La innovación educativa introduce novedades que producen cambios progresivos en el proceso formativo para mejorarlo y adaptarlo a nuevas demandas, con un coste asequible. La incorporación de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) puede producir esta innovación educativa al mejorar el producto y servicio educativo. La innovación debe permitir que los alumnos obtengan la misma nota con menos esfuerzo o más nota con el mismo esfuerzo, adquiriendo conocimientos, habilidades y capacidades relacionadas con la asignatura.