1. NACIONAL
23 Junio 2009
El periodo de sesiones del Congreso enfila las
vacaciones con la Ley de Puertos en el aire
Llegan las vacaciones al Congreso de los Diputados. Hoy es la última semana del periodo de sesiones y
si nadie lo remedia el Proyecto de Ley de Puertos se pasará el verano en el aire. Así, al menos, lo
aseguraron ayer a este Diario fuentes del Grupo Parlamentario Socialista.
Miguel Jiménez
Desde su llegada al Congreso de los Diputados el pasado 30 de marzo, el Proyecto de Ley de
Modificación de la Ley de Puertos de 2003 ha quedado parado en el trámite de presentación de
enmiendas, con progresivas y periódicas ampliaciones del plazo con carácter semanal.
Hoy termina un nuevo plazo, con la particularidad de que nos encontramos ante la última semana del
periodo de sesiones antes de que el Congreso inicie formalmente sus vacaciones.
Según fuentes parlamentarias, si hoy no se cierra definitivamente el plazo de presentación de enmiendas,
lo suyo es que el aplazamiento que apruebe la mesa del Congreso sea ya con fecha de después del
verano. Es decir, salvo inusual urgencia, el asunto quedaría aplazado, como mínimo, hasta primeros de
septiembre.
Aplazamiento
En este sentido, según fuentes parlamentarias del Grupo Socialista, consultadas ayer por este Diario,
todo invita a pensar que hoy volverá a aprobarse un aplazamiento de plazo y que el tema quedará en
suspenso hasta después de las vacaciones.
En todo caso, según dichas fuentes, se trata de un asunto que se está llevando con mucho sigilo y con
conversaciones marcadas por la discreción, dentro de lo que es un tema considerado “muy delicado”, se
asegura.
En estos momentos hay dos cuestiones fundamentales: por un lado la falta de apoyos parlamentarios del
Grupo Socialista y su soledad, que hace que el PSOE esté buscando en este asunto concreto una alianza
con el Partido Popular para buscar una posición común; por otro, está la propia posición que decida
adoptar el Grupo Parlamentario Popular. Si el PP decide presentar una enmienda a la totalidad, muy
probablemente se habría acabado la historia de la ley; si en cambio renuncia a esta opción y apuesta por
las enmiendas parciales, se podría abrir una vía de negociación con el PSOE y salvar el texto legislativo.
Decidir
Ahora mismo nos encontramos en el punto en el que el PP debe decidir precisamente eso, si presenta o
no la enmienda a la totalidad y, en cualquier caso, haga lo que haga, cuándo exactamente, si hoy mismo,
no es probable, o ya de cara al mes de septiembre.