Cada cultura a lo largo de la historia ha creado diferentes medios por los cuales ha logrado envolver al objeto a, objeto causa del deseo, en las imágenes y significantes que produce. En algunos momentos esos velos dejan entrever alguna luz que constituye nuestro enigma... y que se han convertido en momentos de ruptura en la cultura, introduciendo un cambio en la subjetividad desplazando el acento en las certidumbres del sujeto. En estas creaciones encontramos las imágenes emblemáticas del deseo y del goce... Los descubrimientos antropológicos y los estudios etnológicos nos ofrecen las diferentes estatuas, papiros, escrituras.... que los pueblos han construído y las obras de arte que desde la prehistoria muestran las primeras huellas que se han encontrado acerca de las primeras diosas y sus sagrados cultos. Remontarnos en la historia nos lanza al principio de los tiempos... a ese largo, larguísimo período de los cultos femeninos maternos.... donde la maternidad era su misterio principal. Estos mitos son previos a la introducción del concepto de paternidad, es decir, previos a que se admitiera oficialmente la pertinencia del coito para el parto.