1. Laura Betancur B
Introducción al pensamiento sistémico
El pensamiento sistémico se encarga de conocer el todo y como se relacionan sus partes, un
sistema funciona como un todo, y por medio de esta podemos entender sus conexiones y
sus comportamientos. Sin esta no podríamos entender que es un sistema y como está
relacionado con nuestro día a día, al comprenderlo podemos mejorar nuestra vida tan solo
sabiéndolos ejercer correctamente.
Los sistemas se encuentran en todas partes, el ser humano y su entorno son sistemas, estos
están divididos en varias partes que juntas funcionan como un todo.
Cada parte es fundamental y si se quitan o se ponen diferentes piezas va a resultar un
sistema que no va a funcionar, su tamaño también es un factor fundamental al determinar si
un sistema funciona o no, porque si deja de estar en el tamaño adecuado se pierde el control
de este y no funcionaría bien.
Los sistemas poseen las propiedades emergentes, que están presentes siempre pero que
ignoramos y generalmente no sabemos que están ahí, estas no pertenecen al sistema pero
sin ellas no podría funcionar correctamente.
Estas propiedades no existirían sin nosotros y aparecen cuando el sistema completo está
trabajando, también, nos demuestran que no necesariamente se debe comprender el sistema
para darle un buen uso y sacar provecho de este, por ejemplo, yo puedo abrir la llave del
agua de mi casa sin comprender el proceso respectivo de cómo llega hasta ahí, yo puedo
prender mi computador sin saber electrónica, etc...
2. Un sistema no se puede descomponer o dividir, porque así su propósito fracasaría y no sería
posible encontrar sus propiedades las cuales solo se pueden notar si el sistema entero está
funcionando en su totalidad, por ejemplo, no se tiene que desarmar una lámpara para buscar
la luz.
Los sistemas complejos se dividen en dos: la complejidad de detalle y la dinámica, la
complejidad de detalle nos dice que siempre hay una manera de simplificar, mientras que
en la dinámica los elementos se relacionan de múltiples formas y que no significa que entre
menos partes se encuentren, más sencillo va a ser, porque estas tienen múltiples relaciones.
Por otro lado, los sistemas simples están compuestos de pocas partes con pocas relaciones
entre estas mismas.
Siempre es importante saber si el sistema que vamos a tratar posee una complejidad de
detalle o dinámica, ya que esto puede determinar el funcionamiento del sistema y nos puede
hacer comprender su comportamiento y como influiría.