- Jesús fue a Betania para resucitar a Lázaro, quien había muerto cuatro días antes.
- Jesús le dijo a Marta que Lázaro resucitaría, y explicó que Él es la resurrección y la vida.
- Jesús llamó a Lázaro desde la tumba y lo resucitó, lo que llevó a muchos a creer en Él, aunque los líderes religiosos planeaban matarlo por temor a perder su autoridad.
3. Juan 11:1-6 “Estaba entonces enfermo uno llamado Lázaro, de
Betania, la aldea de María y de Marta su hermana. (María, cuyo
hermano Lázaro estaba enfermo, fue la que ungió al Señor con
perfume, y le enjugó los pies con sus cabellos.) Enviaron, pues, las
hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está
enfermo. Oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para
muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo
de Dios sea glorificado por ella. Y amaba Jesús a Marta, a
su hermana y a Lázaro. Cuando oyó, pues, que estaba enfermo, se
quedó dos días más en el lugar donde estaba.”
4. Aunque Jesús estaba muy lejos de donde estaba
Lázaro, sabía lo que iba a sucederle. Jesús pudo
haber sanado a Lázaro sin siquiera ir a donde él
estaba, o haber ido inmediatamente a sanarlo. Sin
embargo, no lo hizo. Jesús dejó que muriera porque
sabía que esta situación iba a propiciar otra
oportunidad para que Él mostrara Su enorme poder
como Hijo de Dios.
5. Juan 11:7-16 “Luego, después de esto, dijo a los
discípulos: Vamos a Judea otra vez. Le dijeron los
discípulos: Rabí, ahora procuraban los judíos apedrearte, ¿y otra
vez vas allá? Respondió Jesús: ¿No tiene el día doce horas?
El que anda de día, no tropieza, porque ve la luz de
este mundo; pero el que anda de noche, tropieza,
porque no hay luz en él. Dicho esto, les dijo
después: Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para
despertarle. Dijeron entonces sus discípulos: Señor, si duerme,
sanará. Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro; y ellos
pensaron que hablaba del reposar del sueño. Entonces Jesús les
dijo claramente: Lázaro ha muerto; y me alegro por
Jesús les dijo a Sus discípulos que era tiempo de ir
donde Lázaro.
6. Jesús quería que Sus discípulos supieran que Él no
temía ser atrapado y matado, por eso les explicó que Él
no era como un hombre que tropieza en la oscuridad,
sin saber por dónde va. Él dijo que era como un hombre
que podía ver claramente por donde iba porque
caminaba en la luz. Jesús sabía que Sus enemigos no
podían matarlo porque el tiempo de Dios para que Él
muriera aún no había llegado.
Jesús les dijo a Sus discípulos que era tiempo de ir
donde Lázaro.
7. Juan 11:17-27 “Vino, pues, Jesús, y halló que hacía ya cuatro
días que Lázaro estaba en el sepulcro. Betania estaba cerca de
Jerusalén, como a quince estadios; y muchos de los judíos habían
venido a Marta y a María, para consolarlas por su hermano.
Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, salió a encontrarle;
pero María se quedó en casa. Y Marta dijo a Jesús: Señor, si
hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto. Mas también
sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará. Jesús le
dijo: Tu hermano resucitará. Marta le dijo: Yo sé que
resucitará en la resurrección, en el día postrero. Le dijo Jesús: Yo
soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque
esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en
mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? Le dijo: Sí,
Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has
venido al mundo.”
8. “Jesús le
dijo: Tu
hermano
resucitará.”
•Jesús fue a ver a las hermanas de Lázaro.
Marta creía que Jesús tenía el poder para
sanar a su hermano. También creía que Dios
el Padre haría lo que Él le pidiera.
•Todas las personas serán resucitadas para
ser juzgadas por Dios.
Debido al pecado, las personas mueren y son
separadas de sus cuerpos. Sin embargo, Dios
resucitará a todas las personas, y aquellas que
han rehusado confiar en el Salvador se
presentarán ante Dios para ser juzgadas.
9. “Yo soy la
resurrección y
la vida; el que
cree en mí,
aunque esté
muerto, vivirá.
Y todo aquel
que vive y cree
en mí, no
morirá
eternamente.
•Jesús tenía el poder para darle vida a
Lázaro.
