1. ATENCION AL PACIENTE CON FIEBRE
1. MECANISMOS DE PRODUCCION Y PERDIDA DE CALOR CORPORAL
El hombre, en condiciones normales, tiene una temperatura corporal
prácticamente constante independientemente de los cambios térmicos
ambientales.
El que la temperatura corporal muestre escasas variaciones en el hombre, se
debe a que éste dispone de unos mecanismos reguladores que le permiten esta
independencia térmica. Básicamente, dichos mecanismos se agrupan en 3:
producción de calor, pérdida de calor y control de la temperatura.
Producción de calor
Basalmente, la producción de calor está relacionada con el metabolismo celular
que genera 1 600 calorías, mediante la acción enzimática y el estímulo de las
hormonas tiroideas. Las fuentes principales se encuentran en el aparato digestivo,
el hígado y los músculos. Una vez generado el calor se distribuye por todo el
organismo a través de la circulación de la sangre.
Pérdida de calor
La pérdida de calor del organismo se realiza fundamentalmente en la superficie
corporal, puesto que pueden despreciarse las pérdidas por calentamiento de
nutrientes y por la respiración, que son mínimas.
La cantidad de calor perdida está en relación con los cambios de la
vascularización de la superficie corporal, produciéndose vasodilatación periférica
cuando aumenta la temperatura corporal, con lo que se facilita la pérdida por
conversión y evaporación. La evaporación está relacionada con la humedad
atmosférica, disminuyendo cuando aumenta ésta.
2. 2. FISIPATOLOGIA DE LA FIEBRE
Diversos estímulos inducen fiebre y estos pueden tener un origen variado, así,
pueden desencadenarlos bacterias y sus endotoxinas, virus, levaduras, reacciones
inmunológicas, hormonales, etcétera. Todos estos agentes desencadenantes
constituyen lo que se conoce como pirógenos exógenos y se piensa que actúan
mediante un pirógeno endógeno. Este pirógeno endógeno es idéntico a la
interleucina 1 (IL-1). Tiene un peso molecular de 15 000 y se libera en el sistema
mononuclear fagocítico, donde es sintetizado tras el estímulo del pirógeno
exógeno que libera un gen reprimido contenido en la célula (figura).
FIGURA. Mecanismo de producción de la fiebre.
La IL actúa induciendo la síntesis de prostaglandinas E (PgE), a partir del ácido
araquidónico procedente de las membranas celulares. Estas prostaglandinas,
especialmente la PgE1, parece que actúan al inducir las síntesis de AMPc.
Cuando la IL-1 se pone en contacto con las neuronas del área preóptica del
hipotálamo, actúa sobre el termostato elevando su nivel.
En ese momento se produce la activación del mecanismo de control aumentando
la producción de calor muscular por escalofríos y disminuyen do las pérdidas
térmicas por vasoconstricción cutánea. La temperatura aumenta hasta que la
sangre que circula alcanza el nuevo nivel que después se mantiene por equilibrio
entre producción y pérdida a un nivel superior al basal.
Las causas más comunes que dan como resultado una elevación térmica (fiebre)
son las siguientes.
3. Enfermedades infecciosas o bacterianas
Enfermedades como la gripe o los resfriados
Infecciones del oído, otitis
Insolaciones
Golpes de calor
Intoxicaciones
Enfermedades vasculares
Infecciones respiratorias, etc...
4. 3. TIPOS DE FIEBRE
Generalmente un patrón febril (curso de la temperatura) no debe ser considerado
patognomónico de un agente infeccioso en particular en un paciente, sin embargo,
la curva de la tamperatura puede convertirse en una valiosa pista para el estudio
etiológico de la fiebre.
Fiebre intermitente: Caracterizada por una amplia oscilación en las cifras de la
temperatura. El uso irregular de antipiréticos y los abscesos piógenos son las
cuasas más comunes de este patrón intermitente. También se observa en la
tuberculosis diseminada, en la pielonefritis aguda con la bacteremia y menos
frecuentemente en el paludismo.
