1. Título: Como una novela
Autor: Daniel Pennac
País: Francia
Año de publicación: 1992
Idioma original: Francés
Título original: Comme un roman
Páginas: 171
A modo de introducción decir que este desempeña como profesor de literatura
libro se define como una perfecta en un instituto. Como cualquier docente
animación a la lectura realizada a través contemporáneo que trabaje con
de argumentos poco corrientes. adolescentes, a Pennac le surge la
cuestión de cómo lograr motivar a éstos a
BIOGRAFÍA
que lean, a que le pierdan el miedo o el
Daniel Pennac es un escritor francés, que rechazo a los libros. De ahí surge Como
además de escribir para niños se una novela.
RESUMEN DEL LIBRO
Este libro: Como una novela, de Daniel Pennac
Es un ensayo escrito por Daniel Pennac, Francia, engancha desde la primera página
profesor de Literatura en un instituto de y cuando llegamos a la última casi sin
1
2. darnos cuenta, en un suspiro, nos da permanente, porque al leer nos vemos
mucha pena que se acabe y, al mismo obligados a imaginarlo todo.
tiempo, nos deja una sonrisa en la boca y
Leer es un placer, algo que nos permite
una agradable sensación de bienestar. Al
olvidarnos de las obligaciones, de los
menos en mi caso, Pennac ha conseguido
problemas, de las preocupaciones. Y así es
transmitirse su buen humor, su
como debemos inculcarles la lectura a las
desenfado, su alegría y su entusiasmo y,
nuevas generaciones, como una afición,
por encima de todo, esta obra ha logrado
no como una obligación. No podemos
hacerme reflexionar sobre lo afortunada
permitir que un placer se convierta en una
que soy por amar los libros y por sentir
preocupación.
pasión por la lectura.
Preocupación por entender lo que se lee,
Porque ese es precisamente el objetivo de
por hacer un resumen, un trabajo, un
este libro, lograr que los niños, que los
comentario de texto o un examen. Son los
jóvenes, que los hijos, que los alumnos se
padres los que en primer lugar transmiten
reconcilien con la lectura, que le pierdan
la pasión por la lectura a sus hijos. Desde
el miedo, que lean por placer, que se
que son pequeños, a todos los niños les
sumerjan en las páginas de un libro
gusta que les lean, que les cuenten
porque ellos quieren, con libertad, sin
historias y cuentos. Pero una vez que ya
obligaciones, como una aventura personal
pueden leer solos, son muchos los padres
y no como una imposición ajena.
que se olvidan de esos pocos minutos que
El libro está dividido en cuatro partes: dedicaban cada día a leerles a sus hijos y
Nacimiento del alquimista, Hay que leer (el del placer que eso les proporcionaba a
dogma), Dar de leer y El cómo se leerá o todos, a grandes y pequeños.
los derechos imprescriptibles del lector.
Prefieren desentenderse del asunto y
Desde las primeras páginas Pennac analiza
dejar que sea el colegio y los profesores
el cambio que se ha producido en la
los que se preocupen de que sus hijos
sociedad, puesto que antes la lectura
lean. Ahora a los padres solo les queda
estaba prohibida, leer era en el pasado un
comprobar que sus hijos entienden lo que
acto subversivo y el placer de leer era
leen, que lo han comprendido, que son
todavía mayor por tratarse de algo
capaces de explicarlo, comentarlo,
prohibido. Leer debajo de las sábanas, con
criticarlo y juzgarlo. Ya no les importa si
una linterna, a escondidas.
sus hijos disfrutan leyendo o no. Ya no son
Leer es un acto íntimo, personal, pero la sus cuentistas, ahora son sus contables.
lectura tiene una virtud paradójica que
Pero así lo único que se consigue es que
nos permite abstraernos del mundo para
los niños y los jóvenes se alejen cada vez
encontrarle un sentido. Al mismo tiempo,
más de los libros, que los vean como algo
no podemos olvidar que leer no es un acto
lejano, ajeno, aburrido y muermo. Es
pasivo. La lectura es un acto de creación
mucho mejor la televisión, los videojuegos
o el cine. Por eso los padres ofrecen a sus
2
3. hijos las horas delante de la televisión distraernos, para informarnos, para
como recompensa y la prohibición de cultivarnos, para comunicar, para ejercer
verla como castigo. El otro lado de esta nuestro espíritu crítico.
moneda es que la lectura queda relegada
Esto es lo que de verdad importa. No
y rebajada al papel de tarea y de
importa que los jóvenes no entiendan al
obligación.
cien por cien lo que leen, los personajes, la
Y eso es precisamente lo peor que se trama, el argumento. Porque lo único
puede hacer. Es mucho mejor y, sobre importante es que sepan, que entienda y
todo, más sencillo de lo que pensamos, que nunca olviden que los libros cuentan
inculcarles a nuestros jóvenes el deseo de una historia.
aprender, la curiosidad. Y la única forma
Una historia que puede interesarles y
de lograrlo es sin prisa y con libertad.
gustarles, mucho. Pero para eso hace falta
Ni los padres ni los profesores deben exigir encontrar tiempo para leer. Un tiempo
a los jóvenes que lean, no deben obligarles que siempre es robado al deber de vivir.
a leer. Todo lo contrario, deben compartir Porque el tiempo para leer dilata el
con ellos el placer que les proporciona la tiempo de vivir.
lectura, su pasión, su entusiasmo y su
La última parte del libro está formada por
amor por la literatura. Porque si hacemos
los derechos imprescriptibles del lector: el
memoria, nos daremos cuenta de que las
derecho a no leer, el derecho a saltarnos
historias más hermosas que hemos leído
las páginas, el derecho a no terminar un
se las debemos casi siempre a un ser
libro, el derecho a releer, el derecho a leer
querido. Porque eso es amar, regalar
cualquier cosa, el derecho al bovarismo, el
nuestras preferencias a los que
derecho a leer en cualquier sitio, el
preferimos.
derecho a hojear, el derecho a leer en voz
Pennac nos recuerda en la segunda parte alta y el derecho a callarnos.
de su libro que hay que leer para
Como lectores, tenemos derecho a todo
aprender, para sacar adelante nuestros
eso y mucho más. Porque somos libres
estudios, para informarnos, para saber de
para elegir nuestras lecturas, para leer lo
dónde venimos, para saber quiénes
que queremos, cuando queremos, donde
somos, para conocer mejor a los demás,
queremos y, lo más importante, porque
para saber adónde vamos, para conservar
queremos. Porque para nosotros la lectura
la memoria del pasado, para iluminar
es una afición, una pasión, algo que nos
nuestro presente, para aprovechar las
hace felices, que nos hace disfrutar, algo
experiencias anteriores, para no repetir las
placentero. Algo que nos hace vivir. Todos
tonterías de nuestros antepasados, para
tenemos claro por qué leemos. Porque
ganar tiempo, para evadirnos, para buscar
nuestras razones para leer son tan
un sentido a la vida, para comprender los
extrañas, tan propias, tan íntimas,
fundamentos de nuestra civilización, para
tan personales como nuestras razones
satisfacer nuestra curiosidad, para
para vivir.
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4. CONCLUSIÓN
Qué mejor resumen que éste. Pennac
aboga por el placer de leer buena
literatura. Un placer fuera de serie. .La
sensación que me dio fue que el libro me
hubiera estado buscando a mí. Y me
alegro de que me haya encontrado, pues
su lectura me resultó deliciosa.
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