El rechazo al trasplante ocurre cuando el sistema inmunitario del receptor ataca al órgano trasplantado al detectar que sus antígenos son diferentes. Los médicos intentan emparejar donantes y receptores lo más posible y usan medicamentos para inhibir la respuesta inmunitaria y prevenir el rechazo, pero aun así este puede ocurrir en diferentes grados desde minutos hasta años después del trasplante.