La desigualdad salarial entre hombres y mujeres en Chile es de aproximadamente un 38%, a pesar de que ambos géneros realizan trabajos equivalentes y tienen las mismas capacidades. Aunque históricamente la mujer ha estado en desventaja debido a leyes y costumbres discriminatorias, la Ley de Igualdad Salarial de 2009 ha ayudado a reducir la brecha. Se necesitan mayores esfuerzos para lograr la paridad salarial y reconocer que ambos géneros tienen las mismas habilidades laborales.
Guía de Sensibilización y Formación en Igualdad de Oportunidades entre Mujere...
Desigualdad salarial entre géneros: brecha del 38% en Chile
1. Desigualdad de Salario Nataly Palma Sanz
RESUMEN
“El salario no es determinante para diferenciar entre hombres y mujeres”,
pero hoy existe una diferencia salarial promedio de alrededor de un 38%, esta
moción además es apoyada por el economista Gary Stanley que en su Teoría de
Capital Humano propone que los salarios son determinados por la educación y la
experiencia, y no por una diferenciación biológica.
“La mujer históricamente ha sido violentada en sus derechos con leyes
abusivas y costumbres que la han segregado, en un país en vías de desarrollo
como Chile ya no debe existir el abuso de poder, ya que sin duda todo aquello se
atribuye al modelo de sociedad patriarcal, que aún sigue vigente e imponiendo su
poder sobre la mujer. Según Max Weber el poder y el uso racional de la autoridad
son factores necesarios, pero su excesiva concentración puede ser preocupante,
en este ámbito gran importancia tienen los medios de comunicación ya que
aportan al cambio de pensamiento de la sociedad, según la teoría de Karl Marx,
los medios de comunicación si pueden ayudar al cambio social, ya que todo
depende de cómo y cuanto influyan estos.
2. Desigualdad de Salario Nataly Palma Sanz
DESIGUALDAD DE SALARIO
¿UNA COSA DE GENERO, CAPACIDAD, LIDERAZGO O PODER?
“El salario no es determinante para diferenciar entre hombres y mujeres”,
sin embargo sigue estando presente a pesar de que hemos ido evolucionando,
progresando económicamente y aplicando políticas orientadas a reducir la
desigualdad, la brecha continúa o se ha acrecentado. Hoy en día un hombre y
una mujer que se desempeñan en equivalentes cargos, en las mismas
condiciones y con idénticas obligaciones, presentan una diferencia salarial
promedio de alrededor de un 38% (La Nueva Encuesta Suplementaria de
Ingresos NESI, perteneciente al INE), un hecho indiscutible es que las mujeres
reciben menor salario que sus pares hombres, incluso el Foro Económico Mundial
en América Latina, ubica a nuestro país en el lugar 121 (entre 134) con mayor
diferencia de salarios entre ambos sexos, hecho cuestionable ya que las
capacidades intelectuales entre hombres y mujeres son las mismas. Apoyando
esta moción, el economista Estadounidense Gary Stanley Becker en su Teoría de
Capital Humano propone que:
“Los salarios quedan determinados por la educación y la experiencia
principales elementos que proporcionan a los individuos mayores
salarios debido a sus habilidades adquiridas para desarrollar un trabajo”
Estas Ideas son compartidas por Mincer y Schultz, tal como dice Stanley,
la diferenciación de salario no debe estar sujeta a una construcción sociocultural,
ya que ésta es aprendida y transformada por miles de mujeres y hombres que
optan por estudiar para percibir óptimos salarios, pero en el presente aún las
diferencias se establecen en desventaja sobre el género femenino ya que
tradicionalmente la función de la mujer está asociada al cuidado de los hijos
y del hogar, fomentando una baja valorización de la ocupación de las mujeres ya
que cuidar de los hijos y del hogar es un trabajo que no recibe compensación
económica, pero no podemos ignorar que cada vez son más las mujeres que
trabajan y que proveen a sus casas forjando en ello un doble esfuerzo, esto es
3. Desigualdad de Salario Nataly Palma Sanz
una simple muestra de las capacidades y habilidades del género femenino cuando
siempre se trata de menoscabar sus capacidades y sus conocimientos
limitándolo a ciertas áreas.
