Este informe quiere aclarar los conceptos básicos para Entender en qué consiste este grupo de enfermedades y explicar, de manera más extendida, aquellos tipos de cáncer más frecuentes en nuestra sociedad.
1. ¿Qué es el cáncer? (Clasificación general)
Tratamientos
Factores de riesgo (prevención)
Pronostico
Tipos de cáncer
cáncer de mama
cáncer de pulmón
cáncer de próstata
cáncer de colon
PAULA PADRINO 1º BACH. A
2. Cáncer es el término y se emplea para un grupo de enfermedades que tienen un
denominador común: la transformación de la célula normal en otra que se comporta de
forma muy peligrosa para el cuerpo humano.
El cáncer puede afectar a prácticamente cualquier clase de células. Dependiendo del
tipo de tejido del que surgen se lo conoce con un nombre u otro:
Carcioma: En tejidos que cubren las superficies internas
o externas del cuerpo.
Sarcoma: en tejidos que sostienen el cuerpo como los huesos,
los músculos o el tejido conectivo que rodea los órganos.
Linfoma: en los ganglios linfáticos donde maduran las células
del sistema inmune
Leucemia: en células inmaduras de la sangre (que se generan
en la médula ósea) y que se acumulan en el torrente
sanguíneo
Cánceres del sistema nervioso central: cánceres que carcioma
empiezan en los tejidos del cerebro y de la médula espinal.
4. La célula es el elemento más simple, dotado de vida propia, que forma los tejidos. Una
pared celular rodea la célula y la separa de su ambiente. Dentro del núcleo está el ADN, que
contiene la información que programa la vida celular. El hombre está compuesto de
millones de células.
La célula se divide y al hacerlo sus estructuras se dividen también en otras exactamente
iguales a las anteriores, con los mismos componentes y funciones que la originaria.
Las células normales crecen a un ritmo limitado y
permanecen dentro de sus zonas correspondientes. Las
células musculares se forman y crecen en los músculos y
no en los huesos; las de los riñones no crecen en los
pulmones, etc. Estas funciones y este ritmo de crecimiento
viene determinado por el ADN. Algunas células tienen
menos tiempo de vida que otras, como por ejemplo las
células del intestino que tienen un período de vida de
dos semanas, mientras que los hematíes viven durante
unos tres meses.
Otras células van a vivir el tiempo que viva la persona y sólo
se dividen para sustituirse a sí mismas, éste sería el caso de
las células óseas que actúan cuando hay que reparar una
fractura. La vida de cada grupo de células es distinta y
funcionará según se lo dicte su ADN que es distinto para
cada tipo de célula. Cada célula está bien diferenciada.
5. La sangre aporta el oxígeno y los nutrientes necesarios para la vida celular y recoge
los productos de deshecho producidos por las células y los transporta a los órganos
de filtrado y limpieza (riñones, hígado, pulmones). La linfa es un líquido incoloro que
se compone, en su gran mayoría, por linfocitos, un tipo de glóbulos blancos, y que
recorre todo el organismo a través de vasos linfáticos.
El sistema inmunológico se encarga de la defensa del cuerpo a través de los
leucocitos que buscan y destruyen a las bacterias y virus.
Los leucocitos viajan por la sangre y por la linfa y se acumulan en aquellos lugares donde hay
infección para rodear y matar a las bacterias o virus y, más tarde, emigran por medio de los vasos Linfocito T
linfáticos a los ganglios linfáticos.
Los ganglios linfáticos son como racimos de uvas situados en distintas partes del organismo.
Cada ganglio recibe los linfocitos y es en ellos donde se filtran y destruyen las bacterias, los
desechos y los propios linfocitos desgastados. Cuando se produce alguna infección, los ganglios
linfáticos se pueden inflamar. Si la infección se produce en un diente, se inflamarán los del cuello.
Si la infección es en una mano, estarán aumentados los de la axila correspondiente. Los ganglios
también pueden estar inflamados cuando hay un tumor. La célula normal pasa a convertirse en
una célula cancerosa debido a un cambio o mutación en el ADN. A veces esas células, cuya
secuencia genética ha cambiado, mueren o son eliminadas en los ganglios linfáticos. Pero, otras
veces, siguen con vida y se reproducen. Las células cancerosas tienen un aspecto
diferente, bien porque su forma ha cambiado o porque contengan núcleos más grandes o más
pequeños. Estas células son incapaces de realizar las funciones que corresponden a las células Sistema
pertenecientes a ese tejido linfático
6. Generalmente se multiplican muy rápidamente, porque les falta un mecanismo de control del
crecimiento. Con frecuencia, son inmaduras debido a que se multiplican de una forma muy rápida y no
tienen tiempo suficiente para crecer plenamente antes de dividirse. Al formarse un gran número de
células cancerosas, se amontonan, presionan o bloquean a otros órganos y les impiden realizar su
trabajo. Como no se limitan al espacio originario donde se forman, y se extienden a otras zonas,
se dicen que son invasivas. Tienden a emigrar a otros lugares, a través de la sangre o de la
linfa. Las células que se encargan de la defensa del organismo suelen destruirlas, así separadas,
pero si sobreviven pueden producir un nuevo crecimiento en un lugar diferente, metástasis, y
dañar a otros órganos.
7.
8. No todos los tumores son cancerosos; puede haber tumores benignos y tumores
malignos.Los tumores benignos no son cancerosos. Pueden extirparse y, en la
mayoría de los casos, no vuelven a aparecer. Las células de los tumores benignos
no se van (diseminan) a otras partes del cuerpo.Los tumores malignos son
cancerosos. Las células de estos tumores pueden invadir tejidos cercanos y
diseminarse a otras partes del cuerpo. Cuando el cáncer se disemina de una parte
del cuerpo a otra, esto se llama metástasis.Algunos cánceres no forman tumores. Por
ejemplo, la leucemia es un cáncer de la médula ósea y de la sangre.
