TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docx
Análisis resultados de evaluación docente año 2011
1. LA U.T.P. EN UN MODELO DE ESCUELA INTEGRAL
Actividad Nº11: Informe con análisis comparativo a partir del Marco para la Buena
Enseñanza.
Objetivo:
Reflexionar en torno a los resultados nacionales de la evaluación docente comparándola
con los resultados de su Escuela
Los resultados de la evaluación docente tienen distintas miradas, dependiendo de los
intereses de quien los evalué, en este caso intentaremos analizarlos como se pide, tomando
como base el Marco para la Buena Enseñanza (MBE) y en relación con los resultados de la
escuela en la cual ejerzo.
A pesar de los problemas que hubo en el desarrollo del año escolar y al estrés que le
provoca esta prueba a los docentes, estos mostraron el 2011 un avance en sus resultados,
aumentando los calificados como competentes y destacados, y reduciendo los básicos e
insatisfactorios.
Así el año 2011, a nivel nacional, un 1, 4% de los profesores fue evaluado como
insatisfactorio, cifra comparable con la del año 2009 cuando fue de un 1,5%, y que está por
debajo del 2,6% del año 2010. Resultados que no distan de los obtenidos en nuestra
Escuela. Dos Básicos, tres Competentes y uno Destacado.
Hay que decir que un desempeño Insatisfactorio significa que los docentes clasificados en
esta categoría presentan claras debilidades en el conjunto de los indicadores del MBE
evaluados y éstas afectan significativamente el quehacer docente, mientras que el
desempeño Básico de un 27, 2 % el 2011(3.330 docentes), está 1,7 % más bajo que el
resultado de 2009 y 6, 1 % más bajo que el 2010, resultado que demostraría que los
profesores cumplen con lo esperado, pero con cierta irregularidad; esta categoría también se
emplea cuando existen algunas debilidades en el manejo de algunos indicadores del MBE
que afectan el desempeño, pero su efecto no es severo ni permanente. A vista de un neófito
es clara la mejoría que han tenido los maestros en el desarrollo de sus competencias, sobre
todo si a estos percentiles le agregamos que los resultados de nivel Competente (7.856
docentes) es de un 64, 3 % el 2011 es superior en 6, 2 % al resultado de 2009.
Así, también, lo demuestran los resultados de casi dos tercios de los docentes Básicos que
se evalúan por segunda vez mejoran a Competente o Destacado (65 % de ellos).
Por otra parte, el 18% de los profesores Destacados y Competentes que se evalúan por
segunda vez disminuye a Básico o Insatisfactorio.
No obstante, hay que señalar que han aumentado los Competentes y Destacados, que
sumados nos dan un 71,4%, es decir, estamos hablando que casi 3 cuartos del universo de
profesores evaluados están en esta categoría.
Si comparamos estos resultados con los del 2010, vemos que ese año los Competentes
fueron un 58,1% y ahora estamos hablando de un 64,3%; los Destacados el 2010 eran un
6% y el 2011 han sido un 7,1% (871 docentes), entonces tenemos que el gráfico desde esta
mirada nos entrega resultados positivos.
En general, podemos decir, que la categoría o nivel de desempeño Insatisfactorio
disminuyó y los niveles Competentes y Destacados aumentaron.
“Cuando cesa el esfuerzo, comienza la decadencia”
2. LA U.T.P. EN UN MODELO DE ESCUELA INTEGRAL
Sin embargo, es preocupante, el gráfico que muestra los promedios en dimensiones que
evalúa el portafolio 2011: organización de los elementos de la unidad, análisis de las
actividades de clases, calidad de la evaluación de la unidad, reflexión a partir de los
resultados de la evaluación, reflexión pedagógica, estructura de la clase e interacción
pedagógica, y ambiente de la clase para el aprendizaje, donde se aprecia en forma
específica que los profesores estamos en un nivel inicial o básico en siete de las ocho
dimensiones que testea, así lo demuestra el instrumento que representa el 60% de esta
evaluación.
Resumiendo, tenemos problemas en la planificación, evaluación y reflexión pedagógica.
Dimensiones que reflejan de una u otra manera un desapego al MBE y se manifiestan, no
necesariamente en la categorización de los profesores, sino que en los niveles de logro a los
que llegan los estudiantes a quienes atienden. Pues se da la paradoja, en mi escuela, que un
profesor categorizado como destacado obtuvo magros resultados en los niveles de logro en
sus educandos en el último Simce. (Situación que se explicaría por el gráfico de resultados
de evaluación de las dimensiones).
También llama la atención el gráfico de distribución final 2011, donde se ve refleja
claramente una disociación entre la percepción que tiene cada profesor de sí mismo en
cuanto a sus competencias como docente, se categorizan como destacado en un 86, 5 %
dado que objetivamente, si validamos el instrumento que nos mide, el portafolios demuestra
que el 82, 9 % se clasificaría como básico y ninguno de ellos como destacados.
Esta incongruencia invita a una reflexión más profunda y colectiva, que sin duda la iniciaré
en algún momento con mis colegas en la escuela o en el foro de la plataforma.
Al analizar los resultados presentados por Mineduc , si queremos dar otra mirada o
interpretación a los datos entregados, nos debiera llamar la atención que sólo mida o evalúe
competencias individuales y no colectivas, que es como se desarrolla el proceso de
enseñanza – aprendizaje, al menos en mi escuela, por lo que pienso que el progreso o
niveles de logros de los estudiantes no dependen sólo de las competencias o acción
individual de un profesor, al que comúnmente “se crucifica” si sus resultados son bajos,
sino de profesionales reflexivos, entendiendo a estos como aquellos profesores que
reflexionan sobre sus prácticas pedagógicas, cuando realiza una actividad o cuando la
termina. Desde esta perspectiva la reflexión pedagógica reclama un trabajo ordenado y en
equipo que va más allá de aprender de memoria el MBE.
A pesar de no cumplir con los parámetros exigidos en las dimensiones que pone a prueba
el portafolio, en nuestra escuela, sí se reflexiona y socializa acerca de los dominios,
criterios y descriptores que nos ofrece el MBE, orientando o reorientando nuestro quehacer
pedagógico, pero como se dispone de poco tiempo para planificar y evaluar nuestra
enseñanza nos convertimos en profesores funcionales a las exigencias del Mineduc, Simce,
Sned, Evaluación docente, etc.
De todas maneras, a pesar de nuestras carencias, existe buena disposición para reflexionar
sobre nuestro quehacer docente a objeto de mejorarlo.
Atentamente,
Rubén Arredondo Díaz
Profesor - alumno
“Cuando cesa el esfuerzo, comienza la decadencia”