1. Alumno: Carlos A. Silva T.
C.I.12704415
Prof.: Arq Deyanira Mujica.
Instituto universitario
politécnico
Santiago Mariño.
Extensión Barinas.
2. Las bóvedas: son un elementos constructivos superficiales, generalmente elaborados en
mampostería o fábrica, en el que sus piezas y componentes trabajan a compresión. Las
bóvedas poseen una forma geométrica generada por el movimiento de un arco generatriz a lo
largo de un eje. Por regla general este elemento constructivo sirve para cubrir el espacio
comprendido entre dos muros o una serie de pilares alineados. Su problemática constructiva
consiste en averiguar el grosor, o resistencia de los muros adyacentes, con el objeto de que
puedan soportar el empuje lateral de las bóvedas que soportan. En muchos casos su superficie
posee nervios en los que se dirigen y concentran las líneas de empuje. A pesar de su uso
extendido en la construcción, su funcionamiento no fue comprendido y explicado por la
ciencia hasta bien entrados en el siglo XIX.
3. El relieve romano, heredero del arte helenístico, se caracterizó por un gusto por el
paisaje del que había carecido el arte clásico griego. Este amor por la naturaleza se manifestó
en la escultura a través del uso de motivos decorativos vegetales en templos, aras y palacios,
así como en objetos hechos en piedra como mesas o candelabros. Se adaptan sobre todo a
pódiums, frisos, pilastras y todo tipo de compartimentación geométrica. Técnicamente varió de
la talla finísima de época alto imperial a la más burda en el Bajo Imperio.
Los principales recursos utilizados fueron: las guirnaldas de flores y de frutos que
simbolizan las ofrendas que se realizaban a los dioses a la vez que la eternidad; el follaje de
hojas de acanto que se enzarza y permite crear brotes ondulantes o zarcillos en forma de roleos
; las palmeteas, decoración de hoja como el acanto pero algo más geométrica; las flores; los
grutescos o juego de mezcla de planta y de ser humano o animal que asemeja que brota de la
planta; los candelieri, composición simétrica de jarrones y formas vegetales; composiciones
laberínticas geométricas o grecas; en las molduras las ovas y los motivos espigados.
4. Ara Pacis:
Es un altar erigido por Augusto a la diosa de la Paz entre los años 13 y 9 antes de Cristo; en el
campo de Marte para glorificar la grandeza del Estado romano por obra de su Emperador.
En el templo Aharas se conserva una inscripción , llamada el “testamento de Augusto” en el
que expresamente dice “ a mi vuelta de Hispania y de la Galia, después de haber pacificado
por completo aquellas provincias el Senado decretó que en acción de gracias por mi regreso
feliz se erigiera un altar a la Diosa de la Paz en el Campo de Marte, al que cada año acudirán
los oficiales y sacerdotes y las vírgenes vestales para celebrar un sacrificio”.
5. La primera naumaquia conocida fue la ofrecida por Julio César al pueblo
de Roma en 46 a. C., durante la celebración de su cuádruple triunfo. Tras haber hecho construir
una piscina cerca del Tíber, capaz de albergar auténticas birremes, trirremes y cuatrirremes, la
representación movilizó a 2.000 combatientes y 4.000 remeros, reclutados entre los prisioneros
de guerra. En 2 a.c, durante la inauguración del templo de Marte Ultor, Augusto ofreció una
naumaquia que tomó como modelo la celebrada por César. Como Augusto mismo recuerda
en Res Gestæ (§ 23), hizo construir en la margen derecha del Tíber una piscina en la que se
enfrentaron 3.000 hombres (sin contar los remeros), 30 navíos dotados de espolón y
numerosas unidades más pequeñas.
Claudio organizó en 52 d. C. una naumaquia en una vasta extensión natural de
agua, el lago Fucino, para inaugurar los trabajos de drenaje del mismo. Los luchadores eran
condenados a muerte. Gracias a Suetonio y a su obra Vidas de los doce Césares (Claudio, XXI,
12-14), sabemos que los naumachiarii (los combatientes en las naumaquias), saludaron al
emperador antes del combate con una frase que posteriormente se haría famosa: Morituri te
salutant ("Los que van a morir te saludan"). Aunque una tradición errónea haya hecho
considerar que ésta era la fórmula ritual con la que los gladiadores se dirigían al emperador
antes del combate, tan sólo se tiene constancia de su empleo durante la celebración de esta
naumaquia.
6. El panteón de Agripa:
Es un templo romano dedicado a varias divinidades, especialmente a
Marte y a Venus, construido por mandato del cónsul Agripa, yerno de Augusto, en el
año 27 a. C. Después de varios incendios que prácticamente lo destruyeron, se volvió
a reconstruir en el año 126 de la era cristiana.
Es uno de los edificios más grandiosos del mundo antiguo. Las proporciones
y la estructura del Panteón son representativos de la concepción religiosa de los
romanos: la morada de todos los dioses, y aparece como una síntesis entre el cielo y la
tierra. Por eso el conjunto tiene una forma circular cerrada por una cúpula.
En la estructura interior, los romanos supieron conjugar armónicamente la tradicional
arquitectura arquitrabada griega con las líneas abovedas características de las obras
romanas
Esta construcción con nervios y arcos de descarga hechos de ladrillos
rellenos de hormigón que se apoyan en el muro circular de la base, a la cual se abren
numerosas exedras y nichos, donde estaban colocadas figuras de los dioses.
El Panteón de Agripa se ha conservado con bastante fidelidad a su origen: conserva
todavía su pavimento antiguo de mármoles y restos de policromía sobre los relieves de
pórtico.
Lo más extraordinario es el hecho de ser el primer edificio en el que aparece el
moderno concepto de la arquitectura como arte creador de espacios interiores.