En Chile para intentar dar respuesta a este gran problema social se
aprobó la Ley Nº 20.348 sobre Igualdad Salarial, publicada en el Diario Oficial el
19 de junio de 2009. La puesta en marcha de esta ley logra un aumento del 38.6%
del ingreso del hogar creada por fuerza laboral femenina evidenciando una
realidad que poco a poco obliga a dejar de lado pensamientos machistas y dar
paso a una sociedad más abierta y neutral.
A nivel Latinoamericano la Organización Internacional del Trabajo (OIT)
considera que la participación de la mujer en la vida laboral en igualdad de
condiciones con el hombre, constituye uno de los elementos fundamentales del
desarrollo económico y social de un país. Está claro que trabajar nos entrega
oportunidades de un futuro económicamente estable pero no debemos olvidar
que éste anhelo debe darse en circunstancias adecuadas que permitan fortalecer
la autoestima de los/las trabajadores/as, desarrollo de la comunicación
interpersonal, el perfeccionamiento de nuestras competencias profesionales y el
sentido de pertenencia a una sociedad donde se valore el trabajo y lo más
importante la participación de la mujer en igualdad de condiciones en el mundo
laboral.
“Las mujeres históricamente han sido violentadas en sus derechos, con
leyes abusivas y costumbres que la han segregado”; sin embargo hoy en día han
logrado una cierta posición, pero subordinada a la del hombre (marido), esto la
ubica en desventaja en el medio laboral en comparación al hombre y además se
refleja en que aún los salarios son extremadamente desiguales, al respecto Max
Weber señalaba:
“El poder y el uso racional de la autoridad son factores necesarios para
que las organizaciones funcionen, pero su excesiva concentración
puede conducir a formas de totalitarismo inimaginadas”
4. Desigualdad de Salario Nataly Palma Sanz
Apoyando lo que dice el autor, toda la vida nos hemos enfrentado y hemos
sido parte de relaciones de poderes en todos los ámbitos, en muchos de ellos
bastante necesario, desde la calidad de presidente de curso hasta el papel que
ejerce la mamá en casa, el tema es, como hacer que las relaciones de poder o
jerarquía sean invisibles cuando hablamos de salarios con igualdad de
condiciones.
Un factor importante para efectos de avanzar hacia el cambio de
pensamiento en esta materia es el aporte que hacen los medios de comunicación.
Karl Marx, señalaba que estos medios si pueden ayudar al cambio social ya que
todo depende de cómo y cuanto influyan los medios, pueden retrazar o acelerar
los procesos, no podemos olvidar que son ellos los que han fortalecido la idea de
desigualdad a través de la publicidad identificando la imagen de la mujer como
dueña de casa, subyugada al hombre, pero también pueden influir positivamente
incrementando el discernimiento como también modificando la estructura y los
pensamientos de esta misma.
Por último, la aseveración presentada respecto a que el salario no es
determinante para diferenciar entre hombres y mujeres se sustenta en que
debemos comprender que existe una diferenciación biológica ahora la toma de
razón viene cuando debemos comprender que esta diferenciación biológica nada
tiene que ver con las capacidades y habilidades de uno u otro, sin embargo
históricamente la mujer ha sido violentada en sus derechos, con leyes abusivas y
costumbres que la han segregado, se le reconoce la posibilidad de procreación y
el cuidado de los hijos, y en este sentido se ha legislado para entregarle mayores
garantías (como la tuición y el cuidado personal de los hijos) pero nada se dice
sobre la paridad, la oportunidad y las garantías de un sistema laboral que incluya
sin diferencias a hombres y mujeres reconociendo en ellos las mismas
capacidades y la misma habilidades.