Una evacuación implica llevar a las personas a un lugar más seguro cuando hay peligro. Es importante conocer las rutas de evacuación en el lugar de trabajo y seguir los pasos correctos durante una emergencia, como caminar rápido pero sin correr, ayudar a otros, y reportarse una vez fuera del edificio. Las evacuaciones son necesarias cuando hay riesgos como terremotos, explosiones o escapes de gas que amenacen a muchas personas al mismo tiempo o secuencialmente.