Este documento habla sobre la fiesta de María Auxiliadora que se celebra el 24 de mayo. Explica que santos como Juan Crisóstomo, Sofronio y Juan Damasceno ya invocaban a María con el título de Auxilio de los Cristianos en los siglos IV, VI y VIII. Sin embargo, fue san Juan Bosco quien más ayudó a extender esta advocación a toda la Iglesia al construir una basílica con este nombre en Turín en 1868. El documento también destaca que María es nuestra madre y nos ama incondicionalmente, nos auxilia
LA NECESIDAD DE SER LLENOS DEL ESPIRITU SANTO.pptx
Auxilio de los Cristianos
1. Arzobispado de Arequipa
Domingo
21 de
mayo de
2017
LA COLUMNA
De Mons. Javier Del Río Alba
AUXILIO DE LOS CRISTIANOS
Este miércoles, 24 de mayo, celebramos la fiesta
de María Auxiliadora, instituida por el Papa Pío
VII en agradecimiento a la Virgen que lo liberó
de la prisión a la que lo había sometido el
emperador Napoleón, en el siglo XIX. La
advocación de María como Auxilio de los
Cristianos, sin embargo, data de mucho antes.
Hasta nuestros días han llegado testimonios de
que santos como Juan Crisóstomo, en el siglo IV,
Sofronio, en el siglo VI y Juan Damasceno en el
VIII ya la invocaban con ese título. En templos
antiguos de Oriente encontramos también la
denominación de Auxiliadora para referirse a la
Virgen. Pero el que más colaboró para que esta
advocación se extienda a la Iglesia universal fue
san Juan Bosco, a quien la misma Virgen inspiró
que construyera una basílica con ese nombre, lo
que nuestro santo hizo en Turín y el templo fue
consagrado el año 1868. “La Virgen quiere que
la honremos con el título de Auxiliadora, los
tiempos que corren son tan aciagos que tenemos
necesidad de que la Virgen nos ayude a
conservar y defender la fe cristiana”, decía Don
Bosco. Desde entonces, la familia salesiana se
destaca por la devoción a MaríaAuxiliadora y ha
construido numerosos templos en su honor por
todoelmundo.
¡Cuántos de nosotros hemos sido auxiliados por
la Virgen María! ¡Cuántos de nosotros somos
testigos de que María ha cumplido el encargo
que Jesús le dio en la cruz y nos ha acogido como
hijos! Ciertamente, María es nuestra Madre y
nos ama con un amor incondicional. Ella, que ha
cooperado en nuestra redención. Ella, en quien
se cumplió lo que Dios anunció al demonio:
“enemistad pondré entre ti y la mujer, entre su
linaje y el tuyo, él te pisará la cabeza mientras tú
acechas su calcañar”. María, a quien Dios le
concedió la gracia de participar de un modo
especialísimo en la victoria de Jesucristo sobre
el pecado y la muerte, es nuestro gran auxilio
ante las insidias del demonio. En ella el demonio
ha sido derrotado. Con ella también nosotros
podemos salir victoriosos de las tentaciones,
mantener viva nuestra fe cristiana y difundirla
connuestraspalabrasynuestrasobras.
Por eso, quisiera invitarlos a no olvidarse de la
Virgen María, a quien en Arequipa conocemos
como nuestra “Mamita de Chapi”.
Invoquémosla en nuestras necesidades y
acudamos a ella como un hijo pequeño recurre a
su madre en busca de protección y de consuelo, y
como un hijo ya joven o adulto recurre a su
madre en busca de ayuda, consejo y
comprensión. En la medida en que lo hagamos
experimentaremos que realmente la Virgen está
viva y ha sido instituida por Dios como
m e d i a d o r a d e t o d a s l a s g r a c i a s .
Encomendémonos cada día a ella y
encomendémosle también a nuestros seres
queridos, familiares y amigos. Veremos que
viviremos contentos, nuestras familias estarán
más unidas, nuestros niños, jóvenes y ancianos
estarán protegidos. Si Don Bosco consideró que
en su tiempo era necesaria la ayuda de la Virgen,
mucho más necesaria lo es en nuestros días
porque la violencia física y verbal ha
aumentado, mucha gente ha perdido la fe y la
familia está siendo constantemente atacada a
través de esa “colonización ideológica” que el
Papa Francisco ha denunciado en varias
oportunidades.
+ Javier Del Río Alba
Arzobispo de Arequipa