El documento discute los efectos negativos que los videojuegos pueden tener en los niños y jóvenes, incluyendo aislamiento social, bajo rendimiento escolar, obesidad, conductas violentas y en casos extremos, la muerte. Se mencionan ejemplos de niños y adolescentes que imitaron escenas violentas de videojuegos cometiendo crímenes o que pasaron tanto tiempo jugando que sufrieron problemas de salud. El documento sugiere que el uso excesivo de videojuegos puede afectar negativamente el desarrollo social