9. SÍNTOMAS:
El cáncer puede causar muchos síntomas diferentes. Estos son algunos:
• Un engrosamiento o bulto en el seno o en cualquier otra parte del cuerpo
• Un lunar nuevo o un cambio en un lunar existente
• Una llaga que no sana
• Ronquera o tos que no se quita
• Cambios en los hábitos del intestino o de la vejiga
• Malestar después de comer
• Dificultad para pasar alimentos
• Aumento o pérdida de peso sin razón conocida
• Sangrado o secreción inusual
• Sentirse débil o muy cansado
Generalmente, estos síntomas no se deben a cáncer. También pueden ser causados por tumores benignos u otros
problemas. Sólo el médico puede decir con seguridad. Cualquier persona con estos síntomas u otros cambios en
su salud deberá ver a un médico para que se haga un diagnóstico y se traten los problemas lo más pronto posible.
Generalmente, el cáncer cuando empieza no causa dolor. Si usted tiene síntomas, no espere a sentir dolor para ver
a un médico.
10. Diagnóstico
Pruebas de laboratorio
Pruebas de sangre, de orina, o de otros fluidos pueden ayudar a los médicos a hacer un diagnóstico. Estas pruebas
pueden mostrar qué tan bien funciona un determinado órgano (como el riñón). También, altas concentraciones de
determinadas sustancias pueden ser un signo de cáncer. Estas sustancias se llaman con frecuencia marcadores
tumorales. Sin embargo, los análisis de laboratorio anormales no son un signo seguro de cáncer. Los médicos no
pueden basarse solamente en un análisis anormal para diagnosticar el cáncer.
Estudios de imágenes
Los estudios en imágenes generan una representación gráfica de las áreas internas de su cuerpo que ayuda a los
médicos a ver si existe un tumor. Estas imágenes se pueden hacer de diferentes formas:
• Rayos X: Los rayos X son la forma más común de ver órganos y huesos dentro del cuerpo.
• Escanograma de tomografía computarizada: Una máquina de rayos X conectada a una computadora toma una
serie de imágenes detalladas de sus órganos. Es posible que el paciente reciba un material de contraste (como un
tinte) para que estas imágenes tengan más detalle.
11. • Estudios con radionúclidos: Al paciente se le administra una inyección con una pequeña cantidad de material
radioactivo. Este material fluye por la sangre y se acumula en algunos huesos u órganos. Una máquina llamada
escáner detecta y mide la radioactividad. El escáner genera imágenes de los huesos y órganos en la pantalla de
una computadora o en una película. Su cuerpo se deshace rápidamente de la sustancia radioactiva.
• Ecografía: Un aparato de ecografía emite ondas de sonido que no se pueden oír. Las ondas rebotan en los
tejidos internos de su cuerpo como un eco. Una computadora usa este eco para crear imágenes.
• Imágenes de resonancia magnética: Un imán fuerte conectado a una computadora es usado para crear
imágenes detalladas de las áreas internas del cuerpo. El médico puede ver estas imágenes en un monitor e
imprimirlas en película.
• Tomografía por emisión de positrones: Se le inyecta una pequeña cantidad de material radioactivo. Una
máquina forma imágenes que muestran las actividades químicas del cuerpo. Las células cancerosas a veces
aparecen como áreas de alta actividad.
Resonancia magnética
ecografía
12. BIOPSIA
En muchos casos, los médicos necesitan Otros tipos de exámenes:
hacer una biopsia para diagnosticar el
cáncer. Para la biopsia, el médico extrae
una muestra de tejido y la envía al
laboratorio. Un patólogo examina el
tejido al microscopio. La muestra puede
obtenerse de varias maneras:
El patólogo usa un microscopio para
examinar los tejidos.
• Con una aguja: El médico usa una
aguja para extraer tejido o fluido.
• Con un endoscopio: El médico usa
un tubo fino y luminoso (un
endoscopio) para mirar dentro del
cuerpo. El médico puede extraer
tejidos o células por el tubo.
• Con cirugía: La cirugía puede ser
por escisión o por incisión.
1. En la biopsia por escisión , el
cirujano extrae todo el tumor.
Con frecuencia, retira también
tejido sano que rodea el tumor.
2. En la biopsia por incisión, el
cirujano saca sólo una parte
del tumor.
13. El diagnóstico de cáncer ya no significa una sentencia de muerte. Hoy en día, las personas con cáncer
pueden beneficiarse de muchos tipos de tratamientos contra el cáncer que podrían salvarles la vida.
1. La CIRUJÍA es el método más empleado para aquellos tumores pequeños y localizados en un lugar
concreto. Para que sea completamente eficaz se precisa extirpar parte del tejido que rodea el tumor para
asegurar así que todas las células cancerosas han sido extirpadas. Si el cáncer se ha extendido a otras
zonas, a través de la sangre o de la linfa, habrá que realizar otros tratamientos, bien sean añadidos a la
cirugía o únicos y distintos a ella.
14. En la mayoría de los casos, el cirujano extirpa el tumor y un poco de tejido de su alrededor. El hecho de quitar
un poco de tejido que rodea el tumor puede ayudar a evitar que el tumor vuelva a crecer. El cirujano puede
también extraer algunos ganglios linfáticos cercanos. Los efectos secundarios de la cirugía dependen
principalmente del tamaño y ubicación del tumor y del tipo de cirugía. Toma tiempo para recuperarse después
de una cirugía. El tiempo de recuperación es diferente para cada tipo de cirugía. Es diferente también para
cada persona. Es común sentirse débil o cansado por un tiempo. La mayoría de la gente se siente incomoda
durante los primeros días después de una cirugía. Sin embargo, los medicamentos pueden ayudar a controlar
el dolor.
