1. EL MITO DE DAFNE Y APOLO
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APOLO Y DAFNE, FRANCESCO ALBANI
(1615-1620)
2. EL MITO MUY RESUMIDO
En una ocasión Apolo fue
maldecido por Eros (Cupido)
haciendo que se enamorara de
la ninfa Dafne, pero este amor
no se vio correspondido. Dafne
pidió ayuda a su padre, Peneo,
para que la librara de la
persecución del dios. Sus
ruegos fueron escuchados y la
ninfa fue convertida en laurel
justo cuando estaba a punto de
ser alcanzada por Apolo.
Desde entonces Apolo adorna
su cabeza con las hojas del
laurel.
GIAN LORENZO BERNINI
(1622-1625)
3. LOS PERSONAJES
DAFNE:
En la mitología griega, Dafne era una dríade (ninfa
de los árboles), hija del dios río Peneo.
En la mitología griega, una ninfa es una deidad
femenina menor de la naturaleza, típicamente
asociada a un accidente geográfico.
Detalle de la escultura de Bernini
Las ninfas suelen considerarse espíritus divinos que Crédito de la imagen
animan la naturaleza.
Son representadas en obras de arte como hermosas
doncellas, desnudas o semidesnudas, que aman,
cantan y bailan.
4. LOS PERSONAJES
APOLO:
Es uno de los dioses más importantes de
la mitología griega y romana.
Hijo preferido de Zeus, se le consideraba
divinidad de la luz.
Era también dios de la música,
considerada como la armonía del
universo; y era jefe de las Musas (diosas
inspiradoras de la música, de las artes y
de las ciencias).
Apolo Licio, copia romana antigua de un
original griego del siglo IV a. C. (Museo
del Louvre)
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5. LOS PERSONAJES
EROS (CUPIDO):
PENEO: Era el dios de la
Era un dios fluvial. atracción sexual,
Una de sus hijas fue la del amor y del sexo.
ninfa Dafne.
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Apolo y Dafne,
Jean- Baptiste Jean Loo
El Eros Farnesio
1720-1737 (Museo Arqueológico Nacional de Nápoles)
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6. EL MITO EN LA LITERATURA ESPAÑOLA
A Dafne ya los brazos le crecían
y en luengos ramos vueltos se mostraban;
en verdes hojas vi que se tornaban
los cabellos qu'el oro escurecían;
de áspera corteza se cubrían
los tiernos miembros que aun bullendo 'staban;
los blancos pies en tierra se hincaban
y en torcidas raíces se volvían.
Aquel que fue la causa de tal daño,
a fuerza de llorar, crecer hacía
este árbol, que con lágrimas regaba.
¡Oh miserable estado, oh mal tamaño,
que con llorarla crezca cada día
la causa y la razón por que lloraba!
GARCILASO DE LA VEGA
SIGLO XVI
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Antonio Pollaiuolo (siglo XV)
7. EL MITO EN LA LITERATURA ESPAÑOLA
«Tras vos un Alquimista va corriendo,
Dafne, que llaman Sol ¿y vos, tan cruda?
Vos os volvéis murciégalo sin duda,
pues vais del Sol y de la luz huyendo.
ȃl os quiere gozar a lo que entiendo
si os coge en esta selva tosca y ruda,
su aljaba suena, está su bolsa muda,
el perro, pues no ladra, está muriendo.
»Buhonero de signos y Planetas,
viene haciendo ademanes y figuras
cargado de bochornos y Cometas.»
Esto la dije, y en cortezas duras
de Laurel se ingirió contra sus tretas,
y en escabeche el Sol se quedó a oscuras.
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Peter Paul Rubens (siglo XVII) FRANCISCO DE QUEVEDO
SIGLO XVII
8. EL MITO EN LA LITERATURA ESPAÑOLA
¡Sé árbol! (Dijo una voz en la distancia.)
Y hubo un torrente de luceros
sobre el cielo sin mancha.
Yo me incrusté en el chopo centenario
con tristeza y con ansia.
Cual Dafne varonil que huye miedosa
de un Apolo de sombra y de nostalgia.
Mi espíritu fundiose con las hojas
y fue mi sangre savia.
En untuosa resina convirtiose
la fuente de mis lágrimas.
El corazón se fue con las raíces,
y mi pasión humana,
haciendo heridas en la ruda carne,
fugaz me abandonaba.
Manantial (fragmento),
FEDERICO GARCÍA LORCA
SIGLO XX Crédito de la imagen
John William Waterhouse (1908)