Los cambios sociales y tecnológicos han influido en el comportamiento de los adolescentes, quienes buscan su propia identidad. La familia y el Estado no cumplen su rol de guía y protección debido a problemas como el exceso de trabajo y la falta de comunicación. Esto expone a los adolescentes a riesgos como el alcoholismo, las drogas y las enfermedades sexuales. Por lo tanto, se ha producido una mayor preocupación por los adolescentes y esfuerzos para promover su salud y bienestar.