Antes de la cirugía, el paciente deberá consultar el plan para aliviar el dolor con su médico o enfermera. El doctor
puede ajustar el plan si necesita más alivio del dolor. A algunas personas les preocupa que la cirugía (o aun la
biopsia) para cáncer esparza la enfermedad. Esto casi nunca ocurre. Los cirujanos usan métodos especiales y
siguen varios pasos para evitar que las células cancerosas se esparzan. Por ejemplo, si deben extirpar tejidos de
más de un área, usan instrumentos diferentes para cada sitio. Esto ayuda a reducir la posibilidad de que las
células cancerosas se diseminen a tejidos sanos. En forma semejante, algunas personas temen que la
exposición de las células cancerosas al aire durante la cirugía cause el contagio del cáncer. Esto no es verdad. El
aire no hace que el cáncer se esparza.
15. 2. Radioterapia
La radioterapia (también llamada terapia de radiación) usa rayos de alta energía para destruir las células cancerosas. Los
médicos usan distintos tipos de radioterapia. Algunas personas reciben una combinación de tratamientos.
Radiación externa: Se aplican utilizando una serie de aparatos similares a grandes máquinas de rayos X (acelerador
de electrones y bomba de cobalto). que dirigen la energía radiactiva hacia la zona afectada. Esta región se marca
previamente con pintura o tinturas, los especialistas tatúan unos puntos clave para indicar la localización exacta del tumor -
si estas marcas desaparecen no trate de sustituirlas usted mismo-. El resto de las zonas del cuerpo se protegen con bloques
de plomo para que no reciban radiación innecesaria. Se aplica principalmente en una serie de sesiones de tratamiento
diarias, de lunes a viernes, dejando al paciente descansar los fines de semana y días festivos. Aunque la duración de cada
sesión depende de cada caso y del tiempo de diferentes máquinas, suele prolongarse durante dos o seis semanas. Las
sesiones suelen durar unos 20 minutos en los que el paciente se quedará sólo en la sala para evitar que la radiación se
propague. Es necesario que mantenga la calma y no se mueva, para que la radiactividad se dirija exactamente a la zona en
tratamiento. En todo momento estará vigilado por un circuito cerrado de televisión y siempre habrá alguien escuchándole
desde fuera de la sala, de manera que si tiene algún problema podrá comunicarlo inmediatamente. La razón para aplicar la
radioterapia en sesiones es la de dar más tiempo a las células sanas para recuperarse y causarles el menor daño posible.
16. El número de ciclos que reciba depende de numerosos factores, entre ellos su estado general de salud, la localización
y la etapa en la que se encuentra el tumor, y si ha recibido otro tipo de tratamiento como quimioterapia o cirugía. De
hecho, ciertos tumores requieren más de una sesión diaria para aumentar la eficacia y disminuir al máximo los
potenciales efectos secundarios.
Por esta razón, el tratamiento para cada paciente se plantea de forma individual. Además, cada dispositivo funciona
de manera un poco diferente, de manera que unos son mejores para tratar los tipos de cáncer más cercanos a la
superficie de la piel, mientras que otros aparatos son capaces de profundizar más hasta llegar a regiones internas del
organismo. Puede que usted reciba la radioterapia como paciente externo, es decir, que le permitan volver a casa al
acabar los ciclos; sin embargo, en ocasiones, será necesario que permanezca ingresado, al menos durante los primeros
días, para ver cómo evoluciona su organismo.
Actualmente se investigan además las posibilidades de la radioinmunoterapia que consiste en introducir anticuerpos
que conducen núcleos radiactivos en el organismo del paciente. Estos anticuerpos están marcados en el laboratorio,
de manera que actúan como 'taxis' que se unen a las células cancerígenas y llevan los fármacos directamente al tejido
del tumor.
17. • Radiación interna (radiación por implante o braquiterapia): La radiación proviene de
material radioactivo puesto en semillas, agujas o tubos delgados de plástico colocados
directamente en el tejido. El paciente se queda por lo general en el hospital. Los implantes
permanecen en el sitio generalmente por varios días.
Se utiliza principalmente en tumores de
cabeza, cuello, cérvix, útero, próstata y piel.. Los dispositivos
radiactivos se insertan dentro del organismo del propio paciente
mediante una sencilla intervención quirúrgica durante la que se
'implantan' los materiales radiactivos (iridio, cesio, yodo...) lo más
cerca posible del tumor. Si va a recibir radioterapia interna tendrá
que quedarse en el hospital algunos días y será necesario que tome
algunas medidas especiales mientras el material radiactivo esté en
su cuerpo. Al terminar el tratamiento no corre ningún peligro de
'contaminar' a sus vecinos o familiares por la exposición a la energía
radioactiva. En ningún caso las radiaciones se 'contagian' o le
convierten en 'material radiactivo'.
• Radiación sistémica: La radiación proviene de un líquido o cápsulas que contienen material
radioactivo que viaja por el cuerpo. El paciente toma el líquido o las cápsulas o recibe una inyección.
Este tipo de radioterapia puede ser usada para tratar el cáncer o para controlar el dolor del cáncer
que se ha diseminado a los huesos. Solo unos pocos cánceres se tratan actualmente de esta manera.
18. Los efectos secundarios de la radioterapia dependen principalmente de la dosis y del tipo de radiación que reciba, así como de
la parte del cuerpo que sea tratada. Por ejemplo, la radiación al abdomen le puede causar náuseas, vómitos y diarrea. La piel
en el área tratada puede ponerse roja, seca y sensible. También se puede caer el pelo del área tratada.
