1. === CELEBRACIONES EN JULIO Y AGOSTO ===
Jueves 16 de julio, Nuestra Señora del Carmen.
Viernes 24, Primeras Vísperas de Santiago Apóstol, 6,30 en la Residencia.
Domingo 2 de agosto, La Porciúncula, Santuario. Se comunicará la hora.
Martes 11, Santa Clara de Asís, Santuario a las 20 horas.
Sábado 15, La Asunción de la Virgen Maria.
Martes 25, San Luís, patrono de la OFS. Celebración final de Centenario.
Antes de la Eucaristía, nos encontraremos para compartir impresiones sobre
el discurso del Papa y la vivencia del verano. Se comunicará hora y lugar
para el encuentro.
LECTURA PARA EL VERANO: El libro de la Regla y Constituciones,
CAPITULO I: LA FORMA DE VIDA Art. 8, 9 y 10. Paginas 63 y 64.
Todos los jueves en la Parroquia a las 20 horas: ESPOSICION DEL SANTISIMO
Julio – Agosto /2015 / nº 209
NO PERDAIS LA ESTIMA DEL PUEBLO
En el marco del Capítulo General de la Orden, el día 26 de mayo el
Papa Francisco recibió en audiencia a los hermanos participantes en el
mismo. Lo dicho por el Papa a los Hermanos Menores es de interés para
todos nosotros; por ello confío al Hermano Lobo las palabras que más nos
pueden ayudar a vivir nuestra común vocación franciscana.
En su mensaje el
Papa se centra en dos
valores esenciales del
carisma franciscano: la
minoridad (pobreza de
espíritu) y la fraternidad.
Le dejo la palabra: “La
minoridad invita a sentirse
pequeños ante Dios,
confiándose totalmente a
su infinita misericordia.
Cuanto más seamos
conscientes de esto, tanto más cercanos estamos de la salvación; cuanto
más convencidos estemos de ser pecadores, tanto más preparados
estamos para ser salvados. Así lo vemos en el Evangelio: las personas
que se reconocen pobres ante Jesús alcanzan la salvación; en cambio, los
que piensan no tener necesidad, se privan de ella. La minoridad exige
también salir de sí mismos para hacerse cercanos a los pobres a los
necesitados, a los marginados, en una auténtica actitud de comunión y de
servicio.”
La fraternidad es otro de los pilares de la vocación franciscana, y así
lo recuerda el Papa. “También la fraternidad pertenece de manera esencial
al mensaje evangélico. En la Iglesia de los orígenes, los cristianos vivían de
HERMANA JOSEFINA SÁNCHEZ
El día 21 del pasado mes de junio la Hermana Muerte pasó
por la calle Herradero, 1 bajo, donde ya hacía tiempo la esperaba
Josefina. El encuentro ha sido de lo más sereno y amigable. La
soledad –soledad sonora- ha sido compañera de nuestra hermana
de día y de noche durante los últimos años, y así la encontró el
Señor a media mañana de ese domingo. Sentada como de
costumbre en el silloncito, sito entre la mesa y la ventana, con la
cabeza suavemente apoyada en la mano izquierda, a su cuñada Mari le pareció
plácidamente dormida. Como manifestó con frecuencia a quienes la visitábamos,
era así que ella deseaba morir; y hasta en esto la complació el Padre del cielo.
La OFS os invita a la Eucaristía que se ofrecerá por Josefina el domingo, día 19
a las 11, en la capilla de la Residencia. En la paz y el gozo de la patria no
olvides a los que aún vamos de camino.