Jesús quería que Marta entendiera que Lázaro
no tenía que permanecer muerto hasta el día
en que Dios juzgará a todas las personas.
Solamente Dios puede dar vida a los muertos
porque Él es el Creador todopoderoso que dio
vida a todos y a todo.
•Los que creen en Jesús nunca morirán.
Jesús explicó que aunque aquellos que
confían en Él como su Salvador mueran
físicamente, sus almas y sus espíritus vivirán
para siempre con Dios. Ellos nunca serán
separados de Dios para ser castigados por sus
pecados.
10. “Le dijo: Sí,
Señor; yo he
creído que tú
eres el Cristo,
el Hijo de
Dios, que has
venido al
mundo.
•Marta confiaba en Jesús.
Marta no era como la mayoría de las
personas que solamente seguían a
Jesús porque querían sanidad o comida
para sus cuerpos.
Marta creía y confiaba en Jesús como el
Salvador prometido que había venido
de Dios.
11. Juan 11:28-38 “Habiendo dicho esto, fue y llamó a María su
hermana, diciéndole en secreto: El Maestro está aquí y te llama. Ella,
cuando lo oyó, se levantó de prisa y vino a él. Jesús todavía no había
entrado en la aldea, sino que estaba en el lugar donde Marta le había
encontrado. Entonces los judíos que estaban en casa con ella y la
consolaban, cuando vieron que María se había levantado de prisa y había
salido, la siguieron, diciendo: Va al sepulcro a llorar allí. María, cuando
llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor,
si hubieses estado aquí, no habría muerto mi hermano. Jesús entonces, al
verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se
estremeció en espíritu y se conmovió, y dijo: ¿Dónde le pusisteis? Le
dijeron: Señor, ven y ve. Jesús lloró. Dijeron entonces los judíos: Mirad
cómo le amaba. Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste, que abrió los
ojos al ciego, haber hecho también que Lázaro no muriera? Jesús,
profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y
tenía una piedra puesta encima.”
12. Jesús lloró.
La gente estaba llorando porque estaba muy triste por la
muerte de Lázaro. Aunque Jesús sabía que Él iba a resucitar a
Lázaro, también lloró.
Dios siente compasión por todos los seres humanos.
Dios siente pesar por todas las personas porque hay pecado en
el mundo. Por causa del pecado hay enfermedad y muerte.
Todas las personas ahora somos pecadoras, y morimos porque
todos somos descendientes de Adán.
Dios los ama y quiere que ustedes crean Sus palabras y confíen
en Jesús como su Salvador.
13. Juan 11:39-44 “Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la
hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es
de cuatro días. Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees,
verás la gloria de Dios? Entonces quitaron la piedra de
donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a lo
alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído. Yo
sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de
la multitud que está alrededor, para que crean que tú
me has enviado. Y habiendo dicho esto, clamó a gran
voz: ¡Lázaro, ven fuera! Y el que había muerto salió, atadas
las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un
sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir.”
14. Jesús es Dios. Nunca ha habido alguien semejante
a Él. Nada es imposible para Él.
15. Juan 11:45-48 “Entonces muchos de los judíos que habían
venido para acompañar a María, y vieron lo que hizo Jesús,
creyeron en él. Pero algunos de ellos fueron a los fariseos y les
dijeron lo que Jesús había hecho. Entonces los principales
sacerdotes y los fariseos reunieron el concilio, y dijeron: ¿Qué
haremos? Porque este hombre hace muchas señales.
Si le dejamos así, todos creerán en él; y vendrán los romanos, y
destruirán nuestro lugar santo y nuestra nación.”
16. Muchos de los judíos creyeron en el Señor Jesús porque vieron Su
poder cuando levantó a Lázaro de entre los muertos. Sin embargo,
la mayoría de los líderes religiosos se negó a creer en Jesús, a pesar
de que habían visto Su gran poder. A los sacerdotes y los fariseos
sólo les interesaba conservar su posición y sus riquezas. Ellos
temían que la gente quisiera convertir a Jesús en su rey. Como los
escribas, los sacerdotes y los fariseos querían mantener su lugar de
autoridad, planearon matar a Jesús.
Satanás estaba guiando a estos hombres. Satanás no quiere que
nadie crea en Jesús y sea librado de su poder.