Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
No temas, ya Él venció por ti
1. Discurso
No temas, ya Él venció por ti
Jorge Enrique Arias Castro
Docente: Carlos Roberto Rivera Pérez
Licenciado en lengua castellana y comunicación
Universidad Rémington
Ingeniería de sistemas I
Apartadó
29 de febrero del 2020
2. No temas, ya Él venció por ti
¿Quién no tiene problemas? Todos de una u otra manera llegamos a
tenerlos, unos más grandes que otros, unos con una mejor disposición
para aceptarlos y salir de ellos, sea problemas familiares, económicos, de
pareja, en la salud o en la universidad los problemas siempre van a existir
en la vida de las personas.
El apóstol pablo en el libro de Hechos capítulo 14 versículo 22 dijo “Es
necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de
Dios” (Versión Reina Valera 1960). Días antes había sido apedreado,
apaleado y dado por muerto por sus victimarios, uno se pregunta ¿que
hay dentro del corazón de una persona para que después de pasar por
una dificultad tan grande siga pregonando del amor de Dios hacia cada
uno de nosotros? La respuesta es sencilla “CRISTO”.
Hoy te quiero animar a que no bajes los brazos, no te des por vencido sea
cual sea el problema, el enemigo no quiere verte victorioso y siempre
usara todas sus artimañas para verte derrotado y deprimido, en algunas
ocasiones pondrá a tu misma familia y las personas que más amas en tu
contra pero tú debes permanecer siempre con la mirada puesta en Cristo
porque Él es el autor y consumador de la Fe y sin ella es imposible agradar
a Dios.
Cristo por medio de su palabra enseña que “aquí en el mundo tendrán
muchas pruebas y tristezas; pero anímense, porque yo he vencido al
mundo” (Juan 16:33 NTV) y Dios nos ha dado el poder de ser más que
vencedores por medio de su unigénito hijo, porque para Dios no hay nada
imposible y todos tenemos derecho a ser reconocidos hijos de Dios por el
3. sacrificio de Cristo en la cruz, solo que debemos ser hacedores de su
palabra y no tan solo oidores.
Hoy en día solo escuchamos noticias de guerras, enfermedades,
destrucción del medio ambiente y lo mal que esta la economía, es por eso
que debemos siempre hacer las cosas como para Dios porque de Él es
que viene nuestra recompensa. Para nadie es un secreto que todas estas
problemáticas son consecuencias de las malas obras del mismo hombre
en su ambición de conquistar el mundo obviando que este mismo es
dominado por un enemigo que muchos ignoran pero que existe.
Hechas las consideraciones anteriores, se puede observar que este
enemigo solo quiere lograr que apartes la vista del único Dios verdadero
y su misma palabra en el libro de Santiago en el capítulo 4 versículo 4 nos
dice Oh almas adúlteras ¿No sabéis que la amistad del mundo es
enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del
mundo, se constituye enemigo de Dios (versión Reina Valera 1960) por
esta razón no se debe amar las cosas de este mundo. Las cosas materiales
son necesarias, sin embargo, la prioridad es amarnos los unos a los otros
como Él nos ama, porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también
vuestro corazón (Mateo 6:21 RVR1960) y este es engañoso más que
todas las cosas, y perverso. (Jeremías 17: 9-10 RVR1960).
Nuestro Señor y Salvador Jesús por medio de su palabra enseña cómo
enfrentarse a cada dificultad que se presenta en la vida, solo se debe leer
y poner en practica todo lo allí escrito obedientemente y así aprender a
ser más que vencedores en Cristo Jesús. No hay que olvidar que en esta
vida siempre se cosecha lo que se siembra y nadie se burla de la justicia
de Dios, es por eso que ante todo se debe permanecer en integridad sea
cual sea la situación, no se trata de hacer todo por conveniencia sin
4. importar el daño que se puede causar a los demás y Dios no es injusto.