Es posible que se sienta muy cansado durante la radioterapia, especialmente en las últimas semanas de tratamiento.
Descansar es importante, si bien los médicos aconsejan a sus pacientes que traten de ser lo más activos posible.
Por suerte, la mayoría de los efectos secundarios desaparecen con el tiempo.
Las reacciones provocadas por la quimioterapia se deben a los efectos que los fármacos tienen sobre las células sanas y,
aunque son muy frecuentes, lo normal es que cada persona reaccione de manera diferente. Puede que el paciente no
experimente ninguna de las sensaciones que se describen a continuación, o éstas varíen de grado a lo largo de todo el
tratamiento.
La mayor parte de los pacientes suele sentir cansancio a consecuencia de la 'quimio', aunque también hay quien logra seguir
con su vida normal sin que el tratamiento interfiera en sus actividades laborales, sociales o familiares. Además, gracias a los
avances, los fármacos que se emplean ahora en quimioterapia son cada vez más selectivos, de manera que matan a las células
malignas causando mínimos daños a las sanas.
Es difícil predecir cómo va a reaccionar cada paciente. lo más frecuente es que el paciente experimente:
• Fatiga. Este estado de cansancio y falta de energía prolongada es el más común, y se diferencia un poco del
agotamiento que pueden experimentar los individuos sanos.
19. • Náuseas y vómitos. Para evitarlo, los especialistas recomiendan beber
líquidos al menos una hora antes o después de las comidas, comer despacio
y en pequeñas cantidades, evitando las grandes comilonas. Manténerse
alejado de olores que le disgusten, evitar las comidas grasientas o muy
fritas, respirar profundamente cuando se sienta que empieza a encontrarse
mal y si se encuentra con ánimo, utilizar terapias de relajación, yoga, lea un
libro que le guste... De todos modos, recordar, no todos los fármacos
oncológicos producen náuseas.
• Dolor. Los fármacos empleados en quimioterapia pueden afectar a los
nervios, lo que en ocasiones provoca quemazón, entumecimiento, hormigueo
en los dedos de pies y manos e incluso cefaleas y dolores musculares o
abdominales.
• Pérdida del cabello. La alopecia es uno de los efectos secundarios que más
preocupa a los enfermos y que más personas experimentan, aunque no todos
los medicamentos provocan este problema. Generalmente el pelo vuelve a
crecer cuando finaliza el tratamiento, tal vez con un color o textura
diferente, éste es un problema menor al que la mayoría de la gente se
readapta sin dificultad. Algunas personas optan por dejar el cuero cabelludo
al aire, aunque la mayor parte de las personas recurren a pañuelos, gorros o
pelucas para cubrirse. Todo depende de qué le haga sentirse más cómodo.
Además se recomienda emplear champús suaves, aplicarlos sin frotar el
cuero cabelludo, evitar que el secador tenga una temperatura demasiado alta
y también evitar los tintes y otros productos permanentes. La pérdida de
pelo no afecta sólo a la cabeza, y puede implicar también a otras áreas del
cuerpo como el pecho, los brazos, piernas y pubis.
20. • Anemia. La quimioterapia ataca a todas las células del organismo, lo que incluye a los glóbulos rojos, responsables de
transportar el oxígeno a todas las partes del cuerpo. De manera que cuando estos vehículos no son suficientes, muchos tejidos no
reciben bastante alimento para realizar su trabajo. Es lo que se conoce como anemia, una patología que puede hacer al paciente
sentirse débil, cansado, con dificultades para respirar... Durante la “quimio” suelen llevarse a cabo recuentos regulares de
glóbulos rojos, cuando los niveles descienden demasiado puede recurrirse a una transfusión sanguínea, o bien a un fármaco
llamado eritropoyetina.
• Infecciones. Los fármacos también limitan la producción de glóbulos blancos, las defensas de nuestro organismo, lo que nos
vuelve más vulnerables a infecciones y otras enfermedades, de manera que incluso aunque se tenga cuidado puede acabar
padeciendo alguno de estos problemas. Los recuentos permitirán controlar los niveles de leucocitos y saber si es necesario
recurrir a otros medicamentos que aumenten estas cantidades.
• Problemas de coagulación. La producción de plaquetas disminuye con este tipo de anticancerígenos, de manera que los
enfermos pueden sangrar más de lo normal o hacerse hematomas frecuentemente, incluso con pequeñas heridas o golpes.
Otros: diarrea o estreñimiento y problemas gastrointestinales, hipersensibilidad en piel y uñas, dificultad al tragar, inflamación de los
tejidos de boca y esófago, irritación intestinal, retención de líquidos, afectación de los órganos y las relaciones sexuales...
Debido a que la 'quimio' puede causar sensibilidad en la boca y garganta se recomienda hacer una visita al dentista antes de
comenzar el tratamiento. Este profesional puede informar de los posibles efectos secundarios de la terapia y de los mejores
cuidados para los dientes.
21. 4. Terapia hormonal
Algunos cánceres necesitan hormonas para crecer. La terapia hormonal impide que las células cancerosas
obtengan o usen las hormonas que necesitan. Es terapia sistémica.
La terapia hormonal usa fármacos o cirugía:
• Medicamentos o fármacos: su médico le da un medicamento que detiene la producción de algunas
hormonas o impide que las hormonas funcionen.
• Cirugía: el cirujano extirpa algunos órganos (como los ovarios o los testículos) que fabrican hormonas.
