permitido reconquista va- ser, por tanto, irreflexiva. Al contrario, el pueblo debía tomar conciencia rios territorios del reino de Israel. Los que los preceptos de la Ley eran una verdadera fuente de sabiduría y babilonios (llamados también cal- que la revelación de la voluntad divina podría ser siempre ocasión de deos) y los medos aliándose entre sí meditación y de alegría sin fin: habían tomado Assur en el 614, he- cho que originó la esperanza de to- «Guárdenlos y cúmplanlos, porque ellos son su sabiduría y su pru- dos los hasta entonces sometidos a dencia a los ojos de los pueblos; los cuales al oír estos manda- su cruel dominio. Nínive cayó en el mientos dirán: «¡Cierto, es un pueblo sabio y prudente esta gran 612, y Harrán, el último bastión asirio, nación!» (Dt 4,6). se preparó para resistir el próximo golpe. Un hombre cuya vida espiritual estuviera completamente llena de la Egipto, antiguo rival de Asiria, palabra divina podría sacar de ella la fuerza necesaria para su compor- había cambiado de política unos años tamiento. antes, convencido de que la ayuda prestada a los ahora asirios impedi- 58 La época del Primer Templo
  • 10. Josías (26,16-24). El hablar claramente al pueblo, Los egipcios quieren impedir la caída de Asiria sin disimular el crítico momento que se vivía bajo el impío Yoyaquim, fue El rey de Akkad (Babilonia) llegó a Harrán y conquistó la ciudad. Se llevó para Jeremías el comienzo de una un botín inmenso de la ciudad y del templo. En el mes de addar el rey de larga serie de sufrimientos. La fideli- Akkad dejó sus (¿...?); volvió a su país y los Umma-Manda (Medos), que dad a la palabra de YHWH lo movió a habían venido en ayuda del rey de Akkad se retiraron. El decimoséptimo hablar de un modo cada vez más duro año, en el mes de du’uzu, Ashshuruballit, rey de Asiria, y un ejército contra la injusticia del soberano, con- numeroso de Misir (Egipto) cruzó el río y se dirigió contra la ciudad de tra el culto formalista y vacío de los Harrán para conquistarla (... sitiaron). Las tropas que el rey de Akkad sacerdotes, contra la mentira de los había estacionado en ella derrotaron. Cuando hubieron derrotado, se falsos profetas que no querían hablar establecieron junto a Harrán. Llevó a cabo combates contra la ciudad de la desgracia que se avecinaba (cf. hasta el mes de ululu, no tuvo éxito, pero no se retiraron. El rey de Akkad 5,1.11-13). vino en ayuda de sus tropas (ANET 305a). Era, sin embargo, esa Palabra de YHWH, no reconocida por los im- penitentes y habitualmente temible para quienes no querían tomar con- ría el peligroso crecimiento medo- seguridad con la que Jerusalén es- ciencia del peligro que se acercaba, babilónico y mantendría el equilibrio peculaba su salvación, motivo por el la que sostenía al profeta, que la sa- de fuerzas en la región. Por eso, el cual los sacerdotes y profetas pidie- boreaba como un hambriento: faraón Nekao II se dirigió a socorrer a ron para él a los jefes del pueblo la la sitiada Harrán, mientras que Josías sentencia de muerte. Ante el tribunal «Se presentaban tus palabras, y intentó cerrarle el camino en el paso Jeremías reiteró la amenaza de Dios: yo las devoraba; era para mí tu pala- de Meguido, en la llanura de Yizreel, bra un gozo y la alegría de mi cora- para impedir la salvación asiria; allí el «YHWH me ha enviado a profeti- zón» (15,16). piadoso rey judío fue derrotado y heri- zar sobre esta Casa y esta ciu- do de muerte. De todos modos Ha- dad todo lo que habéis oído. Aho- Después del triunfo sobre Asiria rrán sucumbió y ya no pudo ser re- ra bien, mejorad vuestros cami- de Nabopolasar, rey de Babilonia, su conquistada por la alianza asirio-egip- nos y vuestras obras y oíd la voz hijo Nabû-kudurri-usur (Nabucodono- cia, como nos informa la crónica ba- de YHWH vuestro Dios, y se arre- sor), emprendió una campaña contra bilónica. pentirá YHWH del mal que ha pro- los egipcios, a quienes venció en el El pueblo de Judá pasó así, en nunciado contra vosotros» 605 en Karkemish, quedando con la poco tiempo, del entusiasmo a la des- (26,12-13). puerta abierta para entrar en la región ilusión. La reforma religiosa iniciada de Hatti. La crónica oficial babilónica por Josías no prosperó bajo su hijo Jeremías fue salvado de morir conservada en el Museo Británico Joacaz y la libertad disfrutada durante en las manos del pueblo gracias a cuenta que, al año siguiente, Nabu- la debilidad de Asiria se esfumó bajo que los jefes se inspiraron en el ejem- codonosor sucedió a su padre en el el dominio egipcio de Nekao, que al plo de la tolerancia que años atrás el trono y recorrió victoriosamente el país regreso de su campaña destituyó y rey Ezequías había tenido ante las de Hattu hasta el mes de kislimu. To- arrestó al rey de Jerusalem, imponien- duras palabras de Miqueas, y también dos los reyes de Hattu vinieron a su do un pesadísimo tributo en oro y pla- gracias a la intercesión de Shafan, presencia y recibió un importante tri- ta y colocando en el trono a Yoyaquim, escriba colaborador de la reforma de buto (ANET 564). En esa ocasión Yo- el otro hijo de Josías (2 Re 24,31-35). Tras la muerte