1. Comentario de texto: Discurso de las organizaciones ecologistas en La Moncloa con motivo de
la entrada en vigor del Protocolo de Kyoto.
Discurso de las organizaciones ecologistas en La Moncloa con motivo de la entrada en vigor
del Protocolo de Kioto
Señor Presidente:
El cambio climático es, sin lugar a dudas, el problema más grave al que se enfrenta la
humanidad. La concentración de carbono en la atmósfera no para de crecer. Las emisiones
actuales nos llevan de manera irreversible a un aumento de temperaturas medias de 1,3 ºC. Si
subieran por encima de dos grados, los impactos del cambio climático serían catastróficos.
Sin alarmismos, pero con decisión, debemos evitar que esto ocurra. Para ello, las
emisiones de los países industrializados deben reducirse en un 30% en 2020, y en un 80% en
2050. Es importante, también, recordar que España está ya un 45% por encima de las
emisiones de 1990.
Señor Presidente, como usted anunció en su discurso de investidura, España debe
cumplir su compromiso internacional y reducir sus emisiones.
Hay algunas medidas que el Gobierno debe abordar: reforma fiscal que grave los
combustibles fósiles; sustituciópn de energías sucias por energías renovables; planificación
territorial que reduzca las necesidades de transporte; leyes que obliguen a reducir el consumo
de energía en edificios…En definitiva, estar a la cabeza de los europeos que abogan por
objetivos de reducción más ambiciosos a partir de 2012.
Señor Presidente, hoy le pedimos que asuma el liderazgo en esta tarea imprescindible.
Muchas gracias.
Estamos ante un texto oral planificado, como se desprende desde el mismo título. El
discurso es un mensaje emitido por una sola voz (en este caso, por un supuesto portavoz de
las “organizaciones ecologistas” y representado mediante el catafórico “me” de la línea 5)
hacia un interlocutor (el “Señor Presidente”) que se limita a su recepción, sin poder intervenir
en ese momento.
Su carácter planificado se observa en la disposición de los elementos. Primero,
presenta una coherencia textual siguiendo un modelo muy formal, típico de las cartas:
encabezamiento (l.4), exposición-argumentación (líneas 5-33) y despedida o cierre. Segundo,
por la disposición del cuerpo central del discurso –que se correspondería con la segunda parte
presentada anteriormente: introducción (líneas 5-7), nudo (líneas 8-31) y desenlace (líneas 32
y 33). Será esta última división la que sea objeto de nuestro análisis.
Desde el primer párrafo, se advierte que su tema es dar su opinión sobre la entrada en
vigor del Protocolo de Kyoto. Para ello, como ya hemos visto, se ofrece-en primer lugar- una
exposición acerca de la importancia de las consecuencias del cambio climático (líneas 8-14).
Aquí ya aparecen algunos vocablos que remiten al campo semántico de este asunto: carbono,
emisiones, aumento de temperaturas,… que después, o bien volverán a estar presentes (como
2. la repetición de emisiones en las líneas 16, 23 ); o bien, verán incrementado su grupo léxico
con otras muchas palabras (véase para ello el párrafo que abarca las líneas 24-31). Asimismo,
se observa la aparición de guarismos (línea 12 ) y otros elementos tipográficos poco usuales
(como la abreviatura de grado centígrado en la misma línea anterior); que, igualmente,
aparecerán en los párrafos siguientes (líneas 17,18, 31,…). También, como corresponde al tono
expositivo de este fragmento, abundan las oraciones simples, en presente (dando carácter
general a sus sentencias) y enunciativas. El uso del condicional y el subjuntivo, tan sólo
aparece en la última oración condicional, puesto que se está en el plano de la hipótesis.
El inicio del segundo párrafo, está marcado por el uso de la primera persona del plural
en la perífrasis verbal de obligación - debemos evitar- y por el anafórico eso , que recoge todo
lo presentado del fragmento anterior. Ambos elementos, cambian el tono del texto a
argumentativo, tono que irá creciendo hasta las propuestas finales de las líneas 24-31. Otro
anafórico importante es el ello de la línea 16, donde se “esconden” las medidas que se deben
adoptar para reducir el impacto del cambio climático. Aquí se va ahora de lo general (países
industrializados) a lo concreto (España, Gobierno); centrando igualmente el discurso en el
interlocutor clave, el señor Presidente, al que en todo momento se le trata de manera formal
(usted, línea 21). La construcción sintáctica es similar a la mencionada para el párrafo anterior.
Destaca, ya en la enumeración presentada en las líneas 24-31, el abundante número de
oraciones nominales, resumidas en la frase -con verbo principal elíptico- introducida por un
marcador de orden (En definitiva) de las líneas 29-31.
Por último, nos gustaría señalar la presencia de dos deícticos temporales: ya (línea
19).31 y hoy (línea 32), que nos remiten al momento en el que fue pronunciado dicho discurso,
alejado en el tiempo para los lectores actuales, teniendo en cuenta que la entrada en vigor del
Protocolo de Kyoto se efectuó en el año 2005.