2. 1. EL DECRETO DEL CURRICULO
En la ley orgánica 2/2006, de 3 de mayo de Educación, se define el
currículo como el conjunto de objetivos, competencias básicas,
contenidos, métodos pedagógicos y criterios de evaluación de cada
una de las enseñanzas. Este decreto incorpora las intenciones del
Proyecto Educativo de Castilla- la Mancha en relación con la etapa de
infantil para que el alumnado alcance la competencia suficiente en el
desarrollo de sus capacidades. Este desarrollo se realiza en un
contexto que garantiza la educación de los valores de igualdad,
interculturalidad, salud y respeto por el entorno natural. Este decreto
va dirigido al segundo ciclo de la Educación Infantil, con el objetivo de
ordenar y establecer el currículo de esta etapa.
En la evaluación del proyecto curricular se diferencian tres ámbitos de
reflexión: uno de carácter organizativo, que está vinculado con los
procesos de confección y aprobación del Plan de Evaluación; otro, de
contenido, donde aparecen las reflexiones relacionadas con la
orientación, coherencia, explicitación y contenido del plan de
evaluación; y el ultimo, relacionado con la puesta en práctica del
contenido del Plan, llamado de ejecución.
En algunas órdenes ministeriales sobre la evaluación, será la
Comisión de coordinación pedagógica de cada centro quien propondrá
al claustro el Plan de Evaluación de la práctica docente y del proyecto
curricular; pero en la práctica real esto es algo poco frecuente y poco
aconsejable, debido: a que se tiende a limitar la elaboración del plan
a un reducido grupo de profesionales en función de su cargo; y a no
dar importancia a las aportaciones que todos los miembros del
claustro consideran oportunas.
Otras opciones para realizar el plan de evaluación, pueden ser que su
realización este a cargo de un grupo limitado de profesores que se
presten voluntariamente a ello; o bien proponer que sea el claustro el
que aporte, debata y lleve a la practica el modelo, filosofía,
orientaciones y estrategias.
Según el Decreto anteriormente nombrado existen unos criterios de
evaluación:
3. - Dar muestra de un conocimiento progresivo de su esquema
corporal, de las destrezas motoras y habilidades manipulativas,
y un control creciente de cuerpo.
- Realizar las tareas con seguridad y confianza, y valorar tanto
las actuaciones propias como las de los otros.
- Expresar sentimientos y emociones, comprender e interpretar
los de los otros y contribuir a la convivencia.
- Realizar autónomamente y con iniciativa actividades habituales
para satisfacer necesidades básicas, consolidando
progresivamente hábitos de cuidado personal, higiene, salud y
bienestar.
- Colaborar con los otros a crear un entorno agradable y un
ambiente favorecedor de salud y bienestar.
2. OTRA BASE BIBLIOGRAFICA
Evaluación del proceso de enseñanza
La evaluación lejos de entenderse como una medición de los
productos y realizaciones escolares, propia de otras épocas,
constituye hoy uno de los pilares del mismo Sistema.
Una de las novedades del concepto de evaluación son los ámbitos
donde obligatoriamente se debe realizar. Junto a la evaluación ya
tradicional de los aprendizajes escolares, aparece hoy con fuerza y
obligación legal la evaluación de la enseñanza.
El tema de la evaluación ha alcanzado un protagonismo evidente
hasta convertirse en uno de los aspectos centrales de discusiones,
reflexiones y debates pedagógicos.
Dentro de nuestra normativa educativa, el término evaluación
aparece por vez primera de un modo generalizado con la Ley General
de Educación de 1970.
Normalmente, cuando se habla de evaluación se piensa, de forma
prioritaria e incluso exclusiva, en los resultados obtenidos por los
alumnos. Hoy en día éste sigue siendo el principal punto de mira de
cualquier aproximación al hecho evaluador. El profesorado, los
padres, los propios alumnos y el propio Sistema, se refieren a la
evaluación como el instrumento calificador, en el cual el sujeto de la
4. evaluación es el alumno y sólo él, y el objeto de la evaluación son los
aprendizajes realizados según objetivos mínimos para todos.
Hoy la evaluación adquiere un nuevo sentido, superior a la mera
recogida de datos, pero a la vez aparece como pieza clave
imprescindible para que el profesor preste al alumno la ayuda
necesaria, y en consecuencia, pueda valorar las transformaciones que
se han ido produciendo. El profesor que realiza una programación
tiene en cuenta la edad, capacidad y preparación del grupo con el que
piensa realizarla, pero ha de descender a la personalización. La
evaluación hace posible ese descenso de adaptar los programas a las
singularidades de cada alumno.
Por tanto, la evaluación es ante todo, una práctica reflexiva propia del
docente.