Los efectos secundarios de la terapia hormonal dependen del tipo de tratamiento. Estos efectos son aumento
de peso, sofocos o bochornos, náuseas y cambios en la fecundidad. En las mujeres, la terapia hormonal puede
hacer que ya no se presente el período menstrual o que sea muy irregular y puede causar sequedad vaginal. En
los hombres, la terapia hormonal puede causar impotencia, pérdida del deseo sexual, aumento del tamaño o
sensibilidad de los senos.
5. Terapia biológica
La terapia biológica es otro tipo de terapia sistémica. Ayuda al sistema inmunitario (el sistema de
defensas naturales del cuerpo) a luchar contra el cáncer. Por ejemplo, algunos pacientes con cáncer de
vejiga reciben una solución de bacilo de Calmette y Guérin (BCG)), después de la cirugía. El médico usa
un catéter para depositar la solución en la vejiga. Esta solución contiene bacterias vivas atenuadas que
estimulan el sistema inmunitario a que elimine las células cancerosas. La BCG puede causar efectos
secundarios. Puede irritar la vejiga. Algunas personas pueden tener náuseas, fiebre ligera o escalofríos.
La mayoría de los otros tipos de terapia biológica se administran por la vena. La terapia biológica viaja
por el torrente sanguíneo. Algunas personas pueden tener una irritación de la piel en el sitio de la
inyección. Algunas otras tienen síntomas de gripe como fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolores
musculares, fatiga debilidad y náuseas. La terapia biológica puede también causar efectos secundarios
más graves, como cambios en la presión arterial y problemas respiratorios. La terapia biológica se
administra generalmente en el consultorio del médico, en la clínica o en el hospital.
22. 6. Trasplante de células madre
El trasplante de células madre (células que forman glóbulos sanguíneos) permite que los pacientes reciban altas dosis de
quimioterapia, de radioterapia o ambas. Las altas dosis destruyen tanto las células cancerosas como las células normales de la
médula ósea. Después del tratamiento, los pacientes reciben células madre hematopoyéticas (que forman o producen sangre) sanas
por un tubo flexible que se coloca en una vena. Las células madre trasplantadas generan glóbulos sanguíneos nuevos. Las células
madre se pueden extraer del paciente antes de recibir el tratamiento con altas dosis o pueden obtenerse de otra persona. Para este
tratamiento, el paciente permanece en el hospital.
Los efectos secundarios de la terapia de altas dosis y del trasplante de células madre son las infecciones y hemorragias. Además,
puede ocurrir que quienes reciben células madre de un donante presenten la enfermedad de injerto contra huésped (EICH). En esta
enfermedad, las células madre donadas atacan los tejidos del paciente. Con más frecuencia, la enfermedad de injerto contra
huésped afecta el hígado, la piel, o el tubo digestivo. La enfermedad de injerto contra huésped puede ser grave o hasta mortal. Puede
ocurrir en cualquier momento después del trasplante o hasta años después. Algunos fármacos pueden ayudar a evitar, tratar o
controlar esta enfermedad.
Existen dos tipos de trasplante de células madre, el alogénico y el autológico.
Se habla de trasplante alogénico cuando las células que se trasplantan, sean de médula ósea o de sangre periférica, son de
un donante, familiar o no, cuyo tipo tisular es casi idéntico al del paciente. El trasplante autólogo consiste en obtener
médula ósea del propio paciente, mientras la enfermedad está en remisión, para mantenerla congelada y realizar el trasplante
después de aplicarle al paciente una dosis alta de quimioterapia. Este tipo de trasplante se realiza cuando no existe un
posible donante o se considera que el riesgo es muy elevado con el trasplante alogénico, por el posible rechazo que pueda
sufrir el paciente. Si no tiene un hermano gemelo, las posibilidades de conseguir un donante compatible no son superiores al
35%. El trasplante autólogo tiene menos riesgos que el alogénico al no existir el rechazo. Sin embargo, es posible que al
extraer la médula del propio paciente quede alguna célula cancerosa que produzca después del trasplante que la enfermedad
reaparezca. Una vez que se ha realizado el trasplante, la médula tarda en reconstituirse unas 3-4 semanas. Durante este
período, denominado aplasia, el paciente no posee un número de células sanguíneas suficiente como para mantenerse con
vida. Debido a esto, el riesgo de sufrir infecciones o hemorragias es elevado, por lo que debe permanecer en el hospital, para
recibir transfusiones, antibióticos o tratamientos para estimular el crecimiento de los granulocitos.
23. La respuesta al tratamiento puede ser: Completa: Si se ha producido la desaparición de todos los signos
y síntomas de la enfermedad. Parcial: Si existe una disminución mayor del 50% en la suma de los
productos de los diámetros perpendiculares de todas las lesiones mensurables. Objetiva: Es la respuesta
completa o parcial. Progresión: Si aparece cualquier lesión nueva o existe un aumento mayor del 25% en
la suma de los productos de los diámetros perpendiculares de todas las lesiones mensurables. Estable:
Si existe crecimiento o reducción del tumor que no cumple ninguno de los criterios anteriores.
Los médicos pueden rara vez explicar por qué una persona padece cáncer y otra no. Pero la investigación indica qu
ciertos factores de riesgo aumentan las probabilidades de que una persona padezca cáncer.
Estos son los factores de riesgo más comunes asociados con el cáncer:
• Envejecimiento
• Tabaco
• Rayos del sol
• Radiación ionizante
• Ciertos productos químicos y otras sustancias
• Algunos virus y bacterias
• Ciertas hormonas
• Antecedentes familiares de cáncer
• Alcohol
• Dieta deficiente, falta de actividad física o tener sobrepeso
24. Muchos de estos factores de riesgo pueden evitarse. Otros, como los antecedentes familiares, no pueden evitarse.
Las personas pueden protegerse a sí mismas si se mantienen alejadas, siempre que sea posible, de los factores de
riesgo conocidos.