2. tal manera la comunión fraterna, que eran un signo elocuente y atractivo de
unidad y de caridad. La gente se asombraba al ver a los cristianos tan
unidos en el amor, tan disponibles para la entrega y para el recíproco
perdón, tan solidarios en la misericordia, en la benevolencia, en la ayuda
recíproca, tan humanos en el compartir las alegrías, los sufrimientos y las
experiencias de la vida. Vuestra familia franciscana está llamada a
expresar esta fraternidad mediante la recuperación de la recíproca
confianza en las relaciones interpersonales, para que el mundo vea y crea
que el amor de Cristo sana las heridas y nos convierte en una verdadera
familia. Es de grandísima importancia –sigue diciendo el Papa- vivir la
vocación cristiana cultivando el diálogo sereno con todos, con bondad,
mansedumbre y humildad, con medios pobres, anunciando la paz y viviendo
sobriamente.
Los franciscanos os habéis ganado la estima del pueblo de Dios con la
minoridad, con la fraternidad, con la mansedumbre, con la humildad, con
la pobreza. ¡Por favor, conservadla! ¡No la perdáis!”.
Que este mensaje nos estimule a no dar vacaciones a la vivencia de
nuestra vocación franciscana; así el verano será también un tiempo fuerte de
gracia.
Hermano Vicente
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
XX ENCUENTRO DE ZONA EN LA PUEBLA DE MONTALBÁN
(TOLEDO). 21 DE JUNIO DE 2015
Gozosos por volvernos a encontrar de nuevo con los Hermanos de la
Zona de San Gregorio, llegamos unos 40 hermanos de Arenas a La Puebla,
donde fuimos recibidos con cariño. Tras obsequiarnos con un suculento
desayuno, (chocolate con churros, pastas y zumos… y volver a saludar con
alegría desbordante a todos los hermanos, nos dirigimos a la Iglesia de San
Francisco de la reciente extinta Comunidad Franciscana de La Puebla. Tras
los protocolarios saludos de bienvenida de los Ministros anfitriones de La
Puebla y Carmena, así como de la Ministra de Zona, Mª José Píriz y una
oración del Asistente Espiritual de Zona, Fr. Isaac Serrano, Fr. José Luís de
la Cruz o.f.m, desgranó su conferencia glosando la Carta del Papa Francisco
dirigida a los religiosos/as de Vida Consagrada. Siguiendo los consejos y
avisos espirituales de Francisco de Asís, el Papa destaca la verdadera
alegría, que debe manifestarse de forma inequívoca cuando se presentan
las dificultades y los contratiempos. Y, como la Iglesia no crece
por proselitismo, sino por atracción, el consagrado, debe trasparentar la
alegría de vivir el Evangelio y de seguir a Cristo Jesús; tener paciencia y no
turbarse ante las dificultades y contratiempos. Despertar al mundo: ser
profetas. Ser expertos en
comunión, siempre unidos.
En la homilía, Fr. José Luís
nos recordó que somos personas
que estamos con Jesús, que le
conocemos... que hemos subido a
la barca de Jesús y con Jesús y
que Él nos dice: "vamos a la otra
orilla". Territorio pagano, país
diferente, cultura distinta, etc.
Cruzar para anunciar la Buena
noticia con sus discípulos. Luego
la tempestad, pero, no hemos de
tener miedo, Jesús tiene poder
para calmarla.
¡Oh, qué bueno y agradable es que los hermanos estén unidos!.... dice el
Sal. 133, y en verdad que este gozo y esta alegría la sentimos íntima y
presente durante esta jornada de verdadera fraternidad, no sólo en la
Eucaristía, sino en todos y cada uno de los actos programados: la comida en
el Restaurante el Nogal y la subasta de las ofrendas presentadas en la misa,
La ruta turística: Visita al Museo de la Celestina, La Plaza Mayor; el
Convento de las Clarisas… con guías especializadas; la vuelta a casa con
canciones en el autocar en las que se veía palpable la alegría que nos
inundaba. Sencillamente, fue un día feliz, vivido desde la fraternidad
franciscana. Aquí no hubo la oportunidad de vivir la verdadera alegría en el
concepto franciscano más estricto, ningún contratiempo, ninguna dificultad,
sino la alegría de saberse unidos y acogidos por todos los hermanos. ¡Gracias,
Señor, por habernos regalado este día!
Hermano Lucidio