Este documento resume los mecanismos para elegir candidatos presidenciales en Chile, enfocándose en el oficialismo y la Concertación. En el oficialismo, las tres opciones son Laurence Golborne, Pablo Longueira y Andrés Allamand. Probablemente elegirán al candidato a través de encuestas, a menos que ninguno lidere claramente. En la Concertación, definirán al candidato a través de primarias como prometieron, pero podrían cancelarlas si Michelle Bachelet compite y lidera claramente las encuestas.
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Análisis de los mecanismos internos de elección de candidatos presidenciales en Chile oficialismo y Concertación
1. BITACORA PRESIDENCIAL 02
PRESIDENCIALES 2013 30-MARZO
2012
LOS MECANISMOS PRESIDENCIALES: ENCUESTAS, CONSENSOS Y PRIMARIAS
I. LAS DOS FASES DE LA ELECCIÓN DE UN CANDIDATO PRESIDENCIAL
¿Qué mecanismos y modalidades usara cada partido y pacto para elegir a su abanderado
presidencial? Desde que empezó la re-democratización a finales de los ochenta se han usado
tres alternativas; las encuestas, las primarias y las definiciones que se realizan al interior de
cada partido que buscan consensos y ratificar “al mejor”. Este último hecho no implica que el
proceso interno de definición presidencial no tenga legitimidad. Se trata, sólo de mecanismo
distintos.
La elección de un candidato presidencial al interior de una coalición política tiene dos fases. La
primera, el candidato que cada partido pone a disposición de la coalición; y la segunda, la
elección del abanderado presidencial del pacto. A su vez, en ambas instancias se define el
mecanismo interno que usara para escoger al candidato del partido y/o pacto.
Las características de la coyuntura y las necesidades políticas del conglomerado -pacto o
partidos- generan las condiciones para optar por uno u otro mecanismo. De ese modo, el
proceso para elegir candidatos para las presidenciales del 2013 tiene su propio afán.
II. LA INCERTIDUMBRE EN EL OFICIALISMO
La alianza gobernante ha entrado en el debate sobre el mecanismo para elegir su abanderado
presidencial hace algún tiempo. Sin embargo, en el sector se habla más de candidatos posibles
que de mecanismos.
En relación a los mecanismos para elegir el abanderado presidencial hay cuatro opciones. En
primer lugar, están las encuestas que indican cuál es el mejor posicionado. En segundo lugar,
aparecen las primarias que es la tesis que tiene más fuerza en Renovación Nacional y
entusiasma a algunos sectores de la Udi. En tercer lugar, surge la posibilidad de que el sector y
cada partido en particular –como en el 2005- lleven su presidenciable a una primera vuelta
presidencial. Y finalmente, la designación de un candidato por parte de los partidos recurriendo a
instancias internas de definición. Nada es definitivo ni claro al respecto.
Bitácora Presidencial # 2 González LLaguno
2. Presidenciales 2013
Por ahora, cada sector y sus cartas presidenciales siguen en “competencia oculta” con el fin de
mejorar sus posicionamientos. Hay que esperar las Municipales de Octubre y la decisión que va
tomar Bachelet. Es tiempo de sembrar.
De las cuatro alternativas existentes para definir al candidato del oficialismo la que menos
probabilidades tiene es que compitan en una primera vuelta presidencial. Ello, se relaciona con
el hecho de que el sector llevara a la elección un candidato único. El peso actual de Bachelet –
con altas probabilidades de ganar hoy en primera vuelta- genera las condiciones para que el
oficialismo no corra riesgos innecesarios y trata de concentrar fuerzas. Incluso, podría pensarse
lo contrario; es decir, competir en primera vuelta con candidatos tan heterogéneos –como la
triada actual- como una forma de sumar desde todos los sectores. Algo en este sentido insinúo
Longueira. Sin embargo, la idea no cayó bien en la propia Udi. Este hecho, reduce a tres los
mecanismos.
En este punto se produce una imbricación entre presidenciables y mecanismos. En efecto, la
modalidad que se usara esta en directa relación al posicionamiento que cada pre-candidato
tenga al momento de llegada la hora de la definición. Hoy es el momento de las encuestas.
Los presidenciables del oficialismo son tres. Luego de dos años de gestión han ido quedando en
el camino distintas alternativas. Hoy tenemos a Pablo Longueira por la UDI, a Andrés Allamand
por Renovación Nacional y al independiente e hijo de la meritocracia y de la educación pública
Laurence Golborne.
