PPT TALLER USO DE PRODUCTOS QUÍMICOS PARA LA LIMPIEZA.pptx
106 pesares
1. Efrén Martín, gerente de FV y profesor de Deusto Business School
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“En el lago Titicaca, fuimos a visitar una isla
flotante de los Uros. Al pisarla, notas que se mueve.
Yo quería ver qué había en sus pequeñas casas sobre
islas hechas de totora, como todo lo demás.
Cuando entré, vi algunas herramientas, un poco de
comida y una cama enrollable.
Salí de la casa y le pregunté al dueño: ¿dónde está
el resto?
El dueño me contestó: No hay más, ¡si tienes mucho,
te hundes!” (Herman Zapp)
Nº 106 Octubre 2015 http://fvmartin.blogspot.com.es
La riqueza, combinada con ciertas creencias,
puede ser nuestra ruina.
Anthony de Mello nos interpelaba: “¿Se te
ha ocurrido alguna vez que aquello a lo que
llamas felicidad es en realidad tu cadena,
tu prisión, y que en lugar de proporcionarte
libertad te priva de ella?”. Hemos sido
condicionados en el apego, la falsa creencia
de no poder ser felices sin conseguir dinero,
status, propiedades, fama, relaciones... Pero la
felicidad no es causada por las cosas. Cuantas
más cosas tenemos para ser felices, menos lo
somos. La depresión se ha multiplicado por 10
en tres generaciones y su inicio ha pasado de
los 30 a los 15 años. A merced de objetos y
sucesos, vivimos atormentados por no po-
seerlos y más aún por la aversión a la pérdida.
Albert Ellis situó, como Epicteto, el origen de
nuestros pesares en el interior y no en el
exterior. En creencias irracionales de que:
“Todo DEBE satisfacer nuestros deseos”:
Mundo. Si la vida no nos trata tan bien como
DEBERÍA, reforzamos la idea de que el mundo
es horrible e insoportable; la alegría es
sustituida por la aflicción del victimismo, la
autocompasión y el desamparo.
Otros. Si no nos muestran el respeto que
DEBEN, deshumanizamos a las personas;
acabando con la confianza y cayendo en el
cinismo, indignación, ira, odio y rencor.
Nosotros. Si TENEMOS la obligación de
hacerlo todo bien, cuando erramos dañamos
nuestra autoestima con sentimientos de
inadecuación, ansiedad, culpa y dilación.
Futuro. Un porvenir amenazante nos
angustia y paraliza, debatiéndonos entre lo
que DEBERÍAMOS o NO DEBERÍAMOS hacer; para
terminar arrepentidos por perder el tiempo.
No queremos decir que debamos pasar de
todo, pues sería otra absurda exigencia. Con
autoimposiciones nos bloqueamos, limitamos
las opciones a “lo mío o nada” e impedimos a
la inteligencia resolver problemas, conflictos,
inseguridades e incertidumbres con flexibilidad.
Sustituyamos exigencias por preferencias y
en vez de esperar pasivamente lo imposible,
cambiemos situaciones de forma creativa:
En lugar de sufrir indefinidamente porque
DEBÍA conocerse a sí mismo; Herman Zapp se
mudó con su familia a un coche de 1928, con
el que recorren el mundo. Ahora sabe quién es
y dice: “Sí, tengo miedo,… pero más miedo
tengo a que me pase la vida sin haberla
vivido. No hay repuesto para la vida”.
Los Uros resuelven conflictos con una sierra,
no para atacarse entre sí, sino para dividir en
dos su isla de totora. Para no hundirse más, se
alivian del peso mutuo, con un… corta y rema.
No lastres tu vida con apegos