El documento describe los componentes clave de una balanced scorecard para una empresa, incluyendo finanzas, clientes, procesos internos, y aprendizaje/crecimiento. Cada componente tiene indicadores para medir el progreso hacia objetivos específicos como obtener ganancias financieras máximas, satisfacer a los clientes, garantizar la calidad de los productos, e invertir en el desarrollo del personal y la tecnología.