2. ESPÍRITU DE AMOR, DESCIENDE
SOBRE NOSOTROS COMO LO HICISTE
EL DÍA DEL BAUTISMO DE JESÚS.
LLÉNANOS DE TU AMOR PARA QUE
ESCUCHEMOS CON ALEGRÍA LA
PALABRA DE DIOS Y NOS
CONVIRTAMOS A TI.
3. Como el pueblo estaba a la espera, andaban
todos pensando en sus corazones acerca de
Juan, si no sería él el Cristo;
Respondió Juan a todos diciendo
“Yo os bautizo con agua;
pero viene el que es más
fuerte que yo, y no soy
digno de desatarle la
correa de sus sandalias.
El os bautizará en Espíritu
Santo y fuego”.
Lectura
4. Sucedió que cuando todo el pueblo estaba
bautizándose, bautizado también Jesús y puesto
en oración, se abrió el cielo,y bajó sobre él el
Espíritu Santo en forma corporal, como una
paloma; y vino una voz del cielo:
«Tú eres mi hijo;
yo hoy te he
engendrado.»
5. Tú también recibiste un día el Bautismo.
¿En qué forma has agradecido a Dios esa
bella realidad?
¿En qué has hecho consistir el hecho
de ser Hija/o de Dios?
Meditación
6. Oración
Señor, gracias por habernos concedido el
don maravilloso del bautismo. Haz que
nuestra vida corresponda a ese don y que
vivamos siempre agradecidos a ti.
7. Contemplación
«Tú eres mi hijo;
yo hoy te he
engendrado.»
Repite varías veces durante la semana esta
frase. No sólo pienses que fue dicha sólo a
Jesús sino también a ti.
Con el Bautismo Dios te hizo su hija/o. ¿Qué puedes hacer
concretamente para demostrarles a los demás que
verdaderamente tú eres el hijo/a de Dios?
¿En algún momento de tu vida has actuado como si no fueras
hija/hijo de Dios? Pídele perdón y agradécele a Dios ser su hijo.
CEBIPAL