El imperialismo se refiere a la dominación política, cultural y económica de un estado poderoso sobre otros más débiles. El imperialismo europeo del siglo XIX se justificó por la necesidad de expandir el comercio y obtener materias primas y mano de obra barata, aunque también tuvo consecuencias culturales como la pérdida de identidad de las colonias. Hoy en día, el imperialismo toma más la forma de dependencia económica de los países más débiles a sistemas dominantes como el de Estados Unidos.