En medio de las dificultades se debe usar el dominio propio que Dios nos
da. Las emociones no deben reinar y guiar nuestras acciones. Podemos
mantener la calma y serenidad porque confiamos en nuestro Padre y Él
nunca nos fallará.
Sus promesas son verdaderas, no se debe dudar ni un solo instante de su
fidelidad porque Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre
para que se arrepienta y también es justo con todos. Animo, recuerda que
Jesús no vino a juzgar al mundo sino a darnos vida y en abundancia pero
debes creer y pensar como Él porque el enemigo no juega a ser malo él
es malo por naturaleza y no debemos darle cabida por medio del pecado
a que gobierne los pensamientos y obras. Dejen que el gran poder de
Cristo les dé las fuerzas necesarias. Protéjanse con la armadura que Dios
les ha dado, y así podrán resistir los ataques del diablo. Porque no
luchamos contra gente como nosotros, sino contra espíritus malvados que
actúan en el cielo. Ellos imponen su autoridad y su poder en el mundo
actual. Por lo tanto, protéjanse con la armadura completa, Así, cuando
llegue el día malo, podrán resistir los ataques del enemigo y se
mantendrán firmes hasta el fin.
Manténganse alerta, que la verdad y la justicia de Dios los vistan y
protejan como una armadura. Compartan la buena noticia de la paz;
estén siempre listos a anunciarla. Que su confianza en Dios los proteja
como un escudo, y apague las flechas encendidas que arroja el
enemigo. Que la salvación los proteja como un casco, y que los defienda
la palabra de Dios, que es la espada del Espíritu Santo.
Dios nos llena de su Espíritu Santo y nos capacita para enfrentar las
situaciones de la vida. No podemos ser tímidos sino valientes, echar mano
de las herramientas que Él da y usarlas. Podemos ser asertivos y firmes,
dar pasos que glorifican a Dios y muestran que estamos llenos de su poder
y su amor.
5. En alguna parte del mundo otras personas están sufriendo igual o peor,
no debemos temer ni angustiarnos porque contamos con la presencia de
nuestro Dios. Él no nos deja solos, y Él es más grande y más poderoso
que cualquier problema. Debemos guardar nuestro corazón y enfocarnos
en la grandeza y el poder de
Dios y en que su mano victoriosa nos sostiene en todo momento y en
todo lugar. Recuerda que nuestra seguridad está en nuestro Señor y
Salvador Jesucristo y Dios es bueno todo el tiempo.
¿Te acuerdas de esta cita Bíblica? La paz os dejo, mi paz os doy; yo no
os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga
miedo. (Juan 14:27 RVR1960). La paz que Dios nos da abarca mucho más
que la paz tal como la entendemos. Normalmente si hablamos de paz nos
referimos a ausencia de guerra o de conflictos. Pero el concepto de la paz
que menciona la Biblia, es mucho más que eso. Significa totalidad,
bienestar, seguridad y alcanza todas las áreas de nuestra vida. Hay veces
en las que nos olvidamos de clamar a Dios en medio de nuestras
dificultades. Nos dejamos cegar por las amenazas que nos rodean y el
tamaño de los problemas. Sin embargo, siempre que clamamos a Dios él
nos escucha y pasa a la acción. Puede que no nos libre al instante de la
enfermedad o de la batalla que nos acecha, pero sí nos concede la paz
que necesitamos y nos da una nueva perspectiva. Nos recuerda que
nuestra vida está en sus manos y en él tenemos salvación.
La muerte de Jesús en la cruz y su resurrección nos garantizan que la
victoria ya ha sido conseguida. No hay ninguna aflicción tan grande que
Jesús no pueda vencer. De hecho, ya la venció. En medio de nuestros
problemas y dolores podemos recordar que Jesús ya ganó la vida eterna
para nosotros y nadie nos la podrá arrebatar.
Nunca olvides que los que aman a Dios todas las cosas le ayudan para
bien y que Él desea que tú seas prosperado en todas las cosas, y que
tengas salud, así como prospera tu alma.