2. Algunos críticos han
propuesto el nombre de
generación de la amistad
para definir al grupo de
pintores, narradores, poetas y
cineastas que comenzaron su
actividad artística por los
años 20.
3. Las estrechas relaciones que se
fueron estableciendo entre sus
miembros explican en buena medida
cómo unos cuantos amigos, con
formación e inquietudes similares,
pero con trayectorias bien distintas,
logran constituirse en grupo
literario.
4. En la Residencia de estudiantes cimentaron su
amistad en torno a la segunda década del siglo XX
Lorca, Alberti, Prados, Buñuel y Dalí. El grupo
malagueño (Altolaguirre, Prados e Hinojosa) se
vincula a los demás poetas a través de la revista
Litoral que ellos dirigen y donde todos publican.
5. Jorge Guillén afirma que la amistad es
el elemento
de cohesión más destacado del grupo,
que se refleja en la intensa
correspondencia epistolar, la
participación en proyectos comunes, la
convivencia prolongada, las afectuosas
dedicatorias de sus
obras, etc.
6. Lorca, al parecer de muchos de los miembros del
grupo, actuó como dinamizador de las buenas
relaciones de quienes vivían en la Residencia de
Estudiantes.
7. UNOS AMIGOS
UN recUerdO de vIAje
QUedA eN NUeStrAS MeMOrIAS.
NOS fUIMOS A SevIllA.
¿QUIéNeS? UNOS AMIGOS.
POr cONtActOS cASUAleS,
UN bUeN AzAr QUe reSUltó deStINO:
relAcIONeS felIceS
eNtre QUIeNeS, AúN MOzOS,
Se deScUbrIerON GUStOS, PrefereNcIAS
eN SU rAíz cOMUNeS
¡POeSíA!
8. Al igual que Lorca, Vicente Aleixandre también fue
catalizador del grupo. A causa de su enfermedad era mucha
la gente que pasaba por su casa y fue lugar de encuentro.
Su hermana recuerda a Lorca como el dinamizador de la
fiesta y la cohesión del grupo: donde estaba Federico
siempre había buen ambiente, comenta Conchita.
9. -La cogida y la muerte.
A las cinco de la tarde. En las esquinas grupos de silencio
Eran las cinco en punto de la tarde. A las cinco de la tarde.
Un niño trajo la blanca sábana ¡Y el toro, solo corazón arriba!
A las cinco de la tarde. A las cinco de la tarde.
Una espuerta de cal ya prevenida Cuando el sudor de nieve fue llegando
A las cinco de la tarde. A las cinco de la tarde,
Lo demás era muerte y sólo muerte Cuando la plaza se cubrió de yodo
A las cinco de la tarde. A las cinco de la tarde,
El viento se llevó los algodones La muerte puso huevos en la herida
A las cinco de la tarde. A las cinco de la tarde.
Y el óxido sembró cristal y níquel A las cinco de la tarde.
A las cinco de la tarde. A las cinco en punto de la tarde
Ya luchan la paloma y el leopardo
A las cinco de la tarde.
Y un muslo con un asta desolada
A las cinco de la tarde.
Comenzaron los sones del bordón
A las cinco de la tarde.
Las campanas de arsénico y el humo
A las cinco de la tarde.
10. JUAN BREVA
Juan Breva tenía
Cuerpo de gigante
Y voz de niña.
Nada como su trino.
Era la misma
Pena cantando
Detrás de una sonrisa.
Evoca los limonares
De Málaga la dormida,
Y hay en su llanto dejos
De sal marina.
Como Homero cantó
Ciego. Su voz tenía,
Algo de mar sin luz
Y naranja exprimida
11. PRECIOSA Y EL AIRE
A Dámaso Alonso
Su luna de pergamino
Preciosa tocando viene,
Por un anfibio sendero
De cristales y laureles.
El silencio sin estrellas,
Huyendo del sonsonete,
Cae donde el mar bate y canta
Su noche llena de peces.
En los picos de la sierra
Los carabineros duermen
Guardando las blancas torres
Donde viven los ingleses.
Y los gitanos del agua
Levantan por distraerse,
Glorietas de caracolas
Y ramas de pino verde.
12. PRENDIMIENTO DE ANTOÑITO EL CAMBORIO
EN EL CAMINO DE SEVILLA
Antonio Torres Heredia, Y a la mitad del camino,
Hijo y nieto de Camborios, Bajo las ramas de un olmo,
Con una vara de mimbre Guardia civil caminera
Va a Sevilla a ver los toros. Lo llevó codo con codo.
Moreno de verde luna El día se va despacio,
Anda despacio y garboso. La tarde colgada al hombro,
Sus empavonados bucles Dando una larga torera
Le brillan entre los ojos. Sobre el mar y los arroyos.
A la mitad del camino Las aceitunas aguardan
Cortó limones redondos, La noche de Capricornio,
Y los fue tirando al agua Y una corta brisa, ecuestre,
Hasta que la puso de oro. Salta los montes de plomo.
Antonio Torres Heredia,
Hijo y nieto de Camborios,
Viene sin vara de mimbre
Entre los cinco tricornios.
13. CANCIONCILLA DEL PRIMER
DESEO
En la mañana verde, En la mañana viva,
Quería ser corazón. Yo quería ser yo.
Corazón. Corazón.
Y en la tarde madura Y en la caída
Quería ser ruiseñor. Quería ser mi voz.
Ruiseñor. Ruiseñor.
(Alma, ¡Alma,
Ponte color naranja. Ponte color naranja.
Alma, Alma, ponte color de amor!
Ponte color de amor).
14. ÁRBOL DE CANCIÓN
Caña de voz y gesto, ¡Ay sol! ¡Ay luna, luna!
Una vez y otra vez Un minuto después.
Tiembla sin esperanza Sesenta flores grises
En el aire de ayer. Enredaban sus pies.
La niña suspirando Mira cómo se mece
Lo que quería coger; Una y otra vez,
Pero llegaba siempre Virgen de flor y rama,
Un minuto después. En el aire de ayer.
15. Fin.
Hecho por:
-María Gavilán Romero
-Irene Martínez León