Fiebre continua: Es aquella con elevaciones moderadas, pero persistentes de la
temperatura, con mínimas fluctuaciones. Orienta a pensar en brucelosis, fiebre
tifoidea y neumonía neumocócica.
Fiebre remitente: Es muy similar a la fiebre intermitente excepto porque las
fluctuaciones de la temperatura son menos dramaticas sin que ésta retorne a las
cifras normales. Ejemplos son las infecciones virales respitatorias, la neumonía
por micoplasma y el paludismo por Plasmodium falciparum.
Fiebre recurrente: Caracterizada por periodos de fiebre alternantes con periodos
afebriles. Durante los episodios febriles, la fiebre puede presentarse bajo una de
las formas antes descritas.
Disociación esfigmotérmica (disparidad pulso-temperatura): Se presenta con
elevación de temperatura sin incremento en la frecuencia cardiaca. Puede
observarse en la brucelosis, fiebre tifoidea y psitacosis.
5. 4. ETAPAS DE LA FIEBRE
Etapa de umbral o de inicio: aumento de la temperatura con aparición de piel
fría y pálida, escalofríos, taquicardia y taquipnea y uñas cianóticas.
Etapa de equilibrio o curso: establecimiento de la temperatura elevada
acompañada de taquicardia y taquipnea, piel caliente y enrojecida,
fotosensibilidad y ojos vidriosos, sed, pérdida de apetito y deshidratación,
herpes, malestar, cefalea, debilidad, dolor muscular, somnolencia, agitación,
convulsión, delirios e incluso puede llegar al coma.
Etapa de lisis, crisis o defervescencia: descenso de la temperatura con
diaforesis, piel caliente y enrojecida, y mejoría generalizada.
ALTERACIONES
• Febrícula: temperatura mayor a lo normal y menor de 38 grados
centígrados
• Hipertermia: temperatura superior a 38 grados centígrados
• Hipèrpirexia: temperatura muy alta, mayor a 40 grados centígrados
• Hipotermia: temperatura menor de lo normal.
SINTOMAS ASOCIADOS
• síntomas de resfriado o flu (influenza)
• dolor abdominal, náuseas, vómitos o diarrea
• ardor o dolor al orinar
• dolor o molestia en alguna parte del cuerpo
• contacto con personas enfermas en el hogar, el trabajo o la escuela
• tipos de alimentos que ha ingerido recientemente
• cualquier exposición reciente a animales, incluyendo las mascotas
• si tiene una prótesis o un dispositivo mecánico que le hayan implantado, como una
articulación artificial o una válvula cardíaca mecánica
6. • alguna cirugía reciente, cortes o áreas amplias de piel lesionada
• condiciones inflamatorias crónicas, como artritis reumatoide
• los tipos de medicamentos que toma
• vacunación recientes
• viajes recientes, especialmente al exterior (paises extranjeros)
Su médico le tomará la temperatura oral, del oído o rectal. Según el lugar donde soseche que esté
la infección, su médico podría examinar su:
• piel: en busca de signos de erupción o infección
• ganglios linfáticos: en busca de hinchazón (señal de infección cercana)
• Ojos: en busca de enrojecimiento o ictericia (color amarillo en la parte blanca de los ojos)
• boca y garganta: en busca de señales de faringitis (infección de garganta) o absceso
dental (infección de un diente)
• sistema cardiovascular: en busca de insuficiencia cardíaca o infecciones del corazón
• tórax: en busca de infecciones de los pulmones
• abdomen: en busca de infecciones de la vesícula biliar, el intestino o el apéndice
• articulaciones: en busca de artritis
• genitales: en busca de enfermedades de transmisión sexual
• sistema nervioso: en busca de encefalitis (infección cerebral) o meningitis (inflamación o
infección de las membranas que cubren el cerebro)
7. 5. INTERVENCION DE ENFERMERIA
• USO DE ANTIPIRETICOS
Tratamiento medicamentoso
• AAS 0,3-0,5 g cada 4 horas.
• Salicilato de lisina 0,3-0,5 g cada 4 horas.
• Paracetamol 0,5 g cada 4 a 6 horas.
Medidas para evitar efectos adversos
• Administrar antipiréticos regularmente cada 4 horas.