Con el tiempo, varios factores pueden actuar juntos para hacer que células normales se conviertan en cancerosas.
Cuando piense sobre su riesgo de padecer cáncer, éstas son algunas de las cosas que debe considerar:
• No todo causa cáncer.
• El cáncer no es causado por una lesión o por un golpe o magulladura.
• El cáncer no es contagioso. Aunque la infección causada por ciertos virus o bacterias puede aumentar el riesgo
de ciertos tipos de cáncer, a nadie se le "pega" el cáncer de otra persona.
• El tener uno o más factores de riesgo no significa que usted padecerá cáncer. La mayoría de la gente que tiene
factores de riesgo nunca padece cáncer.
• Algunas personas son más sensibles que otras a los factores de riesgo conocidos.
Envejecimiento
El factor de riesgo más importante de cáncer es el envejecimiento. La mayoría de los cánceres ocurren en las
personas después de los 65 años de edad. Aunque personas de todas las edades, incluyendo los niños, pueden
padecer cáncer también.
Tabaco
El consumo de tabaco es la causa de muerte que más se puede prevenir. Cada año, más de 180 000
estadounidenses mueren de cáncer relacionado con el consumo de tabaco.
El consumo de productos de tabaco o estar expuesto de manera regular al humo de tabaco (humo en el ambiente o
de segunda mano) aumenta el riesgo de padecer cáncer.
Los fumadores tienen mayor probabilidad que quienes no fuman de padecer cáncer de pulmón, laringe, boca,
esófago, vejiga, riñón, garganta, estómago, páncreas, de cuello uterino o cérvix. También tienen más probabilidad de
padecer leucemia mieloide aguda (cáncer que comienza en las células de la sangre).
Las personas que mascan o aspiran tabaco tienen mayor riesgo de padecer cáncer de boca.
Dejar el tabaco es importante para quien lo usa, aun para quienes lo han usado por muchos años. El riesgo de
padecer cáncer en quienes lo dejan es menor que en aquellos que continúan usando el tabaco (sin embargo, el
riesgo generalmente es más bajo en quienes nunca usaron el tabaco).
25. Rayos del sol
La radiación ultravioleta (UV) proviene del sol y de las lámparas y camas solares; causa envejecimiento prematuro de la
piel y daños en la piel que pueden resultar en cáncer.
Los médicos aconsejan que la gente de todas las edades limite el tiempo que permanece al sol y que evite otras fuentes
de radiación ultravioleta:
• Si es posible, es mejor evitar el sol del mediodía (de 10 a 4 de la tarde). También debe protegerse de la radiación UV
reflejada por la arena, el agua, la nieve y el hielo. La radiación UV puede penetrar la ropa ligera, parabrisas y
ventanas.
• Use ropa de manga larga y pantalones largos, sombrero de ala ancha y anteojos de sol con lentes que absorben los
rayos UV.
• Use crema filtrante de la radiación solar. Esta puede ayudar a prevenir el cáncer de piel, especialmente la que tiene
un factor de protección solar de 15 (SPF, en inglés) por lo menos. Sin embargo, los protectores solares no
reemplazan evitar el sol y usar ropa para proteger la piel.
No use lámparas ni camas solares. Son tan dañinas como la luz solar
Radiación ionizante
La radiación ionizante puede causar daños celulares que resulten en cáncer. Este tipo de radiación proviene de rayos que
penetran la atmósfera terrestre desde el espacio, de una lluvia radiactiva, del gas radón, de los rayos X y de otras fuentes.
La lluvia radioactiva puede originarse de accidentes en plantas nucleares de energía o de la producción, prueba o uso de
armas atómicas. La gente expuesta a la precipitación puede tener mayor riesgo de cáncer, especialmente de leucemia y
cáncer de tiroides, seno, pulmón y estómago.
Radón es un gas radiactivo que no se ve, no huele, ni tiene sabor. Se forma en el suelo y en las rocas. Las personas que
trabajan en las minas pueden estar expuestas al radón. En algunos lugares del país, hay radón en las casas. Las personas
expuestas al radón tienen mayor riesgo de padecer cáncer de pulmón.
El riesgo de cáncer por exposición a rayos X de baja dosis es muy pequeño. El riesgo por la radioterapia es un poco mayor. En
ambos casos, el beneficio es casi siempre mayor que el pequeño riesgo que implica el tratamiento.
26. Ciertos productos químicos y otras sustancias
Algunas personas tienen un riesgo mayor de cáncer debido al trabajo que realizan (pintores, trabajadores de
la construcción, trabajadores de la industria química). Muchos estudios han demostrado que la exposición al
asbesto, benceno, bencidina, cadmio, níquel y cloruro de vinilo en el trabajo puede causar cáncer.
Siga las instrucciones y consejos de seguridad para evitar o reducir el contacto con sustancias dañinas tanto
en el trabajo como en el hogar. Si bien el riesgo es mayor en los trabajadores con años de exposición, tiene
sentido tomar precauciones en casa cuando se usan pesticidas, aceite de motor usado, pinturas, solventes y
otros productos químicos.
Algunos virus y bacterias
La infección causada por algunos virus o bacterias puede aumentar el riesgo de padecer cáncer.
• Virus del papiloma humano (VPH): La infección por VPH es la causa principal de cáncer cervical, es decir, cáncer
de cuello uterino. También puede ser un factor de riesgo para otros tipos de cáncer.
• Virus de hepatitis By hepatitis C: El cáncer de hígado puede aparecer después de varios años de infección con
hepatitis B o hepatitis C.
