2. Los hongos son un grupo de seres vivos diferentes de las plantas y
de los animales, razón por la cual se clasifican en un reino aparte
llamado Fungi. Poseen gran capacidad de adaptación y pueden
desarrollarse sobre cualquier medio o superficie, tanto en los
bosques como en las ciudades. Se reproducen por medio de
esporas, las cuales son diseminadas principalmente por el viento y
por el agua.
Juegan un papel descomponedor, ya que transforman la materia
orgánica en sustancias más simples y asimilables por otros seres
vivos. Pero también pueden desarrollarse formando asociaciones
de beneficio mutuo con raíces de plantas (micorrizas) y con algas
dando origen a los líquenes --que son organismos totalmente
diferentes a las plantas y a los mismos hongos--, mientras que
algunos crecen sobre otros seres vivos produciéndoles
enfermedad o incluso la muerte.
3. Los hongos guardan parecido con euglenoides y bacterias. Todos ellos
producen el aminoácido L-lisina mediante la vía de biosíntesis del ácido
alfa- aminoadípico.
Las células de los hongos suelen poseer un aspecto filamentoso, siendo
tubulares y alargadas. En su interior, es común que se encuentren varios
núcleos; en sus extremos, zonas de crecimiento, se da una agregación
de vesículas que contienen proteínas, lípidos y moléculas orgánicas
llamadas Spitzenkörper.
Al igual que otras especies de bacterias, animales y plantas, más de
sesenta especies de hongos son bioluminiscentes (es decir, que
producen luz).
4. La reproducción de estos individuos puede ser asexual, mediante
mecanismos de gemación o esporulación, y también sexual. Las hifas
donde se produce este tipo de reproducción se denominan conidios.
Para realizar la reproducción sexual se necesita la formación de células
haploides por meiosis.
Las células haploides, o meiosporas, o simplemente esporas, pueden
encontrarse en el interior de una cápsula que recibe el nombre de asca,
o bien, en el interior de una célula muy desarrollada denominada basidio.
Cabe destacar el papel de los hongos en la industria farmacéutica, en la
obtención de antibióticos, y en la industria alimenticia, debido a los
procesos de transformación de alimentos por fermentación, como el pan,
el queso o la cerveza.
5.
6. Saprófitos:
son hongos que viven sobre materia orgánica en descomposición.
Su importancia es clave para el funcionamiento de los ecosistemas,
ya que reciclan la materia orgánica transformándola en inorgánica.
De esta manera puede ser reutilizada por las plantas.
7. Parásitos:
son hongos que viven a expensas de otros individuos, tanto
animales como plantas. Un ejemplo de éstos es Ganoderma,
que ataca a árboles, o Candida, que ataca a animales.
Ganoderma: Candida:
8. Simbióticos:
son hongos que viven asociados a otros organismos. Pueden
asociarse a las raíces de árboles, cediéndoles sales y agua, a
cambio de tomar materia orgánica. Esta asociación recibe el
nombre nombre de micorriza. Otro ejemplo lo encontramos en la
asociación con algas, originando líquenes. En este caso, el
hongo aporta agua o humedad captada del aire y obtiene
materia orgánica.