La metodología etnográfica comenzó a utilizarse en educación a finales de los años 70 en zonas como Gran Bretaña, Estados Unidos y Australia. Se enfoca en cómo los actores sociales construyen y reconstruyen la realidad a través de la interacción, y es importante considerar su propia interpretación de sus acciones. Los ámbitos de trabajo incluyen los efectos de los cambios organizativos en individuos y grupos, el seguimiento de trayectorias educativas, y las culturas y estrategias de profesores y estudiantes.