2. ¿Qué es el estrés laboral?
Es un estado de agotamiento del organismo que
dificulta de forma importante las respuestas
funcionales y adaptativas de las personas.
3. La respuesta del organismo va a ser diferente
según la fase en la que se encuentre la persona
que sufre el estrés.
4. El estrés laboral tiene tres fases:
Fase de alarma
Fase de resistencia
Fase de agotamiento
5. La fase uno de alarma. El organismo empieza a
desarrollar alteraciones fisiológicas y
psicológicas que lo predisponen para
enfrentarse a la situación estresante para actuar
o afrontar la situación.
6. Las glándulas endocrinas liberan hormonas, en especial
adrenalina y cortisol.
Se aumentan los latidos del corazón y el ritmo respiratorio,
incrementa la tensión muscular, se dilatan las pupilas, hacen
más lenta la digestión e incrementa la alerta sobre la
atención a diferentes estímulos.
7. La adrenalina prepara al
organismo para la acción de
combate ante la situación
que percibe como
amenazante para escapar del
peligro.
El cortisol eleva el nivel de
azúcar en la sangre y
disminuye la respuesta
inmunológica para ahorrar
energía.
8. En la fase de resistencia. El
organismo se trata de recuperar y
volver a su equilibrio, pero el
estímulo estresante continúa
debilitando que los recursos no
pueden hacer frente al estrés. El
cuerpo permanece en alerta y no
puede reparar los daños.
La persona pierde tolerancia a la
frustración, esta irritable, tiene
dificultades para dormir y hay
sensación de cansancio o fatiga.
9. La última fase de agotamiento, aquí los recursos fisiológicos
de la persona se agotan por la exposición prolongada a la
situación estresante.
El estrés, es tan intenso que no puede resistirse a él. El
cuerpo colapsa y sufre afectaciones físicas y emocionales,
pudiendo desarrollar enfermedades mentales o físicas.
10. Aparecen síntomas asociados al estrés crónico,
sentimientos de indefensión, enfermedades
psicosomáticas, depresión o adicciones.
Además, sufren cansancio, fatiga, falta de energía,
dificultad para la concentración, alteraciones del
sueño, tristeza e irritabilidad.
11. Se puede encontrar
muchas situaciones
estresantes como las
de tipo organizativas,
de diseño de puesto
y las de la propia
persona.
12. Los principales estresores son:
La sobrecarga laboral
La baja carga laboral
La incompatibilidad del nivel de exigencia del puesto
con sus capacidades y habilidades
La repetitividad o monotonía del trabajo
El ritmo de trabajo excesivo
El horario de trabajo inadecuado
13. La sobrecarga de trabajo. Es cuando el volumen, la magnitud
o complejidad de la tarea está muy por encima de la
capacidad de la persona para realizarla.
Es decir, que la persona se siente desbordada por la gran
cantidad de trabajo que tiene. Llegando a prolongar su
jornada laboral y afectar su tiempo libre y el de su familia.
14. La baja carga de trabajo: es cuando el volumen de
trabajo está muy por debajo del nivel necesario para
mantener un mínimo grado de activación e interés
en de las personas. Afectando su autoestima
personal y generando sensación de pérdida de
tiempo.
15. La incompatibilidad entre nivel de exigencia
con las capacidades y las habilidades: es
cuando las actividades de las tareas a realizar
son muy inferiores a la capacidad profesional o
de las personas.
16. La Repetitividad: es cuando no existe una gran
variedad de tareas a realizar y éstas son monótonas o
rutinarias.
Es decir, las personas no se sienten realizadas con su
tarea por considerarla rutinaria y con falta de
contenido intelectual.
17. El ritmo de trabajo excesivo: Es cuando la persona
tiene poca autonomía para adelantar o atrasar su
trabajo en función de sus necesidades personales,
estando fuertemente condicionado por el ritmo de
trabajo que establece su ocupación.
18. El horario de trabajo inadecuado: Es cuando la
duración de la jornada laboral esta estructura
de modo que afecta el tiempo y el estilo de
vida de la persona generando estrés.
19. Deberá formular y ejecutar un programa de gestión de
prevención de riesgos ocupacionales en las empresas.
Organizar un comité de seguridad y salud ocupacional donde
estén representados todos los sectores y con la participación
de los trabajadores para que elaboren y pongan en marcha
estrategias y medidas organizativas.
20. En primer lugar, incluir una política de
prevención de estrés y de riesgos
psicosociales para proteger la
integridad y la salud de las personas.
21. Elaborar y poner en marcha protocolos de
actuación para la solución de conflictos.
25. Fijar estándares morales, claros, para que
determinen que conductas o actitudes son
consideradas aceptables, justas y tolerables.
26. Incluir planes de formación para prevenir este
tipo de riesgos laborales y psicosociales.
27. Por último, fomentar seminarios o cursos
dirigidos a directivos, mandos intermedios y
trabajadores/as en general para identificar
factores, quejas de acoso, violencia o estrés
laboral.