Los procesos de evaluación tienen por objeto tanto los aprendizajes
de los alumnos como los procesos mismos de enseñanza. La
información que proporciona la evaluación sirve para que el equipo de
profesores disponga de información relevante con el fin de analizar
críticamente su propia intervención educativa y tomar decisiones al
respecto.
Esta evaluación debe hacerse en dos niveles distintos o ámbitos:
a) El contexto del aula
b) el conjunto del centro
Evaluación del proceso de aprendizaje
Los objetivos, no son directamente evaluables, mientras que los
criterios, se convierten en un referente más preciso.
Los criterios de evaluación responden a las capacidades básicas de
cada una de las áreas en cada ciclo y referidas a aquellos contenidos
específicos que se consideran especialmente importantes para su
desarrollo. Son, pues, indicadores sobre qué es lo que el alumno debe
alcanzar.
En esta evaluación el maestro establecerá para cada U.D. unos
objetivos didácticos en los que se indiquen capacidades que
específicamente se pretender conseguir con los contenidos y se
5. establecerá el grado de los aprendizajes. Esto exige que los propios
objetivos sean indicadores observables del resultado de cada U.D.
Aquí se pueden distinguir tres momentos distintos y
complementarios:
Evaluación inicial: permite adecuar las intenciones a los
conocimientos previos y necesidades de los alumnos. Decidir qué tipo
de ayuda es la más adecuada cuando se accede a un nuevo
aprendizaje…
Evaluación continua: irá ajustando la ayuda educativa según la
información que se vaya produciendo. Esta evaluación es formativa,
toda vez que permitirá detectar el momento en que se produce una
dificultad, las causas que lo provocan y las correcciones necesarias
que se deben introducir.
Evaluación final: permite conocer si el grado de aprendizaje que para
cada alumno habíamos señalado, se ha conseguido o no, y cuál es el
punto de partida para una nueva intervención.
3. EJEMPLOS DE CÓMO LLEVAR A CABO
EL PROCESO DE EVALUACION
Indicadores:
DIMENSIÓN INDICADORES DE LOGRO
DIMENSIÓN
SOCIOAFECTIVA
Ejercita acciones de
independencia en su vida
cotidiana.
Disfruta de pertenecer a un
grupo, manifestando alegría al
compartir con sus pares.
Identifica a su profesora y a sus
compañeros por el nombre.
Comienza a fortalecer la
experiencia de una sana
alimentación.
Muestra sentido de pertenencia
por los diferentes espacios del
preescolar.
Comienza a relacionar conceptos
nuevos con otros ya conocidos.
Identifica las partes gruesas del
cuerpo, a través de juegos, rondas y
experiencias sensoriales.
Relaciona las actividades propias del
día y la noche. Comprende y sigue
instrucciones.
6. DIMENSIÓN COGNITIVA
Reconoce algunos conceptos
espaciotemporales (arriba, abajo,
encima, adelante, atrás entre
otros.
Reconoce y aprovecha los
diferentes rincones del salón.
Clasifica las figuras presentadas
en grandes y pequeñas.
DIMENSIÓN
COMUNICATIVA
LENGUA MATERNA
Formula y responde preguntas
según sus necesidades de
comunicación. Incorpora nuevas
palabras en su vocabulario y
entiende su significado. Escucha con
entusiasmo narraciones de cuentos
y pequeñas historias. Afianza
movimientos gestuales relacionados
con la articulación y la
pronunciación.
INGLÉS
Escucha y disfruta de las canciones.
Comienza a familiarizarse con
vocabulario básico.
DIMENSIÓN ESPIRITUAL
Y ETICA
Comparte con sus amigos en los
momentos de juego libre y
dirigido.
Participa con respeto en actos
cívicos y celebraciones del
preescolar.
Practica con propiedad los hábitos de
higiene y cortesía.
Demuestra sensibilidad e imaginación
en su relación espontanea y cotidiana
con los demás.
DIMENSIÓN CORPORAL
MOTRICIDAD
Expresa corporalmente emociones,
situaciones escolares y
experiencias. Disfruta de
actividades como el rasgado,
modelado y arrugado. Ejercita
movimientos finos a través de
trabajos con dáctilo pintura.
Controla a voluntad los
movimientos de su cuerpo y de las
partes del mismo. Disfruta de
momentos en el arenero
manipulando la arena libremente.
ED. FISICA Y NATACIÓN
Se ubica en los sitios de trabajo
reconociendo y familiarizándose con sus
compañeros y profesoras. Conoce
diferentes movimientos corporales.
Explora habilidades motrices básicas
(atrapar y lanzar). Reconoce los
diferentes espacios del área de la
piscina.
7. DIMENSIÓN ESTETICA
ARTÍSTICA
Disfruta manipulando diferentes
texturas. Se observa un mejor
agarre en la toma de elementos
usados en el aula.
MÚSICA
Discrimina e imita sonidos. Participa en
actividades sonoras. Explora sonidos del
entorno y corporales