inesperada de Jo- sías en la batalla de Meguido, Jere- Confesiones de Jeremías mías hizo al pueblo un llamado a asu- mir el momento difícil que atravesaba El drama de la vida de Jeremías nos muestra de un modo ejemplar la el reino y a no quedarse detenidos en naturaleza de la misión de todo profeta. La irrupción de Dios en su vida la nostalgia: «No lloréis al muerto ni y la vocación para la misión la experimentó de un modo violento pues, plañáis por él: llorad, llorad por el que siendo un hombre pacífico, tuvo que amenazar con terribles castigos se va, porque jamás volverá ni verá aunque con ello se le destrozara el corazón. Para un servicio tan exigen- su patria» (Jer 22,10). El destierro de te solamente forzado podía encaminarse este hombre: «Tú me has Joacaz, hijo de Josías, era el signo seducido, y yo me he dejado seducir; tú has sido más fuerte y me has evidente del dominio egipcio, así dominado» (20,7). Pero, a pesar de su imposibilidad de resistirse a la como la sumisión de su hermano Palabra divina, algunas veces llegó al límite de sus fuerzas, hasta llegar Yoyaquim era la señal de la libertad a confesar abatido: «¡Maldito el día que nací!... ¿Para qué haber salido perdida. del seno, para ver pena y aflicción, y a consumirse en la vergüenza mis El profeta de Anatot se enfrenta- días?» (20,14.18). Ciertamente, esta pasión sufrida por Jeremías pone rá con los dirigentes, sacerdotes y fal- en evidencia que la experiencia de la vocación transformaba la vida del sos profetas de Jerusalén, a partir del profeta, haciéndolo distinto de los demás hombres, y dejándolo sumer- 609, cuando levante su denuncia en gido en la soledad: «nunca me senté en la reunión de los que ríen. Bajo los mismos atrios del Templo (cap 7). la presión de tu mano me senté solo; pues me has llenado de ira» Jeremías se había atrevido a relativi- (15,17). zar aquello que constituía la mayor La teología de los reformadores cultuales de Jerusalén 59
  • 11. mada el 16 de marzo de ese año, se- gún la crónica caldea. Los israelitas Nabucodonosor el conquistador que narraron posteriormente este suceso nos informan que Joaquim «El rey de Misir (Egipto) lo oyó y puso en movimiento sus tropas. En fue deportado a Babilonia con parte batalla a campo abierto lucharon cuerpo a cuerpo uno contra otro y se de la población de Jerusalem, y que infligieron mutuamente una gran derrota. El rey de Akkad y sus tropas el rey establecido por los caldeos para dieron la vuelta y regresaron a Babilonia» (ANET 564) acatar sus órdenes fue su tío Matta- nías, cuyo nombre fue cambiado en «Acampó contra la ciudad de Judá, conquistó la ciudad el mes de addar Sedecías (2 Re 24,17). el día segundo e hizo prisionero a su rey. Puso en ella un rey de su gusto; Pero esta lección no fue apren- tomó y se llevó a Babilonia su importante tributo» (ANET 564) dida por Sedecías que, llevado por los falsos profetas, vió la deportación del 597 como algo pasajero. Eso lo llevó a una vida despreocupada y a otra yaquim de Judá también se sometió donde reunió en gran número carros alianza con Egipto contra Babilonia, por un tiempo (2 Re 24,1), pero des- y caballos. Sus campañas del otro provocando a Nabucodonosor, que pués se rebeló por instigación de lado de Eufrates debieron limitarse en sitió Jerusalem en el 588. Así, los ojos Egipto. el 599 simplemente a una incursión de Sedecías tuvieron que contemplar Como antes le había ocurrido a por el desierto contra los árabes, a un horrible espectáculo antes de ver Asiria, los caldeos no llegarían a do- los que capturó en gran número, ade- por última vez la luz: «Capturaron al minar la región al occidente del Eufra- más de sus bienes, ganados y dio- rey y lo subieron a Riblá donde el rey tes mientras Egipto tuviera algo de ses en abundancia. de Babilonia, que lo sometió a juicio. fuerza. De modo que Nabucodonosor En 597 Nabucodonosor pudo ha- Los hijos de Sedecías fueron dego- se lanzó a la conquista de Egipto en cerse cargo nuevamente de la rebe- llados a su vista, y a Sedecías le sacó el 601, como relata la crónica babiló- lión que Yoyaquim había iniciado alen- los ojos, lo encadenó y lo llevó a Babi- nica. La victoria del faraón Nekao in- tado por Egipto. El trono de Judá ha- lonia» (2 Re 25,6-7). cluso obligó al rey caldeo a un año de bía sido recientemente ocupado por Jerusalem fue tomada y destrui- acuertelamiento en su ciudad capital su hijo Joaquim, que logró reinar sólo da después de un año de asedio en para poder reorganizar su ejército, tres meses, ya que Jerusalem fue to- julio del 587. Así dice Yahveh Sebaot: «Asimismo quebrantaré yo a este pueblo y a esta ciudad, como quien rompe un cacharro de alfarería, que ya no tiene arreglo. «Y se harán enterramientos en Tófet, hasta que falte sitio para enterrar. Así haré con este lugar - oráculo de Yahveh - y con sus habitantes, hasta dejar a esta ciudad lo mismo que Tófet, y que sean las casas de Jerusalén y las de los reyes de Judá como el lugar de Tófet: una inmundicia; todas las casas en cuyas azoteas incensaron a toda la tropa celeste y libaron libación a otros dioses» (Jer 19,11-13). 60 La época del Primer Templo