Este documento proporciona instrucciones para convertir un texto en verso a prosa. Explica los pasos a seguir: 1) leer el texto en verso para comprenderlo, 2) eliminar la rima, 3) cambiar posiblemente el orden de las palabras y tiempos verbales, y 4) señalar intervenciones de personajes en diálogos. A continuación, presenta una fábula en verso y pide convertirla a tres párrafos en prosa, realizando los pasos anteriores y manteniendo la estructura y moraleja del cuento.
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PROSIFICAR VERSOS
Para prosificar un texto en verso debes seguir estos pasos:
• Leer con atención el texto para comprender perfectamente su contenido.
• Eliminar la rima.
• A veces, cambiar el orden de las palabras y adaptar los tiempos verbales.
• Si hay diálogos señalar las intervenciones de los personajes.
1.- Lee la siguiente fábula:
El pato y la serpiente
A orillas de un estanque
diciendo estaba un pato:
“¿A qué animal dio el cielo
los dones que me ha dado?
Soy de agua, tierra y aire:
cuando de andar me canso,
si se me antoja, vuelo;
si se me antoja, nado.”
Una serpiente astuta,
que lo estaba escuchando,
le llamó con un silbo,
y le dijo: “Seo guapo.
No hay que echar tantas plantas,
pues ni anda como el gamo,
ni vuela como el sacre,
ni nada como el barbo.
Y así tenga sabido
que lo importante y raro
no es entender de todo,
sino ser diestro en algo.”
Más vale saber una cosa bien,
que muchas mal.
Tomás de Iriarte, Fábulas Literarias.
2.- Ahora convierte la fábula en un texto en prosa de tres párrafos. Para ello realiza las
siguientes actividades:
Primer párrafo: Completa escribiendo en tercera persona y situando los hechos en pasado.
Comentaba un pato en la orilla de un estanque que…
Segundo párrafo: Completa sin rima y también en pasado.
Una serpiente que lo estaba escuchando le llamó y le dijo que…, porque lo importante
es…
Tercer párrafo: Escribe una oración para expresar la moraleja de la fábula.
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3.- Escribe en prosa estos versos. Tienes que cambiar algunas palabras, y recuerda que no
tiene que haber rima:
Un mundo al revés
Érase una vez
un lobito bueno
al que maltrataban
todos los corderos.
Y había también
un príncipe malo,
una bruja hermosa
y un pirata honrado.
Todas estas cosas
había una vez
cuando yo soñaba
un mundo al revés.
José Agustín Goytisolo