Jeremy es un estudiante universitario apasionado por los videojuegos que administra un negocio de cabinas de internet. Las máquinas se han deteriorado por el uso y Jeremy y sus padres deciden renovarlas pero no tienen ahorros suficientes. Un familiar ofrece un préstamo pero con un interés mensual muy alto que no pueden pagar. Luego, un analista de crédito visita el negocio para evaluar si pueden acceder a un préstamo más accesible.
Aula Mass - Curso Finanzas Básico - Financiamiento
1. Jeremy es un estudiante de cuarto ciclo de la carrera de Comunicaciones en
una reconocida universidad, pero realmente su pasión son los
videojuegos, al punto de convertirse en campeón nacional.
2. Jeremy después de sus clases de universidad administra el negocio de
cabinas de internet en su barrio de Carabayllo, donde acuden normalmente
chicos entre 11 y 20 años a jugar en línea
3. Jeremy ha tenido que separar dos ambientes: uno para los gammers y otro, donde no
alcance la bulla, para los chicos que van a hacer sus tareas de colegio y universidad, y en
las noches para las familias que buscan comunicarse por Skype con sus parientes.
4. Para los gammers, Jeremy disponía de 10 máquinas, y para los otros clientes
se contaba con 5, es decir, en total 15 computadoras. El costo de la hora de
alquiler por cada máquina es de S/.2.
5. Todo marchaba bien hasta que las máquinas comenzaron a deteriorarse por
su uso, sobre todo aquellas usadas para los juegos
6. Jeremy con sus padres convinieron en que el negocio tenía futuro, pero
necesitaban renovar los equipos y hacer ciertas mejoras en la infraestructura
para aislar totalmente la bulla de los chicos cuando jugaban
7. Los ahorros de la familia se habían utilizado en pagar el acceso y las pensiones de la
universidad, es más, la utilidad de las cabinas se destinaba a pagar la pensión. Por ello
decidieron analizar algunas alternativas para financiar la compra de nuevas máquinas.
8. La primera opción fue recurrir a un familiar que era prestamista y solicitaron en una
primera conversación informal unos S/.10,000 que es lo que habían estimado para
renovar el negocio.
9. Grande fue su sorpresa, cuando él les dijo que debían pagarle 15% de interés mensual
hasta que cancelen toda la deuda, es decir todos los meses pagar S/.1,500. Esto resultaba
imposible, porque el negocio no dejaba tanto e implicaba dejar de pagar la universidad.
10. Al día siguiente recibieron la visita de Aníbal, un analista de crédito de Edyficar, que
comenzó a realizar varias preguntas, antes de iniciar su evaluación y determinar si el
negocio de las cabinas de Jeremy estaba en condiciones de acceder a un préstamo.