De los tres, el que menos posibilidades tiene según las encuestas es Longueira. A su vez, el que
mejor posicionamiento tiene es Golborne. En este escenario, Allamand ha ido acortando
distancia –presidenciable al alza- y el Ministro de Obras Públicas se ha ido estancando. La
carrera sigue. La política es dinámica y la realidad porfiada. Nada es definitivo. Sólo, estamos en
el terreno de lo probable. En esa dirección, de los tres en algún momento van a quedar dos. Las
duplas probables son Allamand-Golborne y Allamand-Longueira. En efecto, la dupla Golborne-
Longueira tiene muy bajas posibilidades de manifestarse.
En el sector la realización de primarias es probable sólo en la medida en que las encuestas no
favorezcan de manera clara y amplia a uno de los presidenciables; y por tanto, que ningún
sector quiera ceder su opción. De lo contrario, el mecanismo de designación vía encuesta será
el elegido. Sin embargo, las cifras no sólo deben marcar que el Ministro sea conocido y que su
gestión tenga alta aprobación, sino también que tenga buenas cifras de “intención de voto” en
primera y segunda vuelta; y ello, frente a las distintas alternativas opositoras, incluida Bachelet.
¿Quién será el candidato del oficialismo? Cada presidenciable tiene fortalezas y debilidades.
Sin embargo, hay que esperar el desenlace de acontecimientos externos para la definición final
del abanderado del sector. Y ello, tiene que ver con lo que marca cada uno en las encuestas y
con el factor Bachelet.
Bitácora Presidencial # 2 González LLaguno
3. Presidenciales 2013
III. LAS PRIMARIAS DE LA CONCERTACIÓN
En la Concertación hay una cuestión clara. El sector definirá su candidato presidencial por medio
de elecciones primarias. Ello, se instalo no sólo por la mala experiencia del mecanismo usado en
la última presidencial, sino también porque desde los primeros momentos de la debacle electoral
en Enero del 2010 prometieron primarias. De hecho, era uno de los elementos que explicaba la
derrota política y electoral de Frei.
La Concertación entre 1989 y el 2009 tuvo cinco candidatos presidenciales y cuatro Presidentes.
De ello, sólo Aylwin no fue elegido por medio de una primaria. En el ’93 Frei le gano a Lagos y
en el ’99 Lagos le gano a Zaldívar. En el 2005 fue suspendida porque se retiro de competencia
la candidata de la Dc, Soledad Alvear. Finalmente, en el 2009 Frei le gano al candidato Radical,
José Antonio Gómez. En lo sustancial hubo primarias. Por tanto, es un mecanismo conocido y
usado por el sector.
Sin embargo, cada una de ellas tuvo sus propias características. Una más masivas que otras.
Una más legítimas que otras.
En los últimos días se menciono que las primarias del sector no eran necesarias ante la
evidencia empírica de que a Bachelet no le gana nadie. Incluso, para muchos analistas y
políticos si hoy fueran las elecciones la ex mandataria ganaría en primera vuelta. Sin embargo,
con mucha fuerza se escucho que esa situación no tenía posibilidades de imponerse.
En ese escenario las primarias presidenciales de la Concertación sólo están a la esperar de los
competidores.
En la Dc –a la fecha- hay dos alternativas; Orrego y Ximena Rincón. A esa dupla, podría
agregarse el Senador Pizarro. Ello, también depende de Bachelet. El partido deberá resolver
como define su abanderado pre-concertacionista. En el PPD la alternativa más probable es
Ricardo II –Lagos Weber-. Es un presidenciable bien posicionado en las encuestas. De hecho,
de todos es el que mejor rinde frente a Golborne. En el PS no hay plan B. La opción es Bachelet
si o si. Por el lado de los radicales ya se instalo la figura del Senador Gómez. A la fecha, está
dispuesto a competir en las “primarias prometidas”.
Nuevamente –al igual que en el oficialismo- el factor Bachelet es fundamental. Si decide no ir
como candidata se abrirá –para la Concertación- un escenario muy complejo que la pone al
borde de una “crisis terminal”. Al contrario, si va a la competencia se abre un escenario que
genera condiciones muy favorables para volver a La Moneda.
Sin embargo, se debilita la “primaria prometida” ante la posibilidad de que ningún
concertacionista quiera competir y ser derrotado por goleada. En ese escenario, Velasco ni
Lagos Weber van a la competencia. Sólo quedaría la opción Dc y Gómez.
Bitácora Presidencial # 2 González LLaguno