• Virus de la leucemia de células T humanas tipo 1 (HTLV-1): La infección con el virus de la leucemia de células T
humanas tipo 1 aumenta el riesgo de padecer linfoma y leucemia.
• Virus de la inmunodeficiencia humana (VIH): El VIH es el virus que causa el SIDA. Las personas que tienen la
infección de VIH tienen mayor riesgo de padecer cáncer, como linfoma y un cáncer raro llamado sarcoma de Kaposi.
• Virus de Epstein-Barr: La infección del virus de Epstein-Barr ha sido asociada con un mayor riesgo de linfoma.
• Herpesvirus humano 8 (HHV8): Este virus es un factor de riesgo para el sarcoma de Kaposi.
• Helicobacter pylori: esta bacteria puede causar úlceras en el estómago. También puede causar cáncer de
estómago y linfoma en el recubrimiento del estómago.
27. Ciertas hormonas
Los médicos pueden recomendar hormonas (estrógeno solo o estrógeno junto con progesterona) para
aliviar algunos problemas (como los bochornos, sofocos y calores, la sequedad vaginal y el
adelgazamiento de huesos) que suelen ocurrir durante la menopausia. Sin embargo, algunos estudios
muestran que la terapia hormonal en la menopausia puede causar efectos secundarios graves. Las
hormonas pueden aumentar el riesgo de cáncer de seno, de ataques cardíacos, derrame cerebral o
coágulos sanguíneos.
Entre 1940 y 1971, algunas mujeres embarazadas en los Estados Unidos recibieron dietilestilbestrol
(DES), una forma de estrógeno. Las mujeres que tomaron DES durante el embarazo tienen un riesgo
ligeramente mayor de padecer cáncer de seno. Sus hijas tienen un riesgo mayor de padecer un tipo
raro de cáncer de cuello uterino. Se están estudiando los posibles efectos en los hijos varones de
estas mujeres.
Antecedentes familiares de cáncer
La mayoría de los cánceres aparecen debido a cambios (mutaciones) en los genes. Una célula normal puede
convertirse en célula cancerosa después de que ocurren una serie de cambios en los genes. El consumo de
tabaco, algunos virus u otros factores relacionados con el estilo de vida de una persona o con el medio ambiente
pueden causar estos cambios en algunos tipos de células.
Algunos cambios en los genes que aumentan el riesgo de padecer cáncer pasan de padres a hijos. Estos
cambios están presentes en todas las células del cuerpo desde el nacimiento.
Es raro que el cáncer sea hereditario en una familia. Sin embargo, ciertos tipos de cáncer ocurren con más
frecuencia en algunas familias que en el resto de la población. Por ejemplo, el melanoma y los cánceres de seno,
de ovarios, de próstata y de colon a veces son hereditarios en algunas familias. Si se producen varios casos de
un mismo tipo de cáncer en una familia, es posible que estén conectados a cambios genéticos hereditarios, lo
cual puede aumentar la posibilidad de padecer cáncer. Sin embargo, es posible que también estén involucrados
factores del medio ambiente. La mayoría de las veces, los casos múltiples de cáncer en una familia son
simplemente una cuestión de coincidencia.
28. Alcohol
Tomar más de dos bebidas alcohólicas por día durante varios años puede aumentar el riesgo de padecer
cáncer de boca, garganta, esófago, laringe, hígado y seno. El riesgo aumenta con la cantidad de alcohol
que se ingiere. Para la mayoría de estos cánceres, el riesgo es aún mayor si la persona también fuma.
Los médicos aconsejan beber con moderación. Esto significa, beber no más de una bebida alcohólica
diaria para las mujeres y no más de dos bebidas alcohólicas diarias para los hombres.
Dieta deficiente, falta de actividad física o sobrepeso
Las personas que tienen una dieta inadecuada, que no tienen suficiente
actividad física o que están excedidas de peso pueden tener un mayor riesgo
de padecer varios tipos de cáncer. Por ejemplo, estudios sugieren que las
personas que comen una dieta rica en grasas tienen mayor riesgo de padecer
cáncer de colon, de útero y de próstata. La falta de actividad física y el exceso
de peso son factores de riesgo para padecer cáncer de
seno, colon, esófago, riñón y útero.
Llevar una dieta saludable, tener actividad física y mantener un peso saludable
pueden ayudar a disminuir el riesgo de padecer cáncer. Los médicos sugieren
lo siguiente:
• Comer bien: una dieta saludable incluye muchos alimentos ricos en
fibra, vitaminas y minerales. Esto incluye pan integral, cereal y de 5 a 9
porciones de frutas y verduras cada día. Una dieta saludable significa
también limitar el consumo de alimentos ricos en grasa (como la
mantequilla, leche entera, comidas fritas y carnes rojas).
• Ser activo y mantener un peso saludable: la actividad física puede ayudarle
a bajar de peso y a disminuir la grasa corporal. La mayoría de los
científicos están de acuerdo en que es una buena idea que los adultos
realicen actividad física moderada (como caminar rápido) al menos 30
29. Pronóstico del cáncer
Ningún médico puede estar completamente seguro de que el paciente que atiende se vaya a curar. Las
posibilidades de una persona dependen primordialmente, de lo temprano que se haya descubierto la
enfermedad, pero también del tipo de cáncer, pues algunos son más agresivos que otros. Otro factor que interviene
es la condición física del paciente; es muy importante que su forma física sea buena, y la disposición hacia su
enfermedad, ya que debe afrontarla y ayudar con su estado de ánimo a curarla.
A partir de la década de 1990 y con las técnicas terapéuticas disponibles, el cáncer es curable en aproximadamente
el 50% de los pacientes diagnosticados. El pronóstico del cáncer depende sobre todo de:
▪ La localización del tumor primario.