• Si hay escalofríos y temblores resistentes, usar sales de calcio por vía
intravenosa; sulfato de morfina 10 a 15 mg por vía subcutánea y
clorpromacina parenteral.
Debe desterrarse la costumbre tan arraigada en algunos médicos y en muchas
personas que se automedican, de prescribir antibióticos ante la aparición de
cualquier proceso febril, y utilizarlos únicamente en pacientes de alto riesgo, como
inmunodeprimidos, pacientes con linfomas o hemopatías malignas, en neumonías
con grave afección general y gasométrica, y siempre tras la toma de muestra para
cultivos. En cuanto ante los antitérmicos, antes de administrarlos debe tenerse en
cuenta que pueden causar sudación profusa y en ocasiones hipotensión y crisis de
escalofríos.
Estos efectos adversos pueden paliarse con una administración regular cada 4
horas, en lugar de hacerlo cuando la temperatura alcanza determinados
niveles.
Los de mayor uso son los derivados del ácido salicílico (ácido acetil salicílico y
salicilato de lisina), en dosis de 0,3 a 0,5 g cada 4 horas y los derivados del
paraaminofenol, la fenacetina y sobre todo su metabolito, el acetaminofén,
(paracetamol) en dosis de 0,5 g cada 4 a 6 horas; ambos son buenos
antipiréticos al actuar interfiriendo la acción de la IL-1 sobre las PgE, además
tienen acción analgésica y no tienen efecto adverso sobre el aparato digestivo
ni sobre la coagulación. Sus inconvenientes son su acción sobre el hígado. En
el caso del ácido acetil salicílico existe el inconveniente adicional de su relación
con el síndrome de Reye en niños con gripe o varicela. El resto de los
antitérmicos deben ser restringidos a casos muy concretos por sus efectos
adversos.
8. Los esteroides también son antitérmicos, pero no se utilizan como tales por sus
efectos colaterales y porque pueden inducir una caída brusca de la
temperatura y/o de la tensión arterial.
Se debe mencionar que para hacer desaparecer los escalofríos y temblores se
pueden administrar por vía intravenosa las sales de calcio, también puede
utilizarse el sulfato de morfina en dosis de 10 a 15 mg por vía subcutánea y la
clorpromacina por vía parenteral.
• MEDIOS FISICOS
sobre el manejo de la fiebre indica que "los métodos físicos de enfriamiento como
el baño, el ventilador, las mantas enfriadoras o el lavado con esponja húmeda,
como intervenciones diseñadas expresamente para bajar la fiebre pueden interferir
con el rol beneficioso de la fiebre durante la enfermedad". Entre los efectos
adversos más comunes incluyen: escalofríos, llanto e incomodidad. Pasar una
esponja con agua fría puede causar enfriamiento periférico, sin embargo la
constricción de los vasos sanguíneos puede llegar a causar la conservación del
calor.
• Ambiente a temperatura confortable.
• Aportar líquidos y control hidroiónico.
• Enfriamiento cutáneo.
• MEDIDAS GENERALES COMPLEMENTARIAS
Debe procurarse que el paciente esté en una habitación confortable a
temperatura ambiente. Hay que aportarle líquidos en cantidades suficientes
para prevenir el desequilibrio hidroiónico y favorecer así la pérdida térmica
por evaporación.
Es útil la aplicación de compresas frías o soluciones salinas frías con
esponjas, que son tan útiles como los baños de alcohol con la ventaja sobre
éstos de que se evita el olor.
Cuando la temperatura sobrepasa los 42 oC, debe procederse inmediata
mente el baño con agua helada o mantas enfriadas.
Si la hipertermia incide en pacientes con vasoconstricción cutánea, como
ocurre en el golpe de calor o hipertermia posoperatoria, además del
9. enfriamiento cutáneo deben aplicarse masajes en la piel con el objetivo de
aumentar el riego sanguíneo de ésta.
Es preciso tener en cuenta que estas medidas son puramente paliativas,
pues cuando cesen estas maniobras, la temperatura se elevará
nuevamente, por lo que debe acompañarse de otras medidas que hagan
descender el nivel superior al normal.