La comprensión lectora implica que el lector interactúa con el texto para elaborar el significado a través de relacionar las nuevas ideas con las previas. Un buen lector lee de forma rápida y eficiente, haciendo fijaciones amplias y selectivas, y aplicando estrategias como visualizar, categorizar, jerarquizar, inferir e hipotetizar para comprender el texto plenamente.