▪ El tipo histológico con su grado de diferenciación celular, sus características biológicas y citogenéticas.
▪ El estado del cáncer o extensión de la enfermedad.
▪ La edad del paciente.
▪ El estado funcional o la reserva fisiológica del paciente.
Recientemente, estudios en psiconeuroimnunología apuntan igualmente a la influencia de los factores emocionales
en el curso de la enfermedad.
30. El cáncer de mama consiste en un crecimiento anormal y desordenado de las
células de éste tejido. La mama está formada por una serie de glándulas
mamarias, que producen leche tras el parto, y a las que se les denomina lóbulos y
lobulillos. Los lóbulos se encuentran conectados entre sí por unos
tubos, conductos mamarios, que son los que conducen la leche al pezón, durante
la lactancia, para alimentar al bebé. Las glándulas (o lóbulos) y los conductos
mamarios están inmersos en el tejido adiposo y en el tejido conjuntivo, que, junto
con el tejido linfático, forman el seno. A modo de muro de contención, actúa el
músculo pectoral que se encuentra entre las costillas y la mama. La piel recubre
y protege toda la estructura mamaria. El sistema linfático está formado por
recipientes y vasos o conductos que contienen y conducen la linfa, que es un
líquido incoloro formado por glóbulos blancos, en su mayoría linfocitos. Estas
células reconocen cualquier sustancia extraña al organismo y liberan otras
sustancias que destruyen al agente agresor.
31. El cáncer de pulmón consiste en un crecimiento anormal de las células del pulmón. La enfermedad se produce habitualmente en las
paredes internas de los bronquios, y al crecer puede obstruir el paso del aire y alterar la respiración. Por este motivo, produce
generalmente falta de aire, ahogo y fatiga. Existendos tipos principales de cáncer de pulmón: el cáncer de células pequeñas o
microcítico y el cáncer de células no pequeñas (no microcítico o broncogénico).
Cáncer de pulmón de células pequeñas (microcítico) Recibe este nombre
por el tamaño de las células vistas a microscopio. Se relaciona casi
invariablemente con el hábito de fumar y se estima que alrededor del 20%
de todos los cánceres son de células pequeñas. Éstas se multiplican
rápidamente y se pueden formar grandes tumores; además su capacidad
de extenderse a otros órganos es mayor. El de células pequeñas es, casi
siempre, un tumor muy agresivo. Las metástasis suelen afectar a los
siguientes órganos: ganglios linfáticos, huesos, cerebro, glándulas
suprarrenales e hígado. El tumor primario generalmente se origina cerca
de los bronquios y se expande hacia el centro de los pulmones. Cáncer
de pulmón de células no pequeñas:
Este tipo de cáncer representa casi el 80% del total de los cánceres de
pulmón. Se extiende más lentamente que el de células pequeñas
y, ocasionalmente, puede aparecer en personas que no fuman. Tiende a
nacer de las partes más periféricas del pulmón, cerca de la pared del
tórax.
32. Se trata de un tumor maligno que se desarrolla en la glándula prostática.
Consiste en un crecimiento descontrolado de las células prostáticas. Esto
hace, entre otras cosas, que la próstata, por su situación, presione sobre la
vejiga y la uretra impidiendo la salida normal de la orina.
La próstata es un órgano glandular, del tamaño de una nuez,
presente en los hombres y situada alrededor del cuello vesical y
parte de la uretra, por delante del recto. Secreta un líquido,
blanquecino y viscoso, que se mezcla con el esperma en el momento
de la eyaculación. Existen vasos linfáticos que rodean la próstata y
que desembocan en los ganglios linfáticos pélvicos. Cuando
aparece un cáncer en la próstata, existe la posibilidad de que las
células cancerosas se diseminen a través de los vasos linfáticos y
que afecten a los ganglios y de ahí a cualquier zona del cuerpo.
33. El colon se divide en cuatro segmentos: ascendente, transverso, descendente y sigmoide. El recto se
une al colon sigmoide. Tanto el colon como el recto están formados por varias capas de tejido. Según
estén afectadas una u otra capa, así será el pronóstico del cáncer. El cáncer que comienza en el
colon, se denomina cáncer de colon y el que comienza en el recto, cáncer de recto. Según esté afectada
una parte u otra, los síntomas serán distintos y las pruebas diagnósticas serán distintas y más eficaces
para detectar el cáncer según la zona donde aparezca. Se piensa que el cáncer de colon evoluciona
lentamente antes de ser diagnosticado como tal. Antes de que se desarrolle un cáncer suelen aparecer
lesiones en el intestino.
El cáncer de colon es la segunda causa de muerte por cáncer, después del
cáncer de pulmón en el hombre y de el de mama, en la mujer. Entre un
22% y un 36% de los casos, se presenta la enfermedad avanzada y, en
estos casos, el índice de supervivencia ronda a cero. En nuestro país se
producen 11.000 nuevos casos por año. La mortalidad inducida por este
cáncer es de 10 muertes por cada 100.000 habitantes y año, con tendencia
al aumento. El cáncer de colon ha ido aumentando su frecuencia en los
países desarrollados. Representa en conjunto el 15% de los tumores
diagnosticados en el hombre. La tasa de supervivencia a cinco años es
del 90% en aquellas personas que han tenido una detección temprana del
cáncer. Pero sólo son detectados un 37% de estos cánceres en un estadio
temprano. Si el cáncer se ha diseminado a órganos o ganglios linfáticos
cercanos, la tasa de supervivencia disminuye a un 65%. Y si se ha
extendido a órganos distantes, la tasa a cinco años es de un 8%.