3. Marcos 10:45 “Porque el Hijo del Hombre no vino
para ser servido, sino para servir, y para dar su
vida en rescate por muchos. ”
4. “Porque el
Hijo del
Hombre no
vino para ser
servido, sino
para servir, y
para dar su
vida en
rescate por
muchos. ”
•Jesús no vino al mundo para que la gente
pudiera trabajar para Él.
Jesús no le pide a la gente que le dé alguna
cosa o que haga algo para Él. Dios no
necesita de nada.
Tampoco les pide a las personas que trabajen
para ganar su entrada al cielo, ninguna
persona es lo suficientemente buena para
ganar esa entrada pues todas son pecadoras.
•Jesús vino para hacer el trabajo por
nosotros.
Jesús vino a este mundo para ser nuestro
Salvador; y la única forma en que Él podía
lograrlo era dando Su vida por nosotros..
1.-
5. Marcos 10:46-52 “Entonces vinieron a Jericó; y al salir de
Jericó él y sus discípulos y una gran multitud, Bartimeo el ciego,
hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino mendigando.Y oyendo
que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús, Hijo
de David, ten misericordia de mí! Y muchos le reprendían para que
callase, pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten
misericordia de mí! Entonces Jesús, deteniéndose, mandó llamarle; y
llamaron al ciego, diciéndole: Ten confianza; levántate, te llama. El
entonces, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús.
Respondiendo Jesús, le dijo: ¿Qué quieres que te haga? Y el
ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista. Y Jesús le dijo: Vete,
tu fe te ha salvado. Y en seguida recobró la vista, y seguía a
Jesús en el camino.”
6. Bartimeo era ciego, y era incapaz de sanarse a sí mismo.
¿Puede ver un hombre ciego simplemente porque decide ver?¿Puede ver un hombre ciego simplemente porque decide ver?
¿Puede un hombre inválido caminar y saltar simplemente porque decide hacerlo?¿Puede un hombre inválido caminar y saltar simplemente porque decide hacerlo?
Así como Bartimeo era ciego e incapaz de sanarse a sí mismo, del mismo modo todas las
personas de este mundo han nacido ciegas e incapaces. Quizá nosotros no seamos ciegos e
incapaces físicamente, no obstante, todos nosotros hemos nacido ciegos a la verdad e
incapaces de conocerla.
Cuando Adán siguió a Satanás, se volvió ciego a la verdad y al camino de Dios. Su mente
perdió la facultad de entender a Dios y Su verdad. La Biblia dice que todos los descendientes
de Adán hemos nacido con mentes ciegas. Nacemos incapaces de conocer la verdad.
Bartimeo creía que Jesús podía sanarlo.
Bartimeo sabía que no podía ayudarse a sí mismo y que la única persona que podía sanarlo
era Jesús. Así que cuando él oyó que Jesús iba pasando por el camino a Jericó, gritó
pidiéndole ayuda. Bartimeo pidió a Jesús que tuviera misericordia de él. Él sabía que no
merecía ser sanado. Sabía que no podía recompensar a Jesús por sanarlo. Sabía que si Jesús
lo sanaba, tendría que ser algo gratuito. De la misma forma todas las personas sólo pueden
conocer la verdad por la misericordia de Dios. Todos nosotros nacimos pecadores, ciegos a la
verdad y al camino de Dios.
Solamente Jesús, el Salvador que vino de Dios, puede ayudarnos. La única forma en que
podemos ser salvados del poder de Satanás, el pecado y la muerte, es mediante el don
gratuito de Dios a través de Jesús, el Salvador.
7. Bartimeo clamó a Jesús.
Bartimeo lo llamó “Jesús, Hijo de David”. Bartimeo creía que Jesús era el descendiente que
Dios le había prometido al rey David. Dios había prometido que el Salvador sería uno de los
descendientes de David, y que éste gobernaría como rey para siempre. Bartimeo creía que
Jesús era el Salvador prometido. Dios no olvida ni cambia de idea con el paso del tiempo. El
tiempo no cambia para Él. El tiempo no afecta a Dios. Él es el mismo hoy como
cuando David vivió en la tierra.
La gente pensaba que Jesús no se interesaría en Bartimeo.
Muchas personas le dijeron a Bartimeo que se callara. Pensaban que Jesús no se interesaría
en un hombre ciego y pobre como él.
¿Se interesaba Jesús sólo en los ricos, en la gente bien educada y en los sanos?¿Se interesaba Jesús sólo en los ricos, en la gente bien educada y en los sanos? ¡No! Eso
no es verdad.
Cada persona es importante para Dios. A Él no le importa si somos ricos o pobres, altos o
bajos, educados o incultos, sanos o enfermos, ni tampoco le importa el color de nuestra piel.
Dios ama a cada persona y quiere que todas crean y confíen en Él.
8.
9. Marcos 11:1-10 “Cuando se acercaban a Jerusalén, junto a Betfagé y
a Betania, frente al monte de los Olivos, Jesús envió dos de sus discípulos, y
les dijo: Id a la aldea que está enfrente de vosotros, y luego que
entréis en ella, hallaréis un pollino atado, en el cual ningún
hombre ha montado; desatadlo y traedlo. Y si alguien os
dijere: ¿Por qué hacéis eso? decid que el Señor lo necesita, y
que luego lo devolverá. Fueron, y hallaron el pollino atado afuera a la
puerta, en el recodo del camino, y lo desataron. Y unos de los que estaban
allí les dijeron: ¿Qué hacéis desatando el pollino? Ellos entonces les dijeron
como Jesús había mandado; y los dejaron. Y trajeron el pollino a Jesús, y
echaron sobre él sus mantos, y se sentó sobre él. También muchos tendían
sus mantos por el camino, y otros cortaban ramas de los árboles, y las
tendían por el camino. Y los que iban delante y los que venían detrás daban
voces, diciendo: ¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!
Bendito el reino de nuestro padre David que viene! ¡Hosanna en las
alturas!”
10. Jesús envió a Sus discípulos a conseguir un pollino para Él montarlo.
A través de uno de los profetas, Dios había anunciado que el Salvador entraría en Jerusalén
montado en un pollino.
•Las multitudes dieron la bienvenida a Jesús.
La gente alababa a Jesús, diciendo que Él era Aquel que los profetas habían prometido que
Dios enviaría para ser su Rey. La gente quería un rey porque deseaba ser librada de los
romanos que gobernaban su país. Por lo tanto, en este día recibieron a Jesús, deseando que
fuera su Rey.
Tristemente, sin embargo, la mayoría de estas personas no confiaba en Jesús para que las
librara del poder de Satanás, de sus pecados y del castigo de Dios.